- "Sí, mi señor Caballero." -
TEMPUS FUGIT
AÑO DE NUESTRO SEÑOR DE NOVECIENTOS CINCUENTA Y DOS
TERMINÓ EL OTOÑO Y HA TRANSCURRIDO EL FRIO INVIERNO.
PRIMAVERA
- La población está aterrada, los cazadores locales han avistado una fuerza de doscientos magiares a caballo acercándose a la zona. Todo el que puede huye hacia Balgrad. Se rumorea que la ruta hacia Oradea es la muerte, lo que deja abiertas sólo la ruta sur y la carretera hacia Balgrad.
La nieve comienza a fundirse en Deva y a lo lejos comienzan a escucharse tambores de guerra.
Los Magiares se acercan padre, tenemos que huir antes de que nos alcancen...- Zuyla ensilla los caballos y junto a su primo y a su padre, parten lejos del peligro
Espero que se entretengan saqueando Deva y ganemos unas horas de ventaja.
Partimos lo mas rapido posible lejos de los magiares direccion a Balgrad, sin la nieve nos sera mas facil avanzar.
Que conste que no he dejado esto tirado, estaba esperando a que mi señor padre dijera algo, porque se supone que es el que manda. Y yo como hijo debo respetarlo. Aunque visto lo visto antes nos deguellan a los dos..
Cuando parecía que al menos pasarian una temporada descanzando, el destino marcó otra cosa. Al escuchar los tambores sonando Zort cerró los ojos unos segundos, y los apretó fuertemente, apesadumbrado. Allí estaban otra vez, las ordas magiares, asolando la región.
Es que nunca podremos pararlos?! Los maldigo, a ellos y toda su descendencia. Que el Diablo los mutile y los haga arder en el mismísimo Infierno...
Explotó de repente en maldiciones, no soportaba mas aquello. Demasiados años de guerra, demasiada sangre derramada. Pero ahora tenía que pensar en su hijo y su sobrino. No era hora de abandonarlos.
A Balgrad, rápido! Andrei ensilla los caballos, no te despegaras ni por un segundo de tu primo. Zuyla ven.
Se alejan unos pasos para que Andrei no los escuche.
Hijo, tal vez esta de mas decirlo, pero debo hacerlo. Estoy viejo, no se hasta donde podré seguir. Si algo me pasa, asegurate de cuidar de Andrei, y de llegar a Satu Mare cuando antes. Tiberiu, Vladana, y Vladimir nos deben estar necesitando, si es que...
... si es que aún están vivos... Quiso decir, pero no pudo terminar la frase, la sola idea lo aterraba.
Abrazó a Zuyla, y luego hizo lo mismo con Andrei.
En marcha. No dejaremos que esos malditos bastardos nos atrapen!!!
- Zort se siente viejo, tal vez demasiado para estos viajes, no sabe cuántos inviernos más como este será capaz de resistir. Añora estar ante la chimenea, dormir en cama blanda, algo de música, sopa caliente y tal vez uno o dos fieles mastines de caza que le hagan compañía.
- Zuyla dirige la comitiva hacia Balgrad, impulsando a su padre Zort y a su primo Andrei a avanzar más deprisa con sus caballos. Es consciente de que la ruta por Balgrad es más larga, aunque si Oradea ha sido arrasada, seguramente es la más segura.
- Los tres nobles abandonan la región y a sus aterrados habitantes, cabalgando por la carretera que conduce a Balgrad.