Partida Rol por web

El ambiente en las dependencias femeninas parece bastante estable y acogedor. No parece haber ningún conflicto salvo algunos grupos de chicas riéndose de alguna que otra cosa que habrán escuchado o visto. Algunas parecen reirse de cómo deben de estar los chicos ante la mera idea de tener que ducharse todos juntos. Seguro que tanta masculinidad les hace sentirse incómodos y hacen piruetas con los horarios, cosa bastante divertida.

En general la mayoría de chicas está llegando a estas horas a descansar si nadie se lo impide.

Krystal se encuentra por su parte tumbada en su cama leyendo un libro que parece haber tomado de la biblioteca. Parece un poco molesta por el reciente ruido, pero... ¿qué se le va a hacer? No está en la biblioteca. Alexandra en cambio está entrando en la habitación junto a Cynthia hablando como siempre a voces, parece algo frustrada.

-¡Joder tía, como te digo! Ha tenido que petar el motor o algo tras tanta vuelta. El subnormal de mi hermano se ha puesto a intentar a hacer carreritas y claro, ¡tú a Bronco no le puedes pedir eso mientras está lloviendo! Lo he tenido que empujar ahí a presión aparcado al lado de un coche milloneti, porque no se levantaba ni a patadas.

Por otro lado, una chica solitaria está sentada sobre su cama balanceando las piernas, pensativa. Habrá llegado de las últimas, pues en el hall no se la ha visto. Eso significa que no habrá tenido que esperar cola, ¿es un buen movimiento? Teniendo en cuenta que no ha visto la presentación, quizás sí o quizás no.

-Pues si tu hermano es subnormal no es escusa para que tú le sigas el juego. Si le haces caso Bronco habrá algún día que no se pueda arreglar. - Entrecierra los ojos mirándola muy seria. Lo dice sin acritud, pero lo dice.

Cuando escucha lo del coche milloneti la mira sonriendo levemente. -Podrías haberlo rayado un poco sin querer. Seguro que se queda algo mejor y más concordante a este lugar.- La mira pícara. En el fondo cuando quiere echa veneno.

Se acerca a su litera, para ver que encima hay una nueva inquilina. Por fin tiene compañera. Reza para sus adentros esperando que no sea alguien tan... tan... milloneti. Le dedica una sonrisa cuando se acerca, dándole una palmada en la espalda a Alexandra a la vez.- Eh. ¿Eres nueva por aquí? Encantada de ver mi compañera de litera.-

-No, no. Si ya te digo, si agarraras toda su subnormalidad podrías tirar de un carro con ella. Lo que pasa es que el cabronazo cogió y arrancó sin saber dónde quedaba este sitio. Y claro, tuve que perseguirle para pegarle dos gritos, ¿por qué te crees que llegué tan tarde?- Resopla rascándose la nuca con la mano con gesto ciertamente hastiado.

-Ah, no, no. Yo respeto un buen carro, tía. Eso si, de los nervios pegué una patada al aire y le metí chica coz en los bajos sin querer. Buff, menos mal que no le hice nada, imagínate que es de un instructor o algo. No es plan de meterme en marrones el primer día.

 -¿¡Que has hecho qué!?- Krystal cierra el libro de golpe y se levanta con un tic en el párpado dirigiéndose hacia Alexandra con gesto frío y de pocos amigos.

-¡Anda, mira tía! ¡Me libré de una bronca de instructor! Joder, a veces amo lo selectivo que es mi empeine.- Alexandra básicamente pasa de ella y se dirige a echar un vistazo a su litera. La chica adinerada la sigue y empieza a decirle cada cosa. "Voy a demandarte." "El seguro va a hacer que tu familia tenga que comer de la basura si no lo hace ya..." Lo segundo parece picar a Alexandra, lo que consigue hacerla entrar en griterío con Krystal. Esta parece sonreír un poco al ver que sus palabras la afectan, y se mantiene hasta más tranquila al haberla hecho enojar. 

La chica nueva mira hacia abajo al ser saludada por Cynthia, al estar sentada en el borde de la cama superior. -Bueno, si que lo soy. La verdad es que la pregunta es un poco rara, ¿no? Todas aquí somos nuevas.- Le dedica una sonrisa de lado, divertida por la pregunta.

Tiffany tras un buen rato dando vueltas por los pasillos hasta dar con las habitaciones entro con cara visible de cansancio por el paseito. - ¿Eh...? - Dijo nada más entrar y ver el gentío y las voces que se han formado al entrar, cualquiera diría que es una habitación femenina. Se encogió de hombros suavemente y miro a Cynthia, puesto es la única que le sonaba.

- Hola, otra vez. - Dijo de manera amistosa hacia Cynthia y comprobó el nombre de cada cama o numeración si se la dieron cual le tocaba. - Es esta... - Dejo caer la mochila en la cama y se sentó comprobando lo "blando" que es su cama, estaba acostumbrada a un futón así que, una cama es algo maravilloso para Tiffany, no pudo resistirse a dar unos pequeños botes. 

Tras comprobar y corroborar que la cama era blanda, paro de dar botes suaves en esta y miro a las que no conoce. - Me llamo Tiffany, encantada. - Apoyo los codos en sus muslos mirándolas. 

-Buenas Tiffany.- Responde cuando la ve llegar, esbozando una leve sonrisa. Parece más tranquila y contenta que antes. Vuelve su mirada hacia la chica de arriba suya.- Tienes razón. Todas sois nuevas, yo ya llevo días aqui. - La mira con su gesto serio y los ojos entrecerrados, dando a entender que tiene toda la razón del mundo.

Mira de reojo a las dos pelearse, y está tentada de ayudar a Alex, pero sabe perfectamente que ella puede sola, y que de hecho, le gusta más pelearse sola casi segura.-Al menos haced menos ruido, anda.- Y sonríe un poco, volviendo a las dos que tiene cerca. Tiff y la otra. -No roncas, ¿No?- Le pregunta a esta última.

Sonrío a Cynthia cuando esta la saludo. - ¿Todo... Bien? - Dijo mirando a las otras dos discutir ladeando la cabeza y se acercó a donde estaba Cynthia.

- ¿Qué sucede? - Enarcó ambas cejas no evito sentir curiosidad por la discusión y dio respuesta a Cynthia a su última pregunta. - Si te preocupa los ronquidos, puedo dejarte unos cascos. - Río suavemente.

-Nah, es broma, no ronco y creo que ella tampoco. - Mira a la chica desconocida. - Me llamo Tiffany por cierto. - Sonrió a la muchacha y miro a Cynthia. - ¿Qué escuadrón habéis elegido? -

Estaba tumbada en la cama esperando a que se apagaran las luces cuando comenzó todo el alboroto relativo al coche de Krystal. Suspiré molesta y me coloqué sentada al borde de la cama, observando pacientemente lo que ocurría. Por supuesto, no intervine... ni falta que hacía. Sabía de sobra que Krystal podría encargarse de una tipa como aquélla, y tanto que lo hizo...

Je...

Sonreí ligeramente cuando le soltó la última frase. Así era ella, sabía buscar el punto exacto para hacer enojar a sus rivales. Que hubiera pateado su coche tampoco era algo demasiado significativo. Al fin y al cabo, con el dinero que tenía, podía comprarse otro coche igual cuando quisiera.

La pelea entre chicas proseguía con violencia por una parte y fría tranquilidad por otra.  Por un lado Alexandra insistía en que a Krystal le olía el aliento a masculinidad -de forma bastante más grosera-, mientras que Krystal por su parte le respondía que ella olía mal en general. Al final Alexandra le dice que le va a prender fuego al coche y la otra le dice que se atreva, que tendrá consecuencias legales. Se separan y vuelven a sus puestos.

-Pues no, creo que no hago ruido. Bueno, al menos nadie se me ha quejado.- La chica esboza una sonrisa de lado y balancea las piernas en el borde de la cama al encontrarse en la litera superior. -Yo soy de Pawns.- Hace la V de la victoria con dos dedos.

Alexandra se acerca a la litera y sube para tumbarse. Le hace falta relajarse un poco. -Sup, tía de abajo. Espero que nos llevemos bien y no seas una amargada porculera.- Pura poesía.

Miro a Alexandra y enarco una ceja, río suavemente, de quien se habrá acordado.

- Descuida, que no soy de esa clase de chicas. Un placer conocerte. - Sonrió a Alexandra suavemente y se fue para su cama, mirando a Cynthia y a la otra muchacha.

- Yo soy del escuadrón Rock. - Sonrió de nuevo al decirlo, de hecho sonó bastante orgullosa al decirlo. - Pero bueno, ya no queda nada para que apaguen las luces, ¿no? - Mira sus ropas y solo se deshace de las botas y la chaqueta. - Así que si no os importa yo me voy acomodando ya. - Se tumbo en su cama cruzando sus piernas mirando hacia arriba en silencio.

Cynthia mira a Tiffany cuando se presenta y a su escuadrón y carraspea.- Rook querrás decir. Yo también soy Rook. Parece que seremos compañeras. - Hace un gesto con el pulgar hacia arriba y se tumba en su cama, mirando arriba.

-Pues espero no ser la primera en quejarme, señorita Pawns.-Se ríe muy suavemente mientras cierra los ojos. Ni se tapa ni nada, no parece tener frío y va medio en bolas.-Que descanséis.- Y ella se prepararía para dormir, bastante cansada de todo lo acontecido durante la jornada.

Cuando Krystal volvió, la miré y negué ligeramente con la cabeza con una sarcástica sonrisa en mi rostro.

—Parece que abundan las malcriadas — le dije antes de tumbarme de nuevo en la cama —. Ni caso, ya aprenderán.

Desde luego, en ese combate verbal, la clara ganadora había sido Krystal... al menos desde mi punto de vista.