Me reí de buena gana ante a broma que hay tras su nombre antes de responder:
- Bueno, ¿y que queréis saber de mi?. Podéis preguntar cualquier cosa que queráis, que estoy seguro de que os morís de ganas por saber acerca del que será vuestro marido. Así que no os guardéis nada de lo que me queráis preguntar.
-¿Qué clase de druida sois? ¿Cuáles son vuestros dones? ¿Es cierto que hacéis sacrificios humanos? ¿Y qué hay de cierto en los sacrificios de mujeres virgenes?
Mis ojos se abren como platos ante la avalancha de preguntas, antes de responder, con buen humor y una gran carcajada:
- ¡Vaya, no se ni por donde empezar a responderos!. Empezaré diciendo que no soy un druida, ya que no he hecho los votos como tal. Solo soy un mago, alguien que estudia y practica la magia, pero no rindo culto a nuestros dioses más de lo que haría cualquier otro devoto común de la antigua religión.
-¡Vaya! ¿Es por eso que vais con los caballeros? ¿Para poder curarlos en combate?
En realidad los sacrificios si son comunes, muchos practicantes de magia lo hacen para obtener fuerza vital de sus sacrificios
Vaya, pues en ambientación daban a entender lo que he explicado. ¿Puedes quitar mi post anterior, por favor?. No quiero ser un mentiroso.
He editado la parte de los sacrificios.
los "cultos" que se habla en la parte de paganismo es esos rituales que normalmente es un sacrificio, ya sea del tipo del que sea, se solía hacer para "pedir" algo a Dios, ya sea buenas cosechas... Pero en la magia también se hacia para que Dios (al que se adore) le diese más fuerza vital, ya que se cree que sacrificando algo la fuerza vital del sacrificio pasa al mago
Con una sonrisa, respondí:
- Voy con ellos par lo que me necesiten: A veces les curo, les aconsejo sobre asuntos arcanos o relacionados con mis conocimientos y les ayudo de cualquier otra manera que pueda surgir.
Mientras hablamos, un pájaro se acerca y se posa sobre mi mano, después de haber hablado con él en su lenguaje, para luego enseñárselo a mi bella acompañante, mientras piaba alegremente y sin temor en la palma de mi mano.
-¡Es maravilloso! -dice la joven emocionada al ver el pájaro, alarga la mano con temor a tocar el pájaro, no por miedo a que le hiciese algo, sino con miedo de que saliese volando
- La magia es maravillosa, siempre que se use de la manera correcta. - Respondí alegremente, mientras el pájaro daba un saltito para posarse en la palma de mi bella acompañante y mirarla con confianza y sin temor.