Partida Rol por web

Llegas a casa. Son las tantas de la madrugada. Estás cansada y sólo quieres dormir un rato antes de podenerte a trabajar un rato.

Posiblemente será una tarea ingente y con pocos frutos, pero parece ser que seguir a Haight es importante.

¡¡Oh mierda!! -piensas sólo con abrir la puerta- ¡¡los gatos!!

Parece que llevas demasiado tiempo sin tenerles en cuenta, y ya han hecho de las suyas. Nada grave, pero el teclado ha quedado totalmente inutilizado. Trozos de teclas sueltas te reciben ante la puerta como muestra de lo que vendrá después.

Bueno, podría ser peor. Mañana por la mañana tocará madrugar para conseguir un teclado...

- Pff, genial... bonito recibimiento. -Aunque bien podía haber sido peor conociendo a Crítico y, total, no tengo nada mejor que hacer que dormir hasta el día siguiente para reponer fuerzas. Quedan tan pocas horas...

Veo que en su cuenco ya le queda poca comida y le sirvo una poca, no demasiada, no quiero que se abalance y le siente mal, menos aún cuando estos días estaré por aquí y no habrá necesidad de echarle más de la cuenta.

Pasa un rato entre que suelto las cosas y consigo echarme a dormir. Crítico viene inmediatamente y, cual resorte, se arrebuja entre las sábanas a mi lado. Aunque es un gesto de cariño por su parte, me resigno a dormir encuadrada a su gusto y a no moverme demasiado. Por suerte, estoy tan cansada, que me duermo al instante.

Como era de esperar, cuando suena el despertador a las 9 de la mañana, se me pegan un poco las sábanas, aunque consigo levantarme un poco antes de y media. Crítico ya se había largado de mi lado y se encontraba disfrutando de la apacibilidad de uno de sus rincones favoritos de la casa.

Termino las rutinas mañaneras y salgo dispuesta a comprar el teclado. No pasa demasiado tiempo cuando vuelvo con un flamante teclado negro totalmente nuevo. Emocionada, no tardo en conectarlo al ordenador y ponerme a la labor.

Con los programas necesarios abiertos, antes de ponerme a teclear, me ayudo a concentrar con el GPS y el dado cargado. Respiro profundamente, pues de ésto depende mi parte del trabajo, y empiezo a buscar e infiltrar troyanos para dar con un patrón de movimientos de Haight. Espero los resultados con anhelo...

Te conectas, abres sus defensas y colocas los troyanos. Ha sido más fácil de lo que creías. Bueno, ahora debes repetirlo con todas las cámaras que haya por los alrededores del edificio Nolan...

Sabes que en 24h tendrás un ciclo completo de imágenes de varios cajeros, cámaras de tráfico y otras cosas que anden por ahí cerca. Algo más o menos serio con lo que empezar a trazar rutas.

Después de varias horas haciendo básicamente lo mismo, te preguntas porqué no habrás llamado a Morfeo para que te ayudara. Mirar las grabaciones ya te costará varios días...

Me doy cuenta de que no he avisado a Nostromo. Bueno, nunca es tarde si la dicha es buena... o eso dicen. Por lo que no tardo en mandarle un mail encriptado por si me puede echar una mano.

Me lleva apenas unos minutos mandarle a Nostromo el mensaje encriptado.

Demasiados datos que procesar, ¿me echas un cable?

Creo que con esto lo entenderá y vendrá en cuanto pueda.

En vistas de que Nostromo va a tardar un poco en llegar, comienzo a preparar la comida, un poco más elaborada que de costumbre, aunque nada muy complicado, ramen. Esperando a que cueza el agua, me dedico a echarle un poco de comida a Crítico y ordenar un mínimo la casa para que esté presentable, pese a que Nostromo ya esté más que acostumbrado a trabajar en este caos.

Ya es casi la hora de cenar cuando llega Nostromo.

Llama a la puerta y te sonrie una pizza por la mirilla. Notas como las energías de Nostromo te hacen ver lo que él quiere.

Abres la puerta y realmente trae pizza. Dos para ser exactos. Tamaño familiar.

¡¡El alimento de los campeones!! -dice mientras las lleva al comedor- ¿¿Cenamos y me cuentas en qué necesitas de mi ayuda??

Se saca su gabardina y cae un paquete que suena a duro. Ves que se trata de su maletín (a prueba de balas y algo más) para el portátil. Parece que se lo ha tomado en serio...

- ¿Ves? ¡Esto si que es una entrada triunfal! -Digo con entusiasmo- Aunque ya había cocinado ramen... Bueno, no importa, lo guardo para mañana. Vete sentando por donde puedas y quieras.

Entre un trozo y otro de pizza le voy contando.- Mi parte del plan es la de dar con un patrón de movimientos de Haight, para ello disponemos de su foto, aunque yo tuve la alegría de conocerle en persona, y de las cámaras que he conseguido pinchar alrededor de la Nolan. Ahora tenemos que mirar las grabaciones y trazar las rutas.

Tras una pausa para que asimile lo que tendremos que estar haciendo durante los próximos días por horas y horas, añado otra cosa a la lista de quehaceres, más que nada para que no se me olvide.- Oh, también sugirieron de poner micros y pinchar las cámaras del Ritz-Carlton, que es donde se supone que llevaran a Haight, pero esto para cuando tengamos las rutas y puedan abordarlo.

Mmmm... ramen pre-cocinado del dia anterior. La comida de los campeones. -te dice en cuanto comentas que lo dejarás para el día siguiente.

Empezais a cenar y entre bocados le comentas tus planes... y hace un signo de aprovación, sin dejar de masticar la pizza. Hace ese signo de Si, bien. Podría estar mejor, pero bién. Y ya sabes como acabará esto. Con una lección y su frase de Por eso yo aún soy Maestro y tu aún Aprendiz.

Sabes que no lo hace con mala fe, pero da mucha rabia.

¿Has probado de buscar, o hacer, algo de detección de imágenes? Me refiero a algún tipo de software de reconocimiento facial. Nos ayudaría mucho a descartar horas y horas de video. ¿¿No has visto nunca la serie "Las Vegas"?? Me encanta. Tienen un software muy superior al de la policía y casi al del mundo real. Pueden optimizar imágenes increíblemente lejanas o de baja calidad sin problemas. El otro día me comentaron que en realidad, estas series son una avanzadilla de lo que nos espera. Un programa de la Tecnocracia para ir adaptándonos a la realidad que ellos necesitan para poder hacer funcionar su mojo. Sin él, los durmientes verían sus creaciones como verían la bola de fuego de un hermético, y claro, eso da yuyu.

Pero yo sé la verdad. En realidad es la idea de un tipo de Jersey, Tommy, creo que se llama. Es un Verbena, creo. Él quería denunciar por un lado que las agencias gubernamentales estaban infradotadas de presupuesto, hasta el punto que cualquier individuo con dinero podía tener mejor equipo que ellos. Por el otro, quería alzar una queja por la capacidad de la tecnología de limitar nuestra privacidad, y con ello nuestra libertad, sin que nos demos cuenta.

Evidentemente, Tommy, no entendió el poder de la banalidad y un buen par de tetas delante de la cámara. Así que su proyecto se fué al garete... Bueno, a medias. Ahora es rico. Claro que ese no era su proyecto. En cualquier caso, me recuerda que me debe algo de dinero.

A lo que iba. Si programas un identificador de rostros con un refinador de imágenes de alto calibre, te será mucho más fàcil encontrarlo. Y el trabajo lo hará el ordenador, y tu y yo podremos dedicarnos a cosas más interesantes como jugar a la play... -acaba diciendo con una sonrisa.

- Para mi gusto sabe mejor que la pizza del día anterior, pero bueno... -Me encojo de hombros dando a entender que eso es cuestión de gustos.

Escucho su discurso con atención, aunque me de rabia y a veces desespere por irse por las ramas. ¡Mierda!, ¿por qué no se me ocurrirán estas cosas a mi? En fin, tiene sentido... -Entendido, jefe. Voy a ello. Tu ve encendiendo la Play y practicando, ¡que en cuanto acabe todo esto te voy a pegar un palizón! -Digo toda emocionada de poder dejar el trabajo un poco al margen y desconectar, pero antes había curro que hacer y me pongo inmediatamente a ello.