En un pueblo donde los conflictos se resuelven con whisky, póker o balas queda poco espacio para los artistas, al menos para los artistas corrientes, tu, en cambio, tienes todo el espacio solo para ti. Has hecho de las paredes, postes, carretas, incluso las pieles de los caballos y las fuentes, tu lienzo personal.
Y si bien el arte es un modo de expresión, también son las pintadas amenazantes un buen modo de sugestión popular.
Cada noches podrás dar un nombre, ese aldeano tendrá un voto extra en las votaciones del siguiente día.
¿A quién señalaremos esta noche como malo malísimo del pueblo?
(tienes hasta el domingo para dar un nombre; puedes no dar ninguno).