Partida Rol por web

El hombre del traje gris

Siempre hay un lugar llamado hogar

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15/01/2010, 21:04
Director

Minutos más tarde la furgoneta se encaminaba hacia el centro de Madrid. Delante, sentado en el poco espacio que dejaba el Tobías pese a haber tres plazas, iba Elías. Atrás, tumbado entre unos colchones viejos de trapero, estaba Domingo, cuidado por la Maca. Completaban el equipaje Agustín y William, que había permanecido en silencio durante todo el tiempo. El extranjero parecía haber recobrado su calma y se dedicaba a juguetear con un pitillo que no daba encendido. 

Tobías rompió el silencio de los diez primeros minutos:

- Pa' onde os llevo chavales?- preguntó sin apartar su mirada de la carretera.

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18/01/2010, 13:11
Elías Bonabre

-A Carabanchel, por favor, al Hospital Militar. Queda por Vista Alegre – se apresuró a responder. Les presentó el perfil a los de atrás y aclaró: - Ahí atienden urgencias y vamos a quedar todos cerca de casa.

“Por lo menos yo”, remató para sí. Clavó la vista en la noche, sintiéndose un pringao, lo que le había llamado El Cuchara. Apenas se había demorado para intercambiar unas palabras que no comprometían a nada antes de reunirse con los otros náufragos (“Aquí vamos, zafándonos del maëlstrom en una balsa providencial”), pero lo suficiente para recordar hasta qué punto un hombre como aquel podía haberle pillado el truco a la vida, las verdades descarnadas que había podido alumbrar por sí mismo. No había teatrales ínfulas capaces de resistir esa crudeza.

-Te vas a poner bien, Domingo –comentó. –Tenemos que descansar, estar frescos para mañana, para encontrarnos con… con ese… lo que sea. ¿Dónde vas a pasar la noche, Cornellius? Perdoname, pero no puedo ofrecerte hospedaje, no quiero seguir alarmando en casa.

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18/01/2010, 18:15
William Cornellius

- No te preocupes, me puedo buscar la vida en cuanto estemos en la ciudad.- contestó William sin dejar de jugar con su cigarro apagado - A mi también me vendrá bien descansar. Podemos quedar por la mañana en algún sitio ¿no? ¿Tenéis pensado ir al encuentro con vuestro amigo el mago?

Hablaba mirando de reojo a Tobías a través del retrovisor. Sin embargo el enorme gitano conducía en silencio tomando la desviación hacia Carabanchel. Parecía improbable que entendiera lo que decía el extranjero siquiera.

- Si vais a encontraros con él me gustaría quedar antes con vosotros. Informaré esta noche a Cesar y podré deciros si os prestará o no su ayuda.

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18/01/2010, 21:13
Domingo Torres

Sonrió al argentino levantando el pulgar en señal positiva.

—Tranquilo, no cuento con que esto vaya a acabar conmigo —dijo sonriendo.

Un nuevo gesto de dolor velado detuvo unos instantes las palabras del policía.

—William, si necesitas un lugar donde pasar la noche puedes quedarte en mi casa. Mañana seguiremos con lo previsto, al menos por mi parte.

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19/01/2010, 03:49
Agustín Morales Sierra

Ayudo ante el pedido de la Maca, a subir a Domingo a la camioneta sin problemas.

-Supongo que Macarena no tendra en problema en que me quede a dormir en su casa nuevamente, no?

Dijo subiendose los lentes a la cabeza y mirando a la Maca

-Dime William por lo que he visto que esas criaturas pueden vagar por nuestro mundo como nosotros por el suyo, pero nosotros fuimos llevados al suyo, ¿significa que alguien se encarga de traer esas cosas? ¿con que propósito? ¿el que las invoca, ¿puede controlarlas a su gusto? no me parecen seres muy diplomáticos precisamente

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19/01/2010, 13:10
William Cornellius

- No es que nadie las traiga... Nosotros...- se paró un momento, quizás intentando buscar la respuesta - Es todo bastante más complicado... No es que haya varios mundos: son el mismo, sólo que nosotros sólo vemos parte de él. Ellos lo pueden ver todo y así escoger... Hum... ¿Cómo decirlo? Así escogen manifestarse en nuestra existencia. No estaríamos a salvo si no fuera precisamente porque nuestros carceleros nos mantienen en la ignorancia y eso nos protege.

Desistió de dar una explicación más concreta. Finalmente, rindiéndose, añadió:

- ¿Sabes el viejo dicho 'bendita ignorancia'? Pues es del todo cierto...- volviéndose hacia el policía añadió - Si puedo dormir en tu casa lo prefiero. No conozco la ciudad y cuanto menos tiempo pierda vagando sin rumbo mejor.

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19/01/2010, 13:13
Director

La furgoneta se detuvo en frente al parking del Hospital Militar. Tobías esperó a que todos bajaran y con su habitual mutismo se despidió levantando una mano.

El vehículo desapareció por las venas de la noche dejando al grupo en aquel parking.

Notas de juego

¿A dónde va cada uno? William irá con Domingo.

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19/01/2010, 22:54
Macarena

-Domingo, si William se queda contigo, ¿vas a necesitar que te acompañemos? ¿Estás bien de verdad? Es que si entramos todos en el Hospital igual llamamos mucho la atención...

La Maca se miró a sí misma, mostrándose a los demás abriendo los brazos. Aunque no habría hecho falta: Sucia, con la ropa hecha girones, y manchurreada de sangre, como manchurreada de maquillaje corrido por las lágrimas y la lluvia su cara. Era un poema. Tampoco los hombres estaban mucho mejor, pero en ella el estropicio se notaba más.

-Agustín se viene a mi casa, claro, como ayer. Y te pregunto, Domingo, porque si no te importa, nos vamos ya largando. Pero que tú dices, ¿eh?, que no quiero ahora dejarte sin más...

Y su mirada ladeada rozó al inglés, a quien ella no acababa de ver trigo limpio. Claro que ya no se fiaba gota de su propio instinto. Porque... quién habría pensado que Richi...?

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20/01/2010, 13:19
Elías Bonabre

Si bien era muy mirado para esos detalles, no había enfatizado su despedida del conductor, porque se encontraba meditando, motivado por el diálogo entre Agustín y Cornellius, en qué clase de compartimento estanco de la creación había sido confinado el género humano.

Cuando los demás se hubieron repartido los papeles entre anfitriones y huéspedes, ya sólo cabía separarse. Elías se sorprendió entonces mirando a Macarena, quien se exhibía bajo las luces despiadadas de la ciudad, y preguntándose si estaría destinada a ser algo más que un polizón en aquella aventura, considerando aquella anotación del diario de Exiquio que tenía grabada a fuego en su propia mente: “Se la han llevado. Todos creen que ha muerto en el parto pero yo sé que se la han llevado.”

Claro que, ahora que caía, ¿podría haber estado refiriéndose el Gallego a su esposa?

-Estoy con Macarena –suspiró por fin. -Además, no puedo con mi alma, mis días primaverales se fueron hace mucho. Me voy a mi casa. –Empezó a darse la vuelta. La calle de la Oca, en donde vivía, se encontraba a un tiro de piedra de Aquiles, y añadió: -¿Qué les parece si nos juntamos mañana en La Perdida, tipo diez, para ir preparando nuestra estrategia? Ah, y por dios, Domingo, no nos falles. Eres nuestro héroe.

No había sombra de ironía en este último comentario. El hombre echó a andar por las aceras refulgentes con su traje anticuado, los brazos y las piernas acompasados, y la cabeza un poco gacha.

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25/01/2010, 14:47
Domingo Torres

Una amarga sonrisa se dibujó en la cara del policía. "Eres nuestro héroe", decía el argentino y el viejo Domingo sonreia intentando averiguar si eso realmente era algo bueno.

Dirigió la mirada hacia "La Maca" y asintió.

—Estaré bien, no os preocupéis. Un par de costuras por aquí y otro par por allá y listo —dijo mientras se observaba las heridas.

—Mañana nos vemos —concluyó mientras alzaba la mano despidiendose del grupo y comenzaba a caminar hacia el hospital.

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25/01/2010, 16:46
Director

Y así, repartiéndose lo que quedaba de noche, el grupo se separó con la intención de reencontrarse al día siguiente en la Perdida y preparar su encuentro - o quizás su desencuentro - con el misterioso Holandés errante...

Notas de juego

Continuamos en Gulliver.