Saki dio un suspiro de alivio al escuchar las palabras de Vanilla.
—Eromochi me ha contado anoche, cuando estabamos investigando el cuarto de Tsuji, cómo funciona su Ultimate y contra quién lo ha usado. Lo que dice ahora sobre seguir a Vanilla es coherente con lo que yo he oido, su relato de la segunda noche desmiente que su atención se hubiera desviado, porque a quien intentó... seguir—dijo efuemísticamente para no usar la palabra acosar— fue a mi. Pero en la primer noche, aquella en la que Vanilla no hizo nada, si se vio parado frente a una puerta diferente a la que pretendía ir, la de Tsuji, donde olió el cloroformo. Si juntamos eso con lo que acaba de decir Akame—de nuevo se le erizó el vello de la nuca al pensar en la espiritista— podemos concluir al menos una cosa con seguridad, y otra con gran probabilidad:
Saki alzó un dedo.
—Primero, alguien más, además de Vanilla es capaz de redirigir la atención, o quizá las acciones de la gente. Al menos durante la noche.
Saki alzó un segundo dedo.
—Todo lo que Eromochi me ha dicho concuerda con un montón de otra información que ha ido surgiendo durante las conversaciones y que no ha dado él. Si lo que dice es cierto, entonces es muy poco probable que sea un asesino. Podría ser una mentira sumamente elaborada y que haya tenido mucha suerte al montarla y que el resto la confirme por casualidad, pero la respuesta más simple es creer que dice la verdad.
Saki se estaba enfrascando en el hermético misterio, y a medida que hablaba y maquinaba, el horror de los asesinatos comenzaba dar lugar a un auténtico entusiasmo.
Cuando paso la mano de Tomoe sobre mi, me sentí relajado, ahora que todo se estaba complicando, aun que me dijo que no me acostumbre, lo tomare el cuenta a mas futuro.
~Prrrrrrrr-rrrrrrr~
Tras eso, solo me quede escuchando, como las personas estaban el disputa o hablando de sus cuartadas, pasajes secretos, habilidades, muerte y sospecha. Yo solo podía mirarlos a distancia, sin llegar intervenir. Aun que tuviera algo, esta difícil dar con la comunicación. Ahora estaba entre ir a la piscina o ir con Eromochi a su cuarto.
Mientras la mayoría de los presentes seguía discutiendo y viendo la posibilidad de dar con alguno de esos asesinos, y otros simplemente se encontraban más perdidos que un pulpo en un garaje, el reloj de arena que tenía Monokuma bien escondido y que tan solo veía el llegó a su final por lo que este anunció el fin de las votaciones.
-¡El tiempo ha terminado!. -Exclamó de manera solemne pero a su vez algo entusiasmada- Veamos qué es lo que ocurre en estas votaciones, esperemos que no sea ninguna sorpresa desagradable para nadie y hayáis dado con uno de nuestros enemigos comunes... ¡Veamos el recuento!.
Aquellos resultados parecían ser bastantes claros, la mayoría de los presentes habían optado por un motivo u otro que el más votado fuera no otro que Vanilla Carpe Diem, aquella joven de cabellos morados y de sangrado nasal fácil que se encontraba entre todos los demás supervivientes.
-Al parecer el más votado ha sido Vanilla Carpe Diem. -Advirtió el oso no pudiendo contener sus ganas de reirse- Upupupu... Esperemos que hayáis acertado, aunque eso lo veremos luego... ¡Pero antes de nada es hora del Castigo!. -El oso sacó una maza que golpeó a un botón que emergía del suelo.
El compartimento debajo del atril de Vanilla Carpe Diem se abrió dejando ver bajo ella la completa oscuridad y de esta emergían engranajes que empezaban a funcionar. La joven trató de saltar de su atril al que tenía al lado para evitar la caída, pero no tuvo tiempo y esta cayó hacia la más profunda oscuridad. Y el mecanismo de aquella trampilla se cerró tras élla.
Las pantallas se encendieron mostrando que cuando la joven Vanilla Carpe Diem aterrizó lo hizo en... una cama de una habitación; tardó un par de segundos en reconocer el entorno como "aquella habitación" de su antiguo instituto puesto que este lugar estaba en casi completa oscuridad; aún así pudo reconocerla bien luego de forzar la vista; justo a tiempo para que las luces se encendieran.
Alrededor de ella había un total de dieciseis personas, todas de edades similares, y todos ellos miraban fijamente a Vanilla Carpe Díem, estas personas no parecían ser amenazantes, ni tampoco parecía que fueran a dañarla, sino que simplemente estaban ahí, ante ella.
A juzgar por la expresión que esta había puesto, parecía que los conocía a todos ellos. De hecho no se encontraba nada intimidada por ninguno de ellos, sino simplemente impactada por verlos ahí mismo.
Pero no había tiempo para charlas ni presentaciones, puesto que las luces se apagaron de repente, para que, tras un par de segundos se volvieran a encender nuevamente.
Uno de los alumnos había desaparecido, a cambio un "Monopad" apareció en las manos, mostrando la escena macabra de aquel muchacho colgado en lo que parecía ser la sauna. Sea lo que sea que estuviera pasando, era algo que parecía ser irreal, pero la cosa no terminaba ahí. Sino que además tenía un informe de la autopsia.
¿¡QUIEN ES EL CULPABLE!?
Este mensaje apareció con una respectiva cuenta atrás; casi de forma instintiva, Vanilla Carpe Diem se vio obligada a señalar a uno de los presentes; en concreto al muchacho de cabellos blancos que, tras haber sido señalado, explotó en una masa de sangre que manchó al resto de los presentes y a la propia estancia en sí.
Las luces se apagaron de repente, para que, tras un par de segundos se volvieran a encender nuevamente:
Una de las alumnas había desaparecido, a cambio el "Monopad" se actualizó, mostrando la escena macabra de aquella muchacha ahogada dentro de una bolsa de basura en lo que parecía ser la piscina. Así como el respectivo informe de la autopsia.
¿¡QUIEN ES EL CULPABLE!?
Este mensaje apareció con una respectiva cuenta atrás; casi de forma instintiva, Vanilla Carpe Diem se vio obligada a señalar a uno de los presentes; en concreto al muchacho de cabellos anaranjados que, tras haber sido señalado, explotó en una masa de sangre que manchó al resto de los presentes y a la propia estancia en sí.
Las luces se apagaron de repente, para que, tras un par de segundos se volvieran a encender nuevamente:
Cuatro de las alumnas había desaparecido, a cambio el "Monopad" se actualizó, mostrando las escenas macabras de tan solo tres de aquellas muchachas asesinadas, una en lo que parecía ser una sala de juegos, otra en un cuarto de baño y otra en la sala de un incinerador completamente quemada e irreconocible.
¿¡QUIEN ES EL CULPABLE DE DOS DE ELLAS!?
Este mensaje apareció con una respectiva cuenta atrás; casi de forma instintiva, Vanilla Carpe Diem se vio obligada a señalar a uno de los presentes; en concreto al muchacho encapuchado, tras haber sido señalado, explotó en una masa de sangre que manchó al resto de los presentes y a la propia estancia en sí.
Las luces se apagaron de repente, para que, tras un par de segundos se volvieran a encender nuevamente:
Ninguna de las alumnas había desaparecido, a cambio el "Monopad" se actualizó, mostrando simplemente lo que parecía ser una sala de arte, con una estatua sin piernas ni brazos en el centro y unos cuantos caballetes a su alrededor. No parecía ser nada extraño ni espeluznante
¿¡QUIEN ES EL CÓMPLICE!?
Este mensaje apareció con una respectiva cuenta atrás; casi de forma instintiva, Vanilla Carpe Diem se vio obligada a señalar a uno de los presentes; en concreto a la muchacha de cabellos morados que, tras haber sido señalado, explotó en una masa de sangre que manchó al resto de los presentes y a la propia estancia en sí.
Las luces se apagaron de repente, para que, tras un par de segundos se volvieran a encender nuevamente:
Uno de los alumnos había desaparecido, a cambio el "Monopad" se actualizó, mostrando la escena macabra del joven forzudo estando completamente lleno de cuchillos clavados en su cuerpo en aquella sala de música en donde se encontraba con un reguero de sangre por el medio.
¿¡QUIEN MUERE AHORA POR INCUMPLIR LAS NORMAS!?
Este mensaje apareció con una respectiva cuenta atrás; casi de forma instintiva, Vanilla Carpe Diem se vio obligada a señalar a uno de los presentes; en concreto al muchacho de cabellos rojos que, tras haber sido señalado, explotó en una masa de sangre que manchó al resto de los presentes y a la propia estancia en sí.
Las luces se apagaron de repente, para que, tras un par de segundos se volvieran a encender nuevamente:
Finalmente nadie más hubo desaparecido, tan solo aparecio una única pista en el cargador mental de Vanilla Carpe Diem, una pista que, al parecer, hablaba de unos seis alumnos más muertos. Sea lo que sea que esto fuera a significar, tan solo Vanilla Carpe Diem parecía saberlo..
¿¡QUIEN ES EL RECIPIENTE QUE "ELLA" DESEABA POSEER Y QUIEN ES AL QUE TERMINÓ POSEYEENDO!?
Este mensaje apareció con una respectiva cuenta atrás; casi de forma instintiva, Vanilla Carpe Diem se vio obligada a señalar a dos de los presentes; primero a la muchacha llena de vendas y luego al muchacho con el rostro terrorífico, tras haber sido señalados, ambos explotaron en una masa de sangre que manchó al resto de los presentes y a la propia estancia en sí.
Tras todo aquel resumen de un evento que al parecer nadie conocía; tan solo quedaban tres personas con vida. Un muchacho de cabellos castaños y un muchacho de cabellos azules; así como ella misma. Pero al parecer el test había terminado. Ya no quedaban más preguntas que hacer.
Las luces se apagaron de repente, para que, tras un par de segundos se volvieran a encender nuevamente:
¿¡QUIENES SE METIERON EN DONDE NO LE LLAMABA Y TERMINARON MURIENDO?!
Y para finalizar, la muchcha señaló al tipo de cabellos castaños que explotó, y con su mano temblorosa y ojos llorosos, terminó por señalarse a sí misma, teniendo este mismo resultado.
Una vez que hubo terminado aquella ejecución el oso volvió a hablar cortando la transmisión de una vez por todas, a fin de cuentas ver un cadáver por tanto rato era una auténtica pérdida de tiempo y para nada algo al nivel de elegancia que aquel Monokuma tanto se esforzaba por remarcar.
-Muy bien, pues esto ha llegado a su fin. -Comentó dejando que las puertas del ascensor se abrieran- El Periodo Nocturno acaba de empezar, así que más os vale ir a la cama. Tenéis que estar listos para el día de mañana y el Juicio que vendrá... no desfallezcáis... no todos, al menos.
Antes de que esto terminara y pudiese responder siquiera o manifestar intenciones, notó algo. Un color rojo en los votos de Tomoe. ¿Podría ser...? Y luego que Vanilla, a diferencia de todos los demás estaba... ¿Censurada? ¿Qué era esto?
- ¡Monokuma! ¿Qué significa eso? ¿Por qué está...? ¡Monokuma!
Pero sabía que no había tiempo y que esto probablemente no llevaría a nada, pero no podía evitar reaccionar... Tarde, quizá, y muy poco, también.
El oso se sorprendió de que algunos tuvieran acceso a postear en esta escena, recordando de repente que se le hubo olvidado por completo quitar los permisos de posteo en este lugar mientras hacia otras cosas como por ejemplo, reunir información para editar el post de la ejecución.
-Porque no tengo ganas de editar demasiado y me salió un poco mal el recorte de la imagen con el fondo a prisas y corriendo y porque siempre ha sido una pervertida, he decidido "censurarla" a modo de broma. -Comentó el oso maldiciendo acerca del hecho de que no los había muteado y expulsado de la escena a tiempo.- Si luego votáis por el gordo le haré lo mismo, quizás lo pixele entero o quizás le ponga líneas de luz porque sí... o rayas negras... ya veré... ¡FUERA DE AQUÍ!.