Partida Rol por web

Los ojos de Acacia se inundaron de lagrimas, y asi lo hicieron tambien los de Tyss. A pesar de la diferencia fisica, el ya no tan pequeño Acacia sentia una fuerte conexion con aquel hombre, y con Cetus. Cada uno de ellos, formaban parte de el ahora, y el formaba parte de ellos tambien. Se sentia comprendido por Tyss, entendia que no iba a ser una facil tarea.

-¿Juzgar a los dioses? ¿Protegerlos de cada uno de ellos? Aun no lo comprendo, siente que es una enorme carga que oprime mi ser, pero para esto me han entrenado, para esto me han elegido. Aun no me considero capaz de juzgar a los dioses pero si soy capaz de hacer lo mejor posible para este mundo. Acacia se puso de pie mientras Tyss se fundia con Cetus. Sus lagrimas salian de sus ojos pero se reabsorvian rapidamente en sus mejillas e inundaban su Cosmos. Quedando frente a frente a Monstruo Marino mientras sentia un Poder sin igual recorrer su ser, Acacia prometio.  -Protejere tanto a Athena, diosa de la Guerra y la Sabiduria, y tambien a Poseidon, dios de los Mares. Y si alguna vez debo elegir entre uno de ellos, se que junto a Tyss y Cetus, haremos lo mejor posible.

Una luz blanca y celeste lo abarco por completo. El poder era demasiado pero vigorizante a la vez. Acacia comenzo a perder estabilidad, pero no queria perderse ni un momento de la compañia de Cetus. Le sonrio, extendio su mano para acariciar a imponente criatura y entonces todo termino por volverse blanco.

Las olas chocaban en el cuerpo de Acacia, quien fue desperanto de a poco. El frio pero a la vez calido tacto de su Armadura lo hizo despertarse reconfortadamente. A su lado, Foon Xao, yacia impasible tambien en un profundo sueño.

Acacia dio unos pasos mas hacia el Mar. Ahora lo comprendia. No solo podia sentir la batalla librada hacia 200 años atras, sino que, a traves de Cetus, de Tyss, sentia que el mismo habia sido participe de aquella Guerra Santa.

Foon Xao abrió los ojos. Sus manos ardían, podía sentir en sus músculos aún el esfuerzo del poder desencadenado. La esencia del Dragón. Su Armadura.

La Box descansa a su lado. En la penumbra, bajo la luna, ve a Acacia en el océano, con el agua a la cintura. El horizonte parece jugar con su vista, cercano y lejano a la vez. Como el futuro.

Fin del Gaiden

No hay problema Raangar, fijate que te pregunté el 24...