Si el vestido de Nyx ya había gustado al público, sus palabras terminaron por enamorarles. Se pusieron de pie y empezaron a gritar y a vitorearla. Se oían piropos por todos lados.
¡Oh, jovencita, creo que ha ganado una buena parte de nuestro corazón con sus palabras! ¡Muy bien hecho! acompañó a sus palabras con unos leves toques en la pierna de la muchacha.
Ahora lo que te toca no es una pregunta, joven. Queremos saber qué hay tras ese vestido blanco tan deslumbrante. Queremos saber cuáles son tus pensamiento y sentimientos. ¿Dejas a algún enamorado en tu distrito? ¿Te sientes fuerte para ganar estos Juegos? ¿Cómo lo celebrarás si ganas?
Gritos de enamoramiento por flechazo surcaron el público. Varias jóvenes quisieron bajar de sus asientos para coger a Max, pero la seguridad del lugar se lo impidió.
Varias propuestas poco decentes despues, Caesar no dejaba de sonreír y levantó el brazo del joven.
¡Oh, señor Anderson, creo que se ha ganado el corazón de todas nuestras mujeres! ¡Que galante y que Don Juan está hecho! Bueno, se le presenta una oportunidad de conocer a alguna de esas mujeres, y es ganando la Arena. ¿Cómo crees que te sentirás cuando mates a alguno de tus compañeros? ¿Qué harás, tienes alguna estrategia en mente?
La verdad es que sí, pero no voy a contarlo y restarle emoción a los juegos de este año. Además, si algo nos enseñan todos los años los juegos es que no se puede restar subestimar la arena- dijo tratando de sonar convincente, no iba a dejar que nadie se diera cuenta de lo que realmente pensaba de los juegos.
Sobre la primera pregunta, lo único que deseo es ser un tributo digno y dar un buen espectáculo- dijo con humildad.
Mantuve mi sonrisa natural ante la reaccion del publico...Bien hecho Nyx...tras las preguntas de Caesar, recorde la propuesta hecha a Max...mire a los ojos al presentador...
Pues no, digamos que aun no ha aparecido el chico que me deslumbre, quizas lo encuentre aqui, pero ante los acontesimientos futuros, seria una mala fortuna o quizas un simbolo de esperanza, no me apresuro a nada, ya me deslumbra todo lo que he encontrado aqui y solo estoy disfrutando de las bondades que ofrece el Capitolio a sus jugadores...Respondi de forma modesta...Aun que en los entrenamientos no he tenido los resultados que esperaba, pero confio en mis aptitudes, vine aqui a ganar y de momento no hay otra opción...y de obtener el triunfo, pues creo que...pense un momento...aunque su mente se quedo en blanco...¿que haria?...mire a la gente del publico que esperaba inpaciente mi respuesta...me gustaria ver a mi madre y decirle que he cumplido mi promesa...busque con la vista tras las cortinas a Max...
¡Espléndido, qué gran deseo! Pues sólo te resta ganar, jovencita, y así tendrás suerte con lo que quieres.
Un pitido anunció que la entrevista estaba llegando a su fin.
¡Bueno, bueno, sólo nos queda unos segundos más, y estos son todos tuyos! Venga, di algo a los patrocinadores para que te ayuden y te cuiden en la arena.
¿Ni una pequeña pista? ¿No? dijo Caesar mientras levantaba su mano izquierda y su dedo índice y pulgar se separaban levemente, para dar más énfasis a sus palabras.
Bueno, ¡tendremos que esperar a que empiecen los Juegos para ver cómo se desenvuelve este joven que promete mucho! gritó mientras el público aplaudía.
Un pitido anunciaba el fin de la entrevista.
Sólo una cosa más antes de despedirnos. Si quieres decir algo a los patrocinadores para ganarte su simpatía, este es el momento.
Max se removió del asiento. ¿A los patrocinadores? Él no había hecho gran cosa en la exhibición así que no tenía muchas posibilidades de conseguir su simpatía. Además, los patrocinadores tenían sus gustos y él nunca sabía en qué se basaban sus favoritos. Intentar contentarles era prácticamente asegurarse de que le despreciaran.
No soy una persona muy habladora, me temo. Prefiero dejar que sea mi cuchillo el que muestre cómo soy.- y mostró una sonrisa perversa.Estamos aquí para luchar, y el tiempo que sobreviva me aseguraré de que la gente me recuerde. dijo haciendo alusión a algo que solía decir su hermano. Esperó que él entendiera lo que quería decir y que se lo transmitiera a su familia.
Esperaba que supieran que estaban en sus pensamientos, lo consideró su forma de despedirse de ellos para poder concentrarse en su destino, una batalla cruel y sangrienta que lo consumiría, sobreviviera o no.
¿Decirles?...Pues simplemente que disfruten de esta versión de los Juegos del Hambre, sin duda sera mas emocionante y extrema que las anteriores, e invitarles a apoyar no solo a mi, si no a sus favoritos en obtener el triunfo...Miro a Caesar...Somos 24 jugadores, cada uno con objetivos y sueños que queremos lograr y todos nos esforzaremos en brindarles una versión que jamas olvidaran...Soy Nyx Dorian del Distrito 1 y dare todo por lograr el triunfo...y robarles una sonrisa y....quizas el corazón...Finalizo con una sonrisa y una reverencia...
Antes de salir para la arena, Lilith os evalúa con la mirada. No os abraza, no hay ningún signo de cariño en ella.
Dos últimos consejos. No os quedéis quietos en la plataforma. Estallaréis y moriréis en un suspiro. Así que no seáis idiotas, moveros aunque sean unos pasos.
Y, por último, no os fiéis de todo lo que os puedan dar los patrocinadores. Os pueden querer ayudar a vosotros, sí, pero también a otros tributos. Y eso no siempre significa que os regalen los que os quieren mucho, ¿me entendéis?
Sin esperar respuesta, dio media vuelta y dejó que marcharais.