Partida Rol por web

Y así, los supervivientes ganaron la última batalla por la superviviencia de los hombres y mujeres en el Yermo. Cada uno, respondió de manera distinta a los hechos, sin embargo, todos tenían algo más por qué vivir tras esta cruenta batalla.

El Paladín Cross y el Elder Mcnamara se quedaron en la Ciudadela, junto con los demás soldados de la Hermandad del Acero que han sobrevivido. Cross, que había cogido el cuerpo de Pete el Pachorras para darle una sagrada sepultura, rápidamente se puso a ello tras terminar la batalla. A la semana, en la entrada de la Ciudadela, depositaron una estatura del aventurero, justo detrás de su tumba con una lápida que decía: Aquí yace Pete el Pachorras, héroe de la última batalla contra el Enclave. Pero como esto no podía ser justo con los demás caídos, dentro de la Ciudadela se creó un panteón con todos los nombres de los supervivientes caídos en la batalla, que ahora, es un lugar de peregrinación obligatorio para todos los miembros de la Hermandad del Acero antes de cumplir alguna misión.

Arcade Gannon, Lily Bowen y Charon, partieron hacía el oeste con su enorme robot. Arcade tenía un sitio que visitar, que revisar y en dónde se sentiría como en su casa. Cuando llegaron se dieron cuenta que algún misil impacto en la estructura por lo que tardaron unos días en despejar el sitio, pero con la ayuda del enorme robot, al cual le habían llamado Pete en honor a Pete el Pachorras, lo hicieron rápidamente. Ahora, los tres viven allí, en uno de los lugares más tecnológicos del Yermo. Arcade ha mejorado toda la infraestructura y sus avances e investigaciones son conocidas por todo el Yermo. Charon y Lily, se conviertieron en sus mejores amigos y juntos, crearon la mayor gama de armas, armaduras y demas últiles tecnológicos que existen en este momento. Lily y Charon, son los encargados de distribuirlas por todo el Yermo.

Craig Boone se retiró del lugar, silencioso, con el cuerpo de ED-E entre sus manos. No dijo adios, no dijo una sola palabra. Simplemente se marcho y su silueta se perdió en el horizonte. Cuentan las historias por el Yermo, que cuando los bandidos deciden atacar, un hombre con una boina roja, y un robot a su lado, aparecen de la nada y hacen que las cabezas de los enemigos exploten rápidamente. Los Caravaneros le llaman El Angel del Camino, ya que aparece de la nada, y se va sin dejar más que una serie de cadáveres sin cabeza allá dónde los bandidos atacan. Dicen que aún se le puede ver, oculto entre ropas oscuras, visitando la Ciudadela y el monumento a los caídos junto a su amigo robot.

Tabitha se despidió de todos y salió tranquilamente del lugar, viajando hacía el norte. Poco a poco, debido a lo sucedido frente a la ciudadela, muchos mutantes y supermutantes se le fueron uniendo en el camino. Al final, con una comitiva de más de cien supermutantes y mutantes, llegaron hasta un páramo montañoso, con un bosque a un lado, en donde decidieron fundar una ciudad sólo de mutantes. La Ciudad se llama Tabitha City, y todos, humanos, necrófagos, y mutantes, son bienvenidos a pasar el tiempo que quieran allí. Tabitha gobierna la ciudad con la delicadeza que se puede de esperar de una señorita como ella. Al final, dicen que se casó con un supermutante venido desde muy al sur, y tuvieron muchos niños y niñas tan fashions como ellos.

Madison Li regresó a Rivet City con una tropa de soldados e ingenieros de la Hermandad del Acero. Entre todos, reflotaron la gran ciudad y con ayuda de la tecnología de Arcade, se pusieron manos a la obra para intentar purificar toda el agua del Yermo. Estuvieron trabajando de sol a sol, sin descanso, hasta que por fin descubrieron todo lo necesario para hacerlo. Ahora, toda agua embotellada puede ser bebida por hombres, mujeres y niños sin temor a la radiación. Además, la doctora creó una máquina que cura de todas las enfermedades de la radiación a cualquiera que entre en ella y su clínica es una de las más concurridas ( por no decir la única ) del Yermo. Sanidad gratuita para todos. Las malas lenguas dicen que debido a la relación que tuvo con Arcade, el cual fue de gran ayuda con sus investigaciones, que se casaron en secreto y ahora tienen un niño que corretea por la cubierta del portaaviones.

Sarah Lyons fue ascendida al rango de Elder cuando su padre, renunció al cargo. La muchacha sabía que debería aceptar el cargo, pero puso la condición que en La Ciudadela, sea el Elder Mcnamara el que mande. Ella, junto con un grupo de hermanos y soldados pertrechados para la batalla, viajó hacía el sur, buscando un lugar dónde crear otra Ciudadela, otro lugar lejos de la primera dónde cualquiera esté seguro. Tras unos meses de viaje, encontraron una base abandonada debajo de una montaña y allí, ubicó su Nueva Ciudadela, con ella como líder moral, espiritual y militar de la misma. Ahora mismo, la Nueva Ciudadela alberga a mas de mil personas de todas clases. Igualmente, Sarah es una mujer de acción. Muchas veces se la ve liderando una patrulla de reconocimiento de la Hermandad, como batallando con bandidos o con algunas tropas del Enclave que deciden poner los pies en Yermo Capital

THE END.