Cuando termina de ponerme la venda. Hago un par de movimientos de molinillo con el brazo y aguanta muy bien, me vuelvo a colocar la camisa, la chaqueta de cuero y la cota de mallas.
- Muchas gracias mi señora, estoy como nuevo, si bien las fuerzas a mi pobre entender han sido derrotadas, quedarme cerca de ustedes es todo lo que ansío, para poder defenderos en caso que...- hago una pequeña pausa no se si recalcarlo o no, pero finalmente pienso que cuanto más informados estemos todos mejor- Un Vampir sigue ilocalizado.
Finalizo gravemente sin decir nada más, cuando termino de vestirme y cuelgo mi hacha de la espalda.
Asintió imperceptiblemente hacia su prima. Entendía lo que quería decir, era necesario que el pequeño durmiera, y una de las dos tenía que dormir, o montar guardia para que no nos pillaran de sorpresa, aunque con la guardia que había para proteger el castillo, poco íbamos a hacer nosotras, aunque lo primero era proteger a Tiberu.
- Vamos Tiberu, seguro que tienes sueño, es muy tarde y hay que dormir. Le cogí de la mano y la acaricié levemente, lo levanté de mis piernas y lo dejé en el suelo. Con el calor se me había abotargado la mente, y lo mejor era descansar.
- Vamos prima, manda que tu guardia descanse un poco, que nosotras también lo necesitamos.
A la sala de invitados.
- Dama Radovina sale al Patio y lo cruza corriendo, pues está lloviendo, hasta llegar a la zona de invitados.
// Sale de escena: Radovina. - Sigue en: Estancias de Invitados. - Pasando por: Patio del Castillo.
NUEVE DE LA NOCHE. TERCERA HORA TRAS EL OCASO.
NOCHE DEL CINCO AL SEIS DE MAYO DEL AÑO DE NUESTRO SEÑOR DE NOVECIENTOS CINCUENTA Y OCHO.
Dio un último vistazo a la estancia antes de salir de ella junto a Tomescu, Radovina y Tiberiu. Sabía por lo que había visto que apenas había diferencia entre descansar allí o en el ala de invitados. De hecho aquella opción les beneficiaría pues descansarían realmente y mantendría cierta privacidad. Cuando estuvieran lejos de oídos indiscretos comentaría todo aquel asunto del vampyr con su guardia.
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Hacia el ala de invitados.
LINDOR:
- Llevas una hora aguardando a tus familiares en la entrada del Salón, pero no han entrado contigo, por lo que deduces que o bien se han quedado inexplicablemente bajo la lluvia helada, o bien se han retirado a otro lugar.
- Dubieta sale al Patio del Castillo llevándose de la mano a su prima Radovina y su hijo Tiberiu. El guardia Tomescu la sigue a corta distancia.
- En la puerta se cruzan con el Paje Lindor de Slobozia, que parece estar ahí esperando a alguien, pero apenas reparan en él ni le hacen demasiado caso.
// Salen de escena: Dubieta, Radovina, Tiberiu, Tomescu. - Siguen en: Patio del Castillo.
Al parecer ninguna de mis familiares desea entrar como se le indicó y nada puedo hacer aparte de ello más que seguir mis propias indicaciones. Veo como las mujeres nobles y Tiberiu vuelven a salir y les sigo, como fue la orden que Visany me dio.
"Él cree que debo vigilarlas por algún motivo y eso es lo que haré. Si me preguntan algo, diré que se me asignó su seguridad, cosa que no les dará más que risa pues un niño de siete años no puede siquiera defenderse solo."
Comienzo a caminar detrás de ellas, intentando disimular un poco para no ser notado como un perseguidor.
Al patio del castillo.
- Lindor se apresura hacia el húmedo y frío exterior de la lluviosa noche transilvana.
// Sale de escena: Lindor. - Sigue en: Patio del Castillo.