Uno de los del CSI se acercó a los dos agentes con los resultados.
- No hubo suerte pareja. No creo que querráis incluir esto en el expediente, porque la huella es del jefe. No sé como alguien tan curtido como Robledo ha podido meter la zarpa tocando un escenario de crimen, pero no creo que le haga gracia que dejemos por escrito su marrón. ¿No? Yo no tengo inconveniente en borrar la información del ordenador, pero tampoco quiero pasarme de listo... vosotros diréis.
El agente entregó la hoja a sus compañeros. Efectivamente la ficha de la huella coincidía con Roberto Robledo sin ninguna duda.
Está mal en el título, luego lo corrijo.
Gutierrez frunció el ceño cuando el técnico comenzó a explicarles la situación y simplemente meneó la cabeza cuando reveló que Robledo había metido la pata en aquel museo.
- No, mejor dejemoslo fuera de la investigación. - respondió al técnico mirando a Monteros, esperando que ella también pensara de esa forma. - Era tarde y todos metemos la pata alguna vez bajo el estrés.
Espero a que su compañera diera su opinión al respecto antes de repasara las opciones que les quedaban para seguir con la investigación.
-¿Huella? ¿Cuando recogimos una huella? -Patricia le guiñó el ojo al oficial que les había traído el resultado, sumándose a la opinión de su compañero. Mejor dejar fuera de la investigación al jefe, aunque por dentro se sentía inquieta. Aguardó a que se retirara el CSI para exponerle a Gutierrez lo que le rondaba por la cabeza.
-Bueno, parece que hemos dado con otro callejón sin salida. Eso si es que Robledo no es tan ajeno a lo que había en el sótano de Bragante como nos ha dicho -se frotó los ojos, cansada. Las pocas horas de sueño de la noche anterior le estaban pasando factura.
-No es por ser pájaro de mal agüero, pero me temo que las ramificaciones políticas y de poder que vamos a toparnos en esta investigación, es mucho más grande de lo que imaginamos. Desde la mafia rusa hasta una productora de contenido de TV que tenía un pequeño museo del horror en su apartamento, pasando por la tarotista que leía los astros para los ricos y famosos... Y aún no podemos conectar las muertes con las víctimas, mucho menos hacer un perfil de su asesino. ¿Cómo seguimos compañero? Estoy muy desanimada como para que se me ocurra algo.
Mil perdones por la tardanza, la verdad es que me olvidé que tenía que postear u.u''
Ambos detectives estaban frustados, en otro callejón sin salida.
¿Cómo les iría la investigación a los demás?
Estamos resolviendo otras escenas. En cuanto pueda me pongo de nuevo con vosotros. Si queréis hacer algo tenéis plena libertad.
Perfecto! yo ando complicada hasta medidados de septiembre (puedo ir posteando de a ratos, pero no diario) por exámenes, capacitaciones laborales y otro tanto de tareas extra que se han agregado a mi trabajo diario que me dejan el cerebro frito, así que por el momento espero (o lo sigo a Mc donde Gutierrez quiera ir :D)
Perfecto, pues esperamos a que todos nos cuadremos cronológicamente.
Ambos detectives salieron de la propiedad con la intención de regresar al centro. Mientras subían en el coche y arrancaban Patricia recibió una llamada de la central:
- Tenemos las cintas.- le dijo uno de los de criminalística - ¿Queréis que esperemos por vosotros o vamos haciendo un visionado preliminar? ¿Sabéis cual fue el lío? ¡Que las pidió el jefe en persona! Y no nos dijo nada. Imaginaos nuestra cara cuando los del juzgado vinieron a traérnoslas porque no daban con él. Joder, sí que debe ser un tema importante cuando Robledo se pone con el papeleo de forma directa. Aunque cuando lo veáis podíais decirle que si nos avisaba primero sería menos lío.
Venga, le damos. Ya os tengo más o menos coordinados y el grupo que no está lo llevo en modo PNJ si hace falta.
El rostro de Patricia se transformó. De la total derrota que exhibían sus rasgos ante la dificultad para conseguir pistas que no se cortaran dos pasos más adelante, pasó a la euforia y la impaciencia y la bronca y la euforia otra vez en apenas unos instantes.
-Este hombre... vaya, no se lo puede dejar solo! Pero bueno Cervantes, pon las manos en la masa, no vamos a esperar llegar a la central para que nos pongas al día. Bastante demorados estamos con el tema como para hacer la pantomima de la burocracia que adorna nuestro departamento... Aguarda un momento, te pongo en altavoz para que Gutierrez también escuche. Porque irás relatándonos lo que vas encontrando, vale?
Mientras activaba el modo para que su compañero pudiera escuchar, la detective susurró cuatro palabras para ponerlo en tema.
-Listo, ya estamos los dos por aquí. Suelta lo que tengas... ¿qué muestran las grabaciones de las cámaras de seguridad?
- Estamos revisando las cintas desde el momento en que la víctima llegó a la casa, pasándolas a velocidad rápida. Debería... ¡Ahí! ¡Captamos un movimiento fuera, en los setos! ¡Páralo Ramón! Ahora, dale poco a poco. Ahí está... venga capullo, asómate. ¡Lo tenemos! ¿Pero qué..
Hubo un silencio en la línea. Por un momento Patricia y Angel pensaron que se había cortado la comunicación.
- Joder. ¡Hay un puto salto! ¿Cómo coño va a haber un salto en una grabación digital? ¿Se ha borrado un trozo del fichero o qué? Me voy a cagar en todo lo sagrado. Pero tenemos una imagen del sospechoso. Está embozado y no se ven sus rasgos pero tenemos algo. Lo que no sé es que pollas ha pasado después, es mejor que vengáis cuanto antes y lo reviséis con nosotros. Voy a mirar que pasa con el fichero. Tiene que haber una copia adicional en los servidores, esto ha progresado mucho con internet y los servidores dedicados. No me va a joder ese cabrón ¡tenemos algo! ¡por fin!
- Vamos para allá cagando leches. - respondió Gutierrez pisando el acelerador hasta el límite permitido, lo último que quería era un munillo echándoles el alto por pasarse de la velocidad permita.
Joder, ya podía ser como en las películas yankees, sacar la luz al techo y cruzar Madrid a toda ostia.
- Aunque tenga un salto la grabación, podremos ver por donde entro en la casa y desde qué dirección y hacer el camino a la contra, quizá encontremos donde aparcó o similar. - dijo a Monteros mientras se concentraba en el tráfico.
*NpP: munillo se suele llamar a la Policía Municipal. Aquí es un lío porque tenemos Municipales (nivel local), Policia Nacional (nivel nacional), Guardia Civil (nivel nacional) y luego algunas regiones que se consideran históricas en la Constitución pueden tener su propia policia autonómica.
Un poco más tarde ya entraban ambos en la comisaría directos a la sala de investigación. Allí sus compañeros de la científica tenían un monitor de gran tamaño en el que había una imagen congelada. En otros dos pasaban un bucle que analizaban con detenimiento.
- ¡Por fin tenemos algo joder! Empezaba a pensar que sólo estaríamos viendo humo y espejos todo el rato.- Lucas Reinosa, el jefe de criminalística estaba exultante - Éste es el cabrón que buscamos.
La imagen mostraba a un individuo que rondaba el metro setenta. No parecía excesivamente corpulento, más bien lo contrario. Vestía una gabardina que lo cubría casi completamente, guantes, un pasamontañas con gafas de sol y un sombrero. No era gran cosa pero era algo.
- Algo pasó con el disco de la casa pero había una copia en el servidor de la empresa. Las cámaras actuales más caras emiten en tiempo real y se graban en servidores remotos. Aquí lo tenéis en todo su esplendor.
Vieron como el individuo se acercaba a la casa. Parecía arrastrar el pie derecho y cojeaba ostensiblemente. No parecía un individuo demasiado ágil ni fuerte. Ni siquiera podían estar seguros, tal como se pertrechaba, de si era un hombre o mujer, aunque la constitución parecía apuntar a lo primero.
- Ahora viene lo raro.- dojo Lucas - Mirad lo que hace.
El tipo se detuvo unos metros antes de la casa. Movía sus manos de una manera extraña, como un director de orquesta.
- ¿Qué puñetas estará haciendo? - dijo otro de los presentes - Es como si estuviese escuchando música ¿o qué?
Efectivamente se movía como si escuchase algún tipo de melodía invisible, con un ritmo muy acompasado. De pronto la cámara falló. Se desenfocó ligeramente por un fallo del sistema daba la sensación de que el tipo era traslúcido. Luego se detuvo en su danza y la cámara se reenfocó. El sospechoso avanzó hacia la casa, hasta entrar.
- Ahora se pasa dentro un rato. No hay cámaras en el interior. No hay sonido. Solo podemos intuir que durante el tiempo que está dentro, unos diecisiete minutos, reduce a la víctima.
Le dieron al botón de avance. Efectivamente 17 minutos después el sospechoso salía hacia los matorrales, se perdía entre ellos y regresaba de nuevo con un viejo maletín que recordaba a esos maletines de médicos del siglo XIX, aparatoso y negro.
- Creemos que ahí lleva todas las herramientas.- confirmó Lucas torciendo la boca.
Cuando desaparece en la casa Luca vuelve a darle hacia adelante. Cuarenta minutos. Tardó cuarenta minutos en abrir en canal a su víctima, separar el esternón y arrancarle el corazón. Por supuesto eso no se ve en la cinta, pero se intuye. Luego el tipo sale de nuevo y se va, cojeando, con su maletín negro por donde vino.
- Se lleva el corazón de la víctima en el maletín. Eso está claro, no está en la escena. Un tipo pulcro. ¿Lo veis? Ni una mancha de sangre en la ropa, ni en el maletín. Y ahora viene lo más raro.
El tipo se detiene en el umbral de los setos. Y se gira para la cámara. Mira directamente a la cámara a través de sus gafas de sol antes de girarse y perderse entre la oscuridad como un fantasma. Ese instante, esos segundos de mirada fija, Patricia y Angel podrían pensar que los miraba a ellos directamente.
- Sabe que la cámara está ahí. Sabe que lo vamos a ver.- dice Lucas - Pero le importa una mierda. Se está volviendo confiado. Y ahí es donde siempre la cagan. - señala con el dedo la pantalla - Se cree muy listo y empezará a cometer errores.
Lo que no queréis pensar ninguno de los dos es que para cometer errores debería volver a matar.
Tras pasar unos cuantos semáforos en rojo y soportar los bocinazos de los conductores que debían darles paso o Gutierrez se los llevaría puestos, ambos detectives alcanzaron la delegación.
-Buf, vaya carrerilla... Menos mal que no había demasiado tráfico -Patricia aún intentaba serenar su corazón, la temeridad de su compañero al volante la había alterado bastante. Sin embargo, apenas entraron a la sala donde la científica revisaba la cinta, Monteros sintió que todo el riesgo había valido la pena.
-¡Jodido cabrón! -no podía creer la impunidad con la que el asesino (estaba convencida de que era un "el") había entrado a la casa como si tal cosa y había reducido a Marina sin encontrar resistencia. Apenas prestó atención a los movimientos rituales, aunque más tarde, esos signos volverían a ocupar su conciencia, cuando hiciera un repaso de la jornada.
-No le importa nada... sabe que toda la casa está monitoreada y sin embargo no hace esfuerzos por ocultar... ¡Hijo de puta! ¡Nos está provocando! -Patricia sintió que el asesino se burlaba de la policía. No, de la policía no, de ella y de Angel, como si supiera que ellos dos serían quienes descubrirían su rostro en una cinta.
En ese momento, sintió su móvil vibrar. Al ver el mensaje de whatsapp, respondió de inmediato, antes de que la imagen que les estaba enviando Montalbano terminara de descargarse.
-Montalbano y Jurado también lo tienen... Esto me parece demasiada suerte... Corroboremos si es el mismo tipo -Monteros amplió la foto y la acercó al monitor, donde la imagen congelada del sádico carnicero los miraba socarronamente.
Se ve si se trata del mismo tipo?
- Ya te tenemos, hijo puta... - masculló Gutierrez cuando fijaron la imagen.
No era demasiado pero al menos podían empezar a acotar los sospechosos por la altura o la masa corporal y eso era algo con lo que sí podía trabajar.
No hizo caso al movil cuando sonó, absorto como estaba a la imagen del cabronazo, cuando Monteros explicó el mensaje y sacó su propio móvil para comprobarlo.
- ¡Dile que se espere, joder! - exclamó sin comprender como iba a empezar a publicar el sospechoso por toda la ciudad. - Está Robledo como para que se airee más estas mierdas, que parece nuevo...
Patricia llamó a Jurado pero le daba comunicando. Cuando por fin habló con él le dijo que ya estaban en la comisaría y que Montalbano estaba poniendo en marcha la nueva investigación. Suspirando resignada Patricia sólo pudo insistir que se pasaran por allí.
- Ahora va para ahí Montalbano. - le dijo Jurado - Yo me quedo aquí con el papeleo... Robledo no aparece por ningún lado, no saben donde está, y la persona a cargo se está cagando en todo con la que está cayendo. Mantenedme informado1.
Un poco más tarde Montalbano entraba como un torbellino en la sala de criminalística. Llevaban días dando palos de ciego y de pronto ¿tenían dos sospechosos de dos casos?
[1] Me temo que Surendil se nos ha caído de la partida. Vamos quedando menos... bueno, así se hace más manejable :P