-Soy yo -se escuchó la voz de AJ en medio de la oscuridad-. El golpe. Me he caído. -Se percibía cierta incomodidad en el tono de voz del metalero-. Acabo de marearme. No sé qué diablos ha pasado, pero creo que esta sala tiene algún tipo de mecanismo de defensa, un sistema de seguridad para evitar que hagamos "trampas", por lo que no podré volver a utilizar mis poderes hasta que salgamos de la oscuridad.
El muchacho trató de ponerse en pie, no sin cierto esfuerzo, buscando alguien en quien apoyarse a su alrededor antes de incorporarse por completo.
-Nos va a tocar bajar a ese túnel, es la única opción de avanzar -comentó, no muy convencido de que aquello fuera lo más prudente-. Joder, ¿dónde están los velocistas cuando uno los necesita? Ahora nos vendría bien un Flash.
Ulises se sintió un poco aliviado sabiendo que al menos Rebeca le escuchaba, independientemente de si estaba de acuerdo o no con su plan. Y tenía razón en una cosa… si retrocedía desde donde estaba, ¿encontraría la puerta por la que habían entrado? Porque todo estaba tan oscuro que quizás sin darse cuenta se habían desviado y ya no sería capaz de encontrar la ruta de salida. — Ouch… — murmuró, y se puso a “mirar” a su alrededor, como intentando orientarse pero era absurdo, no se podría fiar del sentido de la vista, solo de su intuición.
La voz de Carla llegó a sus oídos, parecía que ya se había recuperado del trastorno que había sufrido en la otra sala, por lo que se alegró. En esos momentos todos debían estar en condiciones tanto física como mentalmente. — Nerea nos ha dicho que cree haber visto como un agujero en el centro de la sala, y que si continuamos adelante podemos caer. AJ… — Eugenia terminó de explicar lo que estaba tratando de hacer el metalero.
Y de pronto, después de un chasquido, se oyó como algo caía al suelo. — ¿Qué ha sido eso? Dios… — “Qué no haya frito a nadie, que no haya frito a nadie” — pensó para sus adentros para no poner más nerviosos a los demás. Y al final trató de retroceder por la sala en busca de la puerta por la que entraron, y a partir de ella se dispondría a tocar la pared y avanzar por la habitación, teniendo cuidado donde tocaba y donde pisaba.
Eugenia trató de localizar al nieto de español de Ronnie James Dio siguiendo su voz y moviendo un pie en alto hasta darle un toque. Se agachó y trató de echarle una mano para ponerse en pie. No pesaba demasiado y siempre podía echar mano de su poder en caso de necesidad, pero parecía que se las apañaban. No era ni mucho menos que le tocaba hacer de muleta. Recordó una vez en que recorrió casi tres kilómetros a pie, cargando con un vagabundo (como ella por aquel entonces) con una sobredosis, lo de hoy, por ahora, casi era como aquella visita a un parque de atracciones en málaga al que había ido de pequeña. En fin.
- Pues ni puta de qué hacer ahora, jovencitos.- Comentó con resignación, se aburría fácilmente, más cuando no sabía cómo resolver un sudoku de nivel intermedio.
Nerea se dio un buen sobresalto cuando escucho el chasquido.- ¿Chicos?.- Pregunto a oscuras esperando la respuesta del resto. Cuando AJ confirmo que su poder no había funcionado soltó un pequeño suspiro. Por un momento había pensado que alguien había caído por el agujero.
Pero aquello no les sacaba del problema en el que estaban. La joven se mordió el labio inferior pensando hasta que finalmente se le ocurrió algo. No era la mejor idea del mundo pero era mejor que nada.- Chicos, no creo que entrar en ese hueco sin saber a dónde va, cuan profundo es y con esta cosa viscosa en el suelo sea la mejor idea…En la sala que entramos antes había un banco. ¿Lo empujamos?.- La idea era simple. -Si empujamos el banco desde la entrada hacia el centro de la sala habrá un momento que este llegara al agujero. Si el agujero es ancho el banco caerá hacia el interior y podremos saber con el si tiene mucha profundidad. Si por el contrario no es excesivamente profundo, o podremos ayudarnos de él para bajar.
Carla apenas acababa de entrar cuando se escucho aquel ruido, y se quedó totalmente inmóvil donde estaba hasta que AJ dio las explicaciones oportunas. Carla siguió camina do en dirección a las voces, con las manos delante para no chocarse con nadie ni nada, cuando de pronto su mano derecha hizo contacto con algo que Carla reconoció facilmente, motivo por el que bajo sus manos sabiendo que estaba junto a los demás, pues sin duda era la teta de una de sus compañeras. - Perdona, soy yo carla- Se disculpo Carla, para luego añadir. - ya estoy aquí para ayudar, si no he oído mal hay un agujero en el que meterse no? Como es de grande? Yo podría intentar crear un cuerda por si hay que bajar o subir a alguien. -sin conocer en profundidad lo que pasaba era lo que podía hacer.
- Emmmm... Si creéis que puede ser útil bajar alguna otra cosa más pesada, siempre que quepa, creo que con mi poder podría intentarlo, lo de bajar puede que sea muy arriesgado sin saber qué profundidad tiene, claro que si no estuviese oscuro, podría bajar yo.- Comentó Eugenia, subiendo la voz para acallar las voces de su cabeza que nadie más oía.
Aquel chasquido seguido del golpe sobresaltó a Rebeca, en una milésima de segundo pasaron cosas horribles (y un tanto surrealistas) por su cabeza.
- ¡¿Qué ha sido eso?!- preguntó angustiada, pero pronto AJ la sacó de dudas y suspiró, aliviada de que no fuese ningún monstruo con pinzas decapitador.
Aj: Nos va a tocar bajar a ese túnel, es la única opción de avanzar.
- ¡¿Qué?!- << ni de puta coña >> - Pero si no sabemos...
Antes de que pudiese replicar más, Nerea habló y dijo algo que, bajo el juicio de Rebeca, era correcto y una buena idea de base. Estaba concentrada pensando en aquella idea cuando sintió una mano en una zona poco apropiada que la sacó de golpe de sus pensamientos. La tensión no se fue por completo al comprobar que había sido Carla por error, pero al menos el apuro era menor.
- Un banco como sugería Nerea estaría bien, Carla. Así podemos calcular el ancho como dice ella y al pesar más hará más ruido cuando caiga, lo que nos permitirá mesurar cómo de hondo es. Al menos así podemos asegurarnos que nadie resulta herido tontamente, se puede bajar con más precaución si estimamos las medidas.
-Buena idea, Nerea -indicó el heavy, con un gesto de asentimiento que nadie vio en la oscuridad-. Si dejamos caer el banco, al menos sabremos cuánta profundidad tiene ese agujero.
Antonio apostaba porque aquella apertura no debía de ser muy profunda. Al fin y al cabo, era el único lugar por el que tendrían para escapar. El ilusionista había concebido aquellas estancias para torturarles, llevándoles a niveles psicológicos extremos como había sucedido con Carla en la sala donde había visto a sus padres, pero algo le decía que el metahumano habría colocado una vía de escape de la forma más insospechada para que pudieran continuar avanzando por aquel sendero de terror.
No tengo muy claro qué vais a hacer, pues habéis planteado bastantes opciones. Así que os dejo seguir roleando en lo que llegáis a alguna conclusión.
Ulises tocó todas las paredes de la sala sin que ninguno de sus compañeros le viera. Se mantenía invisible gracias a la oscuridad de la sala, así que nadie pudo verle.
Tras dar la vuelta completamente se dio cuenta de que efectivamente no había nada en las paredes. La única escapatoria posible, o no la había encontrado o bien era la trampilla del centro.
Durante unos cuantos minutos, Ulises se perdió en la oscuridad, recorriendo los pocos pasos que le separaban de la entrada/salida y comenzó a rodear la sala guiándose únicamente por sus manos que fueron tanteando la pared. Cuando terminó, confirmó lo que temía y lo que todos sospechaban; no había más salida que aquel agujero en el centro. Resopló con resignación y volvió con el resto.
— He revisado y no hay más salida que ese agujero… — Permaneció pensativo, la opción del banco no estaba nada mal, pero al final todos tendrían que entrar por el hoyo, fuese más o menos profundo. — Cuando comprobemos la profundidad no me importaría ser el primero en bajar con ayuda de la cuerda que puede materializar Carla. Si me hago daño no importa, me regeneraré enseguida.
Eugenia, con su vejiga hinchada como un balón vio que sus compañeros no habían dicho nada con respecto a su último ofrecimiento y lo de andar tirando bancos se le hacía tan interesante como los lanzamientos de vaca con catapulta de lis Caballeros de la Tabla Cuadrada, así que sin mucha expñicación más, se movió en la dirección en la que creía que estaba el tan cacareado agujero central y, concentrándose, apuntó las palmas de sus manos hacia el suelo antes de dar un ligero salto que, con un poco de suerte, nadie oiría.
Tirada oculta
Motivo: Planear/descender
Tirada: 1d100
Resultado: 89
Eugenia trata de saltar sigilosamente por el agujero empleando sus poderes para descender en silencio, lentamente, para no hacerse daño,con la intención de precisar la posible altura con más propiedad que un banco.
- ¿Estás seguro?- preguntó hacia donde creía que podía estar Ulises- Creo que Eugenia también quería bajar... en cualquier caso, tened cuidado, aunque te regeneres no debe ser agradable. Yo, si no os importa, me quedaré arriba hasta que sea seguro bajar.
No tenía intención alguna en provocarse a sí misma un ataque de histeria, menos aún cuando podía acarrear serias consecuencias.
- Voy a buscar de nuevo el borde, por seguridad- se agachó de nuevo y se dirigió a tientas hacia donde suponía que estaba el agujero-.
-El ilusionista juega con nosotros -dijo Antonio, en medio de la oscuridad-. Para él, todo esto es un juego, una prueba, y como tal debe haber colocado una forma de superarla. Una salida. Y creo sinceramente esa salida es esa apertura del suelo.
El heavy estaba plenamente convencido de su teoría, si bien decidió no aproximarse al agujero. No sólo porque cabía la posibilidad de estar conduciendo a sus compañeros a la guarida de una criatura o metahumano poderoso, sino también porque entre la lluvia de ideas que habían lanzado los demás, había varias que le parecían bastante acertadas.
-Eras Carla, ¿no? -le preguntó a la muchacha de cabello rubio-. ¿Puedes hacer lo que ha dicho él? -intentó señalar a Ulises en medio de la penumbra-. ¿Materializar una cuerda? Podría sernos útil para bajar.
La joven se mordió el labio inferior. -El poder de AJ no ha funcionado por segunda vez, había propuesto lo del banco para no fiarnos de algo que podría fallar. No sería agradable que la cuerda desapareciera de pronto…-Nerea hablo claramente acerca de sus miedos y porque no había recurrido directamente al poder de Carla.
-Aun así como queráis.- Dijo cuando AJ ya estaba preguntando a Carla en aquella oscuridad para que le tendiera la cuerda. Parecía que ya había consenso.
- si logró crear la cuerda- dijo a la oscuridad. -no desaparecerá miembros tras la toque, incluso si la suelto, tardará un rato en desaparecer,y puedo hacer que lo que cree dure más tiempo sin desaparecer si lo suelto. - aclaró a sus compañeros.
Era momento de comprobar si había conseguido el suficiente control de sus emociones como para usar bien sus poderes.
Tirada oculta
Motivo: Cuerda
Tirada: 1d100
Resultado: 23
Trato de crear un rollo de cuerda de esos que se ven en el decathlon, que venden por metros.