Partida Rol por web

El mago se sento y se estiro en el asiento, ignorando a su acompañante. Prendio un cigarrillo y le dio una larga bocanada satisfecha antes de arrancar el motor y comenzar a conducir. Condujo mientras fumaba unos minutos, hasta que llegaron al Lago Congelado donde habian tenido la primera reunion, hacia ya mas de un año. De pronto, como si se diera cuenta de que estaba haciendo, se sobresalto y bajo la ventanilla automatica de su puerta.

-Si Aveline se entera de que estoy fumando en el auto otra vez, me mata dijo casualmente Mujeres, eh? Me vio salir caminando de disparos en la cabeza, pero en cuanto enciendo un cigarrillo, empieza con su perorata acerca del cancer de pulmon y que se yo...

Pensar en su chica le hizo sonreir. Apago el cigarrillo en la inmovil mejilla de Aurora.

-Alex me comento que cuando los estaquean, aun siguen conscientes comento, aun en forma casual, como si estuviera manteniendo una conversacion con un colega. El tono cambio, sin embargo, cuando volteo la cabeza de la vampira y la miro directamente a los ojos Voy a decirtelo una ultima vez, porque la verdad ya el juego cansa. Firma el contrato, cumplelo y hazlo cumplir, y vive el resto de tu existencia siendo un parasito civilizado.

La voz era mas fria que el lago congelado. No habia rastro de jovialidad, fingida o no, en su voz.

-No voy a apelar a nada mas que la autoconservacion. Tuya y del resto de tus bestiales hermanos. Me tomo menos de un segundo dejarte en este estado, asi que preguntate: Que puedo hacerte si te tengo durante dias, o semanas? Y si Alex me ayuda, ademas?

Le poso la mano en el hombro, apretando con firmeza.

-Voy a retirarte el hueso del corazon. Y luego vas a firmar. Porque sino lo haces, no matare yo a tus hermanos. Te reprogramare a ti para que lo hagas, y no lo haras limpiamente como lo hice a Atha. Y vas a estar tan consciente en esos momentos como estas ahora. Entiendes?

En cuanto le quitó la "estaca" del pecho se sacudió con un espasmo bastante violento. Le dolía bastante y el daño era considerable.

Le devolvió la mirada desafiante de segundos antes de esa birria de combate.

Chico, si ya con olerte el aliento y tu peste a tabaco es suficiente tortura. 

¿Que parte de "me paso tus putas amenazas por los colmillos de la concha" es la que no terminas de entender? -Dijo con una sonrisa condescendiente. 

En fin, mientras gano tiempo para escapar de este coche...  Dijo poniéndose cómoda y mirando un poco a su alrededor-¿Por que no me lees ese contrato detenidamente y me explicas como va a evitar que si lo firmo y me sueltas no mate indiscriminadamente a durmientes solo por resentimiento.

Quiero una copia si es que lo llego a firmar y otra cosa, vas a tener que liberarme de las esposas si quieres que firme. -Dijo moviendo los brazos que tenia a su espalda.

Allan suspiro, hastiado.

-Puedes olvidar la imbecilidad de hacerte la dura de una vez? dijo con voz cansina Ya pasamos por eso y no tienes con que respaldarlo, solo te averguenzas a ti misma.

Le acerco la tablet hasta que quedo a centimetros de la cara de la Tremere

-Lo unico que necesitas saber es que si matas algun Durmiente, nosotros lo sabremos. Podemos hacerte explotar o pudrirte de adentro para afuera en segundos desde el otro lado del mundo. Si vas a firmar, apoya la naricita contra la pantalla. Sino, de vuelta a dormir. Te despertare para que veas lo que queda de tus hermanos antes de ponerte a descansar a ti tambien. Ultima oportunidad, y esta vez en serio.

Aurora hizo algo que pareció un suspiro pero sin aire en los pulmones era confuso. Luego miró a su alrededor, como si esperase ver algo o alguien que le ayudase. No vió nada, pero claro, estaba oscuro en mitad del bosque, le recordó a Max y sus paseos nocturnos.

-¿Que habrias hecho tu? -Pensó angustiada.

Se quedó mirando la tablet en silencio unos segundos mas. No tenia su escopeta, Estaba malherida y algo le decia que esas heridas eran mágicas y llevaría mucho tiempo y vitae curarlas, no lograria huir muy lejos . Notaba magia a su alrededor por lo que el coche tendria encantamientos de a saber que tipo. Sin ver las esposas no se las podia quitar.

Se le ocurrió prenderle fuego en la cara y dejarle una bonita cicatriz pero solo seria un bonito y ultimo  acto de rebeldía

Fue descartando una por una los opciones de su repertorio para salir de una situación como esa. Al final tuvo que recurrir a su ultimo cartucho.

-Está bien, me rindo, firmaré.  Le dió con la nariz donde indicó Allan y luego no dijo nada mas. 

Se quedó pensando en Yuri, tuvo tiempo desde la toma de la capilla de plantearse si lo que hizo ese nosferatu vendiendo la ciudad para proteger la ciudad era honroso o si hubiese preferido quemarla hasta los cimientos antes que entregarla. No se imaginó que tendria una situación tan parecida en tan poco tiempo.

Allan se rio entre dientes.

-Buena chica la felicito mientras el tambien ponia su huella digital de su pulgar en la tablet Tan dificil era?

Apreto un boton del volante del auto. La puerta de pasajeros se abrio, y el se acomodo para expulsar a Aurora de una patada, que cayo en la nieve fresca.

-Ahora fuera de mi fucking coche dijo mientras se inclinaba sobre la puerta para arrojarle la tablet que le habia hecho firmar sobre el pecho Be seeying you.

Sin una palabra mas, cerro la puerta y acelero. En unos segundos el auto se perdio de vista. Instantes despues de eso, las esposas se abrieron con un click, y se convirtieron poco a poco en polvo de oxido.

Esperó a que se fuera y trató de ponerse en pie con esfuerzo, ahora si que se dio cuenta de que le dolía el pecho como si le hubiesen atravesado con una vara ardiendo. No le quedó mas que arrastrarse hasta el árbol mas cercano para usarlo de apoyo.

Una vez logrado eso se quedó ahi sentada quieta y en silencio teniendo pensamientos inconexos, sin saber muy bien como sentirse durante un tiempo que no se sabe si fueron minutos o una hora.

-¿Como he sido tan imprudente?  -Quiso llorar, incluso notó ese nudo en la garganta y la tensión en los ojos que anunciaban las lagrimas.

No Aurora, no vas a autocompadecerte. Eso es para los humanos, vas curarte las heridas, encontrar la forma de romper ese contrato, vengar a Atha y el honor de esta cofradía.

Se volvió a quedar en silencio otro tiempo indefinido. Luego cogió el teléfono mandó una ubicación y un mensaje de "Mueve el culo y recógeme" a Leonid.