La lluvia se apodera de los alrededores y el incesante ruido provocado por las gotas de agua al rodar por el tejado acompañado de los eventuales rayos que trae la tormenta os predice que va a ser una dura noche. Pese a vuestras ojeras y al cansancio acumulado por la situación parece que esta noche va a ser larga, muy larga...
Clickea en la imagen para agrandarla[/url]
Reparto de Habitaciones:
Cita:
Evento Nocturno: ¡Peligro de derrumbe!
Las tejas del techo chirrían violentamente y de vez en cuando alguna sale disparada por la tormenta. No hace falta apostar ya que esta claro que durante la noche de hoy una localización aleatoria se derrumbará. Es decir, un dormitorio (tanto los cerrados como abiertos) o una sala comunal quedará destruida durante esta noche y si hay alguien ahí esa persona morirá también.
Pese a todo en el cementerio se respira tranquilidad ya que la mansión sirve de cobertura para asegurar ese lugar.
La sala de juegos también permanecerá cerrada esta noche.
Este turno termina el viernes por la noche.
- Ay, Dios mío. Virgen Santa...
A Ainhoa le es difícil guardar la compostura esta noche. Su elegancia y altanería desaparece completo sutituyendo una cara de horror y de angustia. Mira a sus compañeros sin mirar a nadie como pidiendo auxilio. Pero, ¿quién podría ayudarla, si todos estaban en la misma situación?
Sin más, Ainhoa se despide de sus compañeros con los ojos llorosos.
- Buenas noches...
Ainhoa baja enseguida con unas mantas en la mano y sale de la mansión.
- No pienso quedarme más en esta casa...
callado y perdiendo un poco su lucida calma con la lluvia el joven que poco se resaltaba en la mansion se dirigia nuevamente a su habitacion apostando por la seguridad que hasta ahora le habia dado la misma
Observo incredula a Ainhoa con las mantas - pero mujer..... con la que está cayendo....., bueno, tu verás lo que haces. Yo me voy a la habitación a dormir si es que puedo. Hasta mañana - con estas palabras me despido de los que quedan aún despiertos y me voy a mi habitación
Prefiero morir de frío que ser comida de algún depravado...
Sus últimas palabras cerrando la puerta tras ella...
Creo que pasar la noche fuera puede ser sensato en la actual situación, dice Norberto. Como dice Ainhoa, es preferible pasar algo de frío a que te coma un vampiro.
El rostro del anciano Don Ramón parece mostrar visos de desorientación.
-Yo... creo... creo que esta noche permaneceré en mi habitación... sí. Eso parece lo más correcto, ¿no es así? No puede ser... malo, si lo pienso con tanta intensidad. Buenas noches a todos, jóvenes. Nos veremos a la hora del desayuno... -el erudito parece desconcertado, como si sus 80 años se hubieran abalanzado de repente sobre su hasta ahora lúcida conciencia- Pero si lo creo intensamente... ¿por qué tiemblan mis manos...?
Comienza a caminar escaleras arriba, aún musitando cosas en voz baja, mientras sus lentos pasos resuenan en los escalones como clavos en la tapa de un ataúd.