Partida Rol por web

De entre el muro de agua salió el Señor Brandigamo, completamente empapado y con cara de pocos amigos.

¡Diríase que el propio Manwë esta soplando a pleno pulmón ahí afuera! Es imposible distinguir nada a cuatro pasos. Deberíamos volver dentro antes de que tu estado empeore, soldado.

-¡Yo sí que he logrado ver algo!- exclamo, asustada- A unos doscientos metros de aquí hay infinidad de figuras encapuchadas. ¡Parecen estar sitiando esta torre! Hemos de volver aprisa y avisar a todos los presentes, así como cerrar a cal y canto la torre y prepararnos para un posible asalto. ¡He de avisar a mi her... a mi supervisor de inmediato!- comento, nerviosísima. Esto parece realmente serio, no una misión secundaria de poca monta. ¿Cómo se me había ocurrido seguir a mi hermano hasta aquí?

-Vamos, todos adentro. ¡Cerrad todas las puertas! ¡Pongamos sobre alerta a todos los presentes!

Borgo se quedó un tanto alterado ante las palabras del soldado pero obedeció y entró a toda prisa. ¡Menos mal que el muchacho si que vio algo porque el se hubiera ido a dormir tan tranquilo con una hueste al asedio sin saberlo!

Debemos avisar a todo el mundo aqui abajo y en la torre también.

 Tardan un poco en sacar las maderas que refuerzan el bloqueo de la puerta y abrirla, entráis apresuradamente y el guardia echa una ojeada al exterior y luego comienza a cerrar la puerta sin prisa pero sin pausa.

 Será mejor que os quitéis todo eso de encima y os cambiéis de ropa - dice el arquero mientras os acerca unas mantas - poneos junto al fuego, debéis estar helados.

Y os acompaña hasta la lumbre que han preparado en un rincón, sin molestar a los caballos.

-¿Qué lumbre ni qué ocho cuartos?- exclamo, apremiada por la prisa- ¡Un inmenso grupo de personajes encapuchados se acercan hacia la torre! ¡Hay que cerrar todos los accesos y prepararse para un posible ataque! ¡Avisemos a todos los guerreros! ¡Borgo! ¿Subes tú a ponerlos en guardia y me quedo yo preparando la defensa de la puerta o al revés?- miro al mediano. No quiero que por su condición no humana se sienta infravalorado. Aquí todos seremos útiles en caso de un asedio- Amigo, toca prepararse para lo que imagino podría tratarse de un cruento ataque. No hay tiempo que perder.

Me ajusto el casco. Lo peligroso de la operación hace que haya olvidado disimular mi femenino tono de voz, pero esa, en estos momentos, es la menor de mis preocupaciones.

Me pregunto si mi hermano y el resto ya estarán al corriente de lo que sucede allá afuera. no hemos sabido nada desde que subieron.

Me dirijo hacia el arquero.

-¿Se sabe algo de los que han subido?

-¡Yo me encargo!

Borgo desaparecio como un rayo escaleras arriba, saltando los escalones de 2 en dos. ¿Como se las habia apañado para meterse en ese tipo de problemas? ¡Él estaba simplemente de viaje y de repente se encontraba en medio de un asedio con una multitud de enmascarados al acecho!

El pequeño hobbit pasó al lado de la olla donde no hacia tanto habia estado cocinando y encaró el último tramo de escaleras.

 Subes a la segunda planta donde el capitán y el joven soldado aún conversaban en voz baja. Se da media vuelta a la que subes alborotando y el joven te detiene sin dejarte continuar hasta que expliques a qué viene todo eso.

Ves que tus gritos ya han despertado a algunos de los soldados que dormían que intentan nuevamente conciliar el sueño, quizás pensando que te sucede algo infantil.

 Espera un momento - dice al hobbit al tiempo que intenta alcanzarlo sin éxito. Luego se vuelve hacia Norwyn - ¿Qué es lo que has visto? ¿estas seguro? - pregunta desconfiado. Afuera está lloviendo y está muy oscuro quizás hayas entrado en pánico y hayas imaginado algo.

El otro soldado que guardaba la puerta te mira con preocupación.

El semblante del pequeño hobbit cambia al comprobar que, como suele sucederle con los humanos, no lo toman en serio. Su rostro se endurece, sus ojos se aceran. Borgo se yergue y mira directamente a los ojos de su interlocutor.

-Si no me creeis iros a dormir, espero que tengais los más dulces sueños pues nunca más depertareis de él, por la mañana vuestros cuerpo yacerán en el frío suelo, vuestras esposas serán viudas y vuestros hijo, huérfanos. Ha sido el soldado de Gondor el que ha visto a los encapuchados, por si os fiais mas de uno de los vuestros. Por mi parte, sé que algo pasa. Dos avistamientos de sucesos extraños son demasiada prueba para mi.

Y ahora, apartate y déjame pasar.

-¡Cierto es! ¿Acaso estás poniendo en duda la palabra de un guerrero rohirrim, vuestros más fieles aliados? Es preciso poner toda la torre en alerta, bajo riesgo de ser atacados vilmente. Más vale prevenir que curar. Afuera hay un montón de gente encapuchada, y deduzco que no vienen con buenas intenciones.

Me quedo mirando, desafiante, al arquero de Gondor.

 Poco convencido por tu explicación aun teniendo como referencia al jinete de Rohan te bloquean el paso. Será mejor esperar a tu compañero, no creo que el capitán quiera que subas ahí arriba con los terribles vientos que están arreciando.

 Se queda apabullado por tu firme convicción y persuadido te permite ascender las escaleras al tiempo que da ordenes al guardia para que la bloquee por completo y se pertreche de sus armas.

Estáis discutiendo cada vez más acaloradamente, haciendo que los soldados que estaban dormidos se despierten y adviertan acerca de qué va la bronca cuando llegan Norwyn y el arquero a toda prisa.

Señor, parece que estamos siendo rodeados. Deben haber aprovechado la tormenta y la oscuridad para acercarse, es posible que incluso se hayan infiltrado en la torre. - dice señalando con la cabeza el techo- no hemos podido saber cual es el número de enemigos.

 El capitán ha estado hasta el momento callado, pensando en cuánto de verdad podría tener la afirmación del pequeño hobbit, sabedor de que los miembros de esta raza se asustan con facilidad y tienden a exagerar cuando cuentan sus aventuras en el exterior de Bree.

Con el aviso del arquero y el jinete de Rohan se pone en pie y avanza cojeando hasta el centro de la sala.

Todos a sus puestos, estamos bajo ataque! - grita a pleno pulmón. 

Mientras los soldados se preparan con rapidez, él sigue dando órdenes. -  Berom y Torio, disponed los caballos intentaremos mandar los avisos antes de que cierren el cerco. Los demás a vuestros puestos.

Luego escoge a uno de los jinetes que acompañaba a Demian y a Norwyn para ascender a la parte superior, permitiendo al hobbit acompañarles, bajo su cuenta y riesgo.

Ved si la situación ahí arriba es mejor de lo que esperamos. Si la dama Isilwen sigue viva, pedidla que haga un reconocimiento, necesito saber cual es nuestra situación con detalle.

Con un esfuerzo titánico y la ayuda del guerrero desconocido, Borgos asciende por la escalera de cuerda. Lo peor no es la ascension, sino pensar que luego tendrá que bajar.