Los artefactos entiendo que estarán en la mochila y, si no, atados a la misma. El pararrayos lo llevo cubierto con alguna lona que encuentre por ahí para llevarlo a mano sin llamar mucho la atención.
Luego me voy a buscar a los compañeros y el carro. A estas horas habrá terminado ya el juicio, así que habrán ido a la posada en la que solamos quedarnos. Me voy moviendo por las calles de forma normal, tratando de no llamar demasiado la atención.
¿Puedo "sentir" a los caballos que tengo vinculados de alguna manera?
GRUÑIDO:
- Vas regresando a la Posada tal y como dices.
- De camino, procuras taparte un poco, no sea que al ser un semiorco la multitud decida pagar su frustración contigo. Están frustrados porque, por lo que dice todo el mundo, la Bestia ha sido absuelta. Eso sin contar con que anoche, otra Bestia, una de color verde, les pegó una paliza a muchos de ellos, los que planeaban asaltar la mazmorra de la Corte de Justicia para asesinar a la Bestia.
- Conforme te vas acercando a la Posada, "sientes" que los caballos han hecho un gran esfuerzo hoy, una carrera trepidante y emocionante por las calles de Lepidstadt, esquivando viandantes y puestos de comerciantes, pero que ya han descansado unas cuantas horas.
- Supones que Cazador les habrá atendido, pero él no es un verdadero experto en los cuidados que requieren tus nobles bestias, así que tendrás que cepillarlos y repasarlo todo para asegurarte de que de verdad están en buenas condiciones.
Dejo las cosas en el carro y aprovecho para pasar un par de minutos ofreciéndoles algo de cariño a los caballos. Luego busco a los compañeros para que sepan que he vuelto y compruebo si estamos todos.
Después de eso vuelvo con los caballos para darles el tratamiento que merecen y necesitan, han sido unos preciosos good bois y eso hay que recompensarlo como es debido. Que hayan descansado un poco sólo facilita que disfruten y que se sientan mejor todavía con mis manos de orco.
MITAD DEL INVIERNO DE 4711 RA.
DÍA DEL TRABAJO, 18 DE ABADIO.
PASADAS LAS TRES DE LA TARDE. - CORTE DE JUSTICIA DE LEPIDSTADT.
TIEMPO FRÍO, CIELO GRIS.
El Abogado Defensor Gustav Kaple les dio unas sentidas gracias y les estrechó la mano.
Con su labor en la Corte de Justica ya finalizada, todos salieron a la calle, donde les aguardaba Cazador con el carruaje, listo para llevarlos a la Posada a descansar y recuperarse.
Todos necesitaban reposo, y los que habían estado en la fábrica alquímica de Vorkstag y Grine requerían también sanación y cuidados, pues habían resultado muy heridos, en particular Velkan.
// Salen de escena: Cazador, Gruñido. - Sigue en: El Tiempo de la Muerte y el Escalofrío.