Partida Rol por web

La mire con una sonrisa mientras su cuerpo se sumergía, la verdad es que no era guapa. Pero tenia ese algo que al final resultaba muy, pero que muy tentador. Cuando se sentó al lado mía, le tire un poco de agua, jugueteando. Luego me quede quieto con los ojos cerrados, disfrutando del calor. Sin pensar en nada simplemente relajándome. En cierto momento abr los ojos y mire lo que hacia Emma.

Me parece que fue buena idea, si. Esto es de lo mas relajante – dicho esto volví a cerrar los ojos y quedarme ahí disfrutando de la burbujas.

Emma estaba también con los ojos cerrados, disfrutando tranquilamente de aquel suave masajeo del agua, que parecía relajarla. Tras tus palabras, abrió los ojos y giró la cabeza para mirarte, con una sonrisa de relajación increíble.. incluso jurarías que estaban desapareciendo así por arte de magia las ojeras que habías visto en su cara.

- En el fondo creo que me vendrán bien estas minivacaciones.. - Sonó en tu cabeza, aunque por la expresión de Emma pudiste ver que lo había hecho sin querer. - Perdona, es que cuando me relajo se me olvida no hacer eso.. - Rectificó rápidamente esta vez hablando de forma normal. - ¿ Qué has pedido para cenar?

Seguramente ya lo habría averiguado después de pasearse por tu cabeza, pero aún así, quería corregirse así que habló como si no pudiera hacerlo, intentando otorgarte la intimidad mental que necesitabas.

Sonreia ante sus maneras, parecia mucho mas suelta de lo que yo era. No sabia realmente que me pasaba, pero era curioso. No era amor pero empezaba a sentirle cierto afecto, cierta utilidad.

Pedi un par de ensaladas y pechugas de pollo con salsade vino blanco, espero que te gusten ambas cosas. - Le deciamientras entrecerraba los ojso de nuevo y miraba al techo.

La mujer asintió con la cabeza aunque no pudieras verla ya que estabas con los ojos cerrados.

- Me parece una buena elección, incluso has hecho que me entre hambre..

En ese momento la mujer giró su cabeza hacia a ti, mirándote unos instantes, aprobechando el que no pudieras percibirla. Se la había un poco raro estar metida en un jacuzzi con un hombre y no hacer nada más que hablar, pero como parecías estar agusto no dijo nada más y tomó la misma postura que tú, quedarse con los ojos cerrados sintiendo los corros de agua golpear su piel.

Estaba medio dormido, aun no había descansado bien desde que paso eso con Emma, me sentía cansado. Asi que el agua relajante no hizo mas que dejarme así. No sabia cuanto tiempo paso pero parece que me quede dormido con media sonrisa en los labios, ahí aun en el jacuzzi relajado y desnudo.

Emma no había querido despertarte, no sabías si porque quizás no le había sentado demasiado bien o porque quizás le había dado pena hacerlo, pero lo que sí que sabías era que el agua estaba helada y tu piel bastante arrugada, aunque al menos no parecía que fueras a acatarrarte por ello.

Saliste del agua y volviste a la habitación para ver sobre una pesa de esas típicas de los hoteles, con ruedas un plato tapado y otro del que ya habían comido y la doctora, estaba metida en la cama, con una respiración regular que te decía que ya estaba dormida.

Me pare unos segundos s contemplar como dormía. Luego sin hacer ruido me senté y comí, tenia bastante hambre antes de haberme dormido y ahora era peor. Cuando acabe la cena me servi una copa del bar mientras pensaba en lo que podría ocurrir. Trataba de calcular todas las posibilidades.

Luego al acabarme la copa me levante y me acerque a la ventana. Siempre me gusto ver el paisaje nocturno de la luz de la luna. Era un espectáculo curioso. Así estuve una media hora. Luego me dirigí a la cama.

Por la ventana tan sólo se veían campos y árboles, ya que daba hacia la parte de detrás y la ciudad quedaba al otro lado. La luna ahora creciente, daba la suficiente luz como para iluminar levemente todo aquello y era un paísaje que evocaba a la calma, como si todo lo malo que podría pasar desapareciera y se viera tan sólo como una cosa que podría imaginarse pero que nunca sucedería. Estabas seguro además de que si abrías la ventana incluso podrías escuchar cantar a los grillos, lo que te hizo sonreir, recordando esos momentos de la infancia en el que todos habíamos hecho algo parecido, pero el sueño comenzó a hacer mella en ti pronto y decidise retirarte.

No tenías muchas camas para elegir, aunque en realidad ya habías elegido, así que tratando de hacer poco ruido, te metiste en la esquina que la doctora te había dejado, que con lo que estaba ocupando ella, eran más bien tres cuartos de cama lo que tenías.

Apagaste la luz y todo estaba en calma, aunque escuchaste el susurro de Emma, quien ni siquiera se había movido.

- Buenas noches Gabriel..

No se cuanto tarde en dormirme pero no me di cuando empezó el sueño. Era bastante raro, me sentía ligero y sobrevolando la ciudad. Lo había hecho en muchas ocasiones, pero esta vez era diferente. Iba mas rápido y me sentía muy distinto. No sabia que podía ser.. Luego me baje al suelo, en medio de un descampado y vi a los hombres… Al principio no me di cuenta de quienes eran, pero…luego me sonó el rostro del joven. Eran dos. Luego cai en cuenta donde había visto ese rostro. Era uno de los crios que despertó con la marca conmigo en la D.C.M. el otro… era un gigante de rostro tosco. No tenia ni idea lo que podía significar.

Cuando me acerque a ellos, vi en el suelo el cadáver de mi amigo… No me resulto fácil ver los ojos abiertos llenos de terror del óptico. La verdad es que sentía cierto apego a aquel hombre. No se por que, no podia hablar. Ellos me miraban ahí quietos. Estaba a su lado. Luego me agache a cerrarle los parpados de mi amigo… Y desperté.

Cuando despertaste ya era de día, aunque tardaste un rato en darte cuenta de ello debido al malestar con el que te estabas despertando. Notaste un hormigueo en la mano que tenías la cicatriz, pero en seguida se pasó, quizás tan sólo era un acto reflejo producido por haber soñado con todo aquello.

Al mirar a la cama viste que estabas solo, no había ni rastro de Emma por ninguna parte ni veías su ropa por los alrededores, aunque sí que estaba el portátil sobre la mesa.

Eche un vistazo a la habitación en busca de alguna pista que me pudiera decir a donde se había ido la doctora. Luego me levante y fui a la ducha. Seguramente se habría bajado a por alguna cosa, ya que el desayuno podía pedirlo por teléfono.

Entre a la ducha y puse el agua muy caliente, me encantaba sentir esa sensación de agua casi ardiendo por mi piel por la mañana. Simplemente me quede ahí durante unos minutos, desconectando de las preocupaciones simplemente dejando correr el agua.

Al no ver nada por la habitación te dirigiste a la ducha, que después de haber dormido relativamente bien, te sentó igual que un bálsamo reparador. La temperatura de la habitación era agradable y tampoco te dio mucha pereza salir de la ducha y volver a vestirte, aunque ahora tu estómago también pedía algo de desayuno.

Al salir de nuevo a la habitación, Emma no había vuelto, pero ahora te fijaste en que el portátil estaba encendido, en modo suspensión. Lo encendiste y había una nota abierta en él.

Cita:

Era todo lo que ponía.

Mire extrañado la nota en el portátil, la verdad no sabría explicar como me sentía. Lo que me resultaba extraño que desapareciese asi por que si. Pero no era asunto Mio. Había pasado buenos momentos con ella, pero parece que algo no le gustaba y no seria yo quien iría a buscarla.

Asi que llame a recepción y pedí un desayuno. Tenia aun otro día mas y no sabia que hacer. Supongo que dormiría bastante. La verdad es que me extrañaba la situación. Pero siendo como soy no iba a hacer nada. Me fui a la cama y me quede ahí tirado hasta que trajeron el desayuno.

El resto del día lo pasaste bastante aburrido, sin demasiado que hacer y sin que nadie te molestara. Estabas acostumbrado a la soledad así que eso no fue el mayor de los problemas, tan sólo el astío de no tener nada qué hacer, acostumbrado como estabas a tener siempre algo entre manos.

Aquella noche no dormiste tan bien, quizás por haber estado en " modo vegetal " el resto del día pero la mañana del día que tenías que presentarte en las coordenadas que te habían dado terminó llegando. Por lo que había apuntado la doctora en el portátil, de la poca información que había podido recabar, todos los mensajes que se habían trasmitido había salido sobre las 12:00 del mediodía, así que te pareció una buena hora para llegar a aquel lugar, aunque tratarías de estar antes.

En poco menos de media hora desde el hotel en que habías estado alojado, volando claro, llegaste a una zona rocosa, en la que había una especie de refugio de cazadores y que era exactamente el lugar al que te habían dicho que debías acudir. Por los alrededores, algo de vegetación, no demasiada ya que era un lugar bastante pedregoso y desde el aire, ya te habías asegurado de que no había nadie, así que parecía que tocaba esperar, porque estabas más sólo que la una a kilómetros alrededor.

No me sentía seguro así que trate de ponerme invisible y localizar posibles rutas de escape si había que hacerlo. Siempre tenia que tener cuidado en estas situaciones. Luego mire la presencia de metales, que no parecía muy abundante. Pero al menos llevaba u par de cuchillos conmigo que podría manejar.

Me quede ahí quieto simplemente observando por si llegaba alguien o ocurría algo. Ahora que sabia donde estaba todas las posibles rutas de escape.

El estar ahí esperando se hizo una tarea bastante aburrida, ya que lo único que parecía moverse por allí era el aire y algún pequeño animal que tampoco se acercaba demasiado a ti, ya que no estaban demasiado acostumbrados más que a cazadores por la zona.

Pasó una hora, en la que ahí no ocurría absolutamente nada, hasta que no tardaste en escuchar el motor de un coche, un todoterreno por el sonido que hacía.

Mire por donde venia el todoterreno y trate de ver cuanta gente había y que apariencia tenia, a su vez oculto con la invisibilidad. Tratando de ver quien había, no pude evitar por instinto tratar de ocultarme no solo con mi invisibilidad, si no también por medios tradicionales buscando un lugar que me oculte y a la vez me permita el panorama del escenario.

Después de esconderme trate de ver donde se pararía el todoterreno y quien saldría de ahí, tenia que estar seguro antes de ir a saco.