Te lo sacaste xD Se me paso ese dato por alto, pero digamos que te lo sacaste
A pesar de mi desconfianza, el masaje en los hombros relaja mis músculos y me hace sentir mejor, al menos por ahora.
- Le cogí algo de cariño al final. - Respondo, encogiéndome de hombros y refiriéndome a Kyle. - El chico estaba dispuesto a todo por salvarme, se merecía un premio a cambio antes de que me fuese.
Cuando me señala el monitor en el que Samantha habla con la pantalla me fijo en ella detenidamente. - ¿Por qué Puzzle se lo permite? La verdad es que pensaba que se trataba de Jacqueline... Hasta esta mañana, claro. - Pregunto con tono suave mientras lo observo a él detenidamente, viendo su rostro por primera vez. Durante unos instantes simplemente observo la escena, reconociendo la actitud de ella y analizando la de él. Tras este tiempo me giro para buscar la mirada de la mujer que se ha presentado como Amanda para hacerle otra pregunta. - ¿Podemos oír lo que hablan?
Suspira al oír sus preguntas, menciona mientras retrocede, cruzando las manos tras la espalda, y agachando la mirada. Su rostro demuestra cierta aflicción.
- Por alguna razón John no confía del todo en mi, me quito el control de esa sala en particular, lo único que puedo... que podemos hacer ahora es verlos.- Vuelve la mirada al frente, suspirando nuevamente.- Si solo entendiera que no todos pueden ser salvados... Tu lo sabes, ¿no? Tanta escoria reunida allí... no merecen vivir. Hasta el momento solo Arthur ha sobrevivido, y tu lo escuchaste, el mismo dijo que esa prueba no le había enseñado nada, ¿crees realmente que merece vivir? - Su mirada parecía dura ahora tras mencionar esas palabras, y su expresión muy seria, casi enfadada.
Recapacito sobre sus palabras y sobre el hecho de que parezca ir por libre, al margen de su "jefe". - Nuestro jefe... - Vuelvo a fijarme en Samantha y el hombre, hablando en la sala de los secuaces antes de responder.
- Creo que algunos sí lo merecen. - Respondo, un poco dubitativa al llevarle en cierta forma la contraria. - Tú también debiste pasar tu prueba, ¿no es así? Pero es evidente que no funciona con todos. - Me apresuro a asegurar, dándole la otra parte de razón. - Yo sentí que mi vida debía cambiar, la cambié por completo después de eso... Pero Joseph por ejemplo, él no había cambiado, seguía siendo escoria. Y Arthur es otro ejemplo como él. Ese hombre no cambiará por muchas pruebas que pase.
- ¡Ja! - Responde a Charlotte de forma cínica antes sus palabras, mientras niega con la cabeza. Aún se puedo notar el enfado en sus ojos, un enfado que crecía poco a poco hasta convertirse en una ira muda.
- Lo que no entiendo, Amanda... - Respondo, cambiando de tema antes de que se enfade más y vuelva su ira hacia mí. - Es por qué Puzzle le da vía libre a Samantha. ¿Por qué le permitía matarnos? Nosotros... O al menos yo, sólo estaba aquí para ayudarle. ¿Por qué le daba todas las facilidades del mundo para acabar con nosotros? ¿Y por qué habla con ella? A mí nunca me respondió...
Sonríe al escuchar la pregunta de Charlotte, y en sus ojos se muestra el típico brilla que se ve en los ojos de una persona justo cuando le dices algo que han querido escuchar hace mucho. Sonríe de lado, girando el rostro, pero mirándole de reojo.
- Porque yo lo entendí, Charlotte... ellos no merecen, ni Joseph, ni Jacqueline, ni tu... Hicieron exactamente lo que él no querían que hicieran. Mataron a alguien sin darle opción a salvarse... jejeje.- Soltó una corta risa. En este punto esperaba que ella comprendiera sus intenciones, que supiese lo que iba a hacer, por ello, antes de que Charlotte pudiese hacer cualquier cosa, llevó las manos que ocultaba tras su espalda al frente, y en ellas sostenía una pistola con la cual apunto a Charlotte.- Descuida Charlotte, por eso me tiene, por eso me hizo su discípula. John no los necesita a ustedes, ni a Hoffman, ni a nadie más. ¿Dices que has cambiado? - Vuelve reír, de forma nerviosa, pero sonriendo. La mira fijamente ahora, manteniendo su sonrisa.- Nadie cambia Charlotte... nadie puede volver a renacer.
Me maldigo mentalmente por haber bajado la guardia en cuanto sus ojos me revelan lo que está a punto de hacer y mantengo su mirada, aparentando una calma que estoy lejos de sentir.
- Tú metiste a Samantha... Para que terminase con nosotros, ¿no es así? Porque quieres ser la única a su lado. Única e imprescindible. - Hago una pausa, dejando que mis palabras calen en ella, hablando con voz fría, antes de esbozar una pequeña sonrisa. - Pero tú tampoco lo has entendido, Amanda. Te está sustituyendo. - Hago un pequeño gesto con la cabeza hacia el monitor, donde Samantha sigue hablando con la pantalla. - Te está sustituyendo por ella, porque la zorra de Samantha tiene los huevos de rebelarse ante él y desmontar su juego siguiendo sus reglas. Dices que eres su discípula... Pero te prohíbe tomar tus decisiones. Y te prohíbe escuchar esa conversación. ¿Cuánto tardará Samantha en tener una pistola apuntando hacia ti como haces tú ahora conmigo, Amanda? ¿Cómo te sientes teniendo que presenciar cómo estás siendo sustituida? ¿No te gustaría tener otra opción? ¿Dejar de ser una discípula para tomar el mando?
Sabía que me la estaba jugando con cada palabra. Que estaba lanzando hipótesis al vacío. Pero era el momento de darlo todo, de manipular hasta forzar los límites. Había dos opciones. O disparaba de una vez... O bajaba el arma.
Volvió a reír en la cara de Charlotte, como si hubiese un detalle que se le escapaba a la rubia. Sonreía mientras le apuntaba con su arma, antes de comenzar a hablar.
- Te equivocas nuevamente. No fue él quien me quito el control del juego, fui yo quién lo tomo. El no puede encargarse de cosas tan triviales como este estúpido juego... ¡Yo soy parte de él! ¡Cada célula de mi cuerpo le pertenece! Pero tu... ustedes... no podrían entenderlo... pero quizás si sea solo un peón para él... pero yo le demostrare que eso no es así... Es por mis decisiones que tus compañeros terminaron muertos, y por las cuales la zorra de Samantha y todos los que están encerrados allí morirán... El no va a sustituirme por ustedes, él no solo me dio una jodida llamada telefónica. Soy diferente, muy diferente a ustedes... ¿Lo entiendes? -
Empiezo a levantarme despacio, girándome hacia ella, para poder mirarla de frente mientras hablo. - ¿Si eres tan diferente... por qué está hablando con ella en lugar de contigo? - Pregunto con sencillez, apoyando la espalda en la mesa y cruzándome de brazos con un gesto tranquilo. Haciendo una pausa antes de continuar. - ¿No lo ves? Es tan obvio... No le gusta lo que estás haciendo, Amanda. Y pretende cambiarte por ella. - Niego suavemente con la cabeza antes de seguir hablando. - Pero no te equivoques conmigo... Yo sí te comprendo. Estoy empezando a intuir la grandeza que hay en ti. Y me agrada. Me sentía traicionada por él, ¿sabes? Ahora veo que era él el que estaba siendo traicionado. Y me parece... Admirable. Un paso más allá. El siguiente eslabón de la cadena.
Frunce el ceño, inclina ligeramente el arma, y jala el gatillo. Un tiro certero en la rodilla izquierda de la rubia. Tras el sonido del tiro, el dolor fue lo siguiente en sentir.
- Ay Charlotte... ¿de verdad crees que permitiré que alguien como tu se aproveche de mis conflictos? Soy la única que puede pensar como él... Puedo ver tus patéticos intentos para lograr que no te pegue un tiro en la cabeza, ¿pero sabes? Deberás de esforzarte más la próxima vez... - Vuelve a reír, como si estuviese disfrutando de esta particular conversación.
- ¡Joder! -No puedo evitar un aullido de dolor cuando la bala golpea mi rodilla haciéndome caer al suelo. - ¡Hija de pu...! - Sólo ver el arma en sus manos hace que me muerda la lengua y contenga la serie de improperios que pasa por mi mente. Trato de respirar, haciendo aspavientos con las manos, moviéndolas rápidamente, intentando pensar a toda velocidad y cuando vuelvo a mirar a la mujer del vestido rojo la fulmino con la mirada.
- Claro que comprendo cómo piensas. - Mascullo, apretando los dientes por el dolor. - Soy una superviviente, al igual que tú, Amanda. Sí, tú tienes la pistola, pero ahora mismo estás sola en esto y lo sabes. Igual que sabes que puedo serte útil. Ya viste lo que fui capaz de hacer con Kyle. Si quisieras matarme lo habrías hecho hace mucho, ambas lo sabemos. Pero si estás hablando conmigo es porque me rebelé contra el juego, igual que tú.
Mientras hablo, evalúo la posibilidad de tirar de su tobillo para hacerla caer e igualar un poco las cosas.
Amanda volvió a reír, haciendo caso omiso a cada una de las palabras de Charlotte. Ahora sostenía el arma con una sola de sus manos, mientras la otra descansaba junto a su cuerpo.
- Ay, Charlotte, Charlotte, Charlotte... ¿en que podrías serme útil? Ya tengo un infiltrado allí adentro. Todos van a morir, y no eres de ayuda en este momento. Pero vamos, intenta convencerme de lo contrario, te reto, y no intentes hacer nada estúpido, o te pego un tiro entre medio de los ojos ahora mismo.-
Sonríe de lado, esperando la respuesta de la chica.
- No me refiero sólo a este momento, Amanda. - Respondo mirándola a los ojos mientras empiezo a levantarme despacio, agarrándome al borde de la mesa y sin apoyar la pierna herida. - Puedo ser para ti lo que tú fuiste para John. Al fin y al cabo... Si estoy aquí es porque tú me lo permites, ¿no es así? Puedo aprender de ti, hacerte el trabajo sucio. Sabes que soy más fuerte que todos los que están ahí dentro. No sé quién es tu infiltrado, pero sabes que es desechable. Vas a deshacerte de él antes de que todo termine. Yo soy mejor que ellos y lo sabes.
Amanda suspira cansada, justo antes de apuntar al cuello de Charlotte. El disparo entra y sale por un costado del cuello, causando una herida en la yugular que desangraría lentamente a la rubia, herida que suponía una muerte segura para la chica, pero de una lenta agonía. Se acerca a la rubia, centrando la mirada en ella, sonríe de lado, y acaricia el cabello de Charlotte.
- Lo siento querida, agotaste tus posibilidades... Charlotte, no hay nada que pueda enseñarte, no puedo confiar en ti.- Suaviza su voz, como sintiendo lastima por la chica.- No eres mejor que nadie Charlotte... eres exactamente igual que esa basura que esta allí encerrada... y por eso vas a morir.- Se pone de píe, dando una rápida mirada a los monitores. Una mueca de disgusto se dibuja en su rostro antes de alejarse de Charlotte, pero sosteniendo la mirada en ella.
Guarda completo silencio, dejando que Charlotte vociferara cualquier cosa que quisiera decir, manteniendo su sonrisa.
Guarda silencio
Un nuevo aullido de dolor sale de mis labios al sentir la bala atravesar mi cuello y boqueo, sintiendo cómo el aire se me escapa por las heridas. Llevo mi mano a ella, apretándola contra mi cuello y aprieto los dientes, haciendo una mueca de dolor antes de hablar. Mi voz sale ronca mientras mis ojos miran con un desprecio enorme a Amanda. Ya no sirve de nada fingir. - Si te muestras débil... Estás perdida, Charlotte.
- La verdad... es que no comprendes... cómo piensa. - Respondo entre toses, con dificultad, aferrándome al borde de la mesa con la otra mano. - Él... es un visionario... Tú tan sólo eres... una zorra psicópata y celosa... que no puede soportar ser... una segundona.
Ya no hay opción para mí, siento la vida escaparse entre mis manos y una risa entre nerviosa e histérica sale de mi garganta con un sonido parecido a un gruñido. - Al menos moriré con el pelo limpio... - Pienso, con los ojos clavados en Amanda mientras me río, haciendo una mueca de dolor con cada movimiento.
Intento respirar mientras siento un ligero mareo asaltarme. No me queda nada que perder, como mucho podré conseguir que acorte mi agonía. En un movimiento desesperado suelto mi cuello y me impulso con la mesa para lanzarme sobre ella, intentando tirarla al suelo.
Amanda río cuando Charlotte se le arrojó encima. Pero la chica estaba débil, casi totalmente desangrada, y lo único que tubo que hacer Amanda fue darle un golpe con la culata de la pistola en la cabeza para que ella cayera de nuevo. Río de forma sádica mientras se agachaba junto a Charlotte, y acariciando su cabello comenzó a hablar.
- Así es, Charlotte... pero ssh... este será nuestro pequeño secreto, ¿de acuerdo?... .- Se acercó, dejando un beso en su frente, antes de terminar de hablar.- Fin del juego, Charlotte.-
Y este es el final de Charlotte ^^
Espero te hayan gustado este par de días de juego. ^^
Mucho ^^.
Ha estado muy guay, la verdad :D.
Echaré de menos a Charlotte T.T