Partida Rol por web

Cuando Yannick se concentra de nuevo, media sonrisa mal disimulada aparece en su rostro.

- Un, dos, probando, probando... - dice divertido - ¿Significa esto que ahora sí pertenecemos a un grupo guay? - pregunta bromeando - Por cierto, creo que ya no necesitaremos la contraseña para decirnos quiénes están aquí dentro.

- No sé si es muy guay, pero desde luego... Parece un grupo. - Responde Nybras, mirando a Verona con el ceño levemente fruncido. - La persona a la que te dije que hay que proteger es Jared. Ya no hará falta ninguna señal.

Yannick escucha lo que Nybras dice, pero sus palabras le confunden. Entiende que la aceptación pública de este lugar por parte de ella es más una pose para evitar conflictos que otra cosa, y él decide hacer lo mismo. Sin embargo, lo otro...

- Nyb, no tengo ni idea de qué hombre me estás hablando. - dice, y durante un momento se plantea hacer un chiste sobre el hombre que ella debería ver en sueños, pero la situación no está como para eso.

Nybras hace una pausa antes de responder. Ella pensaba que Verona había hablado de ese hombre públicamente, pero quizá no fuese así.

- Dice que llegó aquí porque un hombre en sueños se lo indicó, y que fue ese mismo hombre el que le dio el poder de traer gente a este páramo... Quiere encontrarlo para hablar con él, pero a mí no me da muy buena espina ese tipo.

Después se da cuenta de que no respondió sus preguntas anteriores. - Ella trae a la gente que le parece inocente, para que podamos planear cosas aparte de los demás. Cree que Nekhbet es inocente y por eso la trajo, aunque yo le recomendé que trajese a Sandor en lugar de a ella. Diarmuid... Es muy raro, no nos cuenta apenas nada de lo que hace, ni opina casi sobre nada. Tenemos algunas dudas sobre él. Pero dice que sabe a ciencia cierta que Eko es un traidor.

- Vaya... - dice Yannick, almacenando esa información pero sin saber muy bien cómo tomársela - Eso sí que es una putada.

- ¿Hay alguna garantía de que lo que diga en general sea cierto? Tampoco es que le haya visto hablar mucho, la verdad.

- No, no hay ninguna garantía. Salvo lo de Eko sólo nos ha repetido cosas que ya sabíamos por otros medios... Así que por eso no estamos seguros del todo de sus intenciones. Por otro lado, sabe lo de Jared desde el principio y pienso que si el muchacho sigue vivo, quizá sea una garantía de su inocencia. 

Yannick mira un instante a Nybras antes de responder. Después lanza un suspiro, y busca con la mirada a Nyx. Hace mucho que no se acerca a la pantera, pero la verdad es que teme por Trigo si lo hace.

- Claro. - responde en un tono que deja claro que es mentira - El malo confiesa, los buenos siguen ganando... yuju. - le dice, y entonces se encoge levemente de hombros - No sé, Nyb... me siento ridículo e idiota. Me ha tomado por estúpido y se ha aprovechado de mí. Y eso que he sido el primero en decir que no nos podíamos fiar de nadie... Puede que hayamos ganado, incluso estratégicamente, ahora que ha confesado... pero yo me siento como si hubiera perdido.

- Y Verona... no sé qué le pasa a esta chica. ¿En serio ahora quiere votar a Kaldreade? Joder... - le dice en un tono derrotado - ¿Qué narices le importa lo que opine Gael? ¿No valemos más los que estamos aquí? Me he expuesto por todos otra vez, he hecho confesar a otro asesino, yo... no lo entiendo, la verdad.

- No digo que quiera estar muerto, pero a veces echo de menos algunas cosas de allí. Empiezo a odiar a esta gente. - dice, refiriéndose a nadie en particular - En tu cabeza al menos podía ignorarlos, y os tenía a Nyx y a ti. Las cosas eran más fáciles.

- Y yo aún era yo.

Entonces, unos segundos de silencio.

- No quería darte la coña, sólo... no es un buen momento. Perdona.

- Sssshhhhh. - La voz de Nybras intenta acunarlo mentalmente, tratando de consolarlo como si fuese un niño. - No digas esas cosas. Nosotras nos alegramos mucho de que estés vivo y sabemos que puedes con todo esto. No eres un mojigato como la estúpida de Domino quería hacerte creer. Eres mucho más fuerte de lo que piensas, pequeño. Y mucho más valiente también.

La joven suspira, posando sus ojos en él. - Nosotras también te echamos de menos, pero no queremos estorbar, ni meternos en el medio de nada. Creo que a Verona le molestó que os recibiese yo cuando llegasteis aquí, aunque lo hice para proteger su identidad... Pero ya sabes que la chica no le da mucho al coco y que no lo hace con mala intención. Se suponía que lo tenías asumido, ¿no?

- Sobre Eko... No sabes cuánto lo sentimos. Sé que querías creer en él pese a todo. Hicimos un plan para protegerte de ello, para que no tuvieras que enfrentarlo así, pero te adelantaste. Lamento que hayas tenido que pasar por una decepción así. No te la merecías... Pero ey, hay cosas que valen la pena y lo sabes. Céntrate en ellas, ¿de acuerdo? Nos tienes aquí para lo que sea, no lo olvides. Porque pronto podremos salir de aquí y espero que nos podamos comer una pizza tranquilamente en un lugar sin sellos, ni puertas cerradas, ni compromisos, ni mierdas de esas.

Finalmente, la joven hace una pausa y Nyx posa su mirada en el joven con su habitual expresión indescifrable, como esperando algo de él. - Ya falta poco, Yannick. No te derrumbes ahora, te necesitamos aquí entero.

Yannick escucha las palabras de Nybras e intenta dejarse mecer por ellas. Al principio no comprende algunas cosas, pero poco a poco van encajando. Cuando ve que Nyx le mira le dedica una sonrisa de disculpa. Realmente le gustaría acariciarla, pero teme por Trigo.

- Lo siento, pequeña. - le dice, esperando que lo que quiera que una sus mentes funcione también con la pantera - Tengo un compañero y, igual que me dabas miedo antes tú, ahora me da miedo que te lo comas. ¿Lo entiendes, verdad?

Luego se dirige a Nybras de nuevo, esperando que la pantera realmente haya podido escucharle.

- ¿Un plan? - pregunta entonces, confuso sobre esa idea - Yo... no sé qué decir. Si lo hicisteis para protegerme, gracias, supongo. Pero no me gusta que lo hicierais a mis espaldas. - explica, en un tono que deja claro que no está molesto, aunque sí un poco decepcionado - No sé quiénes estabais metidos... pero creo que prefiero no saberlo. No me cuentes nada más, por favor. Aunque gracias por dar la cara. - concluye al final, para que entienda que, a pesar de todo, no le guarda rencor.

Después se queda pensando unos segundos, meditando sobre las cosas que ha dicho.

- No hay motivos para que os mantengáis apartadas. No sé qué pasará cuando salgamos de aquí, o dónde acabará cada uno, pero tú y Nyx seguís a la cabeza de mi lista. - explica, para quedarse entonces pensativo unos segundos - Creo que eres la primera amiga que tengo en más de doscientos años. Y a quien no le guste, que no mire. Ya sabes que no soy de esconderme.

Finalmente suspira, intentando dejar salir con ese aire todas las malas sensaciones.

- Y tranquila, aquí queda Yannick para rato. Y tú no te libras de mí ni aunque me maten.

La pantera parece resoplar con las palabras de Yannick, mientras Nybras hace una pausa, asintiendo levemente ante la petición de no contarle más del plan.

Después esboza una sonrisa divertida al escuchar la broma del joven. - Me alegra escuchar eso. Pero creo que tu novia no es de las que esperan a escuchar antes de desintegrar. Y me gustaría conservar mis huesos en su sitio. 

Finalmente, sus ojos se posan en el pequeño ratón durante un segundo. - Tranquilo, Nyx lo comprende. Es sólo que le fastidia tener que mantenerse otra vez al margen. No se va a comer a Trigo, ni mucho menos, pero entiende que a él le dé miedo. Esas cosas llevan su tiempo.

Yannick escucha las palabras de Nybras, y no puede evitar una sonrisa.

- No estoy seguro de que seamos novios... - dice, aunque la verdad es que sí lo parece - No, al menos, hasta que salgamos de aquí. Entonces ya se verá. Por lo de ahora nos estamos conociendo, y la verdad es que es muy buena chica. Impulsiva, desde luego, pero buena.

- De todas formas creo que comprenderá lo tuyo. Hablaré con ella si no lo hace. 

Entonces sus ojos se vuelven una vez más hacia Nyx, y luego hacia un lugar más allá, fuera, donde Trigo está haciéndose el muerto ante el repentino acercamiento de la serpiente. Una leve sonrisa se dibuja en su rostro.

- Creo que ha salido a mí. - bromea entonces.

- Ya veremos. - Responde Nybras, tratando de zanjar el tema de Verona. No le apetece ni un pelo que Yannick hable con la joven sobre ella. - Pero sí, es muy buena chica.

Después le devuelve la sonrisa cuando bromea sobre el ratón. - La realidad, es que forma parte de ti. Y tú de él. Sois una misma cosa. Ya lo irás entendiendo con el tiempo, según vuestro vínculo se vaya haciendo más grande. Y sí, se te ve claramente en él, creo que os será fácil encajar.

- Algo he notado. - responde Yannick a lo de Trigo, asintiendo despacio - Puedo sentir un poco lo que él siente, y trato de animarle cuando siente miedo y sé que no hay motivos. - explica - Pero aún así es verdad lo que decías, algunas cosas necesitan tiempo.

- ¿Y sabes qué? - dice, mirando a Nyx y a Nybras durante un segundo - No voy a compararnos con vosotras, pero creo que Trigo es mil veces mejor que la cabra esa, o que el tigre. Puede que no sea tan grande o tan fuerte, pero... no sé. Es difícil explicarlo, pero no lo cambiaría por nada del mundo.

- La diferencia entre los que aceptamos nuestro legado con todas las consecuencias y los que se aferran a su falsa humanidad, - comienza Nybras, con una sonrisa. - es que ellos no los consideran sus compañeros, sino sus herramientas, o sus mascotas. Nunca podrán tener un vínculo completo mientras no los consideren sus iguales. - La joven se encoge de hombros, posando su mano sobre el cuello de Nyx, que alza la mirada para posar sus ojos en ella. - Creo que tú y Trigo no tenéis ese problema. Por eso os será más fácil.