Partida Rol por web

Zuyla ayudado por su padre descarga el cuerpo de Haekor, los campesinos se encuentran en guardia en torno a el fuego, bien echo, sea lo que sea que mato a Haekor, sera mejor estar preparados por si regresa.

Zuyla, pudise ver que ocurrió? Vampyr?- le pregunta su padre, Zuyla no estaba seguro de que clase de bestia podria hacer semejante atrocidad.

No estoy seguro padre, pero dudo mucho de que esto sea obra de un vampyr. Esto de aqui- Comenta Zuyla, señalando la herida de el pecho-, se asemejan mas a dientes, que a garras, no estoy seguro pero los que a mi me atacaron en el pasado no podrian hacer semejante herida con sus colmillos.

Que hago con el cuerpo de Haekor? Padre

Las palabras de Zuyla alteran un poco a zort. Si era un Vampyr, a menos sabian que podía ser vencido, pero aquello...

Lobo entonces... debe de haber sido la bestia del Príncipe. Ya cobraremos venganza por esto. La muerte de este hombre no quedará impune. Ahora tapemos bien el cuerpo, que la gente no vea la herida. Al amanecer lo cremaremos y partiremos lo antes posible.

Sacó una manta y cubrió el cuerpo, de modo que no se viera el destrozado pecho.

Mantengámonos alertas. No debemos bajar la guardia.

TRANSCURRE TENSAMENTE EL RESTO DE LA NOCHE, MIENTRAS NO MUY LEJOS SE ESCUCHA EL AULLIDO DE UN LOBO...

SIGUIENTE AMANECER.

El frío de la noche se veía reforzado por los aterradores aullidos que lleganban desde el horizonte. Pero poco a poco los primeros rayos de sol cambianron el panorama, volviéndolo mas esperanzador. Zort había pasado toda la noche despierto junto a una fogata, pensando cual sería el destino de todos ellos.

Andrei, Zuyla, preparemos la pira funeraria...

Al poco rato, colocaron a Haekor en ella, listo para su viaje final.

Anoche perdimos a un gran hombre. Hace tiempo que venimos perdiendo grandes hombres. Hace tiempo que venimos viajando, escapando. Pero les prometo que estamos cerca del final de nuestro viaje. Y les aseguro que estos hombres no nos han abandonado, nos cuidan desde donde sea que estén. Hizo una pausa, Tiberiu, Vladana, Vladimir, pasaron por su cabeza. Los había perdido a todos ellos, y ni siquiera pudo despedirse.

Haekor el Tranquilo... descanza en paz. Tomó la antorcha que sostenía uno de sus hombres e inició el fuego en la pira. Comtemplaron por un rato cómo el fuego devoraba los restos de Haekor.

Vamos, emprendamos la marcha nuevamente. Quiero alejarme pronto de aqui.

TRANSCURREN VARIAS SEMANAS DE VIAJE.