De acuerdo Irina, entonces yo me bajaré a desayunar y en cuanto termine iré contigo a los jardines. Así si te puedo ayudar con el estudio, repaso y así si da tiempo podemos intentar hacer algún hechizo sencillo. Hasta luego - le digo mientras comienzo a salir de la Sala Común de Gryffindor.
Puedes postear directamete en el comedor. Los destinatarios por defecto son las personas que están dentro ahora mismo.
Me desperté en una bonita mañana de sábado. Normalmente los fines de semana suelo levantarme bastante tarde... entonces, un rugido de mi estómago hace que me incorpore. ¡Eh! ¡Aquí hay un horario y como no me de prisa, me quedo sin desayunar!
Horrorizada ante tal idea, me visto a toda prisa, y bajo las escaleras. Allí me encuentro con Irina y Dean, que están conversando sobre qué hacer. Supongo que me da tiempo a saludarles un minutito.
-¡Buenos días, chicos!-saludo peinándome a toda prisa con los dedos de una mano, mientras que con la otra, subo uno de los calcetines de colores que siempre me pongo.-Sí, sí, acabo de levantarme, lo sé. Es que los fines de semana suelo dormir mucho y claro, en casa puedo desayunar a la hora que quiera pero aquí no y tengo que acostumbrarme. Jack ya me avisó: "Tienes que acostumbrarte a levantarte temprano incluso los fines de semana para poder aprovechar el tiempo. Blablabla..."-imito la voz de mi hermano.-eso es lo que siempre me dice, pero claro, es que se está tan bien durmiendo en estas camas taaaan cómodas y mulliditas... Aunque prefiero mi cama de casa, es más pequeña, pero será que estoy acostumbrada y le tengo más cariño y no sé... Uf, hablar de camas me da sueño, ¿a vosotros no? Porque a mí sí...-mi estómago vuelve a rugir y me detengo.-¡Uy! ¡Que aún no he desayunado! ¡Ahora vuelvo!
Salgo corriendo sin darles tiempo a responderme y bajo a toda prisa las escaleras, eso sí, saludando a los cuadros y fantasmas que me voy encontrando por el camino. Un poco más y me pierdo... Es que es taaaan grande...
Finalmente, llego al Gran Comedor y cojo un par de bollos de crema que quedan sobre la bandeja casi vacía y me sirvo un poco de zumo de calabaza que me bebo enseguida. Mientras vuelvo a la Sala Común, me voy comiendo los bollos con una mano, mientras que con la otra sigo saludando a los cuadros y fantasmas. Cuando llego a mi destino, vuelvo a acercarme a mis amigos mientras me termino el segundo bollo.
-Uf, un poco más y no desayuno... ¿Qué queréis hacer hoy?-les pregunto antes de meterme el último trozo de bollo en la boca.
Cuándo llegas a la torre ves que debes haber estado merodeando mucho rato, ya que la mayoría de gente se va a las habitaciones a dormir. No ves a Remus, aunque sí al resto de chicos. Tan sólo faltan Mia y Dean.
Me acerco a mis compañeros de gryffindor.
- ¡Hola chicos! ¿Qué habéis hecho al final? ¿Habéis visto a Remus? Al parecer me he retrasado bastante...- Digo sentandome en una butaca y bostezando de nuevo.
- Decía que estaba cansado y se ha ido a dormir hace un rato. James y yo hemos estado jugando al ajedrez mágico un rato, y Peter dice que le gusta mirar... ¿Has visto a Mia?
-Que va, no he visto a nadie... Me había perdido.- Digo sonriendo timidamente. - En fin, entonces igual se ha ido a merodear por los pasillos ¡Suena interesante! Aunque me extraña que Dean se haya apuntado entonces. Yo la otra noche quise irme y él no estaba muy conforme. Ajedrez mágico ¿Eh? Pues nunca he jugado.
Cuándo bajáis a la sala común, tras despertaros, veis un aviso.
El prefecto busca a los dos niños Gryffindor de primero que vieron el incidente de ayer por la noche con Lion Terson, de Hufflepuff. Estará en el comedor esperando.
Cuando bajo a la Sala Común me encuentro un cartel diciendo que nos buscan tanto a Mia como a mí.
Slytherin estúpido, solo nos trae problemas. Mira que hacer aparecer una cobra para que envenene a otro alumno. Lo deberían expulsar, e incluso quitar la magia porque magos como él son lo que hace que utilicemos mal la magia.
Me siento en un sillón de la sala común esperando que Mia aparezca absorto en mis pensamientos.
A pesar de todo lo ocurrido anoche, conseguí dormir bien. Me desperté en mi cama, con mi gata en la barriga. La acaricié un poquito, es tan linda esta gatita... Pero debía levantarme, ¡un nuevo día amanecía y nuevas aventuras por vivir aparecían ante nuestros ojos! Además, no teníamos clase porque era domingo y tenía el día totalmente libre. Esta tarde iré a ver a Bongo, para que me enseñe a hacer esa tarta que debe estar tan rica. Por la mañana iré con Dean y los demás a hacer hechizos, ¡qué divertido esta siendo este fin de semana!
Me levanté y, por consiguiente, hice que Lilith se despertara. La miré con pena cuando me miró con sus ojitos llenos de odio por haber interrumpido su sueño.
-Perdona, chiquitina, pero tenía que levantarme.-le digo mientras acaricio su suave cabecita y haciendo que ella vuelva a relajarse y a dormirse entre ronroneos.
Antes de vestirme, me doy una ducha para espabilar un poco y después bajo a la Sala Común, con el pelo aún húmedo, pero no me importaba demasiado realmente, así estaba fresquita. Allí abajo veo a Dean y le saludo con una sonrisa mientras muevo la mano.
-¡Buenos días!-le digo. Entonces, me doy cuenta del cartelito que hay en el tablón, llamándonos a Dean y a mí para hablar sobre lo ocurrido con Lion. Parecía que al final no iba a ser un fin de semana tan entretenido como esperaba. Miro a Dean y señalo el cartel.-Deberíamos bajar, ¿no?
Dicho esto, me encamino hacia el Gran Comedor.
Si Dean no tiene objeción, ¡al gran comedor! :D
Me despierto y veo aquel cartel llamando a dos niños de mi curso, de gryffindor. Me acerco a Dean y Mia para ver si ellos saben algo.
- ¿Sabéis que ha pasado? - Digo señalando al cartel.
¡Siempre me perdía todo lo emocionante! Que mala suerte.
Un pequeño encontronazo con un chico Slytherin Irina y a los dos chicos que buscan somos nosotros - digo un poco nervioso
Ibamos al Gran Comedor, así que si estás lista vente. Si no, nos vemos dentro de un rato abajo - digo comenzando a moverme hacia la puerta.
Espero que no tomen ningún tipo de sanción contra nosotros.
Me quedo algo asombrada y asiento.
- Esta bien, voy para el gran comedor.-
No pregunto más, si me lo quieren contar ya lo harán.
al gran comedor!
Por la mañana aparece una extraña nota en el tablón de anuncios:
"DEBERIAIS EMPEZAR A ENCENDER LA CHIMENEA, EMPIEZA A REFRESCAR.
ATT: G.R.H.S"
Me levanto en modo automático y cojo mis cosas para bajar al gran comedor. Voy a la sala común y veo que todavía no hay nadie, así que decido irme sin esperar cuando veo una nota... ¿Sería del prefecto? No, el tiene una K en el apellido... Que raro.
Espero a que bajen algunos compañeros para preguntarles si suelen dejar notas de esas por aquí.
Al gran comedor!
Me levanté algo más tarde que algunas chicas de mi casa, pero es que se estaba tan bien en esa cama tan comodita, blandita, calentita y muchos más "itas" que no tenía ganas ningunas de salir de ésta. Aunque al menos hoy empezaríamos a hacer magia con la varita. Tenía muchas ganas de ello, así que creo que eso fue lo que hizo que saliese de la cama... Aunque, la verdad, no creo que hubiese aguantado en la cama tumbada sin hacer nada más de cinco minutos.
Al bajar, veo la nota que hay puesta en el tablón de anuncios.
"G.R.H.S"... mmm... Encajaría con Gryffindor, Ravenclaw, Hufflepuff y Slytherin... A lo mejor es un comunicado para todas las casas.
Sin darle más importancia, voy junto con Irina a quien veo a punto de salir.
-¡Buenos días, Irina! ¡Espérame!-le pido correteando hacia ella.-¿Qué tal dormiste? ¿Tienes ganas de ir a clase? Yo la verdad es que tengo un poco de miedo porque no sé hacer magia y a lo mejor no lo hago bien... ¿¿Y si creen que no soy una bruja de verdad?? Me sentiría muy, muy triste porque tenía muchas ilusiones de poder hacer magia y cada vez que viera mi varita me sentiría muy mal por no poder haberla utilizado bien...-digo poniendo una cara cada vez más angustiada. Realmente, me ponía a pensar en ello y me ponía realmente triste, tan, tan triste, que ni los mimos de Lilith me animarían... ni los bizcochos de Helen.-Aunque... si no fuese una bruja no hubiese recibido la carta, ni la varita me hubiese elegido, ni sería una metaformo...megamor...-intento decir esa palabra tan difícil que Jack me enseñó una vez para poder definir los cambios de color y de aspecto que sufría. Brad también lo sabía, pero es una palabra muy difícil, además, él es listo muy listo y los listos muy listos como mi hermano o él se aprenden (no sé como) las palabras más raras posibles-...¡Que no podría hacer esto, vaya!-finalicé rindiéndome mientras reía y hacía que mi pelo rojo cambiase al color azul turquesa del cielo.
Después de reír un poco más, sentí que mi estómago rugía y me llevé la mano al vientre.
-Ups, qué hambre, ¿Vamos a desayunar?-le pregunto a mi compañera.
D: Pensé que había posteado ya D:
En todo caso, al gran comedor, porfaplis :3
No prob. Os bajo. Dean ¡llegarás tarde! :P
Cuando me levanto, me voy directamente al aseo, tras conseguir que la mayor parte de mi pelo volviese a estado natural para que no me confundiesen con una criatura del Bosque prohibido, bajo a la Sala Común.
Veo que no hay prácticamente nadie en la Sala Común, y empiezo a preocuparme. Cuando veo el reloj me sobresalto al comprobar que era bastante tarde.
¡Lo que me faltaba!
Voy a salir corriendo cuando finalmente veo la nota en el tablón de anuncios.
¿G.R.H.S.? ¿Podría ser Gryffindor, Ravenclaw, Hafflepuff y Slytherin? A lo mejor es un anuncio común a todos. Con la de magía que se hace, al menos lo podrían personalizar un poco - pienso levantando la ceja.
De pronto vuelvo a recordar que ya llegaba tarde.
¡Pero seré burro! - Digo en voz alta mientras salgo corriendo hacia el Gran Comedor