Iba a mandarle a la mierda. No sabía bien el motivo, pero tenía ganas de hacerlo. Quizás estuviese cansado ya de tanta estupidéz e insulto a la vez o puede que saber que Jones estaba así del otro lado de la puerta y que no quisiera que la viese, me hizo actuar de aquella manera y seguir haciéndolo. Pero lo importante es que ya se iba... hasta que sentí como la puerta se abría detrás de mí y salió Chandrelle con la toalla puesta solamente y cargada de muy mala leche.
Me llevé la mano a la cara. Precisamente lo que quise evitar era eso y ella había salido al pasillo sin pensárselo dos veces, porque de haberlo hecho, se daría cuenta de que ahora seríamos el centro de atención de la OFI y que en cuanto llegase a oídos de nuestros superiores, la llamada y seguramente que la reunión con ellos estaría garantizada.
Solo esperaba que mi mala fama superase a la de Caruso y sus fantasmadas, pues de lo contrario íbamos a estar en el centro del huracán durante demasiado tiempo.
No dije nada. ¿Qué más iba añadir a aquello? Entré en la habitación abochornado por la situación y vi el sobre, ambos lo vimos. Lo recogí con cuidado y con esa misma delicadeza lo abrí y ambos pudimos leer el contenido. - Por si acaso lo empaquetaré como prueba de la policía y se lo acercaremos para que lo costudien ellos. Siendo de la granja... creo que deberíamos tener el sobre con las posibles huellas y ADN a buen recaudo. - Le dije a Jones. - Además, tendremos que ir igualmente a la comisaría a pedir algunas direcciones. Serán más rápidos que en la OFI. - Básicamente por la carga de trabajo y porque allí todos se conocían.
- Iré a embolsarlo mientras te vistes. - Indiqué a mi compañera sin querer hablar de lo ocurrido fuera y de lo que pasaría en la OFI cuando Caruso llegase. Ya me enteraría yo cuando asomase por allí unas horas después. - Y a dejar los papeles del traslado de pruebas a buen recaudo. - En el maletín con todo el material forense del cual no nos separábamos nunca. - Te esperaré abajo, junto al coche, necesito que me de el aire y pensar un poco.
Llevé las cosas a mi cuarto, donde estaba el maletín y lo guardé todo, asegurándome que cogía una bolsa de pruebas de la policía de aquel misterioso lugar. Luego recogí el maletín y todo lo necesario para seguir con la investigación, asegurándome de que mi móvil estaba cargado, salí al pasillo y me encaminé hacia el coche.