Partida Rol por web

- Un poco pronto para empezar a hablar de asesino en serie, ¿no crees, Monteros? - Gutierrez llevaba años en el cuerpo y había visto expedientes de los pocos casos conocidos que había habido en España pero, para él, eso eran cosas de yanquis y de películas.

Sacó su libreta y repasó las notas que tenía para empezar a enumerar las cuestiones pendientes.

- Tenemos que esperar el informe de los forenses, localizar al exmarido que vive aquí, localizar al exmarido que vive fuera, que el secretario nos dé información de los clientes, ver si el cerrajas abre la caja fuerte y si los gallegos pueden darnos algo más de información sobre la otra Adelaida. ¿Me dejo algo?

- Creo que como resumen está bastante currado, Gutierrez... - completó. - Y sí... estoy de acuerdo en que aunque todo esto huele a mierda, empezar a pensar en asesinos en serie nos es un buen comienzo. Si esto se queda aquí, la opción más probable es la de una venganza. Es más, ahora mismo me decanto más por esa teoría que el hecho de que alguien esté matando videntes anónimos... en serie.

Gustavo había anotado como un decálogo todo lo que su compañero había enumerado. Efectivamente había trabajo por delante... lo cual era algo bueno. Los muros de ladrillos en una investigación solían exasperar al más paciente:

- Ex-marido de fuera... ex-marido de aquí... la otra Adelaida... secretario... ¿seguimos con la estrategia de las parejas? Nosotros podemos ocuparnos de hacer algunas llamadas y tratar de hablar con el ex de Francia y, ya que estamos enganchados al teléfono, intentar hablar con el Registro Civil de A Coruña a ver qué sacamos por ahí. Eso os dejaría a vosotros con el ex de Madrid y el interrogatorio con el secretario. Porque todo el tema de la científica... me temo que ahí vamos al rebufo.

-También podríamos llamar al canal de TV donde trabajaba, para ver cuando comenzó su contrato y como es que decidieron tomarla para su programación. Esto nos puede acercar más a la fecha en la cual ella empezó su vida pública como vidente.

>>Sigamos con los equipos, creo que así adelantaremos trabajo sin despistarnos demasiado, que si me dejan, mi imaginación vuela, jajajaja.

Los detectives revisaron la documentación que sus compañeros de la oficina habían dejado para ellos para ver si alguno de los puntos estaba resuelto. El forense todavía no había terminado su análisis pero había dejado una nota indicando que mañana por la mañana tendría el informe completo. Esperaba que comenzaran la jornada en la sala de autopsias para ponerlos al día de todo y responder las posibles preguntas que surgieran.

La caja fuerte no había sido ningún problema y las pruebas estaban ya en la sala de custodia. Antes de retirarse el equipo decidió echar un ojo a lo que había allí. Y entonces la madeja se enredó un poco más, aunque la vertiente rusa empezaba a tomar fuerza.

Había tres pasaportes. Uno español a nombre de la víctima, otro ruso con un nombre distinto: Valeria Iztigova. Otro brasileño con nombre de Victoria Abrente. Los tres con fotos recientes de la víctima.

Aparte de eso un sobre con 12000 euros en metálico, en billetes de 100 y 50.

También constaba una carpeta de cartón llena de documentos y fotos . Eran informes exhaustivos de movimientos de políticos y gente famosa, incluyendo fotos que parecían hechas por algún detective, desde la distancia. 

Por último en una bolsita había un anillo.  La verdad es que no era nada del otro mundo: parecía un anillo de latón, con un enorme círculo en su superficie en el que se había tallado burdamente una especie de ojo. Resultaba curioso porque no tenía mucho sentido guardar una baratija así en un sitio tan protegido.

Los hallazgos de la caja fuerte agriaron un poco el humor de Patricia.

-Buf, con lo que nos está costando encontrar información sobre la identidad de Adela, ahora nos toca investigar otras dos más. Esperemos que estas no estén tan camufladas como la de nuestra víctima o nos vamos a perder en la tortuosa burocracia de rastrear y rastrear documentos.

Mientras hablaba, la detective intentó googlear ambos nombres sin mucha esperanza.

-Está claro que la "astróloga" se documentaba muy bien para hacer sus cartas astrales -dijo señalando la carpeta con la data de los famosos. Sin aguardar a que algún otro respondiera, señaló el punto de la baratija y se lo tendió a Bastida.

-Mónica ¿te dice algo el símbolo del anillo?

Gutierrez silbó cuando vio el sobre con la pasta y respondió a Monteros mientras cogía uno de los pasaportes que tenían dentro de una bolsita de plástico para evitar contaminación cruzada y lo levantaba.

- Joder, esto al menos nos da algo con lo que trabajar. Esto sí nos puede llevar a encontrar quién hizo este trabajito y seguir tirando de ahí. Y todo esto...

Empezó a revisar las fotos, agarrando un guante de latex, sin llegar a ponerselo, para ir pasando los documentos. Gutierrez había aprendido por las malas que los tiempos cambiaban y los procedimientos se actualizaban y, aunque no le hiciera gracia, sabía que tenía que tragar.

- Esto también nos puede llevar a quién hizo las fotos. Quizá desde dónde y cuándo fueron sacadas y encontrar al paparazzi...

-Bueno, no sé ustedes, pero a mí la cabeza no me da más. Creo que es hora de ir a casa a descansar y buscar ideas en la almohada. Hasta mañana compañeros!

Patricia con expresión cansada pero aún risueña, juntó sus pertenencias y abandonó la comisaría para ir a su pequeño piso en La Latina para cenar y tomar un buen descanso que le sirviera para encarar la jornada del día siguiente.

Patricia había dicho lo que todos pensaban: era tarde y tocaba recogerse. Mañana sería otro día...