Partida Rol por web

Egipto Oscuro

Los últimos días de Tch'moar (PRELUDIO)

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25/01/2008, 21:13
Director

Corres todo lo que tus piernas y tus pulmones permiten. La lluvia ha parado, pero la pendiente por la que ahora asciendes está embarrada y resulta resbaladiza. Los ruidos animales son inexistentes aquí, sólo te oyes a ti mismo mientras jadeas cuesta arriba. Esta es la montaña, pero las montañas son grandes y no sabes lo que buscas. Para colmo de males la noche comienza a echársete encima tras todo un día de marcha forzada sin nada real que te empuje a hacerlo. Pero la huída se vuelve tu máxima preocupación nuevamente cuando escuchas lejos, a tu espalda, el potente crujido de una rama entre los árboles.

Notas de juego

Dos éxitos. Si tuvieras las especialidad en atletismo en correr sería un éxito doble. Una lástima que no sea así :-P

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26/01/2008, 12:12
Tch'moar

El brujo hace un esfuerzo sobrehumano para seguir corriendo, su vida depende de ello. El aire es fuego en su garganta; su piel, agujas envenenadas; sus pies, piedras que arden, se derriten bajo el sol. Sube, dejándose las uñas para trepar, las pinturas desdibujadas acentúan el rostro de la desesperación. Pero Tch'moar no se rinde, ni ante el jaguar, la fiebre, Chidubem ni el Mokele Mbembe.

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26/01/2008, 19:12
Director

El ruido a tu espalda crece en intensidad, las ramas se parten en rápida sucesión y puedes sentir el movimiento cada vez más cercano. Trepas y corres todo lo rápido que puedes, todo lo que te deja tu exhausto cuerpo. La ventaja que le llevas al Mokele Mbembe se acorta, pero su enorme tamaño le dificulta el paso entre los árboles.

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27/01/2008, 13:34
Tch'moar

Consciente de ese hecho, Tch'moar intentar avanzar por lugares estrechos, por donde ve los árboles más juntos, trepando por zonas que pueden venirse abajo con alguien más pesado, sin descanso.

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27/01/2008, 23:44
Director

A pesar de tu estratagema el monstruo sigue acercándose, limando esa distancia que os separa, acortando el espacio que queda entre tú y sus mandíbulas. Sus pisadas hacen retumbar el suelo, su movimiento lo percibes a tu espalda como si lo estuvieras mirando, su resuello casi lo sientes en la nuca. Corres. Corres con la desesperación de quien lo hace para salvar su vida... Y de repente no hay ruido a tu espalda. Nada. Tus pulmones y garganta queman como si hubieras bebido algo en llamas tus piernas tiemblan de la tensión y amenazan con hacerte venir abajo al próximo segundo, incluso te cuesta centrar la visión...

Y por fin ves qué podría haber originado el cambio:

esto se alza ante ti.

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28/01/2008, 20:50
Tch'moar

El brujo se desploma entre las ruinas, exhausto, y asiste incrédulo a la desaparición del monstruo. Las ideas le invaden como confusas fantasías que le parecen lejanas, de otra persona, de alguien que vive allí lejos, en el mundo de los vivos, preocupándose por su carne, su sangre, sus huesos, como él hizo hace eones. El poder de las ruinas le ha ahuyentado. Evita los poblados, las aglomeraciones de hombres, podrían con él. No es eso, se ha rendido, moar gana, es el más fuerte. Se aleja cada vez más, ve el que una vez fue su cuerpo, tumbado, la cara en el suelo, la respiración que se hace más pausada. Ha alcanzado el límite, el sueño le invade, le apresa, lo deja indefenso. No hay nada que pueda hacer.

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28/01/2008, 23:02
Director

Caes entre las raices de un árbol crecido entre las ruinas de piedra. Sientes, ahora ya libre de la amenaza sobre tu vida, cómo el cansancio de tu cuerpo exhausto se abate sobre ti, sientes el escozor de numerosas heridas producidas por las rocas y las ramas rotas en tu enloquecida huída. La sangre fluye por tu costado, manando en una cantidad peligrosa, pero te resulta imposible hacer algo más que apretar la mano contra la herida para parar la hemorragia y aún esto te cuesta un gran esfuerzo. La consciencia se desvanece.

Notas de juego

Tu personaje se debate entre la vida y la muerte y está ahora perdido en el limbo entre la una y la otra. ¿Cuáles son los pensamientos de Tch'moar?

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29/01/2008, 10:07
Tch'moar

El brujo flota en calma, ajeno a todo dolor, las punzadas resuenan lejanas como una tormenta que se aleja. Puede ver con los ojos del bosque, una oruga devora una hoja con desesperación, una criatura que, aunque ciega, sabe que sobrevivir lo es todo. La serpiente que muda la piel, nerviosa, con prisa, pues mientras lo hace está indefensa. Tch'moar comprende el mensaje de la madre selva, que es el de sus ancestros, pues moran bajo tierra, son parte de ella, los devora, roe sus huesos como hace él con sus enemigos. Aunque atraído por el pútrido aliento de la oscuridad, aparta los fríos dedos de la muerte y se aferra a su cuerpo, aún le queda algo de calor. El dolor vuelve, abre los ojos. Tch'moar no morirá hoy.

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29/01/2008, 23:42
Adraa

- Resulta irónico que te devuelva a la vida un dios de la muerte, ¿verdad? dice en tu lengua alguien claramente ajeno a ella, con voz profunda y rasposa, a tus espaldas.

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30/01/2008, 11:45
Tch'moar

¿Devolverme a la vida?

Tch'moar responde antes de girarse lentamente, dolorido.

- He sido yo quien ha vuelto, sin ayuda de nadie. La jungla me ha dado fuerzas, inspiración, los espíritus no me esperaban todavía, es pronto para mi.

Cuando finalmente observa a su interlocutor, está demasiado cansado para asustarse, aunque se siente intranquilo ante el extraño personaje, diferente a todo lo que ha visto. ¿Pinturas? Sin saber qué esperar de él, no dice nada más. Si es un enemigo, no podré hacer nada. Mi cuerpo está rígido como la corteza del árbol de piedra.

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30/01/2008, 23:52
Adraa

- Te equivocas, brujo, observa tus heridas. ¿Las ves? Ni tan siquiera queda una miserable cicatriz. ¿Te ha curado la selva, tus espíritus o más bien la sangre que yo te he procurado? Bueno, pronto amanecerá y yo debo retirarme, al igual que tú me hayo débil, debo descansar. En cualquier caso, tienes mi gratitud... dice el extraño ser, cruzado de brazos, comenzando ahora su movimiento hacia el interior de las ruinas. Su aspecto, aunque inhumano, o tal vez por serlo, inspira reverencia.

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31/01/2008, 10:30
Tch'moar

Tch'moar observa su costado; la herida, en efecto, ha desaparecido.

- Por fuerza ha tenido que ser la jungla, ningún hombre podría haberlo hecho. Ningún ungüento que yo conozca. ¡La jungla cuida a sus hijos! ¡Y a los que saben escucharla por encima de todo! He sido recompensado.

Sus palabras suenan vacías conforme la figura se aleja.

- ¿Que tengo su gratitud?

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31/01/2008, 23:55
Adraa

- Así es, mi gratitud, pues aunque mis sueños os hayan guiado hasta mi, mi letargo no hubiera acabado sin el estímulo de tu sangre. Como dije, ahora debes decidir, vivir para siempre o morir definitivamente. El sol está a punto de salir y si no te refugias, si no crees en mi, será tu fin. Todo lo que te he dicho es cierto, aunque no puedas comprenderlo por completo. Dice el ser con su voz de ultratumba pero hablando de la muerte y de la vida sin el menor atisbo de emoción.

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01/02/2008, 09:56
Tch'moar

- ¿Afirmáis ser un espíritu de la muerte que ha cobrado forma humana?

A medio camino entre la incredulidad y el miedo, el brujo mira al cielo, donde el sol comienza a devorar estrellas. Quizá sea él el instrumento de la madre jungla para salvarme, ¿pero por qué me condenaría ella a olvidar la luz del sol?

Casi sin darse cuenta acompaña al espectro a las ruinas, pero sin llegar a entrar.

- Responded, ¿por qué me convertiría ella en una criatura de la noche? ¿La permanente oscuridad me ayudará a guiar a los muertos en su viaje? ¿Ha elegido mostrarme el negro camino de los sin-aliento?

Permanece cubierto por las rocas, pero deja un brazo fuera, expuesto a la luz. Debe comprobarlo.

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02/02/2008, 14:46
Adraa

- Para ser un brujo Lugbara tu capacidad de tener fe resulta bastante limitada... No soy un dios encarnado, soy un hombre hecho dios hace mucho, mucho tiempo. Vosotros me conocéis como Adraa, dios de la muerte. Hoy ya estás muerto, mañana comenzarás a comprender tu naturaleza, con el tiempo entenderás la muerte y si dejas de desafiarme con tu incredulidad, yo guiaré tus pasos dice el ser de espaldas, todavía caminando lentamente entre las ruinas cubiertas con restos de techos y grandes cantidades de vegetación. Y ahora, justo ahora, creerás... En el mismo momento en que pronuncia la última palabra, el sol alcanza tu brazo. Con el instinto de quien es quemado, retiras a toda prisa tu brazo de la zona expuesta al sol mientras notas que algo bestial y primario se adueña de ti, induciéndote terror y haciéndote agachar hacia la sombra de las ruinas. Aullas de dolor. La sola caricia de un instante de sol al amanecer ha quemado tu piel expuesta a la luz.

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02/02/2008, 15:27
Tch'moar

Tch'moar asiste con asombro al efecto del sol en su piel y se encuentra a si mismo huyendo de él, buscando refugio en la negrura absoluta de las ruinas. Ahora soy una criatura de la oscuridad. Lo he sido siempre, acabo de despertar.

Conmocionado por la noticia, no advierte que cierra el puño calcinado con fuerza, atravesando su carne con las uñas, goteando sangre en el suelo invisible. Acompaña al dios de la muerte, pensativo, excitado por su nueva vida. He vencido la muerte. No podía ser de otro modo. Ha nacido un nuevo dios.

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02/02/2008, 23:09
Director

Adraa te concede un lugar donde dormir este día, resguardado de los mortíferos rayos solares. Acurrucado entre las piedras, imaginas la magnificencia que este lugar debió tener una vez. Es algo mucho más grande que una cabaña y construido en piedra como si de una montaña se tratase. El mero concepto resulta casi antinatural, ajeno a la selva. Y no obstante aquí está, el templo/palacio y él, Adraa.

Para tu sorpresa no tardas en caer dormido y al despertar ha llegado la noche. Adraa todavía duerme un sueño sin sueños, yaciendo en el suelo muerto, sin respirar.

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03/02/2008, 12:48
Tch'moar

Tch'moar sale y observa las estrellas, sorprendido por los sutiles aromas que ahora percibe, los colores más vivos, los sonidos imperceptibles. Ahora escucho mejor las palabras de la jungla, y el cielo nocturno siempre ha tenido más que ofrecer al observador curioso.

Espera el despertar de Adraa con paciencia, tratando de imaginar qué le depara la noche eterna.

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04/02/2008, 00:22
Adraa

Adraa despierta y se alza calmadamente, sin prestar atención a sus alrededores. Cuando te alcanza con la vista viene hacia ti pausadamente, sin prisa alguna. Al llegar a tu altura comenta:

- ¿Ya te has puesto en paz con tu amada selva? ¿Estás dispuesto a saber la verdad de los nuestros, el principio de la muerte en vida?

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04/02/2008, 14:00
Tch'moar

El brujo asiente y, sin decir nada, escucha lo que el espectro tenga que contarle.