La siguiente fue la clase de informática, otra que no estaba dispuesta a perderme de ninguna manera. Probablemente tendría poco nuevo que aprender, pero era una buena oportunidad para practicar cosas.
-Buenos días. – me dirigí al profesor. – Soy Diana Avery y quería inscribirme en la asignatura. ¿Podría darme el formulario, por favor? – le pregunté al hombre, para añadir a continuación otro interrogante más. - ¿Qué le parecería un club de teatro como actividad extraescolar?
El hombre saca algunos de los formularios y dice:
- Pues rellena estos formularios, sobre lo del club de teatro, no lo sé porque hubo uno hace unos años y fue un autentico desastre la verdad, así que no lo sé, tendría que tener un programa ya preparado para que me lo plantease
Mira a Diana a los ojos y pregunta:
- Lo tenéis?
Cogí los formularios, frunciendo el ceño ante su pregunta sobre si teníamos un programa preparado.
Es el primer día, ¿Cómo vamos a tener ya el programa? Ni siquiera yo soy tan rápida…
-Lo siento, pero no lo tenemos aún. Soy nueva y no nos comunicaron nada hasta hoy.
Rellené el formulario y se lo entregué.
-Muchas gracias. ¿Y qué debería contener ese programa exactamente? Podríamos preparar uno si eso ayuda a que nos de la autorización...
El hombre mira a Diana y le responde:
El hombre recoge los papeles y dice:
Memoricé lo mínimo que pedían y me despedí.
-Muchas gracias, nos veremos en clase.
Salí rápidamente hacia la siguiente aula.
Entro en audiovisuales pensando en esa fantasía de ser actor y tal. No se, parece una asignatura interesante y relacionada con el mundo del espectáculo. Un mundo que mi madre frecuenta, así que...
Relleno el formulario y lo entrego.