¿Cuándo había sido tan difícil que dieran por buena una confesión? 

- Si el cadáver sigue donde lo dejé, os lo traeré mañana...os digo que está muerta - no estaba muy claro si lo decía a Yakushi o a Eromoshi - podéis dejar de perder el tiempo buscándola. Me preocuparía más por los que averiguan o preguntan insistentemente por las restricciones de nuestras pulseras ¿no véis que es una forma de matar? discreta, además.

Desde un inicio supuse que las condiciones prohibidas iban ir a peor, por eso y otra razón más es que vote por no ampliar los ambientes. - digo mientras reflexiono sobre mi propia pulsera.

Acto seguido me dirijo nuevamente al almacén por si pasé algo por alto, pues acababa de recordar algo.

Levante una mano acusadora señalando a Kasumi Kato

No esta muerta, el Monogram dice que esta desaparecida, ahora mi pana Sousuke Yakushi dijo que ella fue secuestrada por Eromochi Koí-to Lo pienso quizás demasiado, pero tu has buscado atención por mucho tiempo ayer igual, por lo que apostando mis fichas, puedo decir que tu objetivo es que te linchen

Señale varias veces afirmando lo obvio, las mentiras compulsivas no son adecuadas para el ambiente escolar.

Las pantallas que se encontraban en los pasillos se encendieron, y tras mostrar un pequeño vídeo de un reloj con varias partes móviles girando en direcciones contrarias, incluso el minutero iba en sentido anti-horario; el fondo cambió a uno estático, esta pantalla se encontraba partida en dos, un lado blanco completamente y el otro lado negro. Y de esta pantalla, una voz en Off habló, la voz parecía ser de alguien que deseaba aparentar pulcreza, elegancia y clase.

-¡El tiempo de investigación ha terminado!. -Exclamó el oso- Ahora, es de obligada asistencia la presencia en el Juicio Escolar, por favor pasad a la nueva zona accesible...

Poco a poco todos los estudiantes que aún seguían con vida se fueron reuniendo frente a las puertas cerradas del ascensor, todos salvo Tsuki Akane, la cual no parecía tener las ganas de presenciarse en el lugar, los minutos pasaban y nada cambiaba, esta compañera no aparecía y las puertas de la estancia seguían cerradas.

Los estudiantes se miraron entre ellos con preocupación esperando que lo que sea que detuviera a aquella muchacha desaparecida no fuera un asesinato algo que algunos ya decían sin ningún tipo de pudor. Sea como sea, la paciencia y los nervios de muchos de los presentes se estaban agotando y a punto de dispararse, respectivamente.

Finalmente las puertas se abrieron. Y sin decir nadie ninguna palabra, todos entraron en el ascensor, pues las puertas se abrieron y comenzaron a subir; el silencio sepulcral no fue mancillado por la voz de nadie, aunque es de suponer que alguien con afán de protagonismo hizo un pequeño poema acerca de la vida, la muerte, la esperanza, la desesperación o cosas así... ¡Pero dentro de su cabeza!.

Las puertas finalmente se abrieron dejando ver a todos los alumnos un amplio espacio decorado con suelo masónico, largas cortinas rojas, y en el centro de la misma un círculo conformado por 17 atriles, incluso había uno para los muertos en donde eran substituídos por una imagen de ellos, lo mismo pasaba con la desaparecida, aunque con una interrogante nada más.

Aunque lo que más llamaba la atención era el ambiente lleno de engranajes que se mantenían estáticos y la gran vidriera que tan solo daba a la oscuridad con el reloj que marcaba las 9. Aunque parecía estar fuera de hora, pues claramente no eran las 9, sino mucho más temprano de aquella tarde.

Y en una zona ligeramente más apartada, se encontraba unas escaleras de madera que llevaban a un pequeño trono. En el cual se encontraba sentado Monokuma dormitando, a fin de cuentas, los alumnos habían tardado bastante en aparecer y también era bastante tarde.

El oso se despertó, y tras echar un vistazo al reloj de bolsillo que tenía colgado, este daría inicio al juicio escolar pero no sin antes decir algo que quizás pudiera poner algo nerviosos a algunos de los presentes, pero era algo que tenía que hacerlo si quería que todo saliera "bien".

-Vamos a ver que tal ha ido... -Comentó sacando una llave de engranaje y usándola en su atril, como quien daba cuerda a un reloj o a un juguete antiguo, y tras darle un par de veces la vuelta; toda la maquinaria empezó a funcionar, de manera estridente los engranajes de aquella torre del reloj se movieron casi al unisono haciendo que las agujas de este marcaran un nuevo número.

VII

Es decir "7"

Viendo aquel resultado y que los engranajes poco a poco dejaran de moverse, aquel oso dío por fin, inicializado aquel Juicio Escolar en donde se votaría a uno de los presentes para recibir cierto castigo por parte de este mero "observador"; y para no hacer perder más el tiempo a nadie, habló.

-El tiempo corre; -les advirtió- recordad que tenéis como objetivo acabar con los "malos que buscan mataros a todos", no vengar la muerte de nadie en particular si creéis que esta ha sido justa. Así que, debatid con cabeza y encontrad quiénes de entre vosotros busca nuestra perdición. ¡Que empiece el juicio escolar!.

Y así daba comienzo al fin con el Juicio Escolar, en donde tendrían que votar por alguien de ellos para ser castigado, más valía estar atentos y compartir todo lo que sabían si no querían terminar votados, asesinados o peor aún... o quizás guardar un As bajo la manga fuera mejor idea... sea como sea, debían actuar, debían vencer.

VII - Despertares Des-Desesperados [Votaciones]

Pensó entonces, estaba tan cansado que si bien haber ido a tomarse un rico baño en el onsen (Baños Públicos) le ayudó con su falta desueño, seguía alicaído porque les estaban teniendo una paliza inaceptable y él era un pésimo Guardián ante este trío de traidores que les estaba apuñalando de forma cobarde.

- O sea, tú eres el detector... -Murmuró pero no muy bien.- Ella es la controladora, seguramente, y la encerradora u otro skill de soporte es... Ajá, ya.

Pronunció en voz baja y siguió escuchando.

- Tengo que votar por Koito o Vanilla, quiero votar por Watanabe y me tiento de votar por Kasumi, pero yo cumplo mis promesas. -Miró a Vincent, asintió.- Así que... ¿Wata, me haces un favor? ¿Me dices el Ultimate de Vanilla? Y por mi parte puedo pagar con algo simple pero puntual, o ahora o durante el juicio en unos minutos, mi acción prohibida, que hais estado usando para matar cobardemente en vez de tiraros de frente, no soy como ustedes.

Miró su pulsera, como si hubiese irrumpido su propia acción prohibida directamente.

Pero se cansó de tanta charlatanería y cobardía, no iba con él.

- Suiciente. Bay, ven conmigo a la habitación de Kusuri, brother.

Y sin eso fue caminando él solo hacia el famosísimo elevador.

Y de paso, se puso sus lentes oscuros, suficientes tonterías.

Ken Watanabe no salía de su asombro ante las manipulaciones que ejercía Eromochi para con el resto, sesgando la información según le interesaba y callándose lo que realmente era importante. Un facepalm se quedaría corto para expresar lo que sentía el chico en aquellos instantes, pero aún con todo volvió a hablar siempre con la verdad por delante y sin ocultar nada. Podrían tildarle de ser demasiado honesto, quizá exponiendo a otros al revelar sus habilidades, pero jamás de mentir al respecto.

- Antes que nada, voy a pedir el voto conjunto de los inocentes para la chica que "aprovecha el instante" - comentó en clara alusión a Vanilla carpe Diem, a la que señaló sin miramientos - de tal guisa que se linche a una culpable casi segura. Digo "casi" porque no puedo verificar su inocencia o culpabilidad usando habilidades propias, pero creo disponer de suficientes señales para distinguir si es pura o no, y ella en la sauna ha enseñado su pulsera revelando las restricciones que no puede realizar o las que debe lograr para sobrevivir. 

- No puede asesinar a alguien, pero eso no resta que, y eso lo digo yo sin pruebas, no pueda "persuadir/controlar" a alguien con su habilidad a que se suicide. El asesinato no lo realizaría ella, si no que sucedería lo que ya se ha visto con anterioridad, el propio objetivo es quien desobedece las reglas y saldría como CASTIGADO.

- Que (XXXXX) siga vivo para la (X) Noche. Ese alguien es el supuesto "trap" que ha revelado el gordo pervertido acosante cazador de "panties", cuyo apelativo ni fecha exacta repetiré, pero que es así tal cual dijo el "panties" hace unos instantes. ¿Para qué necesita la que "aprovecha el instante" que siga con vida el supuesto trap hasta esa fecha exacta? Toda una incógnita, aunque sugeriría pensar que para "reclutarlo" a las filas del bando del osezno.

Dicho esto, que concluyo vital para todos y espero vuestro apoyo para no dividir votos y que otra vez los oseznos se salgan con la suya en las votaciones, voy a revelar otros datos de interés que he recopilado durante noche.

Tosió un par de veces para abarcar, aún más si cabe la atención del resto, antes de proseguir.

Esta noche visité la habitación de nuestra colega pelirrosa, de vestido azul y lazos a juego. Ella puede verificarlo. - comentó Ken señalando a Kyriu Akame, lo cual no era una sorpresa para nadie habida cuenta que ella misma había invitado a quién así lo desease, siendo Ken el único en acudir. Allí escuché, para grata sorpresa personal, la voz inconfundible del espíritu de la "estilista" ya fallecida, que en verdad no era estilista pero que ya explicaré al detalle que nos dijo en privado. Deduzco por tanto que la habilidad de nuestra pelirrosa es invocar a los espíritus y lograr establecer conexión con el otro plano o realidad.

Pude hablar con la estilista fallecida y nos dijo sin tapujos que de verdad fue secuestrada, encerrada, interrogada y torturada por alguien que tenía voz de chico, y que al final, fue ejecutada pese a que trató de explicar y debatir que era inocente. Le expliqué a quién investigué al inicio y relaté al detalle la habilidad de la chica de capucha blanca. Para un servidor no hay duda de que la chica de blanco se equivocó y precipitó, ejecutando a quién en realidad era inocente, no obstante, la descripción de la habilidad creo que es clara, y habiendo errado en su única elección, ahora ya no puede ejecutar a nadie. No se, creo en su inocencia.

El caso es que la "estilista" nos dijo que en realidad habló con falsedad en cuanto al apelativo que dio a conocer de su Ulti. Ella expresó que en realidad es la "madero de la secreta", y según sus propias palabras, podía "etiquetar" a la gente que visitaba una habitación concreta, no siendo necesario que fuese la suya propia. Nos reveló en adicción que su cadáver todavía no ha sido descubierto desde su fallecimiento.

Estaba hablando mucho, quizá demasiado, pero no terminaría su explicación sin hablar de Eromochi.

- En cuanto al "panties", en efecto él ha sido a quién he investigado esta noche. Puede acosar a alguien durante la noche, vigilando todo lo que haga su objetivo, ya sea que vaya a una habitación o le vayan a la suya. Puede escuchar las conversaciones privadas que allí se produzcan.

¡BEEP! ¡BEEP! ¡BEEP!

La pulsera de Ken Watanabe empezó a sonar con unos "Beeps" bastante sonoros e intensos, probablemente fueran capaces de despertar a todos los presentes con aquellos pitiditos si no fuera por el hecho de que ya todos estaban despiertos y presentes por el lugar. Pero a parte de sonar, este mostró la acción prohibida de aquel muchacho, al parecer, la había incumplido con este acto.

Votar a alguien que no hayas investigado previamente.

Decir algún nombre de un compañero de clase o tu propio nombre.

Decir el nombre de algún Ultimate. Decir algún número.

Usar la letra "M".

"coMo" "Madero" "falleciMiento"

Rápidamente el veneno de la pulsera se inyectó en la muñeca de Ken Watanabe y su piel de por sí pálida empezó a tornarse de un color morado y purpúreo a la par que sus ojos se inyectaban en sangre y sus lágrimas que caían eran también de esta substancia rojiza. A parte de eso, la boca del muchacho empezó a esputar espuma hasta que todo su cuerpo finalmente colapsó, cayendo al suelo como si no fuera más que un muñeco de trapo.

Apenas le dio tiempo a terminar con su discurso antes de colapsar.