Y entonces oí a Camilo hablar tras el muro. Bajé mi paleta y incliné mi cubo-cabeza, ligeramente más relajado - ...sí que eres Félix entonces - entonces empecé a reír nerviosamente - je... jejeje... jejejejeje... Antonio... jejeje... jeje... - y empecé a caminar arrastrando los pies, por entre los oscuros corredores de casita, con el el cubo en mi cabeza inclinado mirando al suelo.
¡Wowowo!
El moreno fue arrastrado tras la pared y, al llegar al otro lado, se giró para tantear el yeso desde el otro lado.
Ugh, casita... la verdad que desde este lado no se te ve tan linda.
Al volver a mirar a Bruno, se encontró de frente con un cubo de metal, o una palangana... no lo tenía muy claro.
Oye, cuñado, diría que puedes quitarte esto. No hay nada que yo pueda hacerte aquí. Ni siquiera animarte a utilizar tus poderes.
Ayer no animé a nadie porque para hacerlo tengo que estar en la misma habitación y, aunque Pepa me dijo el primer día lo que descubriste ayer, no sabía qué estaba pasando y preferí no intervenir de nuevo.
Pero mi pequeña Dolores me susurró al oído y me dijo que había estado escuchando lo que sucedía donde estaban la abuela Alma e Isabela y que no había escuchado a la abuela decir lo que Agustín aseguraba...
El caso es que yo no me fío demasiado de la abuela. Y Agustín es cierto que la trajo de vuelta como dijo... supongo que igual sí que es de los buenos. Pero no debería haber traído a Alma. Ahora mismo hay demasiada gente que asegura saber cosas de los demás.
¿Por qué esa obsesión por mi pequeño, Bruno? Yo empiezo a pensar quien quemó a Luisa pudo ser Pepa defendiéndose sin saberlo. No sé... no me fío demasiado de Agustín. De Luisa no sé qué pensar. De ti, de Pepa, de Dolores y de Julieta confío por completo. De Antonio y Camilo confío entre medias.
-No! - dije casi violentamente, protegiéndome el cubo con los brazos, abrazándolo. - Jorge nunca se quita el cubo!... nunca!... - el estado mental de Bruno dejaba mucho que desear en estos momentos. Parecía una especie de loco asustado con un balde en la cabeza.
De repente empezó a sonar música, como cuando los vecinos ponen el audio a tope y retumban las paredes. Acerqué mi cabeza hacia una de las ranuras de la pared, minúscula, y pegué mi cubo contra ella.
De repente una tranquilidad y una relajación máxima se apoderaron de mí, como la primera vez, cuando Félix lo hizo.
Y de repente me sentí feliz. Me sentí feliz, y de repente me sentí... extremadamente arrepentido. Pero feliz! Era extraño.
-FELIX!!! - me acerqué a él impulsivamente con los brazos en alto como para darle un abrazo. - FELIX!!! ESTO ES GENIAL!! oh dios, pero que horror. No sé... no sé como... oh dios, cómo pude pensar que Antonio era culpable. Le odiaba tanto!! TANTO!! estaba tan contento cuando le expulsé, que nada más me importaba en este mundo. Tenía que deshacerme de él antes que hiciera daño a toda la familia!!
-Pero ahora no... Dolores tenía razón, alguien me hizo odiar a Antonio, lo entiendo ahora... - pero el daño había sido hecho. Justo después de votarle, se celebró la fiesta y todo mi odio se disipó. Y si aún seguíamos aquí mañana, es que Antonio no era tan culpable al final.
-Oh, perdón, te interrumpí... - volví a decir, tímido y retraído. Apartándome. Pero mi aspecto depresivo definitivamente se había vuelto más animado, con cubo y todo.
Y entonces lo aclaró. Tal y como sospechaba, Dolores había oído algo y se lo había susurrado a Félix. Como hizo conmigo - Entonces Agustín dice verdades a medias. La verdad es que ha estado diciendo cosas que sólo él podría saber. Y si tanto sospechaba de Alma no entiendo porqué la ha traído a ella, de hecho yo hubiese traído de vuelta a Mirabel, hubiera tenido más sentido visto como se la llevó la Casita, no? -
Era la primera vez que hablaba tanto con un cubo en la cabeza y me estaba quedando sin aire, así que me senté. Y entonces mencionó a Luisa, y que quizás fue quemada por Pepa. Y mi cubo explotó (mentalmente). - ... - eso significaría que Luisa podría haber atacado a Pepa.
- ... - estuve pensativo un buen rato antes de decírselo, creía que él no lo sabía. O se lo había dicho antes ya? no lo recordaba. Por si acaso, decidí explicárselo - Félix, la última vez tras las paredes, hablando con Dolores también me dijo que quizás no debería fiarme de Luisa. Le expliqué que me picaron justo cuando fui a ver a Luisa al establo de burros, pasando por el jardín. Desde el primer día, Luisa me pidió que fuese su confidente y me habla desde los establos para contarme todos sus temores, sin que nadie más nos oiga, durante el día y la noche si hace falta. Fue allí que ella me dijo que puede intercambiar habitaciones de sitio, como protegiendo a la gente. Ayer dejó de hablarme y empecé a sospechar cuando vino a mi cuarto justo seguida de Camilo, como si ella le dejase entrar. No he ido a ver a Luisa al establo desde entonces. Pero estaba demasiado obsesionado con Antonio y intentar convencer a todos de que era un peligro para la familia!!... perdóname Félix, me siento horrible ahora - no le había hecho caso, no pude evitar votar a Antonio cegado por el odio.
-A este punto, dudo tanto de Luisa como de Agustín. Me siento como si Luisa me hubiera estado manipulando y dando instrucciones desde el principio. De hecho ella fue quien me insistió en hacer la primera Profesía. Ella fue la que me insistió a invitar sólo a Julieta Dolores y a ella misma a mi cuarto. Pero una vez allí no actuó como el plan que me había explicado y empezó a exigirme decir una profesía. Me sentí como si quisiera hacerme quedar como un mentiroso frente a Julieta y Dolores.
Y por fin me lo saqué del pecho. Parecía que todos acudían a mí para intentar ocultar secretos y montar planes, y estaba empezando a afectar a mi salud mental. - Santo cielo, rezo para poder hacer otra profesía pronto. Malditos astros y la suerte que traen!...
No se porqué, algunas partes "no habladas" se han quedado en negrita y no puedo quitarlo.
Pues esperemos no estar equivocándonos. Mañana Intentaremos reparar esto y aclarar sobre Agustín y Luisa .
Parece que Camilo pudo copiar mi habilidad para las fiestas. Es curioso, porque la realidad es que cuando yo montaba una fiesta esta duraba todo el día y toda la noche, pero Camilo se las ha arreglado para hacer una solo nocturna. Eso es incluso mejor.
La noche iba a ser larga, pero al menos teníamos fiesta.
-Pues sí! Por lo que dijo Camilo en mi Torre, sólo puede copiar una parte de nuestros poderes.
Que bien me había sentado mentalmente esa fiesta-pausa en este preciso momento. Mientras oíamos lo que iban diciendo los demás, decidí que era bueno enseñarle a Félix un poco alrededor mientras nos movíamos al ritmo de la música. Ya no había una habitación entera donde dormir o comer, eso quedó destruido con la primera Casita, pero al parecer la estructura era similar, grietas incluidas.
- ... - las palabras de Luisa me entristecieron.
- Luisa fue la primera persona a la que le enseñé la maraca que saqué de tu habitación. Ella sabe que mis ratas son reales - pero ahora decía que debíamos ponerlo en duda... - está claro que Luisa está mintiendo... mañana... se lo explicaré a todos. - aquella traición no me la hubiera esperado los primeros días. Pero visto cómo actuó la noche anterior, lo llegué a sospechar. Eso no hacía que fuese menos doloroso - Lo que no entiendo es en qué miente Agustín. Dolores no puede aclararlo, pero tampoco parece muy fijada en acusarle, será por la fiesta?.
Dolores lo que me susurró fue que no había oído a la Abuela Alma decir lo que Agustín insistía.
Con las nuevas palabras cada vez me sentía más dolido. -Dios santo, Luisa siempre me hablaba en los establos medio llorando y super confundida, haciéndose la tonta. Menudo cambio de personalidad - y que lo dijese yo...
Cuando Félix por fin me dijo qué le había contado Dolores exactamente, asentí con la cabeza-cubo - ...eh... ok... entonces...? porqué ha traído a la abuela de vuelta? - no entendía nada.
-Quizás la abuela nos odiaba? y Agustín no contaba con que se montara otra fiesta? - desde la fiesta todo el odio y las rencillas de los presentes se habría disipado, por lo que faltaba ver qué diría la abuela sobre todo esto.
-Por cierto Félix, elegí traerte a ti tras las paredes después de que Camilo dijese que te duplicaría a ti . No me fiaba de que se aprovechasen de eso para falsificarte si Camilo no era inocente. El peor escenario en mi cabeza era que si Camilo fuese malo, pudiese suplantar a alguien sin que nadie se diera cuenta, y que nunca pudiésemos saber quién era. Podía hasta haber sido un farol de Camilo para duplicar a otro, pero me arriesgué de todas formas y te protegí a ti.
Bruno, creo en ti, pero te ha salido mal la jugada, porque alli fuera yo hubiera sido tu mayor defensor
Sonreí agradecido a Félix por sus palabras... aunque no viera nada porque mi cara estaba dentro del cubo.
-No importa Félix - por mucho que me acusasen ahí fuera, tenía todo el tiempo del mundo a la mañana siguiente para negar todo lo que estábamos oyendo tras las paredes - lo importante es que hoy no pueden atacar, y que Camilo ha usado tu habilidad para el bien. Yo mañana diré lo que sé, y rebatiré todo lo que ha dicho Luisa. Ojalá mañana toque y pueda hacer mi última profesía, aunque quisiera poder hacerla delante de todo el mundo en mi torre. Pero para eso tendrían que coincidir demasiados factores de suerte...
Me sentía mucho más tranquilo que de costumbre, a pesar de las acusaciones. Sería por la fiesta? No, probablemente porque ahora sí que estaba seguro de lo que tenía que decir. Sin tanto odio cegador de por medio.