Partida Rol por web

- Idoia... tranquila. 

No te asustes, por favor. Sé que hay muchas cosas que no sabemos, pero tienes que calmarte.

Entonces se dirige a los otros.

- Bueno... bienvenidos, supongo. 

-¡Yo!, yo... estoy viva. A mi no me han matado ¿por que estoy aquí? El rostro de Idoia es de confusión total ¿Por que estais en mi cabeza?

Siguiéndo el gesto que hace Annia hacia los recién llegados, saludo a los recién llegados:

- Bueno, sé que no es del todo agradable, pero os doy la bienvenida. 

Ahora, dirigiéndome a Idoia, mirando hacia arriba, tal y como harías si intentaras hablar con un espíritu, hablo en voz alta:

-Idoia, ¿cómo es que puedes escucharnos? ¿estás aquí con nosotros o al otro lado?

Graham empieza a mirar a su alrededor.

La oscuridad parece inmensa, peor igualmente hay... restos de cosas que podrían aclarar lo que está pasando.

Sin embargo, no parece que tenga mucha suerte.

Como si el movimiento del contrario hubiese bastado para darle algún sentido a la situación, el italiano se acerca a Graham.

- Deja que intente ayudarte con eso. Quizás entre varios sera más fácil.

Dirigiéndome a Brenda. Yo, yo... estaba hablando con Gabriel o más bien cantando y de repente aparecí en este lugar... ¿Cómo es posible?

Observo mi alrededor con prestitud sin centrarme en ningún punto concreto. Podría decirse que mi mirada es febril

Graham busca por los alrededores pero la oscuridad es tal que no le es posible. Multitud de voces parecen darse lugar en aquel entorno. Miró de un lado a otro. Al parecer no estaban tan muertos. El primero en caer había sido él, los demás se suponían no aptos...

Cuando una voz masculina le comenta que le ayuda agradece el gesto:

-Esto está muy oscuro y acabo de llegar aquí, aún no entiendo muchas cosas y soy muy torpe para moverme en este ambiente. En verdad que te lo agradezco.

Al parecer Idoia no sabe dónde está, Graham piensa y finalmente comenta:

-Idoia, es muy importante tu presencia aquí. No sé como podemos contactar contigo. Si encontramos algo para ayudaros aquí, quizá puedas comunicárselo a los demás. No debes temer, somos nosotros. Tus compañeros. Nada malo queremos para tí. Al revés, queremos ayudaros.

Hay una fluctuación que les atraviesa como una oleada. Lentamente, la imagen de Brenda se desvanece

- ¿Qué ha sido eso? ¿No había alguien más aquí?

No le gustaba que las cosas se escaparan de su control, así que empieza a buscar a su alrededor.

Allí tenía que haber algo que les aclarara qué estaba pasando.

Aunque Cristian tampoco parece tener éxito, quizás de pura casualidad, Rosa encuentra algo.

Ni siquiera era algo sólido, solo un montón de restos de datos que al rozarse con ella, estallan, contagiándoles de la sensación e imágenes de alguien que ni siquiera está allí. 

Por unos segundos, viven la emoción que estaba enterrada en ese montón de datos.

Estás encerrado. el espacio es oscuro, vacío... infinito. En tu mente se dibujan mapas de lo que sabes que has recorrido. Tu mente es analítica, eres capaz de dibujarte a ti mismo un mapa.

Miras en todas direcciones. Hace días que viste al último, y esta soledad está acabando contigo. Notas el desgaste. es como si parte de la información que te forma se estuviese descomponiendo. Sabes que tu memoria tiene agujeros, pero no tienes ni idea de qué pudo haber en esos espacios.

Tienes que seguir... seguir en movimiento, o ESO te devorará. Hace ciclos que olvidarse un nombre para darle, pero sabes que está allí.... en algún lugar... y quien deja de moverse, es devorado.

Tienes que seguir...

- ¡Iiiiiiiiii! - Annia se sobresalta cuando esa sensación la alcanza y se lleva las manos a la cabeza. Cuando la grabación, o lo que quiera que fuese aquello, pasa, levanta los ojos poco a poco, mirando a su alrededor como si quisiera asegurarse de que no había sido real. 

¿Realmente... realmente hay aquí restos de... de... recuerdos? ¿Qué ha sido eso?

Una parte de si temía lo que pudiese encontrar, pero la curiosidad pudo más, y ella también se puso a buscar.

Parece que Annia también tiene suerte, y aunque esta oleada de recuerdos no es tan angustiosa, hay algo que no encaja... 

Calles, edificios... los contemplas como si vieses en un documental, intentando informarte sobre lo que sería el pasado.

Un salto en los recuerdos.

Te afanas en comprender lo que ves. Eres un estudiante... apenas con la calificación necesaria para acceder al puesto que has conseguido, algo que nadie se explica. ¿cómo pudiste conseguir semejantes referencias? no lo saben, pero la mitad de ellas son inventadas. Te has infiltrado en La Burbuja para boicotearla... pero las cosas no suceden como hubieses esperado.

Eres lanzado... sientes la presión, la ingravidez... los últimos restos de recuerdos sólo transmiten desesperación y angustia. Estás encerrado.

Las cosas no son como se suponía que debían ser...

- No entiendo esos dos fragmentos. No parecen ni reales. ¿Lanzado? ¿Ingravidez?

Necesitamos encontrar más para hacerlos con algo útil.

Y mañana tendremos que ponernos de acuerdo para emitir un voto. ¿Correcto? ¿Ustedes tienen algún candidato? si es así, quiero escuchar sus motivos.

-Debemos encontrar todo lo que podamos, quizá podamos darles una oportunidad.

Graham estaba indeciso, no sabía si decir aquello que había visto. Pero finalmente decidió que si quería considerarse valiente era su deber hacer:

-Yo tengo mi candidato. El futbolista. Yo...comenzó a tartamudear...yo confío en que ahora mismo no hay ningún asesino aquí, y por tanto he de advertirles. Lo mejor es hacerlo ahora que estoy seguro de la inocencia de ustedes. Creo estar seguro que todos podemos introducirnos mentalmente en una habitación y podemos manejar un droide.

-Me ha parecido mucha casualidad que su designación V18 y la de Walter V27, fuesen dos de los que me votaron. Y precisamente me encontraba en una habitación que me permitía escuchar los últimos mensajes en otras habitaciones. Esos dos comparten una misma sala, quizá haya más, no lo sé pero sólo pude escucharlos a ellos dos comentando la opción de acabar conmigo. 

Al otro lado de las cámaras, todo se apaga lentamente y ustedes también. 

Para cuando regresa la energía en la sala y pueden ver lo que sucede al otro lado, dos figuras más se forman a su lado, pero a la vez hay una que comienza a desvanecerse...

Graham desaparece.

- Vaya... Graham ha regresado. Me pregunto cómo lo habrá hecho.

Entonces se dirige a los recién llevados.

- Hola ¿Están bien? ¿Saben lo que les ha pasado?

<¿Qué es esto? ¿donde estoy? ¿No he despertado? ¿han acabado conmigo?> La confusión era tal que no fui consciente de lo que ocurría a mi alrededor -¿Graham?-dije cuando oí una voz femenina -¿qué Graham?... ¿el hombre que se llevó Skynet?- fue entonces cuando me di cuenta de que no estaba a solas con aquella mujer, había más personas.. no... conciencias junto a mí -¿Estamos muertos?- pregunté aunque la respuesta era obvia.

Escuché mi nombre proveniente de aquellas pantallas y fijé mi mirada en una de ellas. Javier se había acercado a mi habitáculo y se había topado con mi "cuerpo" inerte en su interior. Un ligero rubor me azotó cuando vi como agarraba aquella cosa extraña que antes había sido mía y le tomaba el pulso, nunca había imaginado que uno de nuestros ídolos fuera a tratarme de aquella forma. Lástima que no pudiera sentir su calor en aquellos momentos, habría sido de lo más agradable. Me entristecí y le di la espalda a las pantallas, aunque no estaba segura de si tenía espalda.

Me acerco a Elena y le poyo una mano en el hombro. 

- Tranquila. Aún no están todas las cartas echadas. Podemos tomar decisiones, y seguro que si Idoia quisiese... - mirando a una de las figuras presentes - podría transmitir cosas que necesitemos contar, pero entiendo que no quiera exponerse demasiado pronto. Quien sabe lo que podrían hacerle.

Noté como alguien me ponía la mano en el hombro y me giré algo asustada para ver quién era. Su cara me sonaba, sabía que había estado en la habitación con todos los demás pero no me había quedado con su nombre, pero en aquel lugar... qué importaba eso... -¿Idoia? ¿qué? ¿exponerse? ¿qué?- estaba confundida pero supuse que sería normal teniendo en cuenta que acababa de morir.