Partida Rol por web

Mientras Tiki permanecía cual muñeca de porcelana en el suelo sin apenas una expresión clara que tornar en ningún sentido, y pese a que todos pudieran pensar que no, atendiendo a lo que deciais, Naysse obviamente seguía vuestras conversaciones, dispuesta justamente a responderos

-Coincido con Anya, dudo mucho que os hayan descubierto, pues de ser así Tiki y Helga estarían atrapadas, junto con Gauche. - evidenció, pues si tal era la creencia del rey, era el destino más probable.

-Princesa o principe, creo que estareis conmigo cuando digo que es indiferente. Para acceder a las ruinas más cercanas, basta con el salvoconducto del rey, como ha dicho Helga. En ese caso, tenerlo os librará de batallas para poder acceder al interior de esas ruinas, y buscar así los templos. Es lo minimo que necesitais, y os ganareis un buen tiempo sin perder. El resto si os tocará a vosotros, distraer o pelear, pero esto segura de que eso lo resolvereis cuando llegue el momento - Naysse hablaba con completa determinación y seguridad en que lo lograría, buscando al mismo tiempo que pudierais evitar el mayor conflicto posible. - Además, si os acompaña la princesa, os será una buena aliada si os encontrais monstruos en la zona - casi como si la conociera añadió el último punto a una grata posibilidad de tomar dicha decisión.

Antes del asunto más importante que surgió gracias a la tabernera, hubo otro más que pareció darse un minimo de importancia - Viene de después de que se escribiera la profecía. En aquel momento ningún chaman supo ver la realidad de aquella profecia, pero hubo uno que fue más allá preguntandose "¿Qué pasaría si la profecía no ocurriera?" Y escribió la contraria: "El mundo se tornará de un color turbio, mezcla del anaranjado de la caida del sol, junto con el morado inerte que sumirá a Sansóläis en sus últimas horas de vida. Si los herederos fracasaran, o fueran los mismos que quieran destruir el propio mundo, este será nuestro punto final" - tras dicha palabrería, Naysse bajó la cabeza - Fue el único Chaman que se opuso a los demás, y quiso divulgar la palabra de dicha profecía para que los niños se criaran adecuadamente, para que no hubiera gente que deseara la destrucción... Pero eso es imposible de controlar, igual que lo que se crea posee libertad. Y gracias a el, empezó la caza hacia nuestra raza.

Se giró entonces a Helga sonriendola - Claro que no nos extinguimos, no es posible. El poder de un chaman cuando este deja su cuerpo, se separa de el y viaja a un nuevo cuerpo, o en el caso de que no haya muerto, empieza a ligarse con un nuevo chaman al cual debe pasarle todas sus enseñanzas y poder. Solo existe un chaman por cada raza y cuando uno nuevo aparece dentro de una raza en la que ya hay uno, el más anciano simplemente pasa a ser un mentor cuyo poder va menguando. - No obstante ante la última pregunta de la Uromaki, Naysse alzó la cabeza mirando al techo - No es que queramos salvar el mundo... Claro que queremos que no se destruya. Pero desde hace años, los chamanes piensan que su destino en esta vida, en este lugar, es ser el apoyo de aquellos que pueden evitar una catastrofe. Ser la base de un cimiento, el cual debe soportar todas las cargas buenas y malas, del pasado, presente y futuro. Por eso, creo que nuestro sentido de vida, es llegar a evitar esto y puede que sea nuestra última labor - terminó de decir desviando la mirada a Tea.

Al menos antes de ser atraida por muerte - Tenemos nuestros trucos, y estoy segura de que Tiki sabe a que me refiero en algún caso. Pero podemos ralentizar el tiempo de la caida del meteorito cuando esté lo suficientemente cerca, o generar una barrera de repulsión para sostenerlo. Pero por eso no te preocupes Muerte, eso será trabajo nuestro. - dijo llevandose la mano al pecho

Por último, el tema más importante, la revelación de Tea la cual hizo sorprenderse hasta a la propia Naysse - Eso es imposible - sentenció con seguridad la tabernera - Si hubieras estado en el interior... hubieras muerto - repitió el hecho de como los chamanes morían allí... Era obvio - Y no, no hay otras formas, es practicamente imposible... - No obstante Naysse apartó la mirada un momento pensativa - El último Chaman que se conoce tenía intención de entrar en el faro, era un Uromaki desesperado. Dijo que quería encontrar la forma de salvar a alguien y que estaría dispuesto a dar su vida... Y así fue, murió pues no volvió a salir de allí... Y fue solo. Cualquier otro ser viviente sufriría nada más tocar la barrera. - aludió pues a una posible teoría de como meter a alguien más, y negandola de cualquier manera, por la forma evidente en que lo contaba.

— Apoyo lo de usar el salvoconducto pero con cuidado, tomando en cuenta que deberíamos ser muy reservados para no causar algo como lo que pasó en la taberna anterior — miró a Senca y a Anya pues con ellos lo había vivido — Y si es obligatorio llevar a alguien adjunto, preferiría al príncipe antes que a la princesa por lo que dijo Helga, ya que sería el “menor” de los riesgos — agregó pero mirando a Naysse, y es que no por ser simplista, pero Tea prefirió reducir sus opciones a eso pensando en que el Rey probablemente no dejaría ir a nadie más, y que de negarse a la compañía elegida seguro quedarían marcados de manera instantánea como sospechosos, si es que no se les detenía en el acto por ir contra los designios reales… o al menos esa impresión le había dado el relato de la Uromaki.

— ¿Conoces a la princesa? — no obstante enseguida preguntó, dado que la respuesta de la pelirroja podría cambiar en mucho el panorama respecto a la dichosa hija del Rey, en especial para alguien que poco conocía de la familia real, como la propia Tea, pero solo si lo que parecía obvio terminaba de hecho siéndolo…

Respecto al tema de los chamanes guardó silencio mientras la mayor hablaba y hasta cerró los ojos a la par que asumía una pose tan pasiva como reflexiva, ello porque las palabras de Naysse contenían datos que también eran de su interés, pues no en vano la tabernera tenía la mayor experiencia allí. El punto en que la colorada relató el inicio de toda la problemática que parecían tener los chamanes hizo que la Cobb se estremeciera levemente, sin embargo la aclaración que a ello siguió, causó en la chica de melena castaña un sentimiento que más bien era de amargura ¿o quizás nostalgia?

— Entiendo — para cuando contestó aquello la portadora de información, Tea llevaba mirándola con fijeza al menos un par de minutos; aunque inmóvil sobre su círculo, la portadora del sello de Helios parecía haber recorrido “cierta distancia” en su pensar, pues realmente Bastian nunca fue tan específico en sus palabras como si lo estaba siendo Naysse, y eso sin duda abría nuevos horizontes para la Cobb mientras que delimitaba otros… y lo más irónico, sin duda, era que mientras más consideraba lo escuchado, más sentido tenía para ella al menos desde su perspectiva.

— Estuve y no estoy muerta… creo, porque mi maestro y mi maestra de hecho lo estaban, eran niños eternos — así pues con igual seguridad a la demostrada por la chamán confesa, la Cobb replicó — Nunca me dejaron recorrerlo por completo, pero hasta donde yo vi, dentro del faro solo habían habitaciones básicas y una bliblioteca bastante grande — en cualquier caso enfatizaría lo primero, pensativa; — Cuando llegó el momento, hace no tanto, mis tutores insistieron en que debía salir y Bastian hasta apartó la niebla que rodea al lugar… no sé para entrar, pero al menos mientras me retiraba no me sentí en ningún peligro nunca ¿cómo hacerlo si era mi hogar? — conforme hablaba su voz fue adquiriendo un deje tembloroso, de pesar.

— C-claro que yo nunca toqué la niebla, ni desobedecía ninguna advertencia de mis tutores; todo lo que pudiera necesitar lo tenía allí, ya fuera que lo encontrara por mí misma o que ellos me lo otorgaran, incluso esta ropa — explicó, sin embargo antes de que el golpe de nostalgia la alcanzara de lleno y desviara la conversación hacia algo que de nada serviría al resto, decidió intentar sobreponerse empezando por contestar a la pregunta de Senca:

— Si, lo soy… en mi caso mi poder de chamán está vinculado al de Naysse, de ahí que actualmente la vea como una maestra… aunque la relación entre nosotras no la supe hasta que llegamos aquí… — aseguró con los ojos vidriosos.

Helga escuchaba lo que se iba diciendo, realmente no podía creer todo lo que estaban diciendo, miraba a unos y a otros sin decir nada, en silencio, escuchando lo que decían. Fue cuando Tea termino de hablar y viendo su estado de ánimo que se acercó a ella mientras le colocaba una mano en el hombro y dice:

No te preocupes, si dices que has estado es porque has estado, y quizás podamos averiguar cómo entrar y así puedas ver a tu gente… venga mujer anímate, que tenemos muchas cosas que hacer y descubrir y eso es increíble

Podía verse como se iluminaban sus ojos de pensar en las cosas nuevas y maravillosas que descubrirían. Vaporum se colocó junto a ambas y Helga dice alzando la voz:

Ya sabemos lo que tenemos que hacer y no tenemos mucho tiempo, así que creo que lo ideal sería ponerse en marcha lo antes posible, como he comentado el rey espera que le dé una respuesta mañana, desde mi punto de vista lo mejor sería contar con su beneplácito y salvoconducto, aunque vengan los príncipes con nosotros.

Mira uno por uno a los allí presentes y añade:

Además, en teoría solo yo iba a ir, pero durante el día he preparado la expedición contratando a unos guardaespaldas e incluso se ha sumado una investigadora ¿verdad?

La última frase la dice mientras mira a Tea y le vuelve a dar un par de golpecitos esta vez en la espalda

Muerte escuchó con atención las palabras de Naysse. Era la primera vez que escuchaba tanta cantidad de información confiable sobre los que creía extintos chamanes de una sola vez, y la idea de que habían cosas demasiado, mucho más grandes que aquellas alrededor de las cuales su vida girado lo hacían en parte sentirse muy pequeño, como una feroz piraña que sale de su estanque para encontrarse en medio de un océano infinito habitado por tiburones de veinte metros. Inspiró aire y se recompuso. No era el momento de dudas existenciales, era el momento de dudas concretas.

—¿Creen que podremos usar todos el salvoconducto a la vez? —inquirió con su vozarrón—. El príncipe acordó llevarlas a ustedes dos, no sé si aceptaría llevar a más individuos de la cuenta que de las últimas cosas que parecen es alguna clase de investigador de ruinas —explicó, refiriéndose principalmente a Anya, Senca y él mismo, además de su sobrina.

Anya se queda observando a Tea y Naysse sin mutar el rostro... hasta que finalmente suspira.

- Bueno, en cierto modo me alivia que tú también seas chamán. -dice mirando a Tea- Francamente, todo esto empieza a ser demasiado para mi autocontrol, demasiadas sorpresas para mantener mis sentimientos a raya. -les cuenta, lo que explica al parecer su notable falta de expresividad- Estoy de acuerdo, si el salvoconducto nos permite pasar a todos, adelante, pero contra menos compañía o más afín, mejor... No queremos que el rey comience a jugar sus cartas en nuestra contra. Mejor cuanto menos sepa. -expone.

No se había movido aún del símbolo de fuego, seguía ahí plantada, meditabunda.

- Está claro que tenemos unos orígenes e historias bastante dispares, en verdad... Naysse, ¿sabemos qué templos son físicos, en el mundo normal, y qué templos no?¿Y cómo acceder a los segundos? -pregunta.

Continué escuchando las enseñanzas de los presentes, parando en el tema de los chamanes, ¿un chamán de cada raza?, eso son muchos chamanes incluso uno delemental ¿no?, Pregunté con curiosidad, teniendo en mente todo lo dicho acerca de la extinción de especies, Si se estinguiera una especie, ¿dónde iría todo ese poder?, tal como lo dices parece no poder desaparecer de este mundo. Continué mirando a Tea, Me alegra que estés viva otra vez, ojala pueda ver esa biblioteca algún día, quizá allí tengan información que busco.

Tras ello hablaron de salvoconductos y acompañantes, Yo tengo uno, aunque no se si es lo mismo. Dije enseñando el mío como explorador de Ilunia, si eso me dejaba entrar y salir de ese lugar, por qué no de este, solo era un papel pintado. Después simplemente continué escuchando, Anya dijo algo interesante, ¿dónde estarían esos templos ocultos?, si hay torres que no están a la vista quizá estén allí los portadores de mis esencias, quizá ese lugar volviera a tener la vida que tenía cuando llegué.

¿hay guardianes de los templos? Pregunté cuando todos habían acabado. ¿y población en ese lugar escondido de la vista? Continué por si supiera algo.

Naysse asintió ante Tea en primer lugar - Ayudé a concebir a esa cría. Ser tabernera solo es una responsabilidad como Chaman. Antes era una curandera, y el rey muchas veces requiso de mis servicios, aunque muchas de esas veces no le cobré. Con la princesa, fue uno de esos casos. Se que esa niña os ayudará, aunque esté en contra de lo que hacemos - aseguró con total firmeza.

Por la parte de muerte, simplemente negó - Si haceis lo dicho por Helga, no habrá problema, simplemente actuad como contratados por ella. Y por supuesto, no rompais vuestro papel. El rey no sabe nada de vosotros, ni de los herederos del sello, aún. Si la princesa no se entera, no llegará a oidos del rey - Y si no tendríais que buscar la forma de que no llegase. Al menos así acabó también con la duda de Anya.

No obstante la tabernera miró al salvoconducto de Senca con curiosidad - No es el mismo, aunque ese os servirá para dirigiros al templo de Jikoate cuando llegue la hora. Es una gran suerte que tengas uno Senca. Consevalo bien. - Aconsejó pues la chamana antes de pasar al asunto más importante, ante el cual Helga trató de animar.

Con un suspiro mientras se cruzaba de brazos, Naysse miró a tea dubitativa. Sin embargo parecía que por su expresión, no podía no creer a la humana - Te creo. Es extraño, y practicamente un hecho casi imposible... Pero algo en mi interior siente que no me mientes. - Aclaró finalmente, destensando así el ambiente generado. - Investigaré como es que has podido vivir allí. Igual no encuentro respuesta alguna, pero te lo comunicaré encuentre lo que encuentre.

Aunque por un lado bueno, que hubiera preguntas nuevas, consiguió generar en la chaman un nuevo punto en el que apoyarse para dejar que todo se calmara. Miró a Anya y su pregunta, y luego a Senca y alzó una mano en gesto de aprobación - Buenas preguntas. Como tal, las escrituras arcanas narran que parte del poder de los dioses fueron ocultados en el plano espiritual, escondido a ojos de todos los vivos, pero pudiendo acceder por aquellos que son capaces de entenderlo.

-El plano espiritual está identificado como una copia espectral del nuestro, totalmente calcada, pero también hay escrituras vagas que hablan de zonas dentro del mundo espiritual, que solo se es capaces de entrar de ciertas maneras. Por desgracia mi conocimiento solo llega hasta ahí, pero dado el momento, deberiais buscar a Vulfaira. Es experta en el reino espiritual, aunque no os podrá enviar a esos lugares. Para ello necesitareis a un espiritualista. - Os dejó claro pues así tendriais que buscar algo muy claro para un futuro que bien podría ser temprano o tardío

-En cuanto a esos guardianes, dije que los templos os pondrán a prueba. Un guardían puede ser una  prueba totalmente lógica. En cuanto a la población del mundo espiritual, es nula. Aunque los espiritus son su población, a pesar de que no estén vivos. - Aclaró finalmente.

Tras todo eso, Naysse se movió hacia la puerta, abriendola y dejando entrar a Niero y Gauche - Si nadie más tiene más dudas, entonces antes de iros, deciros dos cosas: Teneis una habitación para pasar la noche en la posada, y... Vais a entrenar todo lo que queda de día vuestros sellos para controlarlos, y no voy a aceptar un no por respuesta. Quien quiera abandonar la sala, deberá o bien controlar su poder o derrotarme. - Niero al oir a su maestra retrocedió un paso un tanto asustado.

-Y tu ladrón de pocamonta, haz que tu mimali reaccione y o te haré ver las estrellas en pleno día. - Gauche por su lado se revolvió un poco, pero aún así suspiró y se acercó a la mimali.

Gauche se acercó a la mimali y se agacho para ponerse más a la altura de ella. - Tiki... Siento lo que he dicho antes... - se ¿Disculpó? - Es decir... reaccioné mal simplemente porque creí que me estabas mintiendo, pero pensandolo friamente... No puedes mentirme. Igual si que viste a un hombre o te quedaste dormida despierta, porque te tuve que hacer reaccionar, yo que se... - Por más que explicaba una buena razón, no miró directamente a la mimali, aunque el resto podíais notar como Niero clavaba la mirada en el ladrón.

-Además. No sería lo mismo si no estuvieras en mi hombro. Solo no pases todo el rato encima del hombro de Tea ¿Vale? O me sentiré traicionado - Le advirtió pues a la mimali dejandola volver a posarse encima suya - Eso sí, hazle caso a Naysse. Quiero que aprendas a manejar ese poder raro y nuevo tuyo ¿Estamos? - Y con eso dicho fue hacia donde estaba Niero cargandose en la pared mientras ambos hombres os miraban a todos esperando vuestra decisión

— Gracias… no intentaba complicar el ambiente — aseguró ante las palabras de Helga que no pasarían desapercibidas, si bien no tan animada como podría estar, al menos si lo suficiente para corresponder a la cercanía de la Uromaki con una sonrisa sincera, dulce. Por otro lado el planteamiento que luego hizo la susodicha ofrecía una muy buena excusa para justificar la presencia del grupo completo, roles incluidos — Cuenta conmigo entonces — lo que provocó que el optimismo de Tea sobre ese asunto creciera un poco más.

— Bueno, estoy lejos de poder hacer lo que mismo Naysse pero al menos pueden contar conmigo para traducir… — no mucho después contestó a Anya que por su expresión parecía impasible, aunque claro, la Cobb ignoraba lo que realmente sucedía dentro de la espadachina. De cara a Senca, respondió si cabe con más inocencia — Podría ser, allí habían tantos libros que incluso sin poder salir no fui capaz de leerlos todos, y más de una vez mi tutor, Bastian, me hizo sospechar que habían incluso más escritos pero reservados para sus ojos… — no es que quisiera emocionar en vano al Kazibara, solo que no poseía mayor confirmación como para asegurarlo firmemente.

Tal como sentiría la tabernera más adelante, Tea simplemente concluyó que no podía no creerle a la contraria, siendo pues suficiente la respuesta de Naysse para que a ojos de la Cobb la dichosa princesa cambiara de una figura incierta a alguien que por lo menos les ayudaría sin problema mientras no cometieran las mismas indiscreciones que en el pasado, algo que la castaña se aseguraría de recordar.

— Si pudieras encontrar algo así, seguro me dejaría entender muchas cosas y te estaría eternamente agradecida… pero debo decir que incluso ignorando las condiciones en las que terminé allí, volvería a elegir crecer vigilada por Bastian y Nayra — no por nada ambos niños etéreos eran la única familia que conocía, por estricta o críptica que pudiera ser.

Según progresaban el resto de explicaciones, ella se quedó callada a fin de poder atender mejor a cada palabra ajena, admirada de las posibilidades que portaba Senca al parecer de manera casual.

*****

Dado que tras la ilustrativa ronda al menos ella no poseía otras dudas, o bien intuía que las respuestas a tales tendría que encontrarlas en el camino, esperaría a que los otros estuvieran satisfechos antes de intentar cumplir lo que a todas luces era una orden de la pelirroja, y es que podría no parecerlo, pero el mentado tutor de la chamán básicamente la educó para que empujada a ese tipo de situaciones se enfocara en el objetivo incluso si no era algo sencillo y por ende necesitaba más que esforzarse.

Como heredera del sello de viento, Tea había recibido el poder del torbellino, etéreo impulso que en forma cónica era capaz de envolver un área con brazos cortantes y dejar su marca incluso sobre la tierra para otros inamovible. Al igual que el resto, cuando logró vislumbrar por primera vez esa capacidad traspasada estaba en un momento de extremo estrés, así que ¿cómo replicarla?

Yendo básicamente al tanteo la chica suspiró, cerró los ojos y asumió una postura firme, en guardia pero sin llegar a la ofensiva como tal, ello con las piernas separadas en forma de compás y los brazos flexionados a los lados, reposando con los puños cerrados que apuntaban hacia el frente; basándose en el estilo de combate que comenzó a desarrollar dentro del faro, Tea intentó concentrarse en el sello arcano sobre su pecho e invocar mentalmente su poder en el lenguaje que se suponía perdido. Debía hacerlo brillar, extraer su naturaleza y proyectarla cual torrente gaseoso hacia la que bloqueaba la salida, experta que confiaba pudiera de hecho detener algo como lo que destrozó al gigantesco Echo mineral sin mayor dificultad.

En ese momento un delicado brillo verdoso recorrió a la chamán desde las puntas descubiertas de los dedos de sus pies hasta el último de sus castaños mechones, sus ojos adquirieron fugazmente el mismo tono, incluso la intensidad, y con toda la seriedad del mundo la Cobb aseguraría que sintió el soplo del elemento invisible concentrarse a su alcance, más para cuando intentó emitir lo que era el disparo como tal, la forma que buscaba no se moldeó ni tomó sustancia la energía que pretendía canalizar, terminando pues en una pequeña implosión que no fue suficiente ni para empujarla a ella, aunque si para asustarla dada la falta de certeza que tenía sobre el resultado…

— ¡Kyaaa! — incluso gritó.

Parecía que ya tenían un plan y eso agrado a Helga, mañana iría al castillo y comenzarían la estrategia, pero hoy tenían que entrenar, tenían que experimentar con ese poder y sobretodo tratar de dominarlo. Tea fue la primera que trato de hacer algo, Helga le observaba, la chica parecía que lo iba a lograr, pero en el último momento parecía que no fue así.

Vaporum será mejor que te pongas ahí y esperes… a ver

Helga cierra los ojos y toma aire profundamente mientras empieza a pensar:

A ver… la última vez que lo hice… bueno, la primera vez estaba en una situación peligrosa junto con Vanille, bien es cierto que estaba tensa y temía que nos pasara algo y entonces sucedió. Supongo que he de recrear una situación similar, pero aquí no hay ningún peligro, ¿valdrá que piense eso? Supongo que sí puedo llevarme a un estado mental parecido sí que puedo reproducirlo. Pero aquí no hay espacio para crear una tormenta… aunque Helga, no olvides que es la electricidad, a lo mejor

Helga notaba un pequeño hormigueo en la punta de sus dedos, como si se le hubieran dormido, pero no era eso, sentía algo más, una pequeña chispa podía verse en algunos de sus dedos, respirando profundamente y tras unos segundos estira los brazos mientras dice:

Ja….

El grito se fue ahogando cuando se dio cuenta que no había hecho nada. Con una leve sonrisa se lleva la mano a la cabeza y dice:

Vaya… parece que no es tan fácil.

Anya asiente lentamente ante lo de que aquellos capaces de entenderlo podrían entrar a los templos del mundo espiritual, aunque se plantea las limitaciones que poseerán en dicho lugar.  En cualquier caso, aún les faltaba por localizar a la persona dicha por la tabernera y a alguien capaz de mandarlos al reino espiritual y de quien, a la vez, puedan fiarse... Sería una tarea más ardua de lo que parece, cree.

El asunto de los guardianes también es particular: de algún modo, imagina que sus dotes de combate no serán relevantes para muchas de las pruebas, porque no cree que aquellos que dividieron los sellos quisieran que alguien simplemente fuerte puediese hacerse con ellos. Aunque, visto lo visto, la única de la que podía tener dudas en su fuerza era la Mimali, ya que a Tea ya la había visto combatir.

En cualquier caso, parece que ha llegado la hora de tratar de controlar el sello, lo que hace que asienta y parece que sus ojos brillan con cierta emoción por el desafío y el nuevo poder, aunque es difícil saber si viene de toda Anya o solo de su parte Delemental.

Pero, antes que eso, viene una nueva escena entre Gauche y Tiki, a quienes mira ladeando la cabeza ligeramente.

- Diría que te preocupa más de lo que parece a simple vista, ¿me equivoco? -pregunta mirando al ladrón, mientras desenvaina tranquilamente.

En cualquier caso, ya Tea y Helga comienzan a intentar manifestar su poder, sin decir palabra y sin gran efecto, por suerte, ante lo que Anya plantea:

- Yo no seré tan sutil, aunque probaré algo distinto... 

Toma un instante de concetración para juntar las runas que quiere en su mente: la primera, antepenúltima y penúltima de la palabra que conjuró la otra vez, pensando que el resultado es algo que también se atribuye a su elemento. Una vez enfocada y con esas tres runas en mente, comienza a concentrarse en la furia ígnea que lleva en la sangre, alza la espada, señalando con ella a Naysse, y habla a un volumen normal, aunque con tono furioso:

- Ira. -tratando de mezclar, de alguna forma, las runas en lo que dice.

En caso de que no produzca ningún efecto, suspira y se enfoca una vez más en su espada.

- Quizás pueda tener que ver con las emociones y la intensidad... -plantea, concentrándose entonces en el fuego de su interior y en la palabra que se grabó a fuego en su mente, soltándola en un susurro- Incinerar.

Las respuestas volvían cada vez más confusas, había una princesa y un rey, y al parecer teníamos que hacer una especie de papel como en las plazas de las aldeas, ¿Contratados?, Repetí interiorizando el papel que tenía que tener a partir de ahora, no parece dificil, Miré a Helga con decisión, Naysse dice que a partir de ahora debo actuar como un trabajador, estoy a tu servicio aunque desconozco el pago por tal cosa y no lo quiero, ni monedas ni verduras. Acabé diciendo, sin quedar muy claro quizá que lo que no tenía claro es la diferencia entre actuar y ser alguien, de hecho solo sabía que al final de su actuación recibían monedas o tomatazos.

Una vez aclarado mi rol en la campaña, continué escuchando, Ultimamente todo el mundo me encomienda guardar papeles, Bajando un poco la cabeza ante la falta de seguridad en esa misión, Quizá podrían fabricar escritos más resistentes, como en una piedra. Lo guardaré como mejor pueda. Dije devolviendolo con cuidado a la bolsa de viaje que me acompañaba.

Después habló del plano espiritual de una forma clara, aunque no encontré respuesta, ¿sería ese el sitio donde viví?, Los poderes de los dioses eran demasiado elevados para aquellos seres, aunque el lugar no parecía tan normal como este, Vulfaira, Tú tienes respuestas. Parece fácil entrar a ese lugar, ¿sólo necesitas conocer a la persona adecuada?. Pregunté antes de que nos encomendara la última misión, probar nuestros sellos. No me gustaba la idea, no había nadie a quien enfrentar, no rezaba a los dioses para que me dieran sus poderes cuando no los necesitaba.

Sin mayor entusiasmo me senté en el suelo, y como hacía cada día encomendé mi rezo a una diosa, Icycla esta vez, Mujer de hielo, Naysse dice que debemos probar el sello, Comencé a rezar mientras abría el cuello de la ropa dejando ver el sello nuevo que había aparecido, entre otras muchas marcas cercanas, y desenvainando la espada esperando que surgiera algo como la última vez.

He seguido todas tus instrucciones hasta aquí, he sido paciente en mi búsqueda y he encontrado compañeros que comparten el sello que me impusiste, he priorizado tus órdenes a mis objetivos y ahora el séptimo elemento pide una prueba del sello para buscar los templos. Sin más, esperé a ver si como la última vez, una visión aparecía y algo acababa congelado, quizá el sello o la espada brillaran, quizá como pensaba la diosa no me otorgaría los poderes o se enfadara. En cualquier caso era ella la que me había hecho encontrar a Naysse, por qué no hacer lo que mandara.

Entendió el mensaje, subiéndose de nuevo al hombro de Gauche y susurrándole algo, esperando una señal y en cuanto la tuvo, de pronto su expresión y gesticulación cambió a la del inicio, una mimali feliz, risueña y amigable además de charlatana. Aquel cambio brusco podía descolocar a cualquiera, ¿Como se podía cambiar tan fácil de ser? - ¡Vale Gau Gau! ¿Entonces voy con la señorita Naysse? Le dio un besito en la mejilla y volvió a su sitio para comenzar con el entrenamiento que necesitaba para salir de ahí y volver a reunirse con el ladrón. - ¡Prometo esforzarme para hacerlo bien! Pero esas eran palabras vacías, por mucho que se esforzara, su mente estaba en blanco, no era capaz de conectar con su alma, con su energía... Con nada. 

Aquello sería una tarea titánica para Tiki, quien estaba haciendo un sobreesfuerzo mental con todo aquello. ¿Conseguiría siquiera contactar consigo misma? 

Poco a poco según intentabais usar vuestros poderes, veiais como Naysse bloqueaba vuestros intentos a veces de suicidar a todo el mundo, o de que afectara a todo el mundo.

Poco a poco y con vuestros intentos, Naysse sonreía - Vuestros intentos son loables, sobre todo el intento de convocar la mezcla de sellos. No obstante, no puedes modificar o crear los poderes que los sellos te otorgan. ¿O acaso creeis que el poder de un dios puede modificarse tan facilmente por un mortal? No... - Dijo bajando la cabeza.

-Cuando obtengais los cinco sellos, tendreis el mismo poder que un dios, pero cuando llegue ese momento también os llegará a vuestras vidas inconmesurables dudas, y un tamaño poder que os podrá someter en apenas un pestañeo. Por eso las pruebas, por eso este viaje. Por eso que os conciencieis en que vosotros sois herederos de un poder que no es vuestro, y ahora debeis hacerlo vuestro. - Se puso por delante de todos vosotros y con una especie de rezo, extendió un montón de simbolos que salieron de su cuerpo en el aire

-Concentraos, en que en vuestro interior se concentra todo el poder. Concentraos en que todo lo que saldrá, es lo que quereis que salga. Concentraos, en que lo que se quede dentro es parte de vosotros. - Cerró los ojos y alzó una mano hacia delante, empezó a concentrar entonces todos los simbolos en su cuerpo mientras que al mismo tiempo, diez simbolos en total del simbolo del fuego, se concentraron en su mano generando una gran bola de llamas que expulsó como si fuera el Incinerar de Anya.

-Si conseguis sentirlo así, lograreis superar todos los obstaculos que os pongan los templos. - Anduvo por delante de todos vosotros - Quemar, Rayo, Congelar, Estacar, Tornado y Curar - uno a uno respectivamente, Anya, Helga, Senca, Muerte, Tea y Tiki - Concentraos en esa acción, pero a pequeña escala. Y lo lograreis.

Acto seguido comenzasteis a entrenar como dijo Naysse.

Durante toda la tarde, errasteis muchas veces los poderes convocados con los sellos de la magia de los dioses, pero poco a poco comenzasteis a hacer cosas como vuestra mente quería dirigir aquel hechizo. A lo largo de la tarde y trayendo Naysse algo de beber y comer para que no desfallecierais, cada vez empezasteis a descontrolar menos vuestro poder, hasta que poco a poco, lograsteis lo que en un principio os parecía imposible.

Anya al decir Incinerar cuando lo controló, lanzó una nube de fuego que se quedó en el lugar casi como un pilar de fuego quemando lo que había en dicho pilar... Aire por suerte.

Helga convocando la Tormenta de su diosa, consiguió controlar los rayos en cuanto a su dirección de donde convocarlos desde sus manos en menor medida, aunque del cielo lo conseguiría convocar con rayos que parecerían reales.

Senca logró que su Congelar, fuera un aliento calmo que hacía que el aire donde llegaba se cristalizara y callera al suelo, aunque tras salir de la nube se derritiría.

Muerte por su lado, logró lo que tanto deseó con su Seismo. Un movimiento terrestre sacudió el lugar alzando del suelo una esquirla que no llegó a tocar el techo.

Tea logró controlar el viento delante suya generando un Tornado controlado que desaparecería raudamente cuando dejara de concentrarse volviendo el aire del tornado a la brisa natural.

Tiki consiguió reducir su burbuja de Purificación, a un ligero globo de agua que parecía poder recobrar heridas. Por desgracia no pudo comprobarlo con nadie, pero Gauche la probó y lo sintió tranquilo y agradable.

Tras terminar el día, todos estabais agotados, por mucho que Naysse os diera de comer. Ya era tarde y debiais descansar de tanto entrenamiento hasta el día posterior... Pero... ¿Que es lo que os depararían las ruinas? ¿Que es lo que os depararían los demás templos? ¿Que es lo que os depararía el mundo espectral? ¿Y a lo que os enfrentariais cuando tuvierais todos los sellos?

Había ahora muchisimás más incognitas que os surgían sin parar. A pesar de que ahora teniais respuestas, faltaba buscar el resto en vuestros viajes, allí donde los conocimientos de Naysse no llegaban, y allí donde vuestro poder se extendería hasta el mismisimo de los propios dioses.