Su pequeño camaleón se dejó caer resbalando por el cuerpo del mago hasta posarse en el ardiente suelo. Su piel se tornó roja como las llamas que caían del cielo. Lo vio escurrirse bajo una enorme piedra y quedarse allí con los ojos amarillos y saltones observándole.
- ¡Ya voy!- Corrió un poco mientras esquivaba las llamas y después se deslizó pro el suelo hasta quedar bajo la piedra también. Su corazón se le iba a salir de pecho así que trató de controlar sus respiración para calmarse y observar si Leiath había oído sus súplicas.
Motivo: TS reflejos
Tirada: 1d20
Dificultad: 15+
Resultado: 20(+8)=28 (Exito)
A mí me has recordado a Salvad al soldado Ryan. Qué máquina Leiath!
En el río, el cuerpo de Kaevhas es sujetado por el brazo. Su salvador es Tremens. No hay espacio para los dos en el hueco horadado en la tierra, y la única opción de Kaevhas es mantenerse sumergido, con solo la mano aferrada al pie de Tremens.
La desconfiada de Flame logra extraer un colmillo sin que maldición alguna la embargue, ni explote el diente, ni la calavera empiece a hablarle diciendo que es un dracoliche. Parece que no hay pegas, solo fue un golpe de suerte fugaz.
Gastando varias cargas de su varita, Leiath cura a Aire... y a sí misma cuando vuelve corriendo para la cueva bajo el fuego amenazador. Pasan los minutos y el fuego sigue cayendo, pero todos están ya en sus refugios. Alice empieza a temer que se acabe antes su conjuro protector que la lluvia de ascuas. Pero la frecuencia disminuye, y la lluvia para.
En la cueva, Leiath suspira aliviada. Pero no sabe que cuando salió a ayudar a Aire, una criatura se coló en el mismo refugio. Ahora el monstruo observa a Leiath desde la oscuridad...
Fosco sale de la grieta y resopla victorioso. Seguro que es el único que se ha salvado. Entonces una sombra enorme a sus espaldas le tapa el sol...
Kaevhas saca al fin la cabeza, aún agarrado a Tremens. Entonces algo coge de los hombros al Dos Peniques y tira de ellos dos hacia arriba...
Bajo la roca, Onfale ve pasearse un largo cuerpo de serpiente, lo suficientemente grande para comérselo entero. Trata de contener la respiración hasta que la constrictor se vaya, utilizando un chakra con un nombre raro. En ese momento es cuando una mano se mete bajo la roca y saca al eunuco tirándole de su melena hacia el exterior...
Uno a uno, separados y heridos, van cayendo. Flame, ajena a todo, sale de la calavera de dragón y mira a su alrededor...
Se pone en guardia contra la criatura, pero su pésimo oído no logra advertirla de que otro monstruo se le acerca por la espalda. Seis golpes por detrás y a traición, y a la humana se le nubla la vista. Lo último que ve es a la mujer serpiente de las espadas acercándose...
Motivo: Reflejos de Leiath
Tirada: 5d20
Dificultad: 15+
Resultado: 13(+1)=14, 7(+1)=8, 18(+1)=19, 9(+1)=10, 20(+1)=21
Exitos: 2
Motivo: Daño a Leiath
Tirada: 2d6
Resultado: 5
Motivo: Daño a Leiath
Tirada: 2d6
Resultado: 8
Motivo: Daño a Leiath
Tirada: 2d6
Resultado: 3
Motivo: Daño a Leiath
Tirada: 2d6
Resultado: 9
Motivo: CHM a Leiath
Tirada: 2d8
Resultado: 11(+3)=14
Motivo: CHM a aire
Tirada: 2d8
Resultado: 6(+3)=9
Motivo: Personalidad de Alice
Tirada: 1d20
Dificultad: 14+
Resultado: 20(+3)=23 (Exito)
Motivo: Fortaleza Kaevhas río estigia
Tirada: 1d20
Dificultad: 17+
Resultado: 17(+4)=21 (Exito)