Partida Rol por web

No estaba muy claro cómo, pero Max y Mary habían acabado en el interior del coliseo en unos calabozos. Lo que si estaba claro es que esa Fera no era alguien con la que jugar.  Y lo peor no era que no había conseguido a C.A.N.G.R.E.J.O., sino que ¡LE HABÍAN QUITADO TODAS SUS BOMBAS! Porque claro, nadie en su sano juicio mete a alguien armado en una celda.

La verdad es que antes de entrar, había ocurrido algo interesante. Mientras registraban al artillero, para quitarle sus pertenencias habían descubierto el medallón que Valeria le había metido en la boca. ¡Y resulta que eso lo identificaba como un participante en el torneo! ¡Con razón estaba tan interesada Valeria en recuperarlo!

—Podrás salir cuando empiece el torneo—le dijo uno de los piratas mientras lo arrojaba al calabozo de malas maneras—. Si no haces más tonterías.

No estaban sólos en la celda. Valeria estaba con ellos, pero en la otra punta y con gesto de morros. Y había un par de personas más. Uno de ellos era un tipo enorme (y con enorme quiero decir como cinco metros) que estaba en la parte más profunda del calabozo, fuera de la vista de todos por la oscuridad. El otro era una especie de caballero con símbolos religiosos. No pegaba mucho allí. 

Supuestamente, ahora sólo les quedaba esperar. El torneo empezaría en unas cinco horas a la medianoche.  ¿Pero estaba acaso el dúo formado por el artillero y la cabra dispuestos a esperar tanto tiempo sin hacer nada?

Por norma general, cuando se mete a alguien en un calabozo se le registra concienzudamente. Así que tenemos dos opciones:
   - Un pobre desgraciado descubrió la sorpresita de Max y queda pendiente el efecto épico positivo a cobrar. (Y algún pirata va a querer cobrar venganza xD)
   - Max todavía tiene la sorpresita (que os ayudaría a escapar en cualquier momento) y compensamos el efecto épico positivo.

Lo dejo a tu elección.

Y terminaron en la cárcel... otra vez.

-Bueno, nadie podía saber que este iba a ser el resultado de todo aquello... ¡Simplemente no se podía saber! -Trató de justificarse Max ante la cabra- Bueno, no me mires así. Podíamos estar peor... podíamos estar con Levi.

Al parecer el cierto desdén que tenía Max con Levi era algo bastante palpable, y aunque probablemente Mary no compartiera ese desdén hacia su compañera de tripulación, Max tenía que intentarlo, a fin de cuentas, cualquier cosa valía para que este pudiera justificar su acción de insistir a una de las mandamases de todo aquello.

-No te preocupes, tengo un plan para salir de aquí. Tu sigue así. -Le dijo susurrándole al oído a la cabra- ¡CARCELERO!. -El grito de Max era potente, llamando por un nuevo personaje pintoresco que hiciera acto de presencia en el lugar; y aunque ciertamente tenía curiosidad por quienes eran y qué hacían esos dos ahí dentro, ahora mismo tenía que poner en marcha su plan.

   No les iba a mentir, esta situación estaba muy, pero muy lejos de considerarse a mi gusto como bajo nuestro control, pero.... Al menos el joven Powder estaba algo mas calmado tras todo el asunto y lo mejor.... se había sacado por fin aquel cachivache y por lo mismo... una de las partes iba a poder complementarse mejor que antes ... o al menos entender cuando quiere pelea... o solo le esta tomando el pelo a medio mundo... otra vez...

    Por el sitio también se encontraba la muchacha ladrona y otras personas mas, lo cual era un curioso alivio, pues a nivel Global... no era la unica que estaba fallando en su trabajo de cuidar a su Joven Powder .... Al fin entiendo la frase de mi viejo jefe de compañia... no todos pueden ser un busca pleito... Pero un Busca Pleito puede venir de cualquier parte....

Ante las palabras de Max, solo le mire, tome un poco de aire y bueno...

 . . .

Bah~ahhhhhh~ahhhhhhhhhhh....

. . .

 Para quedarme entonces rumeando el aire en mi boca.

El caballero de aspecto siniestro se acercó a Max y ¿le pasó la mano por el hombro?

—¿Peor? ¿Tú crees que podríamos estar peor, amigo?—le dijo mientras su rostro se iba dibujando una expresión maníaca—¡NO SABES LO QUE DICES! ¡EL FIN ESTÁ CERCA! ¿No la hueles?

El hombre comenzó a olfatear el aire.

—¡LA MUERTE SE PASE POR ESTE LUGAR!—le gritó casi en el oído— ¡Y todos los que están en este lugar no quieren escuchar! Pero tú si, ¿verdad? Tú eres listo. Por eso estás aquí conmigo. Porque tu sabes.

Era evidente que hablar con un loco era una mala idea, en particular si estabas encerrado con el en una celda, por lo que, evidentemente lo lógico sería ignorar sus súplicas de atención e intentar pasar del tema lo mejor que uno pudiera.

-¿Olerlo?. -Max trató de olfatear el ambiente- El ambiente está un poco cargado, sí.

Por lo que, lanzando por la borda todo lo dicho al inicio de este Post, Max Powder siguió hablando con el loco.

-¿A qué te refieres con "Muerte"?. Yo y mi cabra estamos aquí porque esa de ahí me robó mi bomba C.A.N.G.R.E.J.O., no porque sepa que huela a Muerte o a Algodón de Azúcar... aunque... ¡Soy listo!. ¡Así que desembucha!. ¿Qué es lo quieres decir?. ¡Porque yo quiero escuchar!. Como un listo haría...

   Continuando con mi disfraz de ser una cabra común me toco ser una mera espectadora de tan curiosa escena, por lo que haciéndome la desatendida me senté en la fria piedra sin perderle la vista al joven Powder.

  ... Dios los cría... y ellos se juntan... 

   ... ¿ sera un cultista de esos que te intentan vender tiempo compartido...? ¿ o es un salido de mas alla del monte ?...

... Bueno... tampoco tengo mucho que hacer... solo necesito que Powder no se meta en mas problemas...

... Vamos Shepherd... nuestra tarea se a vuelto mas fácil...

... ahora no tiene bombas.... 

... ahora solo hacer tiempo hasta que el susodicho torneo inicie...

—¿Que a qué me refiero? ¡A LA MUERTE! ¡AL FIN DEL MUNDO TAL Y COMO LO CONOCES!

El hombre carraspeó, pareció serenarse y le habló a Max con una voz grave y sosegada.

—Él ángel del Señor bajará para juzgar a justos y pecadores. Los justos serán enviados a la Ciudad Dorada. Y aquellos marcados con el número de la bestia serán arrojados al lago de fuego.

La expresión del caballero se recrudeció.

—¡PERO NO ESCUCHAN! Sólo piensan en sus juegos y en sus vidas vacías. Pactan con el Maligno bebiéndose esos elixires del diablo. ¡PERO ESOS ACTOS NO QUEDARÁN IMPUNES!—el hombre se levantó enérgicamente—!LA JUSTICIA DIVINA CAERÁ SOBRE ELLOS!

Max se sorprendió de toda esa nueva retahíla de información que acababa de recibir de aquel buen hombre que tan amablemente había decidido compartirla con él, asintiendo con la cabeza a cada frase que decía, este quedó embelesado no solo con la retórica del Caballero Siniestro, sino con la advertencia que le contaba.

-No conocí en mi vida a alguien que haya bebido un elixir y fuera una persona decente. -Confirmó sus palabras a rajatabla asintiendo- Así que todo lo que me dices me cuadra bastante con lo que yo ya suponía. Agradezco esta información. Pero... ¿A qué viene esta conversación?. Me refiero... es una cosa un poco extraña de decir... ¿Por que nos adviertes si solo somos un pirata y su cabra?.

    No iba a mentir, en cuanto escuche el comentario de Powder no pude evitar mirarle con el seño fruncido, aunque casi al instante solo dejaba escapar un nuevo Balido mientras cumplia con mi parte de ser un simple animal mas, eso si... las palabras de aquel señor no dejaban de intrigarme.

... Claro... puede que al final sea un demente mas a quien solo representa el peligro si se le deja estar pero... ¿ y si no esta solo....? digo, tuvo que haber llegado de alguna manera a esta isla... sus afiliados podrían fácilmente estar desperdigados por la isla con la idea de hacer pagar a quienes hemos incurrido en aquella herejía de la que hablan......

... Ojala y el joven Fawkes... se haya podido reunir con el resto...

El caballero iba a responder a la pregunta de Max, cuando de pronto ¡EL MUNDO SALTÓ POR LOS AIRES! Una tremendísima explosión los lanzó a todos por los aires mientras una buena parte del coliseo comenzaba a venirse abajo entre temblores. ¿Qué estaba pasando? ¿Se trataba de algún tipo de ataque?

¡Feliz día de los inocentes!

Si por un casual quieres saber lo que le ocurrió a Mary y a Max el 28 de Diciembre, entra aquí.

—Porque el Señor es amor. El Señor, como buen padre, siempre le dará una oportunidad a sus hijos.

—¿Ah sí?—preguntó Valeria con ironía mientras sus cabellos comenzaban a moverse—¿Incluso a los que hemos pactado con el demonio?

El rostro del caballero se descompuso de rabia.

—Bruja asquerosa—dijo entre dientes para luego gritarle—. ¡SI! CLARO QUE SI! ¡PERO SÓLO A AQUELLOS QUE SE ARREPIENTEN! ¡SOLO A AQUELLOS DISPUESTOS A ASUMIR EL CASTIGO POR SU ACTO PROFANO! Pero tú no eres de esas... no... ¡POR ESO SERÁS ENTERRADA EN EL MAR DE SAL! 

—Pues vale—dijo Valeria completamente despreocupada.

El caballero decidió ignorar a Valeria.

—Tú todavía puedes salvarte amigo—dijo mirando a Max—¡TODAVÍA PUEDES PREPARARTE PARA EL FIN DE TODO! ¡TODAVÍA PUEDES SER UN SOLDADO DEL SEÑOR Y LUCHAR CONTRA LAS FUERZAS DEL MALIGNO! Porque tú eres listo, tú escuchas.

Tras sufrir una pequeña embolia cerebral en donde por algún momento había visto a un gigantón liberándolos de la cárcel en la que se encontraban a cambio de unirse a su tripulación, eso sí, insultándolos en el proceso... Max Powder volvió a la realidad y escuchó con atención tanto a aquel siniestro caballero como a esa ladrona discutir, hasta que le llegó el turno a él de hablar.

-¡Yo soy listo!. -Exclamó confirmando la alabanza- ¡Así que yo sigo escuchando lo que dices!. ¡Maldita gente que bebe cosas que no debe!. ¡Una vez mi padre hizo lo mismo y terminó por empujar a una criada escaleras abajo!. ¡Es el Maligno!.

    La parte buena de tener un disfraz demasiado convincente es que normalmente si eliges parentar ser un simple animal de granja, es que la mayoria de los problemas se los tenia que cargar a otra persona de turno que supiera como lidear con ellos, la parte mala..... No... espera, no existe la parte mala en este tipo de situaciones

Por lo viendo que Max estaba consiguiendo hacerse con la información o al menos calmar a los cercanos,  aproveche esto, para recostarme al lado del pie de mi compañero artillero y echarme una siesta, asi en caso de que hubiera algo que nos obligara a movernos, podría reaccionar rapida ante el problema ... aunque lo dudo... llevo casi buena mañana acarreando gente de un lado a otro y ahora necesito un poquito de descanso... y Spoiler... tampoco veo que alguien me haya servido mi café....

Mientras Mary se recostaba para echarse una siesta, Max seguía charlando con el caballero.

—¿Estás dispuesto entonces?—preguntó algo extrañado como si estuviera sorprendido de que alguien lo estuviera tomando en serio— No importa que hayas sido un pirata. Todavía puedes dejar atrás tu vida de pecado y unirte a nuestras filas. ¡Podemos ser hermanos y castigar el mal juntos! 

Aunque aquel caballero tan amigable estaba dando buenos argumentos, la personalidad de Max era demasiado explosiva e impredecible como para poder unirse a una organización tan estricta como era la que parecía estar describiendo, o al menos, como Max se estaba imaginando en esos momentos.

-¡Me niego!. -Dijo definitivamente Max- ¡Me encanta escucharte porque soy listo, pero eso de afiliarme a algo así para siempre es algo que no me llama!. ¡Ahora mismo estoy feliz con mi cabra haciendo explotar cosas y mordiendole las piernas a ladronas!. -Con esto dicho, Max no quiso cerrarle la puerta en la cara, principalmente porque no había puerta que cerrar- ¡Pero si necesitas algo de alguien que odie las mismas cosas que tu!. ¡No dudes en llamarme!. Excepto si es en la hora de comer, ahí estaré ocupado... comiendo y eso...

Y hablando de comer...

-¡CARCELEROOOOO! -Volvió a llamar al Carcelero como había hecho antes de que este hombre le comiera la oreja hablando de lo listo que era.