Si todos los asesinos están muertos, ¿no deberíamos poder salir de este lugar? - pregunté a Yannick, a quien se le veía más enterado del tema que a mí.
Mientras yo seguía observando, mientras estuviera allí encerrada no me sentiría segura.
-Antes yo me aseguraría de que las muertes hayan cesado. Además, quizás todavía quede alguien - Dicho eso no puedo evitar que mi mirada se pose en el emo y en la follacabras.
Yannick da un par de pasos en la dirección de Trigo antes de responder a Eva. Le hace un gesto, agachándose, y el animal abandona su posición cerca de la serpiente para subirse a su mano. Todo el mundo está poniéndose serio. Parece que el momento de la euforia ha pasado, ahora que se acerca la noche.
- No lo sé, Eva. - le dice - Yo no sé cómo funciona este lugar. Cuando llegué aquí no sabía nada de magia, ni de sellos, ni de nada. Ni siquiera sabía que era un semidemonio. - recuerda.
- De todas formas, ¿quién dice que no podamos salir? Que yo sepa nadie lo ha intentado. - aclara entonces - Yo me he quedado estos días para tratar de proteger las cosas que me importan. Como todos, creo. - dice, pasando la vista por el lugar - No sé, prueba si quieres. Yo me quedaré al menos hasta estar seguro.
No me gusta la muerte Yannick, porque sólo trae desgracia. A pesar de nuestra naturaleza, odio la muerte desde que mi madre... - dije sin poder acabar la frase - Si no he intentado irme aún es porque necesito saber que todos estamos a salvo, los de aquí dentro y las posibles víctimas que pueda haber fuera si salimos de aquí antes de tiempo. Sí, le temo a la muerte.
Ví el cuerpo bañado en sangre de Escoria y no pude evitar suspirar:
- Ya queda menos- dije mirando a todos- Yannick tus palabras serán escuchadas- dije sin más- y yo también estoy cansada de tanta muerte, sangre, vísceras y sobre todo del miedo que cubre este lugar...- dije mirando a Eva-, espero que sea cierto y esto hay llegado a su fín...
-Sabremos si los traidores han caído por completo en la mañana. Cuando no se produzcan mas muertes por sus manos.-Miro a Yannick y su séquito.-No por ende de los demás.
-Lo siento Elisabeth y Kaldreade. Creo que caeréis esta noche por manos de inocentes, porque aun piensan que hay traidores entre nosotros, no atienden a razones.-Hablaba apoyado en un pilar.
-¡OH! Luego es tarde para contestar.-Parecía algo cínico.-No Verona, que tu usaras tu estúpido poder para reunir gente y que urdan planes entre ellos a expensas del resto no entra en mis planes. Odio el don del General y te aseguro que no es mi intención seguir creando el aren que tu estabas haciendo. Yo solo quiero el beneficio de todos. Pero esta claro que nadie de los de aquí comprenden mis acciones. A pesar de ser las correctas. A pesar de que arriesgue mi propia vida por el bien común y prometí la liberación de mi lacayo al terminar esto. No, Se me traiciona y se me aleja del final. Ahora que ya he echo todo el trabajo. Y el resto solamente tiene que beneficiarse de el.-Hablaba mordiéndose los labios.
-Es mas, se juega conmigo, dándome un poder que me parece asqueroso y de débiles. Y no contentos con ello, se me amenaza después de muerte. Y se me advierte que al morir Jared, el me llevara con él. Como si yo tuviera culpa de algo así. No entiendo las acciones contra mi. Teméis las acciones que desconocéis, aunque sean buenas y les dais muerte. Un rasgo muy humano.
Yannick escucha las palabras de Helmuth y las comprende, pero aún así no tarda en contestar, sintiéndose molesto por algunas de las cosas que dice.
- A ver, Helmuth. - empieza - Es verdad que has colaborado a tu manera, y que no vayas a utilizar ese lugar para esclavizar a los demás está de puta madre, como tampoco Verona quiso usarlo para eso. Pero tampoco te eches tantas flores, por favor. - le dice.
- No te apartamos del final. Tú te has mantenido apartado desde el primer día, sin participar apenas en las discusiones. Trabajabas a tu rollo, sin contar con nadie ni opinar sobre lo que se decía más que en contadas ocasiones. No puedes esperar que ahora te aclamemos como nuestro gran salvador, o algo parecido. Aquí se han forjado auténticos lazos de amor y amistad. Si el único que tú has forjado ha sido de esclavitud, pregúntate por qué, pero no nos culpes de ello.
- No digo que tus acciones no fueran correctas. Pero no te vanaglories con haber arriesgado tu vida, porque creo que aquí otros nos hemos expuesto bastante más que tú. Hablo por mí, hablo por Valfar, por Nekhbet... y hablo por Nybras, que se merece estar aquí mucho más que tú. No creas que tú has hecho todo el trabajo. Tú sólo has descubierto a Escoria, y alguien la ha matado en tu lugar. Créeme, no quieres que comparemos logros, porque saldrías perdiendo.
- Así que no entres en una actitud de reproche. Es desagradable y no tienes motivos, porque tu intercambio fue hecho por alguien con la mejor intención. Y funcionó, al menos en parte.
- Vamos a ganar, Helmuth. Alégrate de eso y deja de esperar un reconocimiento que otros se han ganado mucho más que tú. ¿Que tú lo mereces? Sí, pero otros más.
- me considero mas humano que demonio Helmuth y la verdad prefiero que así sea, pues elijo sacrificarme a mi mismo antes que obligar a otros a hacer el trabajo que considero necesario...- hago una pausa y me viene otra idea a la mente- o quizas al igual que Kaldreade crees que eres un Iluminado.. otro mesías?... jajaja, creo que deliras hombre.... eso es!... !¡delirios de grandeza!... la verdad es que creo que si no eres un traidor y cobarde, al menos eres un despota que cree que sabe lo que es mejor para los demás y nosotros debemos darte las gracias por ser tan bueno... jajaja... bueno... al menos si en algo ayudo a salvar este mundo con tu muerte, será un puto nazi menos!.-
Helmuth sonrió de medio lado ante el comentario de Yannick, apenas conocía la verdad de sus acciones.-Escudate en lo que quieras Yannick pero no hemos ganado, no vamos a ganar. Muchos se han perdido ya...
Alzo la cabeza al escuchar al estúpido una vez mas y dejo su conversación con su hermano para encararse con él.
-Guarda tus tonterías para quien quiera escucharlas o escucha cuando los demás hablen. Lo he dicho antes y lo repito. Soy mestizo. No me desagradan los humanos, de así serlo no hubiera hecho todo esto para librar al mundo de Kain. Me gusta el mundo tal y como esta y no quiero que nadie lo cambie. Y a diferencia de ti, yo no hago prejuicios y no deseo la muerte de un inocente por estúpido que sea.-Golpeo el pecho de Jared con su dedo.