Mapa regional de Londres
K&C: Kensington & Chelsea
H&F: Hammersmith & Fulham
City:
El centro de la ciudad, el corazón de Londres en el que se invirtió mayor esfuerzo para reconstruir, y que esta prácticamente finalizado. Un bocado apetecible para cualquier vástago, alberga la chispa de la reconstrucción europea, a pesar de la miseria que rodea el distrito. En ella se pueden encontrar los mejores comercios e industrias.
Westminster:
Contiene la mayor parte del centro oeste de Londres, y figuras tan notables como el palacio de Buckingham, la histórica Abadía de Westminster donde todos los monarcas ingleses han de ser coronados, o la Corte Real de Justicia. La importancia del distrito lo hizo prioritario en la destinación de fondos para la reconstrucción de la zona, a pesar de ser una zona con baja densidad demográfica. El distrito es todo un símbolo para los partidarios de la realeza, y un foco de injurias para sus detractores.
Lugares que visitar:
Southwark:
Al sur de la City, pero fuera de ella y separados por el Támesis, fue en comienzos la tercera joya de la corona de Londres, pero una serie de incendios históricos la han sumido en una depresión tan solo iluminada por la catedral de Southwark. Se sospecha que la dirección no-muerta de la ciudad pudo tener algo que ver en la depresión de este distrito, y lo cierto es que no se aconseja a ningún vástago acercarse demasiado a la catedral.
Resto de distritos:
Los distritos restantes apenas han visto una parte del dinero de la reconstrucción de Londres, y aún esperan esos fondos para reconstruir sus casas. Mientras tanto, viven en un entorno de semipobreza exactamente igual al que se vivía en la postguerra, lo cual convierte a sus habitantes en blancos fáciles de manipulaciones por parte de la gente con recursos.
Londres, capital del poder europeo:
Han pasado siete años desde que la segunda grande terminó, y los ganadores van recogiendo poco a poco los frutos cosechados. El problema es que en una guerra, los ganadores son realmente escasos, y los damnificados se cuentan por millones. Y por supuesto, Londres no es para menos. El centro de la capital, cuyo distritos céntricos son el símbolo de la urbe europea, están casi reconstruidos, con un nuevo esplendor fruto del dinero americano y el sudor europeo. Sin embargo, el resto de la capital no ha recibido tanto esfuerzo como los distritos de la City o de Westminster. Las heridas de los bombardeos son visibles para todos, y mucha gente ni siquiera ha recobrado sus hogares, destruidos por las explosiones, viéndose forzados a vivir todavía dentro de los refugios subterráneos, que han sido ampliados hasta dar como resultado gusaneras por todo el subsuelo de la ciudad, mientras la miseria campa a sus anchas por la superficie.
Mientras tanto, la vida continúa para los vástagos de la ciudad, mientras Lady Anne se esforzaba por regir la ciudad lo mejor posible en ausencia del Príncipe Mithras. Y es ahora cuando, con un vuelco en los acontecimientos, toda la realidad ha cambiado para los vampiros, sin dejar de ser la misma. Mithras, desaparecido durante la guerra, ha sido dado finalmente por destruido, aunque su búsqueda continúa. Su lugar pasó rápidamente a ser ocupado por su Regente, Lady Anne Bowesley, que está a punto de ser coronada Reina de Londres, título femenino para el Principe de la ciudad. En realidad, nada cambia, pues Lady Anne ya hacía y deshacía a su antojo, bajo la aprobación de Mithras. Pero ahora, los vástagos rivales de Anne que permanecían bajo la protección de la sombra de Mithras se temen lo peor, mientras el puño férreo de la pequeña Reina se cierne sobre la ciudad, remodelada a su antojo.
Actualmente, se ultiman los preparativos de la coronación, mientras Lady Anne ha demostrado una eficacia casi pasmosa en sus movimientos. El Sabbat, deseoso siempre de conquistar el territorio, fue aplastado cuando siquiera planteaban un movimiento al amparo de la ausencia de Mithras. Vampiros disidentes, anarquistas o no alineados, todos fueron eliminados en lo que se denominó La Noche de las Velas, y los pocos que pudieron salvarse escaparon rápidamente del lugar, de vuelta a la seguridad del continente o las zonas rurales.
Los siguientes son los rivales dentro de la Camarilla de la propia Lady Anne, pero para estos necesita no exponer su estatus político, por lo que simplemente aguarda el fallo de sus enemigos para despedazarlos en renuncio.
Londres bajo tierra:
Londres ha cambiado por dentro. Con sumo cuidado, debido al flujo del Támesis, se han ido conectando poco a poco los refugios antiaéreos que fueron construidos durante la guerra. La respuesta oficial que se obtendría preguntando es simplemente por comodidad, debido a que esos refugios se han convertido en los hogares de miles de ciudadanos que perdieron su casa y esperan una reconstrucción por parte del Gobierno. Pero lo cierto es que se trata en gran parte de una tapadera. Si se observan con detenimiento los túneles, se podría llegar a encontrar aberturas secretas que llevan a pasadizos desconocidos, quizá nidos de Nosferatus, o quizá algo peor. La asunción más lógica es que pueden llevar a niveles inferiores, y que con toda probabilidad una toda Londres bajo tierra. De todas maneras nadie ha entrado allí para averiguar sobre esas galerías, y la Regente tampoco tiene interés en agitar un avispero mientras aquello que more dentro no le de problemas.
Londres, en este momento:
La Regente se encuentra a punto de ser coronada, y los preparativos se ultiman para los próximos días. Sin embargo, algo extraño está sucediendo, algo que podría dar al traste con todo para la nueva Reina. Varios vampiros de cierto estatus han desaparecido, y la situación parece desestabilizarse por momentos. La Reina tiene mucho que demostrar si quiere mantener su puesto, y todo comienza por asegurar la seguridad de aquellos que le son fieles.
Londres: Localizaciones
[color=#2E8B57]Eliseo de Londres[/color]
Londres posee un único Eliseo por el momento, el Globe Theatre, el teatro de Shakespeare. El resto de los Eliseos de que disponía la ciudad fueron destruidos durante la guerra, y no se han vuelto a erigir. El Eliseo es utilizado frecuentemente por la Reina para sus audiencias, mientras disfruta del arte del Toreador Guardián del Eliseo, un vástago con varios siglos de antigüedad con el que comparte cierta conexión.
El centro del teatro, al aire libre, es utilizado por la Reina para sus audiencias, mientras el resto de vástagos pueden hacer vida social desde las gradas. Se trata de un Eliseo pequeño, que no pudo ser ampliado bajo tierra por causa del Támesis, pero que cuenta con el aprecio de la Reina, lo que es suficiente para que todos lo respeten pese a su sobriedad.
[color=#2E8B57]Palacio de Buckingham[/color]
El Palacio es uno de los edificios más emblemáticos de la ciudad, además de ser uno de los más protegidos. Los vástagos corrientes tienen su acceso restringido, aunque se sabe que los vástagos influyentes debaten asuntos de importancia en ese lugar, lejos de los oídos atentos de los pobladores del Eliseo. Por supuesto, todo esto sin el conocimiento de la casa Real, o quizá con el conocimiento y consentimiento que la gente sojuzgada otorga, pero esto último no se ha podido demostrar, y por el envejecimiento normal de los miembros de la casa real, en cualquier caso no podría tratarse de ghouls.
Durante la guerra el palacio fue desalojado, y todas sus riquezas retiradas a los interiores de Inglaterra para ser puestas a salvo. La única parte en sufrir daños fue la capilla real, quizá debido al fervor de los pilotos ingleses, dispuestos a proteger el edificio con su vida si fuera necesario, realizando maniobras kamikazes en caso de ver un peligro cerniéndose sobre el lugar y no disponer de munición para protegerlo. La capilla fue rápidamente reconstruida, y su seguridad no ha vuelto a ser puesta en entredicho jamás.
[color=#2E8B57]Palacio de Westminster[/color]
También conocido como el Parlamento, alberga la torre del reloj de Londres. Construido en el siglo XVII, y reconstruido casi en su totalidad tras el incendio de 1834, contiene más de un millar de habitaciones, así como la Cámara de los Comunes y la Cámara de los Lores. Sus dos torres más altas son la Torre del Reloj y la Torre de Victoria. A la primera corresponde una antigua Ley Inglesa que determina que la ciudad con el campanario más alto de Inglaterra será la capital del Reino. La segunda fue bautizada así en honor a la reina Victoria I, y contiene el Archivo del Parlamento, con todos los registros de la Cámara de los Comunes y la Cámara de los Lores.
La seguridad del lugar esta encargada a la División del Palacio de Westminster, encabezada en este momento por el Teniente Comandante Brian Horrocks. Los métodos militares son aún visibles en las fuerzas de seguridad del lugar.
[color=#2E8B57]Abadía de Westminster[/color]
A pesar de recibir tratamiento de Iglesia, esta estructura histórica de Londres tiene el tamaño de una catedral. En ella, desde hace casi 1000 años, se ha coronado a todos cada uno de los Reyes de Inglaterra, siendo oficiada la ceremonia por el Arzobispo de Canterbury. Esta tradición es tan fuerte, que coronaciones de Reyes fuera de la Abadía han llegado a ser declaradas nulas, hasta que tuvieran lugar en Westminster. La arquitectura actual es de estilo Gótico, y se rumorea que podría haber reuniones de cultos o sociedades secretas dentro de sus entrañas.
[color=#2E8B57]Catedral de Southwark[/color]
Esta Catedral es un símbolo de lo que queda del empobrecido distrito de Southwark. Construida en el siglo XII, ha sufrido diversas remodelaciones, siendo una de las más importantes la del siglo XIX, cuando se vino abajo toda la estructura medieval, y tuvo que ser reconstruida. Existen rumores de que este derrumbe fue provocado por la propia Iglesia, de manera que se pudiera iniciar una reestructuración interna a gran escala para dar albergue a algo aún secreto. Lo cierto es que mantiene una influencia muy notable en la zona, y rivaliza con Westminster por la afluencia de los feligreses. Ningún vástago osa acercarse demasiado, pues una fuerte presencia de la Fé se encuentra latente en el lugar.
[color=#2E8B57]Torre de Londres[/color]
La temible Torre de Londres. Ideada originalmente como residencia Real, fue abandonada de este uso por los Tudor, y utilizada a partir de entonces como prisión para sujetos fuera de lo común. No se tienen planos interiores que den una idea de los corredores que la pueblan, y sin duda sería fácil perderse en sus entrañas. Durante la 2ª Guerra Mundial, con la excusa de acomodarla para que sirviera de fuerte en caso de una operación de invasión alemana, fue remodelada con elementos de alta seguridad, y es bien sabido que los vástagos que importunan a la Regente y no son condenados a la no-muerte, pasan una temporada en la Torre, para salir como seres completamente en blanco, sin voluntad propia, presos de la mente de Lady Anne.
De forma tradicional, las joyas de la Familia Real se guardan en el interior de la Torre, lo cual la hace un objetivo tentador para ladrones de guante blanco, pero por el momento se desconoce de ninguna violación de la seguridad del lugar.
Actualmente no se permite la entrada de turistas al interior.
[color=#2E8B57]Reales Tribunales de Justicia[/color]
Si la Regente no se encuentra en el Eliseo, probablemente se encuentre en el Tribunal de Justicia, enfrascada en alguna de sus complicadas operaciones financieras. Por regla general es difícil entrar en el ala del a Regente, pero allegados o gente que cuente con su beneplácito podrán disfrutar de todas las comodidades del lugar, como si de un segundo Eliseo se tratara. Además, el lugar esta acondicionado para recibir grandes acontecimientos, y posee un restaurante propio de alta cocina en el que aquellos que dispongan de suficientes libras podrán degustar platos exquisitos en las mejores compañías.
Londes: Localizaciones
El Submundo
Si bien la Londres de la superficie es un lugar que poco a poco va cobrando un esplendor jamás visto en sus calles, el submundo de Londres es un tema totalmente distinto. Bajo varios pies de tierra se construyeron múltiples refugios, se reconvirtieron estaciones de Metro en lugares donde permanecer a salvo de las bombas, y se mantuvieron durante todos los años de la guerra.
Cuando la guerra terminó, y aunque la realidad había sido muchísimo más benevolente que las expectativas acerca del Blitz alemán en cuanto a bajas humanas, las pérdidas materiales habían resultado cuantiosas. En algunos barrios se estima que el porcentaje de viviendas destruidas o seriamente dañadas llegaba la 95%, y cientos de miles de personas quedaron sin hogar. Los refugios, único lugar en el que la gente se sentía segura durante los bombardeos, se fueron transformando en hogares improvisados. Al término de la guerra, un dictamen del Gobierno quiso desalojar las estaciones de Metro de la gente que las poblaba, pero lo único que consiguió fue desplazar a miles a otros refugios subterráneos que tuvieron que ser ampliados. La Regente esperaba que la situación se normalizase, y que el miedo a morir ahogados por el Támesis fuera más fuerte que la necesidad de los londinenses, pero la situación se le escapó de las manos. Tras varios accidentes en zonas cercanas a las orillas del río, y una docena de muertos ahogados, los ciudadanos refinaron sus sistemas de excavación al tiempo que evitaban acercarse la río. Los refugios empezaron a interconectarse entre ellos, con gusaneras de apenas metro y medio de alto, que eran propiciadas y financiadas desde las sombras por la facción de Nosferatus Londinenses. La Regente había perdido esa guerra, y bajo sus tacones, a algunos metros bajo tierra, Londres se movía con fiereza, extendiendo galerías a toda velocidad.
Resulta fácil acceder al primer nivel de galerías, donde se encuentran los refugios contra bombardeos y gran parte de la población de los núcleos urbanos aún no reconstruidos. Se entrelazan entre ellas con largos túneles, y existen pocas galerías que no posean una salida al exterior o una puerta trasera a alguna estación de tren. Sin embargo, existen rumores acerca de un nivel por debajo del nivel de los refugios, tan profundo que podría ser escavado incluso por debajo del Támesis. No existen registros de ninguna entrada a este supuesto nivel inferior, pero la leyenda continúa, respaldada por civiles que afirman haber trabajado en galerías por debajo de los refugios, sin llegar a recordar con exactitud ningún acceso.