Partida Rol por web

El golpe de Aethorn, siguió sin ser suficiente como para acabar con el no-muerto, mientras que Elbrietas volvió a toparse con la extraña sensación de estar golpeando algo que no sentía nada. El lobo parecia que iba a volver a atacar al paladín, cuando de pronto se puso rígido durante un instante. Y entonces se dio media vuelta para volver a internarse en el bosque. ¿Por qué huía? A unos cientos de metros de ellos, en otra de las salidas del bosque vieron también otros animales no-muertos que abandonaban Entrebosques.

No sabían por qué, pero parecía que el ataque al pueblo había cesado.

Aethorn miró a Jace y a Elbrietas y viendo que aun se encontraban en pie se tranquilizó.

-¿Estáis bien?

Sin esperar respuesta el paladín giró sobre sí mismo y buscó al resto de compañeros con la mirada para ver si se encontraban bien. Habría que reunirse y ver cómo estaban todos lo antes posible. Había mucho que hablar y que analizar para ver cuál sería el siguiente movimiento.

- Yo tengo una pequeña herida, no es grave pero me preocupa que siendo criaturas muertas se pueda infectar.

Además Elbrietas parecía un poco triste y apesumbrada...

- Si no llegaís a estar aquí habría muerto seguro. Mis puñetazos no los hacían nada... Creo que tengo que replantearme mí estrategia y llevar algún arma más que sólo puños... Más que me duela admitirlo.

—Yo no cantaría victoria tan pronto—dijo ácida Vincenza—. No sabemos si se han retirado para no volver... o para reagruparse. Y tenemos un paladín que no puede curar y un mago sin magia.

—Por suerte estás tú, la mortal espadachina del hacha—le respondió con un tono burlón Jace—. En fin si se están reagrupando nosotros deberíamos de hacer lo mismo. Aunque si vuelven esos pájaros estaremos en las mismas.

El grupo de aventureros, volvió a internarse en el pueblo. Consternados vieron como algunas casas habían sido asaltadas por los animales muertos vivientes, matando a las familias que allí vivían. Sin embargo en esos momentos reinaba el silencio, parecía que todos los no-muertos se habían marchado. ¿Pero por qué?

Afortunadamente no tardaron en encontrar compañeros. Pronto se hubieron reunido con Barril, Morowe, Rajmia, Eiren, Tulia, Vanadiato y Berilion. Sólo Cobalia, Shem y Klaus estaban en paradero desconocido.

Aethorn y Elbrietas continúan aquí.