Tybalt enseguida devolvió las botas a su dueña en cuanto estuvieron de regreso a su cubil. Le resultaba complicado no fijarse en las siluetas que permitían adivinar las finas túnicas que llevaron puestas durante la prueba, pero el respeto y la devoción que sentía por la sacerdotisa le permitió no caer en la tentación de ser tan descarado. Y es que el tiflin, aunque medio infernal, no estaba hecho de piedra.
Ya otra vez encerrados, se encontraron con nuevas comodidades quizás por haber conseguido llegar con vida hasta este punto. Comida caliente era todo a lo que podían aspirar después de la dura prueba del laberinto. Le alegró ver que los que se enfrentaron a la tortura física y mental habían salido ilesos, al menos que uno pudiera notar. Pero el ánimo por haber sobrevivido se empañó por un tonto despiste. Tybalt se llevó la mano hasta su frente en un gesto de decepción por haberse olvidado de algo tan importante como la katana maldita. -Ninguno nos dimos cuenta realmente.- Dijo para evitar la búsqueda de una cabeza de turco para llevarse la culpa pues, exceptuando a las que se enfrentaron a la Prueba de la Mente, todos habían tenido la oportunidad de decir algo al respecto. -Estoy con Jadewo. Superar el laberinto lo antes posible se convirtió en nuestra prioridad.- Y no era falso, pues les preocupaba que cualquiera de sus compañeras acabase siendo un plato degustación para algún demonio retorcido. -Supongo que habrá que hacer guardias hasta que reaparezcan los dichosos tentáculos.- Propuso mientras se llevaba un bocado caliente para llenar un poco el estómago.
¡Ey, rápido! Venid...-llamó Becky desde el muro invisible, para que se acercasen a ver-¡Empieza la participación de los ninjas...
No había mucho que ver. La plataforma de la Prueba del Corazón se elevó bastante pronto, pero luego, de nuevo, las congregaciones se atascaban en la prueba de inteligencia. El ninja que estaba en el interior de la esfera, sobre el laberinto, no tardó en consumirse por la energía negativa. Al cabo de bastante tiempo, tres ninjas salían manchados de mugre del interior del laberinto. En conjunto, habían hecho peor tiempo que la cohorte de Becky, pero mejor que otros equipos antecesores.
¡Uy, no os lo perdáis...! ¡El Pentecostés!
Llamó la atención que en la esfera de la Prueba del Corazón hubiese un esqueleto, que se fue desmoronando en cuanto la plataforma empezó a quemar sus huesos. Después, la prueba se prolongó considerablemente. El humanoide nazareno terminó saliendo, entre los abucheos del público, que habían pasado media hora sin ver nada. Por lo menos, el Pentecostés estaba en la final, aunque es posible que el compañero que hizo la Prueba de la Mente no haya quedado en muy buenas condiciones mentales.
Aaaaah, los chicos guapos...
El grupo de Hugo tardó en llegar a la plataforma. El que salió, contra todo pronóstico, fue Keocratis, su explorador. Su batín le quedaba pequeño, y mostraba un injerto de piel en el brazo con muy mala pinta. Keocratis pasó los primeros cinco minutos sin inmutarse. Después, empezó a dar saltitos, como bailando en una sartén. Conjuró unas telarañas que ocuparon la mitad superior de la esfera, se agarró a las hebras, y con sus poderosos abdominales de macho, se encaramó y pasó el resto de la prueba suspendido a media altura, lejos del calor de la plataforma. Arpanhoe, su sacerdote, terminó saliendo, tan cubierto de mierda como todos. Lo que sí llamó la atención fue que cuando se recogían de nuevo en su cubil, Hugo caminaba encorvado, nervioso, mirando con miedo en todas direcciones. A él sí le había hecho mella hacer la Prueba de la Mente.
Bueno, solo queda el Coleccionista-bostezó.
Lo del Coleccionista fue espectacular. En pocos minutos, la plataforma ya se estaba alzando. La presentadora Yuri mostró cierto desconcierto, pues el que se sometía a la prueba era el Gólem Escudo. Técnicamente, los gólems no sienten dolor, y la sacerdotisa debió advertirles de que no podía realizar la prueba. Pero para sorpresa de todos, el pecho del gólem se abrió, como una alacena de metal, y mostró en su interior una jaula con un lince. Aquel pequeño felino, apacible, y majestuoso, seguramente el último de su especie en el plano en el que fue capturado, empezó a chirriar de dolor, para algarabía del público. Fue el lince el que hizo la prueba, y la falló, muerto por energía negativa. Ocho minutos después de haber empezado la carrera, el Coleccionista salía del interior del laberinto impoluto, sin un ápice de mierda, en brazos del minotauro.
Aquí huele a cuerno quemado... Es como si ese capullo supiese exactamente qué criaturas debía traer para resolver las pruebas. ¿Un minotauro? Esos bichos tienen un don natural para salir de los laberintos. ¿Y el lince oportunamente traído para poder sacrificar...? Menudo tongo.
En ese momento, la presentadora Yuri anuncia el sorteo para la tercera jornada del Torneo de la Calavera. Los nombres de los siete semifinalistas parpadean girando entre sí, fruto de un conjuro ilusorio, en el techo del coliseo. De pronto se atasca, las letras tiemblan... cuando los nombres vuelven, este es el resultado de los emparejamientos.
La Cábala vs La Hermosa y Lista Becky y su cohorte de sirvientes
La Secta de Thoon vs Los 101 asesinos del Rakshasa
El Pentecostés vs La Capellanía del Ahorcado
Y en cuanto al Coleccionista, por no tener rival, es declarado oficialmente por Yuri como vencedor del torneo. En general, el público le vitorea. Puede que no se hubiese ganado su cariño ayer, en la Ceremonia de Apertura, pero ha batido todos los récords del laberinto.
Bueno... Mañana toca enfrentarnos a los dos encapuchados verdes. ¿Algún plan?
Tirada oculta
Motivo: Inteligencia del Rakshasa
Tirada: 1d20
Resultado: 8
Tirada oculta
Motivo: Pentecostés
Tirada: 3d20
Resultado: 12, 10, 4 (Suma: 26)
Tirada oculta
Motivo: Capellanía del Ahorcado
Tirada: 3d20
Resultado: 1, 18, 7 (Suma: 26)
Aire entró con Aristóteles corriendo en su habitación. Desnudandose, salió corriendo, delante de hombres y mujeres, sin ningún tipo de pudor, hasta las bañeras. Allí se lanzó, haciendose algo de daño, con Aristóteles.
¡Qué bien, agua calentita! dijo justo antes de meter la cabeza bajo el agua, junto a su oso. Salió cubierta de espuma, y tuvo que luchar un buen rato para quitarsela.
Salió y se puso de nuevo el batín. No le apetecía vestirse, no de momento. El estómago era lo siguiente, y tenía mucha, muchísima hambre. Empezó a zampar sin esperar a los demás.
Supongo que hay que matarles, ¿no? Pues a lanzarles conjuros.
Jad, hizo unas breves pausas en su tarea de limpiar la armadura para ver como terminaban los distintos grupos las tres pruebas del día. Analizando los posibles contrincantes. El coleccionista, quien hasta el momento se había mostrado reservado, estaba mostrando gran capacidad para ir superando los encuentros...
Una vez terminados todos los grupos, se hicieron los emparejamientos.
- La Cábala, dos lanzadores de conjuros...
Habrá que tener cuidado si lanzan protecciones, por si las moscas yo preparare alguno hechizo de disipar magia. Luego la maga pensó un momento y agrego. Y bolas de fuego, las bolas de fuego siempre son útiles.
También habrá que tener cuidado con nuestro querido amigo tentaculin, seguro que esta noche querrá participar en la fiesta de las almohadas. Claramente Alice se estaba refiriendo a la odiosa catana maldita y sus asquerosos zarcillos.
El agua ya se estaba quedando tibia así que, con un movimiento estudiado y repetido infinidad de veces durante su cautiverio, Onfale salió de la bañera sin que pudiera vérsele cicatriz alguna. Como muchos sus perfectas y redondeadas nalgas y su cintura estrecha, casi de niño. Se cubrió el cuerpo con una toalla limpia y se la anudó en un lateral mientras respondía primero a Leiath.
-Los supervivientes que llegamos a la última jornada de la competición lucharemos en la Arena de los Condenados, en combates a muerte de dos congregaciones, con todo nuestro equipo y magia permitida. Se celebrará una única ronda, con lo que el número de equipos vencedores suele ser aproximadamente la mitad de los que llegan con vida a esta fase final. En caso de que los equipos sean impares, uno de ellos, por sorteo, será proclamado uno de los equipos ganadores, como le ha pasado al Coleccionista. Pero también nos advirtieron que hay muchas posibilidades de que el viaje a la Puerta de Orcus lo hagamos en compañía de más congregaciones. Eso puede comprometer la misión, así que hubiera estado bien dar muerte a alguno de los grupos ya en la Ceremonia de Apertura, para ir quitándonos acompañantes molestos que vayan con nosotros al palacio. Por lo tanto podrán ser candidatos a acompañarnos a la Puerta de Orkus:
La Secta de Thoon ó Los 101 asesinos del Rakshasa y El Pentecostés ó La Capellanía del Ahorcado.
Doy por supuesto que venceremos a la Cábala. Recordad organizarnos de manera que podamos quedarsnos el valioso equipo que puedan portar esos encapuchados. No os quedéis embobados con sus cadáveres cuando los hayamos matado, corred como buitres a rapiñear todo lo que podamos pues, seguramente, los combates no hayan terminado con la última de las Purebas.
El perfumista se secaba el pelo con parsimonia, deleitándose en cada movimiento.
- Luego está la Cábala. Lanzadores de conjuros...encapuchados...creíamos que eran humanos pero uno de ellos, el que hizo la prueba del Corazón, era un elfo, como pudmos ver por sus orejas puntiagudas- Repetía lo poco que conocía de ellos. Con su memoria prodigiosa repasó lo que habían visto de ellos durante los combates.- En el combate común contra el Ángel convocaros con un pergamino a un vroc y también uno de ellos a un babau. Uno de sus integrantes fue asesinado allí mismo. Emmanuel Biphrem. Ese fue el nombre que el asesino dijo.- Se quedó reflexionando sobre si conocía algo de ese individuo.- ¿Te suena de algo Alice?- Se abstuvo de preguntar a Becky o Aire por miedo a su respuesta. Quizá la primera de ellas se lo hubiera tirado.-También conjuraron un caminar por el viento. Parecen ser sacerdotes demonologistas pero es verdad que, cuando el segundo miembro salió del laberinto embadurnado de mierda, fue corriendo a curar al otro, por lo que fue abucheado, me acuerdo perfectamente, lo cual me hace pensar que no son malvados totalmente como los amigos de Hugo.- Si eras clérigos no tendrían tanto poder de ataque pero sí, como decía Alice, capacidad para protegerse muy bien.- Recordad que también nos quedan piedras de trueno. Siempre son muy molestas para los que hacemos uso de la magia. Sería muy importante saber si nos llevarán inmediatamente a la Puerta de Orkus. Si gastamos en este combate todas nuestras fuerzas luego podríamos arrepentirnos.
Tirada oculta
Motivo: Saber (Local o planos) para saber algo sobre Emmanuel Biphrem
Tirada: 1d20
Resultado: 6
Dejo tirada de saber para conocer algo sobre Emmanuel Biphrem. Si es saber local +6 y si es saber planos +11
Nada. Al parecer, por mucho ruido que hiciese o ventanucos que buscase, la bruja no iba a conseguir deshacerse de la katana. Dejó pues de intentarlo y se sentó a comer y a hablar con sus amigos.
No menosprecies el poder de ataque de un clérigo, mi querido Onfale- dijo con la boca llena-. Con el poder de nuestro dios podemos dar unas buenas tortas si nos ponemos. También invocar magia ofensiva muy ponderosa.
Terminó de tragar el suculento manjar- lo mejor es evitar que puedan llamar a sus dioses, silenciarles o interrumpirles mientras oran. Puedo preparar una piedra de silencio si alguien se compromete a alejarla de nosotros y acercársela al enemigo. Quién se ofrece a llevarla?
Un día deberíamos ir a que nos enseñen a hablar por signos, nos sería muy útil- concluyó pensativa.
Deberíamos hacer guardias para la katana, o algo.
Y sí, como dice Jadewo en el off, mejor prepara proyectiles mágicos para cortarles el casteo, aunque tengo una duda; si es de pergamino, se interrumpiría?
Alice reflexiono sobre la pregunta de Onfale, no había vuelto a pensar en ese nombre, seguramente si el eunuco no hubiera mencionado no habría pensado en él. ¿Emmanuel Biphrem? ¿Quién narices será?
Tirada oculta
Motivo: Saber local
Tirada: 1d20
Resultado: 13(+6)=19
Tirada oculta
Motivo: Saber los planos
Tirada: 1d20
Resultado: 10(+8)=18
El grupo se reponía mientras debatía qué hacer el día de mañana y qué demonios hacer con la dichosa katana maldita. El problema de los tentáculos era algo que podían solventar con un poco de vigilancia. Otra cosa sería la manera de afrontar el duelo contra los supervivientes de la cábala. -Si conjuráis otra piedra de silencio yo mismo podría llevarla y cargar contra ellos sin darles tiempo a reaccionar. Flame puede luchar junto a mi cuerpo a cuerpo mientras vosotros mantenéis la distancia para no veros afectados y nos apoyáis con magia.- Propuso ante la idea de Leiath. Después de todo, no necesitaba hablar para blandir sus espadas.
Luego estaban las preocupaciones a largo plazo que expresó Onfale. -Habrá que estar atento sobre quién resulta ganador.- Realmente no podían hacer mucho más que eso. Entre el resto de participantes habían contrincantes realmente problemáticos. Los de la Secta de Thoon parecían tener poderes realmente terroríficos y la habilidad de invadir mentes ajenas. Sin duda todo un obstáculo si realmente llegan a enfrentarse a ellos...
Ni repajolera de quién era Emmanuel Biphrem, pero el Dedo Rojo, el nombre de la congregación que se lanzó a por su cabeza, les suena a gremio de asesinos interplanar. Solo sabían que Emmanuel había cabreado mucho a alguien para que terminase pagando a un asesino por su cabeza.
Hombre... que la Cábala haya ayudado a uno de los suyos puede ser un acto desinteresado, o simplemente la inteligencia de no querer enfrentarse en solitario a otra congregación. No creo que se pueda deducir por eso si son buena gente o mala gente. En fin... creo que tenemos nuestro poder mágico casi sin usar. Si vamos a hacer turnos de guardia, los intelectuales deberíamos ir de últimos.
Llamar a Becky intelectual era como llamar al guano de murciélago el sabroso caviar mágico de los ángeles voladores. Pero mientras Onfale se secaba, la maga tuvo la idea de urgar en la bolsa de contención, sacar la katana maldita y dejarla en el suelo, de modo que pudiesen ver con tiempo cómo los tentáculos iban despertando.
Sin el factor sorpresa de cogerles dormidos, los tentáculos no supusieron mayor problema. Alguna pequeña herida ocasionada, fue curada al instante por Leiath.
Dios... al fin terminó. Me vuelvo a la cama...
Y todos pudieron dormir tranquilos, y estudiar sus libros. Y rezar por sus almas condenadas...
Preparar acción para leer un pergamino de proyectiles mágicos y preparar acción para lanzar un conjuro de proyectil mágico haría el mismo efecto de interrumpir conjuro, solo que la tirada de concentración requerida es CD 10+el daño recibido, así que un conjuro haría más daño que la mayoría de pergaminos:
-Un pergamino de proyectiles mágicos a nivel de lanzador 1 solo hace 1d4+1 al daño = CD concentración para la cábala de 11+1d4 = entre CD 12 y CD 15. Se pueden crear pergaminos de proyectil mágico con nivel de lanzador por encima de 1, pero también son más caros de fabricar.
-Un conjuro de proyectiles mágicos a nivel de lanzador 7 hace 4d4+4 al daño = CD concentración para la cábala de 14+4d4, entre CD 18 y CD 30.
Preparad la lista de conjuros y posteádmela en este hilo, mis queridos Onfale-Alice-Leiah...
-Nivel 0 (CD:16 [+1 Evo] ):
+ Detectar magia
+ Leer magia
+ Cuchichear mensaje
+ Salpicadura de ácido
* Luz (Evo)
-Nivel 1 (CD:17 [+1 Evo] ):
+ Armadura de mago
+ Impacto verdadero
+ Arma mágica
+ Impacto verdadero
+ Proyectil mágico (Evo)
+ Proyectil mágico (Evo)
* Proyectil mágico (Evo)
-Nivel 2 (CD:18 [+1 Evo] ):
+ Rayo abrasador (evo)
+ Levitar
+ Gracia Felina
+ Gracia Felina
* Rayo abrasador (evo)
-Nivel 3 (CD:19 [+1 Evo] ):
+ Disipar magia
+ Afiladura
+ Disipar magia
*Bola de fuego (evo)
-Nivel 4 (CD:20 [+1 Evo] ):
+ Convocar monstruo IV
+ Convocar monstruo IV
* Muro de hielo (Evo)
Habiendo eliminado el factor sorpresa de la katana asesina deshacerse de su problemática compañía no fue demasiado difícil. Al final, tras el baño y una buena cena pudieron descansar como merecían. Al perfumista se le cerraban los ojos mientras estudiaba su libro de conjuros para memorizar aquellos que consideraba mejor para enfrentarse a la Cábala. Una cosa es que fueran sólo dos pero bien harían en no confiarse y así de lo hizo saber a sus compañeros.
- No sabemos que objetos poderosos pueden guardarse esos dos.- Dijo con un brillo en sus ojos que denotaba cierta codicia.- Así que estad atentos y no malgastéis conjuros.- El apenas podía malgastar pues su poder mágico no era comparable al de sus compañeras, incluida Leiath. Tratar de distraer a los encapuchados de la Cábala para que no pudiesen conjurar o echarse protecciones y, a la vez, acosarles con ataques cuerpo a cuerpo se le antojaba el mejor plan posible aunque también el más previsible.
- Nivel 0 (CD 15):4; 1 leer magia, 1 lanzar objeto, 1 cuchichear mensaje, 1 detectar magia
- Nivel 1 (CD 16):6; 1 grasa, 1 caída de pluma, 1 proyectil mágico, 1 proyectil mágico, 1 armadura de mago, 1 disfrazarse.
- Nivel 2 (CD 17):3; 1 invisibilidad, 1 partículas rutilantes, 1 rayo buscador
- Nivel 3 (CD 18):2;1 acelerar, 1 intermitencia
Entonces... Aire reaccionó a las palabras de Onfale tras la cena ¿hay que esperar a que Jadewo, Flame y Tylbat se los carguen? Mientras nosotros lanzamos dardos, ¿no? Pues qué aburrido.
Aire sabía que su misión era muy complicada y dura, pero desde luego eso sonaba bastante aburrido. ¡Ella quería soltar magia! ¡Quería que Alice les quemara a todos con sus bolas de fuego!
Jadewo, tras largas horas de minucioso trabajo, dejó la armadura otra vez impoluta, libre de las inmundicies que la manchara en el laberinto. Luego se tomó un agradable baño y ya puestos demoró el volver a ponerse la armadura que prácitamente vestía todo el tiempo.
Así, con una muda ligera, comió con el resto mientras estudiaron las opciones con las que contaban.
-Minimizar el dispendio en recursos, no sabemos que nos espera más allá del combate. Propongo un golpe duro al principio, intentando esperar anular sus conjuraciones mintras el resto llegamos para reducirlos en el cuerpo a cuerpo.- Dijo como eufemismo de matar.-En cualquier caso deberíamos tener algún plan alternativo en caso de que se pusieran a volar lejos de nuestro combate, o se volvieran invisibles.
Le sorprendió la respuesta de Aire, la muchacha retraída y ... singular del grupo. La observó mientras reflexionaba una respuesta.
-Ya habrá ocasiones para dar el máximo de nosotros, a pesar de que nos hemos jugado nuestra integridad física, mental... y espiritual en este torneo, recordemos que no es más que un inicio.- Dijo sin terminar de ser claro con respecto a la Rosa de Laón, por si alguien que no debía escuchara la conversación.
- Mi primer ataque podría ser partículas rutilantes. Eso los dejaría imposibilitados para un hipotético uso de invisibilidad.- Le gustaba trazar planes con su compañero Caballero. No cabía duda que después de gobernar un harén durante muchos años, Onfale prefería la compañía masculina a la femenina.- Si vuelan tendremos que freírlos a conjuros.- Y en eso Aire era de las mejores. La miró para decirle sólo con sus ojos que podría divertirse todo lo que quisiera y más.
Tras un breve trago de vino de la copa que tenía en la mano, el rubio guerrero, que ahora llevaba su caballera suelta y húmeda sobre sus hombros, asintió ante la propuesta de Onfale, con un saludo de la copa.
-Tal vez no sea necesario, pero sin lugar a dudas será bueno contar con este recurso a nuestro favor. Una aptitud muy útil, Onfale.
Dijo antes de dar otro trago.
-Esta es una asignatura pendiente, mejorar mis aptitudes ofensivas a largo a medio y largo alcance.-Terminó diciendo con una breve mirada perdida al aire, recordando alguna escena de años atrás. Pero pronto regresó para terminar de vacia rla copa de un último trago.-Creo que lo tenemos bastante bien organizado. Preparamos ataques a distancia para neutralizar sus conjuraciones, nos acercamos para atacarles cuerpo a cuerpo a la vez que Onfale limita sus capacidades de huir del combate invisibles...-Mirando a Leiath añade.- Se me ocurre que, usando tu propuesta, tal vez sería útil encantar una flecha para usar en el primer turno, ya sea alcanzándole a uno o clabándola en el suelo donde estén; esperando que el conjuro de silencio pueda retrasarles en sus acciones, mientras mantenemos los ataques para desconcentrarles a punto de usar. Para terminar, si logran escapar del combate, por alejarse del mismo, será vuestro momento de usar los grandes poderes.
Teriminó diciendo a Aire y Alice. Jad se incorporó y estiró un par de veces.
-Voy a entrenar un poco.
Dicho eso se acercó a un rincón y empezó a ejercitarse con ejercicios físicos de fuerza y flexibilidad, siguiendo unas fuertes rutinas que al parecer había integrado hacía años a su entrenamiento marcial.
Hechizos preparados
Nivel 0 (6)
-Purificar comida/bebida 1
-Crear Agua 1 (2 galones/lvl)
-Detectar magia 1
-Luz 2
-Leer magia 1
Nivel 1 (5+1)
-Bendecir 2 (+1 moral att, TS vs miedo; 50' radio)
-Quitar el miedo 2
-Santuario 1
Dominio: CHLeves (1d8+ 5)
Nivel 2 (4+1)
-Silencio 1
-Explosión de sonido 1
-Quitar paralisis 1
-lentificar veneno 1
Domino: CHModeradas (2d8 +8)
Nivel 3 (3+1)
- Adaptación 2
- ciculo mágico contra el mal 1
Dominio: Disipar Magia
Nivel 4 (2+1)
-libertad de movimiento 1
-Ancla dimensional 1
Dominio: Curar heridas críticas (4d8+ 8)
Dependiendo de la distancia, mi primer ataque podría ser una bola de fuego que les confundiera e hiciera daño a todos. Luego pensó un poco. Pero claro, esto sería sino pudierais cargar los guerreros directamente contra ello. Por el contrario, si pudierais cargar lanzaría algún que otro Proyectil Mágico.
Al igual que el resto, Tybalt disfrutaba de la comida y la bebida mientras discutían la estrategia a seguir. -También tendríamos que tener en cuenta el campo de batalla en el que tengamos que luchar.- Puntualizó. -Ya hemos visto lo capaces que son los de la organización para cambiar el terreno de la arena. Así que no sería de extrañar que para esta prueba prefieran algo más que una explanada para ver luchar a las congregaciones.- Tomó un trago de su copa y disfrutó brevemente del sabor. -Aunque, por otra parte, también sabemos de la sed de sangre del público. Así que quizás no hagan ningún cambio excesivo para que el público pueda ver bien cómo nos matamos unos a otros.- Aquel razonamiento casi deshacía su primer argumento, pero después de las dos pruebas anteriores no tenía muy claro con qué sorpresas se encontrarían en la tercera.