-Lord Baelon parecía convencido de que estaba obrando bien. Como vos habéis apuntado él creía que estaba tratando a todo sus hijos por igual, el muy necio. Es posible que busque otra forma de resarcir a Maegor no lo dudo, pero aún así nos ha estado mintiendo toda nuestra vida y dando prioridad a su hija de Lys. Por mucho que consiga un matrimonio favorable para mi hermano nada es comparable con quitarle lo que él ha pensado era su derecho de nacimiento. Quitar a Elaena el honor de ser la madre del favorito. Menospreciar la forma en la que nos ha criado, y decir que la tiene 'domesticada'. En fin, mi señor, no creo que ese hombre consiga hacer nada que nos haga perdonar lo que ha hecho, por lo menos por mi parte.
Con respecto a la de Lys, creo que ya hay rumores sobre sus malas artes que espero espanten a cualquier marido, a parte de la duda sobre el padre de su hijo. Sinceramente yo se la daría de come a Arrkax para terminar más rápido, pues esto puede llegar a convertirse en una guerra interna. Pero no es preocupéis, aceptaré cualquier decisión que tome Lady Elaena pues es ella, de entre todos nosotros, la que más a sufrido los actos de traición de Baelon.-
Daenyra echó un vistazo hacia la Celtigar, impaciente porque hablase de una vez.- ¿Creéis que tardará mucho? ¿Puedo quedarme?-
Espero realmente que todo se pueda resolver lo mejor posible para la casa Baelralys. Lo último que necesitamos es un conflicto interno.- Dijo el Maestre preocupado por la situación y haciendo una señal a la chica para que tomara una de las sillas de la habitación y se sentara a esperar.
Para cuando la joven Ariadna volvió a recobrar la conciencia pasaron varias horas de espera y lo primero que hizo la Celtigar fue llorar de dolor y pedir que la volvieran a dormir. Sin embargo esta vez Forthwind no le suministro la leche de amapolas.
-Sé que el dolor es insufrible pero necesitamos que nos digas que pasó.- Dijo siendo un tanto inhumano. -Dinos que fue lo que te sucedió y podremos dormirte de nuevo para que no sufras hasta que podamos curarte y dejarte bien.- Agregó.
La habitación se llenó rápidamente de un terrible olor a gangrena que hizo que los maestres tuvieran que abrir una ventana y taparse la boca para poder respirar. Daenyra también sintió ese olor y le entraron arcadas de lo repulsivo que era. Ese aroma estaba acompañado a un torrente de sangre negra que indicaba el terrible estado en el que se encontraba la chica.
-Me citaron para hablar sobre el embarazo de Pricilla.- Logró decir entre llantos. -Y reconocí a su guardia, a Ser Etain. ¡El me apuñalo! él fue el que me lastimó.- Dijo la chica esperando que eso fuera suficiente como para que la volvieran a dormir.
-Creo que tenemos lo que necesitábamos.- dijo el maestre Borges. -Fui designado por la reina para tratar a la chica así que al transmitir el mensaje que dio la joven antes de morir lo estaré haciendo en nombre de ella, pero no creo que sea conveniente decir que la joven Baelralys estuvo presente en la confesión ya que podrán ser visto como una manipulación. Así que les pido que no hablen de la presencia de Daenyra en este lugar y también pido que la joven se retire antes de informarle que la chica murió. Me niego a hacer sufrir más a esta niña, la próxima dosis de leche de amapolas que le dé será la suficiente como para hacer que la chica ya no despierte más.-
¡Eso olía peor que las cuadras! Tuvo que hacer acopio de todo el valor posible para soportarlo, y cuando el Maestre Borges dio por terminado el asunto estuvo más que contenta por abandonar la estancia.
En la puerta, antes de irse le susurró unas últimas palabras a Forthwind.
- Maestre, vos sois leal a nuestra casa como ningún otro. Habéis sido capaz de ofrecer vuestra vida para salvar nuestro honor sin pensarlo dos veces- y también había visto como nadie, tan solo ella, habían hecho nada por sacarle del calabozo.- Si la casa se dividiera, si al final el plan de mi padre de que Dhalia se ponga a la cabeza de la familia enfrenta a los hijos de Elaena contra Baelon y su primogénita ¿De qué lado os pondréis vos?- necesitaba saber a quién se mantendría fiel el Maestre.
-Mi dulce Daenyra si ese dia llega maldecire al detino por dejarme continuar vivo.- Dijo el hombre a la joven. -Sin embargo mi funcion es clara, sirvo a la casa Baelralys y solo el señora de la casa tendra mi devoción. Pero me negaré a ejercer como estratega o brindar mi conocimiento en el campo militar. Lo ultimo que quiero es que la casa se desangre por dentro.- Contestó sin tomar ningun compromiso. Su funcion como Maestre era servir a la casa, pero en la ciudadela nunca le enseñaba a uno que hacer si la casa se dividia en una guerra interna.
-Entiendo Maestre- no podía culparle por su fidelidad a Baelon, aunque le hubiera gustado que él hubiera elegido a Elaena por encima del Lord de la casa.- Esperemos no llegar a ese punto.-
Daenyra, hizo algo que nunca antes había hecho, una muestra de afecto; se despidió con un rápido beso en la mejilla y se marchó de aquel apestoso lugar que olía a muerte.
Creo que esto ya se puede cerrar.