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La lucha continuaba, mientras el objetivo principal parecia ser Isilwen, el enano aprovecho y cargo su hacha con quien parecia ser el lider del grupo enemigo.

Aquel Balchott, no vio venir el golpe, pero sin embargo resistio bastante bien el ataque.

-Maldicion -espeto Ozbeorn mientras se preparaba a un posible contraataque.

TURNO 2 DE BATALLA

Demian 12 - SANO

Isilwen 9 -  MALHERIDA (-2 HERIDAS) penalización de -5 a todas las pruebas

Borgo 9 - SANO

Ozbeorn 9 - SANO

Norwyn 8 - SANO (-7 HERIDAS) sin penalización

Balchott 7 - VER NOTAS

Ergon 6 - DOLORIDO (-0 HERIDAS) penalización -1 a todas las pruebas

Demian seguía enfrascado en la lucha y su mente, revitalizada por el hecho de haber abatido a un oponente, estaba totalmente focalizada en el combate. Después de esquivar el golpe del balchott sin ninguna dificultad, volvió a blandir su espada larga golpeando desde arriba, realizando un maniobra contundente que consiguió hacer añicos el escudo del soldado y herirlo mortalmente. No tubo ninguna posibilidad de defenderse.

- Vamos, ¿¡eso es todo de lo que sois capaces?!- Vociferó a grito pelado, dejándose llevar por la euforia del combate.

Sin pensarlo dos veces, saltó por encima de los cuerpos caídos y arremetió contra el capitán, dispuesto a llevárselo por delante antes de que pudiera herir de nuevo a la elfa.

Estaba en serios apuros, las heridas de la batalla eran graves y el capitán centraba todos sus ataques en mí, me sentía mareada debido a la pérdida de sangre, tenía la flecha en el arco, así que lo levanté y apunté a la cabeza del capitán, utilizándo toda mi fuerza de voluntad para ignorar el dolor e intentando conseguir distinguir a cual de los dos capitanes que veía tenía que disparar.

Ví como Demian se acercaba para ayudarme en la batalla y sonreí, necesitaba ayuda, pero no la iva a pedir ni admitir que la necesitaba, pero sí me alegraba de recibirla, solté la flecha y rezé a Elbereth que llegara a su destino.

A pesar de toda su experiencia en combate, y de su habilidad con el escudo, no consigue cerrar la guardia a tiempo de bloquear la carga de Demian y éste consigue herirlo de muerte. Aun en pie tras recibir semejante golpe, aturdido y desorientado no tiene tiempo suficiente para detener el ataque de Isilwen y su flecha atraviesa limpiamente el gaznate.

El capitán cae al suelo, inerte.

Borgo había visto una flecha pasar muy cerca pero no estaba seguro de donde había venido. En aquellos momentos estaba mas preocupado por Norwyn, cuyo atacante parecía claramente superior. El pequeño hobbit se acercó con cuidado  a la espalda del guerrero e intentó algo que no había probado en mucho tiempo.

-VIULOR ANIHANDIL! -grita en elfico

Un destello cegador, surge de las manos del pequeño hobbit y se expande alrededor vuestra en todas direcciones. Es como si mil rayos se hubieran unido para golpear en el mismo sitio, solo que no hay impacto tan solo una luz muy intensa que deja ciegos a todos los presentes y que alerta a los sitiadores cercanos que algo está pasando.

La lucha continuaba, mientras el objetivo principal parecia ser Isilwen, el enano aprovecho y cargo su hacha con quien parecia ser el lider del grupo enemigo. Pero en mitad de la carga una terrible luz lo cegó y tuvo que detenerse.
-Maldicion -espeto Ozbeorn mientras se preparaba a un posible contraataque.

Borgo abrió los ojos y comprobó que su conjuro había resultado efectivo. Lamentablemente, algunos de sus compañeros también habían resultado cegados.

¡Por aquí! ¡Seguidme! ¡Seguid mi voz! ¡Los que aún veis bien, guiad a los otros! Tenemos que salir de aquí ya mismo.

Quedo completamente cegada a causa de una luz inusualmente brillante que surge a mi espalda. Me parecía haber oído la voz del pequeño Borgo a mis espaldas un instante antes de que sucediese. Incapaz de ver nada, me dejo guiar por la voz de Borgo, quien nos está indicando hacia dónde huir. Trato de seguir su voz para colocarme más a salvo. No quiero quedar completamente expuesta en medio de la nada y sin ver de dónde me vienen los golpes.

En un momento quedan solo cuatro soldados. Uno, moribundo contra Ergón a quien intenta golpear pero Ergon bloquea con éxito el ataque. El segundo golpe falla.

El soldado que se dirigía a por el Enano recibe de lleno el resplandor, grita de dolor e ira y cae al suelo embarrado al perder pie en su carga.

El soldado junto a Norwyn se encuentra igualmente cegado, se tapa los ojos con las sucias manos y retrocede por lo que tampoco actúa este turno.

El último de los soldados, el arquero, está suficientemente lejos para conseguir mirar al suelo y evita así la ceguera, por lo que vuelve a cargar una flecha y disparar contra el pequeño hobbit, que ahora es un blanco seguro. Dicho y hecho la vuela sale disparada hacia Borgo rozándole un hombro.

Bloquea el golpe de su enemigo y contra ataca. Al ver como uno de sus atacantes cambia de rumbo decide centrarse en el que se ha quedado herido debido a su lanzamiento con el arco. 

¡¡¡SALVE AL REY DE LA MARCA!!! - grita mientras queda cegado por la luz casi celestial que acaba de inundar aquella pequeña zona del campo de batalla.

TURNO 3 DE BATALLA

Demian 12 - SANO - CIEGO

Isilwen 9 -  MALHERIDA (-2 HERIDAS) penalización de -5 a todas las pruebas

Borgo 9 - SANO (-8 HERIDAS) sin penalización

Ozbeorn 9 - SANO - CIEGO

Norwyn 8 - SANO (-7 HERIDAS) sin penalización - CIEGA

Balchott 7 - VER NOTAS - CIEGOS (hay uno que no lo está)

Ergon 6 - DOLORIDO (-0 HERIDAS) penalización -1 a todas las pruebas CIEGO