Partida Rol por web

A Escape to Date

Cuarto Cuarto (?)

Cargando editor
21/12/2024, 02:13
AdrianAdrien Joyce
Cargando pj

Tardé un momento en volver a hablar después de lo último que dije. Sí la escuché a ella, y aunque dijo que no me pensé si yo debía o no gritar llegado el caso. Bueno, ya se vería. Quizá no era necesario.

Al volver a hablar, mi voz sonó como si hubiera pasado algo.

—¡Había tres! —grité desde más lejos—. ¡Hay tres! —me corregí—. ¡Pero se ha abierto el espejo! ¡Es como una puerta secreta! ¡Así que hay cuatro! ¡Supongo!

Tragué saliva.

—¡Es como un armario! ¡Hay accesorios de ropa y un maletín con una cuenta atrás y una nota! ¡Y en la pared hay un mensaje que dice...! ¡en los ojos de quien mira!

Mientras tanto ya fui agachándome para examinar mejor el maletín, la nota... todo.

Cargando editor
21/12/2024, 03:28
¡Acierto!
Cargando pj

Martha pasa ante la primera puerta, con el muro igual que antes. Al pasar frente al espejo que dice "Oscar" de camino a la segunda puerta, éste se desliza hacia la izquierda, como las puertas de algunos centros comerciales. Dentro puede ver una especie de armario iluminado por una lamparita de techo: blusas, pantalones, faldas, camisetas, vestidos... Con la misma tinta invisible, ve un mensaje en la pared:

La Belleza está

Cargando editor
21/12/2024, 03:32
¡Acierto!
Cargando pj

Al tomar la nota, Adrian lee el siguiente mensaje:

¿Qué usarías para una cita especial? Que el maniquí sea tu modelo...

El contador indica que quedan 30 segundos...

Cargando editor
21/12/2024, 13:43
AdrianAdrien Joyce
Cargando pj

—¡La nota dice que e l maniquí sea mi modelo para una cita especial! —grité—. ¡Y el contador que quedan treinta segundos!

Mierda, no tenía claro que nos diera tiempo. La verdad es que sabía que yo —y solo yo— había perdido demasiado el tiempo al llegar allí, pero aún así...

—¿Tú tienes algo de eso?

Cargando editor
21/12/2024, 14:53
Martha
Cargando pj

¡Aquí se ha abierto también un espejo! —gritó Martha, mientras examinaba el interior del pequeño compartimento que había al otro lado—. Es como un armarito y hay escrito... «La belleza está»...

Se quedó pensando apenas unos instantes y se dio cuenta de lo que había dicho Adrian.

Es una frase, la tuya y la mía, sí, «La belleza está en los ojos de quien mira». ¡Puede que sea de Oscar Wilde!

Entonces, escuchó lo de que solo quedaban treinta segundos y entró en pánico.

¿¡Treinta segundos!?

Miró a un lado y a otro. Allí no había ni maletín ni nota alguna.

¡Viste al maniquí! ¡Con lo que sea! ¡Aquí hay ropas de chica, voy a vestir al mío con algo!

Pantalones, blusas, faldas, camisetas... ¡demasiado complicado! ¡Un vestido! ¡Un vestido por encima y arreando!

¡Le voy a poner un vestido, que es fácil! ¡Busca algo sencillo! —dijo, mientras escogía al azar un vestido y se iba corriendo hacia el maniquí. Si en el suya había ropa de mujer, en el de Adrian puede que hubiera de chico—. ¿Lo tuyo es ropa de chico? ¡Ponle una camiseta y un pantalón y ya está!

Se apresuró a ponerle el vestido al maniquí. Estaba tan nerviosa que tuvo que darle la vuelta un par de veces para ver si estaba del derecho o del revés. Ojalá se sujetara bien y no se cayera...

Cargando editor
21/12/2024, 22:30
AdrianAdrien Joyce
Cargando pj

Me alegré de oír lo de su espejo. ¿Lo habíamos hecho con los interruptores? Quizá sí. ¿Y por qué yo podía verla y ella a mí no? Aún no lo entendía. Asentí, de hecho aunque no pudiera verme cuando dijo lo de que era como un armarito, y volví a mirar mi trozo de frase cuando leyó el suyo.

—¡Claro que es de Oscar! —dije después, como si supiera de lo que hablaba. Y como si tuviera confianza con él, o algo.

Volví a sentir luego, cuando dijo lo de los treinta segundos. ¿Ella no tenía un temporizador igual? Eso sí era raro. Y vale, no podía verme, pero antes de que pudiera contestar en voz alta me dijo lo del maniquí... y me puse a hacerlo.

—¡No hay camisas ni pantalones! —le grité—. ¡No sé qué se piensan que llevamos los chicos a una cita, pero solo hay complementos!

Aun así le hice caso y me puse a vestirlo frenéticamente: corbata, gafas, calcetines, zapatos...

—¡Casi estoy! ¡¿Cómo vas tú?!

Cargando editor
22/12/2024, 00:50
La Voz que Guía
Cargando pj

Martha revisa el espejo "Wilde", y encuentra el armario de accesorios, mientras que Adrian encuentra el armario con ropa detrás del espejo Oscar. Visten a sus maniquíes lo mas rapido posible, y el contador llega a 0. Se escucha una vez más la voz guía. -Es momento de continuar, pero esta vez no habrá despedidas. En el maletín encontrarán la indumentaria que deberán vestir para la siguiente sala.-

En la pared con espejo se desliza una porción, revelando un espacio de un metro que conecta con la habitación del otro.

Dentro del maletín encuentran un traje de trabajo de cuerpo completo color blanco. Y de pronto, la pared del panel detrás del maniquí empieza a moverse...

Notas de juego

¡Cuarta habitación terminada!

Pueden poner un último post aquí, y pronto les daré apertura a la siguiente habitación.

Cargando editor
22/12/2024, 09:46
Martha
Cargando pj

¿Lo habían conseguido? ¡Pues parece que lo habían conseguido! Martha sintió una bajona repentina cuando la voz de los organizadores comenzó a hablar, y miró hacia el espejo al otro lado del cual estaba su compañero. Cuando observó que se abría una especie de agujero, no demasiado grande y que al otro lado estaba efectivamente Adrian, se fue hacia allí, sonriendo y colocándose el pelo.

Adrian, gracias por preocuparte —dijo, mientras se asomaba por el hueco. No pudo evitarlo y le dio un abrazo—. Perdona por haberte asustado con mi grito, es que —Negó, como quitándole importancia. Era complicado—... me he asustado, lo siento. Gracias por todo. Nos vemos a la salida, ¿de acuerdo?

Tenía que vestirse con el mono blanco (¿tocaba mancharse en la última habitación?) y darse prisa para salir por la puerta que se había abierto al otro lado. Le daba la impresión de que esto tocaba a su fin.

Notas de juego

En la pared con espejo se desliza una porción, revelando un espacio de un metro que conecta con la habitación del otro.

Entiendo que lo que quiere decir esta frase es que hay un pequeño espacio para asomarnos y poder darnos un abrazo o algo así, pero no lo suficiente como para cruzar el uno a la habitación del otro. Si no es así, edito la entrada.