Cuando Camus, Shaka y Aldebarán parten como alma que lleva el diablo a ayudar a sus amigos en el Ágora.
Dicho y hecho, en cuanto Dokho, nuevo Gran Patriarca del Santuario os ordenó acudir de inmediato a ayudar a vuestros compañeros, se podía decir que no había dado tiempo casi a que acabase el mandato cuando ya estábais saliendo del Partenón como alma que lleva el diablo.
¿Correr? No, a la velocidad que íbais casi se la podía denominar volar. Por lo que los santos dorados habían percibido, Shaina, Algol y Jabu podrían encontrarse en serio peligro, por lo que vuestra ayuda podía evitar innecesarias muertes.
Desde el Partenón, hasta el Ágora, la distancia era considerable. Si estaban en plena batalla, tardaríais lo suficiente en llegar como para aterrizar por allí a recoger los cadáveres...
No, debía de haber otra manera. Quizás ser guiados por algún caballero de la guardia por un atajo...
Quizás la teleportación...
Pero no correr. Corriendo, no íbais a llegar a nada...
Mejor que nos teletransportemos, nuestros compañeros estarán en verdadero peligro.
Ocultemos nuestros cosmos, de esta manera el enemigo no sabrá que vamos para alla -decia Camus mientras emepzaba a ocultar su propio cosmos -
¿Los Caballeros de Oro no tenemos la velocidad de la Luz?
XD hago como el hombre de Hielo...XD, me hago una rampa mientras avanzo para llegar pronto...es broma.
Tienes razón Camus, revelar nuestra posición al enemigo es un grave error cierro los ojos y me concentro brevemente, reduciendo mi cosmos al mínimo, de tal forma que pase desapercibido ante cualquier intento de detección estoy listo para partir. Solo espero que lleguemos a tiempo para salvarlos mi voz suena levemente angustiada, saber que otros caballeros estaban en peligro y no estar allí para protegerlos era algo difícil de soportar.
¿Teleportarnos? ¿No se suponía que el único capaz de hacerlo era Mu?
-Llegaremos porque no tenemos otra opción, Aldebarán . Lo que he visto es una situación bastante grave.
Apenas hablo, reduciendo mi cosmos al mínimo mientras voy a la par que mis compañeros, totalmente pendiente de lo que he visto en el Agora, preocupado por el resto de compañeros que allí están.
Ya nos falta poco, algunos caminos que usa la guardia los recuerdo bien*. -decia sonriendo Camus -
No tardaremos mucho en ver el Agora , llegando con celeridad por estos atajos de la guardia.
Ya nos falta poco, algunos caminos que usa la guardia los recuerdo bien*. En el anime recuerdo que Camus bajo a otras casas Zodiacales , en el caso de cuando saco a uno de los de bronce de la dimension de Saga, o donde congelo a Hyoga, asi que se supone que Camus conoce los caminos secretos de la Guardia.
Mientras corréis, ocultando vuestro cosmos, al tomar una curva, antes de pensar en teletransportaros, Aldebarán arrolla a un caballero.
Éste resulta despedido un par de metros, cayendo al suelo, tras la embestida del enorme caballero dorado. Al fijaros de quién se trata, veis a Marin, que estaba de guardia por la zona.
Tras el impacto, se incorpora ágilmente dando una vuelta en el suelo, y os encara. Al ver que sois vosotros, baja la guardia.
-¿Qué pasa? ¿A dónde vais tan corriendo? ¿Pasa algo?
En el momento en que termina de haceros estas preguntas, una inmensa luz procedente del Ágora lo envuelve todo, el Ágora, el Santuario... No es un cosmos agresivo, pero... Es increíble. ¿Acaso hay alguien con más poder que Atenea? Os parece que ni el mismo Hades poseía un cosmos tan magnífico.
La luz crece en intensidad, más y más... Hasta que al instante todo queda de nuevo como estaba. Han sido unos instantes nada más, pero os ha quedado claro que era algo magnífico, único.
-¿Qué...? ¿Qué demonios ha sido eso?- pregunta Marin, asustada- ¿Quién hay en el Santuario que posea un cosmos así?
Tirada: 1d3
Motivo: ¿Quién se la lleva por delante?
Resultado: 2
1. Camus
2. Aldebarán
3. Shaka
Caballero del Águila, no hay tiempo ahora para explicaciones, llevanos guiándonos por el atajo más corto y rápido que conozcas, debemos de llegar al Ágora enseguida, no hay tiempo para explicaciones, Guianos -decia autoritario y frío Camus, después de que pasara aquel extraño y magnífico Cosmos -
Es de crucial importancia que llegemos cuanto antes al Ágora, haznos el favor de guiarnos rápidamente y sin demora al Ágora, Caballero del Águila -decia mirando con su autoritaria mirada a Marin-
Per…perdona Marin, no te había visto le digo a la pobre mujer después de arrollarla, completamente avergonzado de mi mismo por mi falta de atención lamento mi torpeza, pero es que la situación es bastante complic… me quedo a media frase al notar el inmenso cosmos procedente del Agora. No recordaba haber sentido nunca un cosmos semejante, ni siquiera durante la guerra sagrada, lo cual no hacía sino aumentar mi ansiedad.
Camus tiene razón, ya habrá tiempo para las explicaciones Marin, pero ahora necesitamos que nos guíes hasta el Agora sin perder tiempo. Puede que la vida de Shaina, Algol y Jabu dependa de lo rápido que lleguemos.
Vale que ha sido por los dados pero, ¿no podías haber echo que fuera Shaka o Camus el que se chocaba con Marin? Pobre mujer, se ha debido de pegar unas costalada de aupa xDD
Alargo la mano para volver a poner en pie a Marin, y antes de que pueda hablar se ve el cosmos.
- Camus tiene razón Marin... luego las explicaciones. ¡Tenemos que llegar ya! Shaina puede necesitarnos.
Son palabras suficientes para que cualquier miembro de la guardia se ponga en marcha, aparte de haber sido testigo de la luz que provenia del Santuario. No obstante, algo extraño me inquieta mientras seguimos corriendo.... No se percibía maldad en ese cosmos. ¿Por qué entonces la certeza de que había gente en peligro? ¿Quién poseía ese Cosmos?
Marin ni siquiera cuestiona vuestras órdenes. En cuanto habéis dicho que podía haber caballeros en peligro, y le habéis mencionado el Ágora, en seguida se le vino a la mente el grupo que hoy debía patrullar por la zona, es decir, Ofiuco, Perseo, y Unicornio.
Os hace un leve gesto con la mano de que la sigáis, y parte corriendo a una velocidad increíble, ya que se trata de uno de los caballeros más veloces de todo el Santuario.
Vais tan rápido que apenas sabéis por dónde os ha llevado, ni falta que hace. No os fijáis en esos detalles, lo único que deseáis es llegar lo antes posible al Ágora.
Poco a poco, os alejáis del Santuario. Ya casi estáis. Un poco más, un poco más...
Fin de escena. Por fin llegaréis en la próxima :)