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El Regente de Jade I: El Legado de Muro de Salmuera.

El Sueño de Ameiko.

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05/11/2017, 22:51
"El Espíritu Kami".

EL SUEÑO DE AMEIKO:

Notas de juego

- Escena onírica principalmente narrativa.

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20/04/2018, 07:45
[RIP] Punta Arena: Madame Niska Mvashti.

CARROMATO DE ADIVINA DE MADAME MVASHTI:

- "Entra, pequeña. ¿Vienes buscando pistas de tu futuro? ¿Quieres saber si te casarás con algún apuesto héroe?" -

La anciana sonríe bonachonamente a una joven Ameiko, seis años atrás.

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06/07/2018, 07:54
Tradición Ancestral.

MITAD DEL INVIERNO DEL AÑO 4708 RA.

DÍA DE LAS ESTRELLAS, DÉCIMO SEXTO DE CALISTRIL.

BOSQUE ADYACENTE A LA ALDEA DE MURO DE SALMUERA.

QUEDAN CINCO HORAS PARA EL ALBA.

Todo era muy confuso en la mente de Ameiko, atrapada como estaba en un ciclo de sueños y rememoraciones del pasado.

Acababa de salir de casa de la antigua adivina, la madre de Koya Mvashti, y el pueblo de Puntarena de nuevo estaba siendo atacado por Goblins y rufianes y se había desatado un terrible incendio.

Era un sueño-recuerdo de años atrás, de cuando Ameiko y Shalelu aunaron fuerzas para salvar del incendio a tantos habitantes del pueblo como pudieron. Aquello fue un gran éxito y las unió mucho más, convirtiéndolas en grandes amigas.

En el carromato de Adivina de Koya, donde duerme su inquieto sueño Ameiko en el mundo real, es visitada por la elfa Shalelu, que toca a su amiga y se concentra. Tal vez el Espíritu Kami que posee a la noble Tien capte que ella es un alma amiga y no pretende ningún mal a su protegida. Tal vez facilite el contacto mental-onírico...

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10/07/2018, 00:46
Shalelu Andosana.

MITAD DEL INVIERNO DEL AÑO 4708 RA.

DÍA DE LAS ESTRELLAS, DÉCIMO SEXTO DE CALISTRIL.

BOSQUE ADYACENTE A LA ALDEA DE MURO DE SALMUERA.

QUEDAN CINCO HORAS PARA EL ALBA.


¿Cómo he llegado hasta aquí? ¿Es esto real? ¿O es un sueño? Ameiko... ¿Ameiko? ¡Ameiko!


- ¡Ameiko!

La elfa corrió hacia el carromato de la adivina del que salía Ameiko. Todo era confusión. La gente corría sin sentido intentando alejarse del fuego. Llegó hasta la mujer y la agarró del brazo, temerosa de perderla entre la multitud.

- ¡Vamos, nos están atacando! ¡Todo arde! ¡Los establos, los animales! ¡Hay que sacarlos de ahí o morirán!

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10/07/2018, 01:06
Ameiko Kaijitsu.

MITAD DEL INVIERNO DEL AÑO 4708 RA.

DÍA DE LAS ESTRELLAS, DÉCIMO SEXTO DE CALISTRIL.

BOSQUE ADYACENTE A LA ALDEA DE MURO DE SALMUERA.

QUEDAN CINCO HORAS PARA EL ALBA.

El acre olor del humo invadió las fosas de Ameiko, ahogándola, que corrió por las calles, cubriéndose con la manga de su vestido en un vano intento de sofocar las toses. Tras ella el carromato de Koya, del cual no recordaba haber salido, somo si una voluntad inviisble e inaprehensible la hubiera trasladado de un escenario a otro. Miró atrás, pero no vio nada. Solo casas ardiendo, ruinas ennegrecidas, gritos y la borrosa imagen de algo que recordaba a goblins como causantes de todo aquel caos.

El calor era sofocante y quemaba la piel y los pulmones. Ameiko se sintió desfallecer, sus fuerzas y voluntad menguadas, cuando una mano la tomó por el antebrazo. Se volvió, los ojos llorosos y enrojecidos, y entre la bruma de las lágrimas distinguió su rostro amigo.

-Shalelu -musitó sintiendo ganas de llorar por el alivio de ver aquella cara conocida.

-¡Vamos, nos están atacando! ¡Todo arde! ¡Los establos, los animales! ¡Hay que sacarlos de ahí o morirán!

No hubo reconocimientos, ni voz amable, ni tregua en el infierno. Tan solo apresuramiento, ansiedad, nerviosismo. Pero también verdad y un ancla a la que agarrarse, un trabajo que hacer.

-Sí, claro -replicó confusa-. Vayamos. Yo te sigo -añadió agarrándose a la mano de aquella mujer como si fuera lo único real a su alrededor. Aunque en medio de su estupor, algo resonó quedamente-. Koya.

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21/07/2018, 21:00
Shalelu Andosana.

MITAD DEL INVIERNO DEL AÑO 4708 RA.

DÍA DE LAS ESTRELLAS, DÉCIMO SEXTO DE CALISTRIL.

BOSQUE ADYACENTE A LA ALDEA DE MURO DE SALMUERA.

QUEDAN CINCO HORAS PARA EL ALBA.

La elfa tenía la sensación de que prácticamente arrastraba a la muchacha, y sentía que debía aflojar la presa hecha en su brazo para no hacerla daño, pero la idea de que pudiera soltarse y perderla hacía que apretara la presa un poco más. Ni siquiera la soltó del todo cuando llegaron a los establos.

La visión era aterradora. Los tablones eran lamidos por llamas altas, y el olor a madera quemada inundaba las fosas nasales. Muchos se hubieran quedado paralizados, pero el sonido de los animales intentando escapar dio un empujón a la elfa, que no podía dejar a aquellas criaturas morir allí.

- ¡Vamos! Romperemos aquellas tablas. - Dijo señalando un segmento de pared que prácticamente era carbón. - Entraremos y soltaremos a los animales. Los guiaremos si hace falta. ¡Ten cuidado!

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22/07/2018, 17:55
Ameiko Kaijitsu.

MITAD DEL INVIERNO DEL AÑO 4708 RA.

DÍA DE LAS ESTRELLAS, DÉCIMO SEXTO DE CALISTRIL.

BOSQUE ADYACENTE A LA ALDEA DE MURO DE SALMUERA.

QUEDAN CINCO HORAS PARA EL ALBA.

Escuchaba sus palabras, sentía su ansiedad, olía el miedo y el humo. No sabía si el de Shalelu o el de ella misma. Posiblemente fuera lo último. No había visto nunca a la elfa asustada, así que sí, debía ser ella, la propia Ameiko la asustada.

-¿Romperlas? ¿Con qué? -dijo mirando incrédula aquellas tablas renegridas primero y luego sus manos, no tan blancas como debieran. No era que le molestara mancharse, era que dudaba poseer la fuerza necesaria para ello. Miró en derredor, angustiada por el piafar de los caballos asustados por el fuego, sin alcanzar a distinguir nada útil. Sin opciones, se recogió la falda y arrancó el bajo de la misma, envolviéndose las manos con la tela y se acercó a la pared indicada por la elfa. Podía sentir el calor de la madera en sus palmas, el del fuego en su cara y el del humo en sus pulmones. Jadeó y tosió y con el sudor cayendo por su frente y empapando su cabello que se pegaba a su rostro, agarró la primera de las tablas y comenzó a tirar de ella.

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05/08/2018, 02:12
Shalelu Andosana.

MITAD DEL INVIERNO DEL AÑO 4708 RA.

DÍA DE LAS ESTRELLAS, DÉCIMO SEXTO DE CALISTRIL.

BOSQUE ADYACENTE A LA ALDEA DE MURO DE SALMUERA.

QUEDAN CINCO HORAS PARA EL ALBA.

La propia Shalelu gastó un par de segundos en buscar algo que sirviera para derribar las tablas y poder pasar, pero el tiempo apremiaba, y pensó que con un par de patadas las más chamuscadas cederían. Vió como Ameiko llegaba a la misma conclusión. La siempre resuelta Ameiko, capaz de romperse su propia ropa para poder atravesar una pared.

El calor era agobiante, y el humo picaba en los ojos y ardía en la garganta, pero sólo pensar en las pobres bestias encerradas le hacía continuar. Unos pocos golpes abrieron un hueco suficientemente grande como para poder pasar, hueco por el que el humo salía con ganas. El oxígeno alimentaría el fuego, pero no había otra forma.

- ¡Guía a los animales pequeños, yo me encargo de los caballos!

Tenía miedo de que alguno se encabritara con el estrés y dañara a la mujer.

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11/08/2018, 17:38
Ameiko Kaijitsu.

MITAD DEL INVIERNO DEL AÑO 4708 RA.

DÍA DE LAS ESTRELLAS, DÉCIMO SEXTO DE CALISTRIL.

BOSQUE ADYACENTE A LA ALDEA DE MURO DE SALMUERA.

QUEDAN CINCO HORAS PARA EL ALBA.

Obedeció. Sin duda Shalelu sabia lo que había que hacer y en medio de la cortina de fuego y humo, Ameiko apenas podía siquiera pensar. Siguió a la ella, viendo como tomaba por las riendas a una de las monturas para sacarla fuera. Ella miró en torno, intentando vislumbrar a los animales pequeños de los que le había hablado. Unos balidos marcados por el miedo y la desesperación, la dirigieron hasta una puerta tras la cual podían verse tres cabras y otros tantos cabritillos. Abrió la puertecita del pequeño recinto y se metió dentro, intentando torpemente que salieran de allí. Pero el miedo a abandonar las crías parecía superior al temor al fuego. Ameiko se arrodilló, y abrazó a los cabritillos tomándolos entre sus brazos y salió por entre las tablas que Shalelu había abatido. Una vez fuera, soltó a los pequeños, confiando en que sus madres la hubieran seguido y guiaran a sus crías fuera de allí. Así fue y sonriendo de forma apagada, secándose el sudor de la frente y haciendo que una mancha de hollín la tiñera largamente, volvió a entrar en pos de nuevos animales. Pero no vio a Shalelu.

-Shalelu, Shalelu, ¿dónde estás? -preguntó en voz alta. 

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18/08/2018, 22:20
Shalelu Andosana.

MITAD DEL INVIERNO DEL AÑO 4708 RA.

DÍA DE LAS ESTRELLAS, DÉCIMO SEXTO DE CALISTRIL.

BOSQUE ADYACENTE A LA ALDEA DE MURO DE SALMUERA.

QUEDAN CINCO HORAS PARA EL ALBA.

- ¿Están todos fuera?

Entre una nube de humo que me impedía ver a Ameiko, me llegaba su voz. Yo me acercaba al agujero de la pared tirando de las riendas del último caballo, que se había negado a moverse sin haberle convencido primero haciendo que confiara en mí.

- ¡Corre! ¡Temo que se desmorone en cualquier comento!

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19/08/2018, 12:34
Ameiko Kaijitsu.

MITAD DEL INVIERNO DEL AÑO 4708 RA.

DÍA DE LAS ESTRELLAS, DÉCIMO SEXTO DE CALISTRIL.

BOSQUE ADYACENTE A LA ALDEA DE MURO DE SALMUERA.

QUEDAN CINCO HORAS PARA EL ALBA.

La voz de Shalelu la apremiaba a correr, pero ni siquiera era consciente de si había sacado a todos los animales del establo. Aun así, no había vuelta atrás y el miedo a la muerte estaba por encima de todo. Y obedeciéndola, Ameiko echó a correr, alejándose de las llamas y de la estructura a punto de caer, sin mirar atrás, sin ver si la elfa avanzaba tras ella, presa del miedo y de la desesperación que estrangulaba su garganta. Algunas lágrimas cayeron por sus mejillas tiznadas de hollín, creando surcos más pálidos haciendo de su cara una extraña máscara. Y corrió, corrió, corrió, hasta que sus pies tropezaron con un cuerpo tendido en el suelo y cayó cuan larga era. Cuando volvió la cabeza hacia aquello que la había hecho caer, su boca se abrió en un mudo grito de horror que no llegó a brotar.