Partida Rol por web

Regreso de la cacería.

La comotiva que va de caza regresa maltrecha...

Mucho de los caballos han desaparecido y los participantes de la cacería regresan compartiendo caballo, todos menos Gorek quien desposeido de su armadura regresa a pie con un Lobo Huargo en los hombros.

Cuando el primer mozo aparece a su encuentro tira al Huargo a sus pies y con una amplia sonrisa dice --La cena.

A pesar de lo muestra su rostro, su aspecto no es nada alagueño.
Donde no hay armadura son visibles múltiples arañazos y magulladuras, pwro además una de sus piernas esta evidentemente empapada de sagre y sin duda cojea aunque intenta disimularlo.

Tras dar las oportunas indicaciones al mozo de como quiere la cena y la piel, se encamina a la Torre del Maestre.

Creo que necesitaré un remiendo -- le dice al maestre una vez ante el.

El Maestre había ya recibido la noticia de que uno de los posibles herederos había tenido heridas importantes, por lo que cuando Gorek entró, se vio ante un Maestre listo para tratarlo. 

-Ven, muchacho, pasa- le dijo señalándole la cama donde a tantos había remendado -Cuéntame, ¿qué sucedió?- le preguntó mientras con celeridad asombrosa para su edad preparaba los medicamentos que utilizaría en el joven que ya tantas veces había tratado -Voy a necesitar un asistente dentro de poco, de eso estoy seguro...- soltó por lo bajo.

DESPUES DE LA CACERIA

Nada grave, fui de cacería con los invitados y casi acabamos siendo la cena de una manada de Lobos Huargos, pero al final dimos buena cuenta de la manada, aunque uno de ellos se encariñó conmigo antes de morir jajaja--dice quitándole hierro al asunto y mostrando las heridas.

Un ayudante ¡EH! creo que puedo tener alguna idea al respecto...¿Qué le parecería la pequeña Nieve? padre le ha echado la cruz y al menos con usted seria de utilidad y no estaría por los pasillos ensalzando la ira de padre

DESPUÉS DE LA CACERÍA

Escuchó en silencio, y cuando le nombró a la bastarda, ocultó un gesto de desagrado que nadie podría haber notado.

-No te preocupes, Gorek, estoy buscando alguno, ya lo encontraré...- respondió Krilan -Huargos... malditas criaturas... al menos han tenido un buen botín, ¿no es cierto? ¿Crees que podrías conseguirme alguna piel de alguno? Dicen que abriga mejor que nada y en esta torre por momentos el frío se vuelve crudo. A mi edad...-  se interrumpió como si se hubiera aburrido del tema -¿Los invitados están bien? ¿Notaste algo curioso en ellos? Hay que conocer a tus enemigos, y más aún a tus amigos...-

EL OTRO HEREDERO

El Maestre le hizo una seña a Gorek cuando éste estaba por salir de la habitación del Rey.

-Espera un momento, hablemos un poco antes de que salgas- le dijo con suavidad, para no despertar o molestar al Rey en su dolorido descanso, lo llevó aparte y volvió a hablar -Se vienen tiempos oscuros si no arreglamos lo que sucede aquí...- sería franco con el muchacho -¿Crees que Till haya podido hacer esto?- Gorek no sería capaz -¿Sabes qué tienen pensado hacer tus hermanos?-

DESPUÉS DE LA CACERÍA

Si, he traído un Huargo, me encargare de que le llegue la piel-- sonríe por poder complacer al anciano.

Los invitados estan bien, yo me lleve la peor parte, ya conocéis mi suerte...-- dice con una media sonrisa.

Los comerranas parecen enigmáticos pero creo que seran buenos aliados...los caníbales...esos son arina de otro costal, no me fio ni un pelo de ellos.

EL OTRO HEREDERO

¿Mi hermano? ¡Los Dioses no lo quieran!-- exclama.-- Me decanto mas por algún infiltrado de los Stark...pero no se...

Y en cuanto a mis hermanos...la verdad no tengo idea de que piensan ¿Que pansais vos?

DESPUÉS DE LA CACERÍA

El Maestre le sonrió al muchacho cuando éste accedió a su pedido. Era un buen chico...

-En ninguno podremos confiar... todos quieren lo mismo que nosotros: más poder- respondió el maestre mientras continuaba con los vendajes y aplicando ungüentos dolorosos y malolientes algunos -A ninguno hay que darle la espalda, porque apenas nos demos vuelta, caerán sobre nosotros... nunca lo olvides-

EL OTRO HEREDERO

-Un infiltrado...- repitió pensativo y la verdad era que no lo creía en lo más mínimo -No creo, había mucha vigilancia y yo seguramente me habría enterado.. no, tiene que haber sido alguien en quien confiábamos y dejamos entrar a nuestro hogar.-

Se quedó mirando un momento el cuerpo del Rey, meditabundo.

-Gorek, voy a serte sincero. Creo que puede estallar una guerra, pero interna, si no solucionamos la heredad del Reino. Es más, apenas sepan los otros Reyes que tu padre ha muerto, exigirán saber cómo se sigue y quién honrará los contratos asumidos- hizo una pausa, para luego volver a hablar -Yo creo que deberías ser tú, pero para eso tienes que mostrarte fuerte y confiado, reunir a todos los que te apoyen, asegurarte de ello y estar listo para todo. ¿Entiendes? Yo siempre aconsejaré al Rey Rojo, sea quien sea, pero ahora que hay uno moribundo, busco el bienestar del Reino por encima de todo-

EL OTRO HEREDERO

Sonrie, algo triste eso asi, ante las palabras de maestre, despues de todo el había sido mas padre que el Rey...

Me alagan vuestras palabras Maese, pero ¿quien ademas de vos me daria su apoyo?
Siempre he sido el hijo mas apartado, superado solo por la bastarda, todos aprecian mas a Till, yo hare lo que pueda, pero a no ser que vos obreis milagros con madre...creo que el nuevo Rey será Till.

La respuesta de Gorek le sorprendió. No pensaba que se retiraría sin luchar, y mucho menos de una forma resignada.

-¿Entonces lo que dices es que le dejarías el camino libre a Till? ¿Quiere decir que no quieres el Trono?- le preguntó sin mostrar asombro en absoluto.

No, no digo eso, claro que quisiera ser Rey, creo que sería una bastante bueno, muy bueno con vuestra ayuda ¿pero que sugeris que haga? ¿Alzarme en armas?
Soy realista, nada más... Till se ha criado junto a sus hermanos y junto a Madre, yo en cambio he pasado mi infancia solo postrado en una cama, bien lo sabeis vos ¿Que puedo hacer ante esto?
Me he esforzado por mostrar mi valia ante padre, pero ¿de que me sirve eso ahora?
Me sirvio para que padre dudase entre Till y yo, y con mas tiempo no le hubieran quedado dudas, pero ahora...
Al esforzarme ante padre he descuidado al resto de la familia.

Krilan lo observó, buscando cualquier signo de engaño que pudiera tener el muchacho. A todas luces era diferente a Till, y eso marcaba una diferencia importante a estas alturas.

-¿Qué crees que podrías hacer para ganarte el Trono? Quedándote de brazos cruzados, lo dudo. Pero de todas formas, Till es temido y hasta odiado por algunas personas. En cambio tú, no lo eres. Tal vez por desconocimiento, tal vez porque eres distinto a tu hermano, pero de todas formas, puedes cultivar amistades.- le dijo el Maestre -Entonces, ¿qué harás? Porque tienes dos opciones: intentar ganar el Trono, como sea; o dejarle el trono a Till y muy probablemente tener que exiliarte o prepararte a tener que defender tu vida. Dudo que tu hermano vaya a dejar una posibilidad de derrocamiento como el que significa un hermano como tú, por más resignado que esté éste último.-

¿Como sea? ¿Que estas sugiriendome?

El Maestre no acusó recibo ante la pregunta claramente intencionada del joven Gorek.

-Sugiero que tendrías que hablar con tus hermanos, con la Guardia Negra, con tu propia madre, con Arthur... básicamente con todos para que te den su apoyo- dijo el Maestre -Till no hará nada si tienes a todos a tu favor... especialmente si la Reina te apoya en este momento-