Partida Rol por web

Hay 3 botes con 4 orcos en cada uno - 2 reman y 2 disparan - que os están dando alcance rápidamente. Desde la orilla aun os disparan, pero al ritmo que lleváis en breve saldréis de su alcance. 

El rohirrim rema con todas sus fuerzas pero ni así puede sacarles ventaja a los orcos, que poco a poco se acercan a la embarcación. Enfurecido, empieza a soltar imprecaciones al darse cuenta de que Ozbeorn, Ergon e Isilwen no van a poder escapar, pero cada segundo que les regalan debe ser aprovechado, así que sin pensarlo empieza a dar órdenes.

- ¡Borgo, a remar! ¡Norwyn, siéntate de una vez en el suelo y agacha la cabeza, si te dan no lo vas a contar, maldita sea!

Borgo grita con una potencia que corta el aire. 

-SILENCIO!!!!

Si sus compañeros pudieran verle el rostro sin duda le harían caso pues el gesto afable del halfling había desaparecido, dejando paso a un rostro poseido por la concentración. Unos ojos que no podían permitirse el lujo de parpadear. Una lengua que no se podia dar el lujo de tragar saliva y un cuerpo tenso como la cuerda de un arco a punto de soltar la saeta.

De repente, el señor Brandigamo levantó los brazos al cielo y empezó a entonar una letanía extraña como ninguna. Su cántico no sonaba a ningún lenguaje de esta era pero pronto sus manos empezaron a brillar y su pelo se erizó y se levantó. Un extraño olor a ozono inundó las narices de los heroes de la barca y el cuerpo de Borgos se arqueó cuando, de sus manos, surgió una descarga eléctrica tremenda que se dirgió hacia la barca más cercana.

Incapaz de mover los remos, tomo el arco de nuevo. Sé que no tengo buena puntería, pero al menos los olbigaré a tener cuidado. ¿Y quién sabe? Quizás alguna vez logre ensartar a uno de ellos con una de mis flechas, aunque lo veía poco probable.

-No pienso esconderme, hermano- le digo, mientras veo como mi flecha se pierde en el mar- Otros han dado su vida para que yo subiera a esta barca. No voy a agachar la cabeza y esconderme hasta que pase todo.

Un terrible haz de luz, golpea como un látigo uno de los botes que os persiguen. El bote arde y los orcos, electrificados gritan de dolor hasta que finalmente mueren.

Una visión horrible que cuanto menos hace detenerse a los otros botes unos minutos para intercambiar entre ellos gruñidos y palabrotas en su negra lengua.

Vamos con la iniciativa: Al ritmo que va demian necesitais 3 turnos para alejaros de la orilla lo suficiente. Los orcos os perseguirán hasta que lleguéis a Caern Andrhen o los matéis. No hay más botes y los orcos son malos nadadores, no habrá más de ellos persiguiéndoos.

Hay dos botes con 4 orcos cada uno.

Iniciativa:

Primero los héroes. No hace falta que tiréis.

Segundo los orcos de las orillas.

Tercero los orcos de los botes.  

Borgo deja el arco a un lado y salta  a los remos que ha dejado la humana. Sabe que su fuerza en poco ayudara a alejarlos pero si consiguen mantener la distancia otro minuto mas hasta que recupere las fuerzas magicas, puede lanzar otro relampago.

Borgo se esfuerza por remar junto a Demian pero no tiene suficiente fuerza para ayudar en los remos. Apenas aumenta la velocidad del bote.

Solo queda Norwyn y su arco este primer turno para acabar con los orcos que os persiguen.

Demian, aunque no deja de remar, queda impresionado por la exhibición de magia de Borgo.

- ¡Es usted una caja llena de sorpresas, señor Brandigamo!- le dice soltando una carcajada que casi parece fuera de lugar- Has demostrado habilidades inimaginables, joven hobbit- añade con lo que parece sincero respeto- pero creo que serás más útil si intentas acabar con los orcos a flechazos que remando. Mi testaruda hermana agradecerá la cooperación, aunque os sugiero que cada uno dispare a un bote distinto.

¡Maldita sea! ¡Debía haber tomado lecciones de arco y flecha! ¿Por qué habré tomado siempre lecciones de espada?

Apunto de nuevo, me concentro intentando apuntar lo mejor que puedo, pero con el movimiento de la barca y mi falta de puntería, otra flecha más que aterriza en el agua.

Recargo el arco y vuelvo a apuntar. Alguna vez acertaré, por mi honor que alguna vez pienso dar en el blanco.

En total 4 flechas. De las cuales 2 impactan al bote (sin daño), una impacta a Demian y otra a Norwyn. El daño de cada flecha es de 8.

Los orcos de los botes disparan contra el bote enemigo. El primero impacta con una flecha que da al bote. El segundo, da directamente al bote.

Borgos vio como una lluevia de flechas cayó sobre el bote y hirió a Nolwyn y a Demian. Enfurecido, asio su arco , cargo una flecha y disparó sobre el orco más cercano.

-Cubre a tu hermano con el escudo, Norwyn. Si perdemos su fuerza a los remos nos atraparán!

Otro impacto más... Las fuerzas me estaban abandonando. Cogí el escudo que Borgo me había señalado y cubrí con él a mi hermano, protegiéndome detrás. Creo que ya no podía hacer más que aguardar y aguardar. Estaba a punto de desfallecer.

Demian siente el impacto de la flecha en el muslo como fuego quemándole la carne. Ahoga una exclamación de dolor que casi se le escapa entre los dientes y, sin parar de remar con más furia si cabe, dirige una preocupada mirada a su hermana. Como mínimo el escudo también la protegerá a ella... piensa con pesar mientra intenta evaluar el alcance de la herida de la muchacha.

- ¿Puedes sostenerlo, Norwyn?- pregunta ocultando una angustia que le carcome los huesos. Si ella muere, nada tendrá sentido para el joven capitán rohirrim aunque lleguen a tiempo a Caern Andrhen.