Partida Rol por web

Tremens sacó unos frutos secos mientras se recostaba contra el muro del túnel que los había llevado hasta el exterior y empezó a comerlos mientras escuchaba las observaciones de unos y otros.

-Dime, Fosco, tu si pudieras volar y quisieras comer tranquilo, ¿dónde irías? ¿En el suelo del desierto donde te achicharras y además quedas expuesto a los depredadores que en ellos pueda haber... o en un lugar alto e inaccesible para que no te molestaran mientras comes y además estás fresquito?

Luego miró a la peculiar Aire.

-Creo que las alforjas de la bestia llevan comida para caballos, este cargaba con la comida de los dos caballos, creo.

La maga se fijó en la tierra y estaba cogiendo puñados de tierra y guardándolos en pequeños sacos dentro de su bolsas a de conjuros, cuando se dio cuenta de la discusión. Creo que matar al caballo no nos proporcionaría nada. No nos apresuremos en matar, ya abra tiempo de que muera. Alice no se dio cuenta de la cruel afirmación que había dado. Ciertamente el caballo le recordaba vagamente a Trompicón. No, no deberíamos de matar a este magnífico animal, además creo que se llama… La maga puso la mano sobre uno de los costados del animal y se concentró. ¡Tropezón! Si, se llama Tropezón. Seguro que algo de la esencia vital de Trompicón ha pasado a Tropezón.

Miró con cariño, pero sobre todo con compansión, a la maga pelirroja. Como temía, había cogido apego al nuevo animal. La decisión estaba tomada.

- Está bien, demos un rodeo hacia la niebla para que el animal nos pueda acompañar. Pongámonos en marcha.

TROPEZÓN??? ¿¿En que estabas pensando, Alice?? le interrogaba el mediano con cierta sarna y humor. ¿Tienes que ir al baño? JUA AJ AJ AJAAAA! 
Luego el malote del grupo le hablaba, parecía un tipo duro y sabía su nombre. ¿Me convierte eso en un tipo aún más duro? cavilaba el mediano, pero tenía que responder algo. ​EH-aaaah... AZUL? digo ejem, ejem. Si pudiese volar me lanzaría en picado un par de veces para quitarme esta calor y luego daría igual que paso cogería porque vuelo. No creo que ninguno me tocase, pero algo me dice que el paso de la montaña hay criaturas más peligrosas. Es sólo una sensación... y así era... la montaña le aterrorizaba, además que huir en una montaña sería más difícil. Si se topaban con algún bicho que estuviera acostumbrado a esas latitudes. En tierra igual no sería tan peligroso... pero eso eran sólo cavilaciones de un mediano. Serían mejor no exponerlas a la vista de Tremens o le harían parecer un empollón y no el tipo duro que estaba demostrando ser...
 

Escucha lo que tenía que decir el mediano y sonríe. –No me agrada demasiado la idea pero un mediano también puede servir para armar raciones, aunque lo mejor sería lanzarlo al próximo enemigo que encontremos para entretenerle un rato, se ve que se le dan las gracias- El chusco comentario se corta al recordar que el pequeño era propiedad del hombre al que llamaban Onfale y que la mujer que leía magia se decía ahora su madre. -Aun claro, sé que tiene familia que le protegerá y se asegurara de que su pequeño cerebro de niño inexperto no le traicione y le haga tomar decisiones ridículas, una buena madre sabe que hay que cuidar al chico y llevarlo por el buen camino… Rumbo a las brumas.-

Enseguida la mujer da su opinión respecto al caballo y para su satisfacción esta del mismo lado que la suya, otra cosa es el Kaevhas quien pretende llevar al estorbo, sin embargo bien sabe hasta dónde medirse y le ha visto pelear, lo mejor es mantenerse a raya en lugar de disentir con el hombre lanza fuego, sin embargo dos de las mujeres hablan de los mismo, dar un rodeo y salvar al caballo, por lo que camina tranquilamente hacia el animal acercándose a su cabeza para acariciar su crin, sus manos se deslizan en su frente acariciándolo. –Ciertamente es un buen animal, lo que no impide que debamos matarle, hacerle filetes cuanto antes y movernos de aquí hacia las brumas sin dar ningún rodeo, eso solo nos traerá la muerte o que algún enemigo acabe con nosotros gracias a lo débiles que nos dejara este estúpido sol.- -¿Cuántos tajos en el cuello habrá que darle para matarlo?, ¿los estúpido recién llegados intentaran detenerme o serán tan listos como para no hacerlo? 

El mediano saca su estoque y su escudo Quieres pelea cara-rata? No eres mucho más alto que yo. Puedo cortarte en filetes y darte de comer al caballo.

Tranquilamente continúa acariciando al caballo sin acercar sus manos a las armas. –Vamos niño pequeño, no te enojes, mama y papa te cuidarán bien y harán lo mejor para ti, no saques tus juguetes que puedes dañarlos, mejor ayúdame a filetear al caballo y te tocará, una gran parte, claro a menos que sea hembra.- El tono y la sonrisa no se borra de la voz y los labios de Artho, aquel pequeño respiro en una tontería como aquella era suficiente para hacer descansar su alma un poco, Carceri no era un lugar que permitiese aquellas frivolidades sin tener después un cuchillo en el vientre unos segundos después, quiza aquella broma no fuera la excepción.

El mediano espera a que sus compañeros le pasen. Saca su estoque y con sumo sigilo se aproxima a Atho para clavarle el estoque. Cuando este reaccione con piruetas y extremo sigilo se retirará de la posición de ataque para esconderse entre sus compañeros y que no vea quien fue su agresor.

Fosco se achanta y se aleja de Artho. O eso quiere aparentar el pequeñín. Al cabo de unos minutos, cuando Artho está distraído, Fosco le clava el estoque a traición. Furtivamente, trata de esconderse, pero Artho se da la vuelta antes y le ve. Claramente le ve.

Flame se acercó a Fosco, le puso una mano en el hombro en señal de protección y agitando su espadón miró directamente a Artho. Por alguna razón se le había parecido bastante a Azaron, pero en forma de ser y de comportarse estaba claro que eran sumamente opuestos.

Mucho cuidado con lo que dices. Lanzó a Artho una mirada de muy pocos amigos mientras su escama iba cambiando de color de forma alternativa. No te interesa tener a este pequeño bribón en tu contra, ni tampoco a su aterrador padre, dijo mirando a Onfale y mucho menos a la tía, dijo refiriéndose a ella misma. No creo que quieras conocer a Ayash, así que será mejor que contengas tu lengua, o él se encargará de arrancártela. Dijo a modo de amenaza al encapuchado.

Gracias Flame, pero Artho se comportará. ¿Verdad que si, Artho? El mediano que venía de hacer pis se encontró a Flame defendiéndola. El mediano venía con el escudo en la mano. ¿Quién sabe lo que puede atacarte en estos lares? Nunca se sabe lo que viene por la espalda... Y sin duda el mediano estaba atento a cualquier cosa que viniese

Tocándose el pinchazo sonríe. Pero madame Flame, si solo he querido ayudar al pequeño, sin embargo es evidente que está bien cuidado y eso es lo importante en estas tierras, diría que tan oscuras, pero en este caso toca que luminosas. Avancemos pues con el caballo que es lo que la mayoría quiere, de ninguna forma pienso quedarme en este paramo solo y a la espera de la muerte. Comenta sin contestar a Fosco.