Partida Rol por web

Nombre: V

Clase: Sombra

Atributos:

(F) Físico: 7

(D) Destreza: 8

(I) Inteligencia: 7

(P) Percepción: 8

Puntos de Vida: (Físico x4)= 28

Iniciativa:(Percepción + Reflejos)= 8+8 =16

Ataque C.C.: (Fuerza + Ataque C.C /Pelea)  = 7+7= 14

Ataque a Distancia: (Destreza + Ataque a Distancia)= 8+10 = 18

Defensa: (Destreza + Esquivar+5)= 8+8+5= 21

Habilidades:

-Yo yo mismo e Irene: el pj puede crear tantas copias de sí mismo como saque en una tirada de 1d6. La duración de estas copias será de un turno por lo que sus acciones deberán ser declaradas en el mismo post en el que se haga la tirada, con las tiradas necesarias. Esta habilidad tiene un límite de 1 vez cada 2 días offrol.

Habilidades: se cogia solo una, ¿no?

Sí, solo una

Tabla de habilidades: No sé si es puesto bien los modificadores por clase. Los puse en poderes, si van en otro sitio, los cambio...

¿Esta todo bien?

Los puntos de vida los habías multiplicado mal, 7x4 son 28 no 24. Lo de las sumas para ataque y defensa ya te las corregiré cuando lo pongas. Piensa que si no te pones "puntos de habilidad" en Esquiva, si tienes que evitar un área te quedas con el dado menor por no tener esquiva, a la vez que se sumaría solo tu destreza+5= 13.

Luego te mando tambien la historia/descripcion/curiosidades del pj

Ok.

En cuanto a objetos.. ¿Tenemos algo de serie? Yo, si puedo, querria pillarme un:

Rifle francotirador 12.7 X 99 mm

3d10

0

5

400/600/1200 m

Me gustaria que V fuera francotiradora, básicamente. Y me gustaria ser profe también no se si eso afecta a algo. (En principio, si nos dejas, me gustaria venir del mismo insti que Viktor).

Te pongo lo mismo que le he puesto a Viktor:

"Ehhhh, no. Podéis venir de esa institución, pero no podéis tener más poderes que los demás. Los únicos que tienen más poderes es porque vienen de otra partida y tienen más historia y cosas detrás, así que de momento con lo del inicio básico.  Además, los poderes requerirán muchísimo roleo y tiradas pues los poderes son mejoras genéticas, y las operaciones son difíciles y arriesgadas.

Lo del equipo lo tenemos que ver, porque como he dicho, tenemos que ver que equipo podríamos daros para mantener el equilibrio. Todos los demás llevan pistolas normales y algún cuchillo grande, pero nada de katanas ni armaduras. Eso lo veremos cuando nos hayáis mandado la historia, en la que se tiene que justificar porqué llegáis a la ciudad, porqué dejásteis el lugar de donde venís y todas esas cosas."

Y ya por ultimo... ¿Que es eso de los poderes? ¿Tenemos alguno? ¿Nos los das tu o lo elegimos nosotros?

No tenéis ninguno, de inicio, y más adelante, si roleáis mucho y tal podrán salir la opción y, entonces, hacer operaciones, tiradas y muchas cosas. 

Habia sumado mal la vida porque inicialmente me habia puesto 6 en fuerza y olvide cambiarlo :S

Modifico tambien y me pongo 3 puntos a esquivar, rascándolos del resto :D

Por lo demás entonces está todo bien ya, ¿no?

Gracias resala :)

Dicen que cuando uno piensa en su infancia acuden a su mente sonidos, olores e imágenes cálidas, llenas de color, de juegos, de olor a canela y azúcar y del calor del fuego del hogar.

Dicen que cuando uno es niño, todo es dicha, felicidad y consuelo.

Sin embargo, eso fue en otro tiempo, en otro lugar. Aquí, ahora, en nuestra tierra, los niños ya no juegan, los niños ya no ríen. No hay azúcar, ni canela, ni fuego, ni hogar. Y es que, desde que el apocalipsis se desencadenara, desde que Dios enviara a los suyos para purgar esta tierra de criaturas impuras y malignas, nada ha sido igual. El mundo se sumió en el caos, en la destrucción, y criaturas horribles y terribles ocuparon la faz de la tierra, llevando la muerte con ellas, a su paso.

Sólo unos cuantos sobrevivieron. Sólo unos pocos, a los que Dios consideró buenos, justos y merecedores de seguir con vida. Yo soy una de ellos. Soy una de las habitantes de New Hope, nueva esperanza, el lugar en el que Dios guareció a aquellos a los que aún amaba.

Mi nombre es V, y esta es mi historia.

No sé dónde nací, ni quienes fueron mis padres. Sé que tuve que conocerlos algún día, pero ni siquiera soy capaz de recordar sus rostros a día de hoy.  No recuerdo nada de mi infancia, ni siquiera mi nombre, mi apellido, o dónde estaba mi hogar; no recuerdo si tenía amigos, hermanos o familia. No recuerdo nada, sólo a él.

Mi primer recuerdo es una casa medio derruida, en la que aún ardían los rescoldos del fuego que la había asolado. No sé cómo había llegado allí, ni que había pasado. Tan solo sé que estaba rodeada de cadáveres calcinados y que me costaba trabajo respirar. No tendría más de seis o siete años, y él no tendría más de quince. Sin embargo, nunca, jamás, he olvidado aquella primera vez que vi su rostro, en el que apenas había crecido la primera barba.

Recuerdo que me cogió en volandas, y que me cubrió con su propia ropa, intentando que conservara las fuerzas  y el calor. Había otro hombre con él, uno mucho más mayor, al que llamó Maestro, alertándole de mi existencia.

Entonces todo se volvió oscuro a mi alrededor, y aquellos ojos azules fueron lo último que vi, antes de volver a perder el conocimiento.

Cuando desperté, estaba tumbada, en una cama, con ropa limpia y sábanas y mantas que me protegían del frío exterior. Recuerdo que la cabeza me daba vueltas, y que las sienes me palpitaban, como si me hubiera dado un fuerte golpe. Abrí los ojos lentamente y allí estaba él de nuevo: mi salvador, mi único amigo, mi padre, mi hermano, mi tío; lo único que tenía en este mundo: Alexander.

Recuerdo que, en aquella misma cama, me explicó quién era, qué estaba haciendo en aquel lugar en el que me encontró y dónde estaba. Me habló de New Hope, de la Institución, de Sajuuk  y de sus hijos, los que ahora se encargaban, como él, de hacer la voluntad de Dios sobre esta tierra.

Me habló de su maestro, de su pasado y me dijo que nunca, jamás, debería volver a tener miedo. Que él estaría allí, conmigo, para enseñarme, para cuidarme, y que jamás volvería a estar sola.

Fue así como, a aquella temprana edad, Alexander me tomó bajo su amparo. Y diez años han pasado ya desde aquel  día, el primer día de mi vida. Sigo sin recordar nada anterior a aquel momento y sólo hay algo que me sigue uniendo débilmente con quien debí ser: un  guardapelo de plata grabada, sin fotos, sin nada que pueda decirme algo más de mí, con una única pista sobre quién soy, sobre quién pude ser: una V grabada en su superficie.

Durante algún tiempo, intenté saber quién había sido, de dónde venía y qué estaba haciendo cuando Alexander me encontró. Sin embargo, hace tiempo que dejé de preguntar. Ya no me importa el pasado. No me importa quién fui.  Ahora sé quién soy: V, de New Hope, pupila de Alexander Sonnenzorn, mano de Dios en el mundo. Última luz, última esperanza para los suyos. Heraldo de la muerte para los que se apartan de su camino. Mano férrea que imparte su justicia.

Ahora, por primera vez en diez años, hemos de emprender un largo viaje, del que ni siquiera sabemos si regresaremos. Buscamos respuestas, queremos saber qué está pasando, por qué esta tierra, regalo de nuestro Señor, está plagada de criaturas monstruosas. Mi maestro dice que es la voluntad de Dios, que quiere que ambos sigamos la senda que ahora se abre ante nosotros, ese camino que él mismo nos marca y nos ilumina.

No tengo miedo. Jamás lo he tenido. Sé que Dios está conmigo, guiando mi mano, en cada una de mis decisiones. Sé que con él nada he de temer, que nada me ha de faltar. Porque somos sus hijos, su estirpe. Los bravos, los justos, los hacedores de su voluntad, los tejedores del destino.

Él guía nuestros pasos en medio de este caos, de este océano de maldad.

Hágase su voluntad.

Nombre: V

Edad: 18 años

Procedencia: New Hope

Descripción física:

Menuda y delgada, su aparente fragilidad engaña. Y es que, tras esa complexion más bien delgada, se esconden unos poderosos músculos, fruto de los años de entrenamiento.

De pelo entre castaño y rojizo y ojos de un profundo azul, hay algo en la mirada de V que no deja indiferente. Quizás sea ese aire desafiante, o ese atisbo de locura que a veces aparece en sus ojos.

Tiene una cicatriz en la muñeca izquierda, fruto de su rito de iniciación. Nunca ha hablado a nadie de lo que sucedió durante él, sólo a Alexander, y aquella cicatriz es para ella un recordatorio de algo que jamás desearía olvidar.

Descripción psicológica:

V es, a todas luces, una psicopata en potencia. De carácter calmado y amable cuando está de buenas, pasa del cero al cien en cuestión de segundos, siendo bastante comunes en ella los estallidos de violencia, sobre todo cuando se la contradice o cuando está actuando, como ella suele decir "en nombre de Dios". Puede pasar de la risa al llanto en cuestión de segundos, y es bastante inestable psicológicamente.

Su fe sobrepasa con creces el fanatismo, y sólo hay algo a quien adora prácticamente con la misma intensidad que a Dios: a Alexander, su maestro y protector. Tiene fe ciega en él, y lo idolatra como si del mismo Dios se tratara, y como si cada una de sus palabras fueran la sabiduría y la verdad absolutas.

Acepta su papel en este mundo y no le tiembla el pulso a la hora de impartir justicia. Se podría decir que incluso disfruta de ello, recreándose en más de una ocasión en el proceso, siempre y cuando cuente con el permiso de Alexander para ensañarse más de la cuenta.

Papel en New Hope:

A pesar de que V acabó su instrucción hace tiempo, no ha abandonado las enseñanzas ni la compañía de Alexander, quien la ha tomado a su cargo, como pupila, para convertirla en su digna sucesora, en su compañera en el arduo caminar por el desierto de Dios.

Curiosidades:

• V tiene una cruz tatuada en la espalda, que ocupa su mayor parte, en la que se entrelazan rosas rojas y espino.
• Siempre lleva colgado el guardapelo con el que Alexander la encontró.
• Cantar la relaja. Así pues, en situaciones de estrés, es bastante común escucharla tararear canciones sin sentido.
• Es zurda.
• Le encanta el fuego, y quemar cosas.
• Su color favorito es el rojo. Odia el amarillo. Sencillamente no lo soporta.