Partida Rol por web

En cuanto aparece la niebla negra me pongo en tensión, retrocedo dos pasos y me pongo en guardia, mientras busco con los ojos algún arma que poder utilizar para la batalla.

Sin embargo, de aquel negro vaho vuelve Lylian de entre los muertos y doy un pequeño salto para atrás.

"¡Cago'n la puta!"

Exclamo, sobresaltado. Miro a unos y otros y nadie parece especialmente sobresaltado, ni siquiera Vael parece alerta y entonces decido relajarme y suspirar, dejando escapar el aire de mis pulmones pesadamente, cuando mis oídos perciben la pregunta que la recién regresada me formula, entonces mi sonrisa se amplía casi como la de un lobo, era una pregunta que no me dejaba ninguna duda.

"Seguir luchando hasta que te sangren los nudillos, hasta que no puedan contener el aire en tus pulmones, hasta que el destino te envuelva en su tela para arrastrarte. Y entonces: levantarte y seguir luchando. Aunque parece que eres una experta en eso. Me alegra tenerte de vuelta con nosotros."

Miro alrededor y escucho todo lo que dicen mis compañeros, y entonces mi mirada va desde Ithan hasta Zoar y de nuevo de vuelta. Cierro los ojos y asiento despacio.

"Sí, no debemos olvidar lo que ha pasado, no hemos deducido nada realmente significativo y exacto. Pero han habido varias preguntas interesantes: ¿quién es Mimí? ¿qué ha pasado con la llave? ¿no viste nada sobre tu o tus atacantes?"

Y entonces me giro hacia Ithan y ladeo ligeramente la cabeza para luego negar con contundencia.

"No sé si el regreso de Lylian tiene que ver con Zoar ni si ha sido un ritual oculto bajo una capa, pero por las palabras de ella diría que lo ha hecho por sí misma. No sé si tiene que ver con Dam. Y no sé qué significa ese tigre. Tendrás que preguntarle a alguien más sabio que yo."

Desvío mi mirada final hacia el recientemente mencionado Zoar y dibujo una mueca que bien podría ser una sonrisa.

"Cuando me muera, me importa una mierda lo que hagáis conmigo siempre que no sea alimentar a la Dama Oscura. Sólo comprobad que realmente esté muerto y no inconsciente ¿ok? O volveré de muy mal humor."

Sin nada más que añadir, vuelvo a cruzarme de brazos y lanzarle una pequeña mirada a Lylian como si quisiera asegurarme de que de verdad está con nosotros tras lo que le ha pasado. Sólo queda aguardar por ahora.

-Señorita, una cosa es la teoría y otra es la práctica. Vos sois un claro ejemplo. Habéis muerto, ahora habéis resucitado y ahora os acompaña un hermoso tigre digno de un Eve. Con Madame creerme que todo es diferente pues es ella quien elige a sus acompañantes. Si, ella ha pasado por más de uno. En ese momento Madame grazna a Zoar. Lo siento, ya sé que no os gusta que se hable de tu pasado. Vuelvo a centrar mi atención en Lylian. ¿Por donde iba? a sí... ella por consiguiente no es una extensión de mi alma pero somos como uña y carne. No me gusta la carroña pero a ella sí. Y si tu tigre la da caza, cosa que dudo, pues obtendrá un bonito tentempié.

Ladeo un poco la cabeza al escuchar el comentario de Ithan. No, Ithan... no hago estúpidos rituales los cuales enmascaro con palabras.

Estoy de acuerdo con Marian, dejemos a un lado Los supuestos teóricos de cómo debe de ser un Eve y demos con los asesinos. Por cierto,  tengo una teoria señorita Lylian la cual en la practica seguro que se va al traste. Si quereis escucharla no hay inconveniente... Es curioso me meso el menton pero Nexi solo menciono una tercera parte de mi conversación. Exponiendo solo la negativa hacia mi persona.

Escucho el comentario de Nathaniel y le devuelvo la sonrisa. Ok, lo tendremos presente.

Las palabras del anciano no fueron bien recibidas por Nessa, que le dijeran continuarían muriendo personas hasta dar con el culpable la amedrentaba un poco. Respiró profundamente, tratando de calmar los nervios y evitando que el miedo se cebase con ella. No lograba concebir la idea de que alguien de los presentes estuviera asesinando, todos parecían más o menos normales excepto el tipo de la armónica. Unos más especialitos que otros, pero desde luego no psicópatas asesinos. 

Resopló otra vez antes de mirar a Dam y Nathaniel.

-No podemos sacar conclusiones precipitadas Nathaniel, quien quiera que haya asesinado a Lylian lo habrá hecho únicamente para asustarnos y confundirnos. -enunció en alto para todos- Debemos aguantar y estar atentos. Entonces escuchó a Miriam y sintió que estaba totalmente de acuerdo con ella. De entre todos los que habían acudido a Oldland aquella noche, a Nessa le pareció la más sensata. -Miriam tiene toda la razón. De nada nos sirve discutir entre nosotros, centrémonos en el verdadero problema.

Devolvió su atención a Marion y enmudeció, no quería que sus palabras hirieran a la chica. Suficiente tenía con su pérdida.

Algo ocurrió. Lylian respiraba de nuevo, desapareció y apareció como si nada ¡Y viva! -Wooo... -farfulló dando un par de pasos adelante con el rostro desencajado por el asombro, pero se detuvo cuando vio a un tigre acercarse a ella. ¿Es una Eve? -¿Cómo es posible, Lylian? Estas... viva, y hay un tigre... Lo siento, no quiero agobiarte... No entiendo nada.

Trevor asistió, con cierto asombro mal disimulado, a aquel espejismo mediante el cual, una niebla negra tomaba posesión de Lylian y la restituía. Había oido historias de Odland, sabía que ocurrían allí cosas inexplicables, pero no las había presenciado, por lo que aquello lo dejó sorprendido y turbado, aunque en cierto modo, satisfecho. 

Manteniéndose al margen, por respeto hacia la intimidad del momento en el que ambas hermanas se reunían de nuevo después de la tragedia, miró alrededor, calibrando las reacciones de quienes los rodeaban, fijándose en sus palabras y en sus gestos, en cualquier cosa que pudiera serle de utilidad en sus propias cavilaciones.

No fue hasta que escuchó de nuevo la voz de Lilyan dirigirse a él y a otros, cuando al fin dijo algo al respecto, esbozando una media sonrisa- Me alegro de que hayas vuelto con nosotros, y de que parezcas totalmente restituida e incluso más fuerte que antes- dijo, mirando al gran felino que la acompañaba- Por desgracia no hemos sido capaces de sacar ninguna conclusión sobre lo sucedido. Tan sólo contamos con habladurías y conjeturas que bien podrían estar intoxicadas por otra clase de pretensiones tenebrosas, ya sean expresadas por unos o por otros. -expuso, casi lamentándose- Tendremos que tener los ojos bien abiertos. Al menos ahora tú cuentas con cuatro. Eso es una ventaja. 

Cuando la niebla comenzó a aparecer bajo el abrigo acompañada por una brisa, estaba distraída. No entendía que tipo de Eve podría hablar así de su hermano animal. Sorin también se alimentaba de carne y si era necesario de cadáveres, pero jamás lo había hecho. Aunque su instinto animal era fuerte, él sabía que no debía hacerlo porque no me gustaría. Nuestro vínculo era más fuerte que su instinto.

Sorin me golpeó ligeramente en la cara con el morro, la brisa se hacía más fuerte y giré la cabeza para mirar el lugar donde reposaba Lylian. Mi sorpresa fue enorme al notar que no había nada bajo la prenda, seguí con la mirada el lugar que apuntaba Vael y mi sorpresa aumentó. Nunca había visto algo parecido, de camino a Oldland escuché hablar sobre el último legado, pero jamás pensé que fuera cierto. Allí estaba Lylian, viva y acompañada de un hermoso tigre.

Sonreí ampliamente contenta de verla de vuelta, me alegré también por Marion. –Me alegro mucho de que estés aquí. Me alegro por las dos. Aún no sabemos quién ha hecho esto, pero lo averiguaremos.- Miré al tigre con respeto, era un animal formidable y protegería a su hermana con su vida. No sabía cómo vivían los demás con sus legados, pero yo no sería nada sin Sorin. – Nunca había visto a nadie con el último legado, hasta ahora pensaba que solo eran habladurías pero ahora sé que es real. Tu hermano animal es impresionante. Tienes toda la razón, el vínculo entre un Eve y su  compañero, es muy especial. Disfrútalo.

Vexy escuchó toda la habladuría de Zoar con cara de incomprensión, ya que todo aquello que decía le parecía ilógico. Al mencionar los múltiples acompañantes del cuervo, Vexy la observa y le dice con un tono neutro pero pesado - Entonces eres como un Grovehn sin su arma, no has encontrado ese vínculo especial. Es una lástima - el favor que le pide no le parece razonable y mientras más critica su vida, más se va ganando la mirada de la Eve. Ella comenzaba a enojarse y al final le dice - He vivido en el bosque toda mi vida y trotamundos como usted son los que han perturbado su primigenia esencia. creyéndose conocedores, mas conociendo únicamente lo más superficial - el pelaje de Nimah parecía erizarse, compartiendo la ira de la joven.

- Primero aprendí el lenguaje de las bestias antes del de los humanos y ¿Usted me habla de no conocerlas? Reconocer el desconocimiento es una virtud y trato de no hablar más de lo necesario, aunque veo que usted aplica lo contrario - con un tono más sereno pero con un intenso brillo en sus ojos que mostraba la decisión de sus palabras.

- Curioso es que usted diga ser uña y carne con una bestia con quien no comparte un vínculo real y me acuse a mí de sentenciar su infame acto, con respecto a la antes difunta hermana de una Melknhar aún presente. Si no he mencionado sus otras cavilaciones es porque no he encontrado en ellas la sensatez de las palabras de otras personas, además de considerarlo un mal espécimen de los Eve. Para mí, las verdaderas palabras están en el silencio, no en las habladurías y por eso callo, tratando de encontrar aquello que las voces callan. La boca miente, pero el corazón es sincero - Nimah le enseña los dientes al cuervo y le dice - Además, los pandas rojos también gustan devorar carne y no por eso Nimah pensaba arrojarse al primer cadáver que tocó el suelo. Él es mucho más que solo una bestia salvaje - sus palabras terminaron casi como si de un rugido se tratase y se aleja nuevamente enojada empuñando sus manos. La fuerza ejercida sobre su propia piel hace que un leve hilo de sangre se despliegue, pero Nimah acude rápidamente para limpiarla, a lo que Vexy agradece.

Se oculta detrás de Brif, esperando que al Melknhar no le importe y dice - Por cierto, mi nombre es Vexy -.

Mira a Trevor y asiente ante sus palabras. Como había dicho, el silencio era más importante que aquello que se dijera a viva voz y tratar de descubrir a aquel que la había regresado era jugar una carta importante a favor de los traidores.

Gracias al cielo

Es lo único que Dam pudo pensar cuando vio como Lylian volvía a la vida. Con una expresión de alivio, suspiró y se pasó una mano por el pelo. Sonrió, bastante más tranquilo y alegre que hacía unos instantes, estaba feliz de ver a su compañera. No se acercó, no aún, pues Marion seguía abrazándola, y quería concederle este momento de intimidad y bienvenida, pues aunque había pasado poco tiempo, habían sido unos momentos muy intensos cargados de angustia y de incertidumbre, aunque aún quedasen vestigios de estos en el aire.

Una vez Marion y Lylian se separaron, escuchó la respuesta, o más bien explicación, de esta última a Zoar. Sonrió de medio lado, orgulloso. No pudo evitar mirar a Gabrielle de reojo por sus palabras y dedicarle una sonrisa seguida de un asentimiento. Se acercó a las muchachas y tomó con delicadeza una de las manos de Lylian; la estrechó con afecto, pero con sumo cuidado, como si temiera que se rompiera, aunque después de lo que había visto... sabía que sería muy difícil hacerlo. 

- Bienvenida de nuevo-le dijo con voz suave-, ha sido descorazonador no tenerla aquí. Y ahora es un alivio volver a tenerla entre nosotros-miró a su tigre, la majestuosa criatura de pelaje azul. Lo que había oído era real, el último legado existía. No pudo sentirse más orgulloso de Lylian- algo me dice que sabe quien es esa Vieja Tata... ¿recuerda algo de... su viaje?-se pausó, de golpe y negó con la cabeza-. Oh, lo siento, no quiero abrumarla con tantas preguntas. No quiero agobiarla.

Entoces escuchó que alguien preguntaba si todo esto tenía que ver con la discusión que había mantenido antes. Miró, inquisitivo, a quien lo planteó, ese Melknhar de palabra ligera y dudoso sentido del humor. 

- ¿Por qué debería esto tener algo que ver conmigo?-preguntó, por curiosidad. No se sentía atacado, o al menos quería verlo así-. Si alguien lo piensa, me gustaría saber el motivo. Yo solo mantenía una interesante discusión con nuestra querida Nessa, no veo qué puede tener esto que ver.

Lylian siguió con la mirada el gesto de Marion hasta el papel, preguntándose si el dibujo significaría algo más allá de lo que parecía, pero la explicación de su hermana sobre la vieja Tata llamó su atención y volvió a posar sus ojos plateados en los de Marion. 

Y ante su pregunta esbozó una pequeña sonrisa. - Me siento mejor que nunca, más fuerte, más completa. Como si hubiera encontrado piezas que faltaban dentro de mí. - Su mano se movió para encontrar sin necesidad de mirar la cabeza de Enoch y dejar que sus dedos se enredasen en su peculiar pelaje. - Es... difícil de explicar. - Añadió, frunciendo levemente el ceño. 

Dejó apartada por el momento la conversación con su hermana, pues varias personas parecían alegrarse con su vuelta. Las palabras que Nathaniel dio como respuesta a su pregunta le sacaron una sonrisa tranquila. Era agradable poder seguir luchando. Durante el rato que había estado perdida había odiado la idea de que su camino se hubiera truncado antes de comenzar a recorrerlo.

Se quedó escuchando sus preguntas en silencio, meditando sobre ellas, hasta que la voz de Zoar volvió a alzarse y sus ojos lo contemplaron con el brillo del acero. - Pues si es usted un Eve incompleto, o que aún no se conoce a sí mismo, no puedo hacer más que compadecerlo. Pero pienso que corregir y menospreciar el legado de esa joven cuyo vínculo sí parece real quizá haya estado fuera de lugar por su parte. - Comentó, haciendo un breve ademán con la mano hacia Vexy y dejando por su parte el tema ahí por el momento pues la discusión entre ambos no era de su incumbencia mientras no volviese a cuestionarse si deberían comérsela a ella.

Devolvió la sonrisa al apuesto Grovhen de color cuando se dirigió a ella y asintió con la cabeza. - Trevor tiene razón. Sea quien sea el responsable de mi vuelta y habiendo al menos un asesino entre nosotros, no deberíamos ponerle en bandeja a esa persona dilucidando quién ha sido, sino todo lo contrario. Tal vez lo que deberíamos plantearnos son las intenciones de quién quiere averiguarlo. - Terminó, posando su mirada sobre Ithan brevemente. Si no se equivocaba el Melknhar había sido el primero en lanzar esa cuestión. - ¿Y por qué iba a tener mi muerte algo que ver con la discusión entre Nessa y Dam?

Lylian sonrió también a Katia y a Sorin y el tigre inclinó brevemente la cabeza hacia la joven, como agradeciendo el cumplido mientras Dam se acercaba. Lylian dejó que Dam tomase su mano enguantada y respiró lentamente mientras posaba sus ojos calmos en los del otro hombre. Sabía que había muchas preguntas, algunas podía responderlas y otras no. Pero la presencia del Melknhar le aportaba una punzada de serenidad entre todas las personas presentes. - Gracias por la bienvenida. - Dijo entonces en un susurro, antes de responder a todo lo demás.

- Si la vieja Tata es Mimí, sí, creo que sé quién es. Mimí fue la última de su linaje que fue Guardiana del Sello. Un sello místico que debía haber aquí hace siglos. No sé mucho más de ella, salvo que era mi... eh... - sus ojos plateados se quedaron un instante pensativos- la abuela de mi... -miró a Marion y se corrigió de inmediato con una sonrisa- de nuestra abuela. ¿Nuestra tatarabuela? O algo así. No la conocí nunca, pero me contaron algunas historias, probablemente exageradas o subjetivas. No creo que nos pueda ser útil ahora.

Miró a Nathaniel. - Sobre la llave no sé nada. - Miró el suelo y luego a Vael. - Pero él dijo que para conseguirla deberíamos calmar el odio de la Dama Oscura. Era así, ¿no? 

Después negó con la cabeza suavemente. - No, lo siento. Pero no vi nada, me quedé dormida en algún momento de la noche... Y apenas desperté para sentir el dolor recorrer todo mi cuerpo, ya estaba ahí colgada cuando desperté. - El gesto de Lylian se ensombreció al recordar y buscó con la mirada las cadenas que habían tensado su cuerpo en el aire mientras de la garganta de Enoch surgía un leve gruñido, casi imperceptible. - Traté de pedir ayuda, pero no fui capaz. Después... Todo fue oscuridad hasta que llegué a un lugar donde parecían morar más almas. Había uno de nosotros allí, alguien que podía ver los dos reinos. Pero no sé si puede hablar allí, pues no llegó a responderme antes de... Bueno, de que volviese.

Entonces su mirada pasó sobre los que habían preguntado por Enoch mientras los ojos del tigre hacían un recorrido por el lugar. - Dicen que en este lugar hay una especie de poder que provoca que si mueres y vuelves a la vida aquí, lo haces con lo que la gente llama el Último Legado. Tu ser se completa con los tres legados formando uno solo. Por eso Enoch está aquí ahora. 

Finalmente miró a Mariam y le dedicó una pequeña sonrisa. - Eso es todo lo que yo puedo responder a vuestras dudas. Y ahora, como dice esa joven, creo que deberíamos centrarnos en tratar de averiguar quién me colgó de esas cadenas. No me gustaría volver a despertarme igual mañana. Tal vez si pudiéramos adivinar por qué me escogieron a mí... - Sus ojos recorrieron a los presentes de nuevo. 

Nessa prestó atención a la explicación de Lylian y no supo por qué pero cada vez desconfiaba más de ella, como si todo hubiera salido a pedir de boca para ambas chicas. Desde un principio ellas habían dejado claro que sabían mucho de Oldland, quizá no lo expresaron mediante palabras, pero sus gestos, su actitud y su atrevimiento las delataba.

Las tendría bien vigiladas por el bien de todos.

Fue entonces cuando sintió la necesidad de agarrar su arma, de tenerla cerca por si acaso. El contacto con el acero estremeció a Nessa y la llenó de fuerza. Con mucha cura se enrolló la cadena del arma en el brazo y guardó la daga bajo la manga. Nunca se sabía cuando podría tener que hacer uso de esta.

-No le hagas caso Dam, solo quiere confundirnos. -enunció en referencia a Ithan.- Lo ha estado intentado desde que entró en el mausoleo. 

Mmm... Zoar. En terreno escabroso te has metido pues con los nacis del como debe ser y las tradiciones has topado. Estúpido de mí!!! Como no he sido capaz de reconocerlos. Si durante mi eterno deambular me he topado con cientos de ellos. Aquellos que son portadores de la única verdad. Aquellos que rechazan a los que no son como ellos. Aquellos que rechazan a los que no siguen los cánones establecidos... La naturaleza humana nunca cambiara, la inquisición, las dictaduras, el miedo a lo desconocido y a lo diferente. Pero sabía que tampoco podía culparlos pues la supervivencia es el instinto primordial. Es el motor de todas nuestras acciones tanto  humanas como animales... 

No pude más que encogerme de hombros y suspirar con tristeza. Otra vez la historia se repetía pues halla donde fuera Zoar era considerado  un pájaro de mal agüero.

Sin saber porque recorde aquella conversación de taberna acontecida largo tiempo atrás con aquel anciano.

"Qué satisfacción saber que las merluzas nunca te llevan la contraria!.
¿Por qué?
porque tienen razón".

Sabias palabras la de aquel viejo borracho macerado en alcohol. Con aquellos recuerdos la sonrisa volvió a mi rostro y con toda la tranquilidad del mundo y en voz audible para todos.

-Tenéis razón Vexi, mis palabras y mis actos han sido erróneos, mi ignorancia total  y con ello he herido vuestra sensibilidad y puede que la de alguien mas... por ello pido perdón.

Observo a los presentes. -Creo que somos lo suficientemente maduros y sabios como para saber distinguir  lo que es una rencilla personal y del extraño acontecimiento “asesinato” que sucedió esta noche. Pues lo uno no tiene nada que ver con lo otro. En lo que a mí respecta no puedo acusar a nadie pues carezco de pruebas tangibles para tal acto... Que tengan buenas noches, damas, caballeros y animales también. Dicho esto me retiro con una amable sonrisa en la boca mientras voy repitiendo para mi mismo como si de un mantras se tratase.

Qué satisfacción saber que las merluzas nunca te llevan la contraria!.
¿Por qué?
porque tienen razón.

Miré a Amarok mientras algunos hablaban e incluso cuestionaban la relación que debía haber entre los de mi linaje; otros incluso trataban de ver intenciones oscuras en actitudes que a veces incomodan.

Entonces se me ocurrió una idea:

- Señorita Lylian- hice una pausa esperando su atención-tengo una petición que hacerle: podría mi compañero Amarok- le señalé a mi amigo- olerla?, sé que tal vez a usted pueda incomodarle y también a su tigre, pero es para saber si quizás, quedo algo del olor de los asesinos, y así tener alguna pista- antes de hacer nada agregué algo más- sería bueno que si accede, también se lo comunique a su nuevo compañero- le dije con una sonrisa. 

Nessa... no intento confundiros, ni mucho menos, opto por lo mas plausible, Dam hablo contigo y Lylian sonbre la historia de Joseline, mi pensamiento no es la verdad absoluta solo explongo mis ideas,añado antes de seguir,solo pienso que quizas le dañasteis el ego y bueno...,  mira a Nessa y al resto de sus compañeros,yo soy escentrico,me he criado solo fuera de alguna familia que me guiase en mi Legado o bueno algo tan facil como relaciones personales, quizas el tono de Zoar,fuera junto al arbol lo mal interprete como un ataque a mi persona, mientras hablar mira con sinceridad a Nessa para despues dar un trago a su petaca y encenderse un pitillo,que no sepa tener modales no significa que quiera engañar a nadie, yo vien a Oldland con la intencion unica de encontrar a Faith, mi primer amor, era una chica especial del orfanato donde me internaron despues del asesinato de mis padres, ya esta... ni mas ni menos vengo a buscar aqui...

Lylian sintió la mirada de Nessa cargada de desconfianza al mirarla y enarcó una ceja devolviéndole la mirada con curiosidad. Sin embargo no dijo nada, tan sólo esperó por si la joven tenía algo más que preguntar o que aportar. Pero nada llegó.

Cuando Speeir llamó su atención se giró hacia él y se encogió de hombros. - Claro, no tenemos ningún problema con que Amarok nos huela. - Dijo, incluyendo directamente al tigre en sus palabras. - Aunque sospecho que si quedase algún rastro Enoch ya lo habría descubierto... Pero intentémoslo. Ojalá pueda encontrar algo. - Sin mostrar ningún temor se acercó hacia el lobo, con el tigre caminando tras ella con paso acompasado, se agachó frente Amarok y mientras ella colocaba las palmas de las manos hacia arriba, Enoch se sentó junto a ella. Ambos se quedaron inmóviles, dejando que el animal los oliese hasta quedar satisfecho.

Marion recibió la respuesta de su hermana con una pequeña sonrisa. Sabía de sobra a lo que se refería, aunque no en sus propias carnes.

- No es la primera vez que oigo eso. - Le dijo con voz suave antes de dejar espacio para que atendiera a todos los que requerían su atención. Marion podía esperar. Lo había hecho durante años, unos minutos más no serían nada. Mientras tanto se dedicaría a estudiar las reacciones de los presentes a la vuelta de Lylian esperando así dar con quienes la habían colgado. No podía dejar que la alegría empañase su mente científica: había cosas que hacer. Se acercaba el atardecer y si las tradiciones se mantenían, probablemente un combate.

Marion escuchó con interés las palabras de Nathaniel, sin poder evitar considerar al chico demasiado optimista. Le recordaba a los diálogos de algún anime y en cierta forma le resultaba gracioso. No le resultaba suficientemente convincente como para infundirle esperanza, pero en el fondo deseaba que el chico tuviera razón.

Luego, mientras todos hablaban, Marion se dirigió a su mochila y abrió el bolsillo superior, el grande, para rebuscar dentro. Una vez hubo terminado se dio la vuelta y se quedó observando la escena. La alegría por la vuelta de Lylian había creado un poso constante y sereno en su estómago y en su mirada, pero su mente ya comenzaba a trabajar con normalidad.

A tiempo de escuchar las palabras de Lylian, Marion asintió cuando ella habló de la tatarabuela que compartían antes de hablar en dirección a Dam.

- Mimí recibió a los que llegaron a una reunión parecida hace siglos. - Explicó, tratando de completar la información aportada con los datos más objetivos posibles. - Les hizo unas advertencias muy parecidas a las que Vael ha expuesto. Ella también era mayor, tosía y esputaba sangre, pero era una semi como nosotros. Con el Último Legado. Habló de muchas cosas, y de una muy importante. Que quienes intentaban abrir ese Sello deseaban un infierno bajo sus pies. - Dijo antes de hacer una pausa en la que posaría su mirada sobre algunos de los presentes, intentando ver algo en sus ojos. - Ella alimentaba el Sello con su sangre, como Vael ha hecho con la de los barriles. Lo más probable es que sean la misma cosa en realidad. - Comentó mirando ahora al anciano. Quizá sólo él pudiera esclarecer esas dudas.

- Lo que quiero decir es que lo que está pasando aquí no es sólo que alguien intente matarnos, o liberar lo que quede de Joselinne. Quien, por cierto, Mimí en su día ya dijo que se había corrompido y caído en la oscuridad y la sed de venganza. Nos estamos jugando mucho más que nuestras propias vidas. - Concluyó, esperando que sus palabras calaran en los presentes. Aunque nadie lo hubiera expuesto realmente hasta el momento tenían que ser conscientes de lo que tenían entre manos.

Vaek, sonrío ante las palabras de la pequeña de los Létang... Empezaban a escuchar, o al menos a sentir que su destino estaba allí.

Una mera bocanada de un destino incierto... donde la esperanza aún no se sabía...

Pero al menos empezaban a escuchar...

Estaba muy contenta por Lylian y por Marion, que se hubieran encontrado era una fantástica noticia. El vínculo que yo tenía con Irina ni se parecía, pero esperaba poder encontrarla igual que habían hecho ellas. El relato de Lylian sobre su muerte me puso los pelos de punta. Debió de ser horrible estar allí sin poder pedir ayuda hasta la muerte. Quién fuera que había hecho algo así era realmente retorcido.

Me extrañó mucho la actitud de Nessa con Dam, había cambiado radicalmente de tanto como el día y la noche. No pude evitar sospechar de ese cambio, sin embargo no dije nada, tendría que esperar para confirmarlo.

La conversación se tornaba interesante por momentos. La historia del sello y de las consecuencias de abrirlo me resultaba familiar.

-Entonces quiere decir que ha habido varias reuniones como ésta. De hecho, he venido buscando a alguien que estuvo en una o, al menos, información sobre que fue de ella. No sé si salió o no, aunque espero que sí.