Había llegado la última de las citas y había que poner esfuerzo y voluntad. No por ser la última tenía que ser la menos importante...
Me puse a cantar - Qué será, será... whatever will be, will be...
Reí - Hola, hola... ¿Hay alguien? Aquí Arthur de 22 años - Se escuchó como me senté en el sofá, y por lo demás, quedé a la espera.
Amy llegó relajada a la última cita. Cuando escuchó al chico reír y cantar ella también dejó escapar una pequeña risita.
-Jaja, hola ... Me llamo Amy, tengo 30 años y soy de Nueva Orleans, me dedico a realizar pasteles de bodas. Guau, 22 años... Me temo que nos llevamos mucha edad. Tan joven como eres ... ¿Estás buscando casarte?
Lo que Amy me transmitía me ponía alegre - Genial, yo vengo de Escocia, trabajo como jardinero en una mansión lejos de la ciudad, cerca de los acantilados en plena naturaleza...
Luego tocó el tema de la edad - Bueno... no me cierro a nada. Debido a mi timidez ahí afuera y donde trabajo, pues me resulta complicado conocer chicas. Me enteré del concurso y me dije... ¿Por qué no?
Iba a aceptar cualquier cosa pero sentí necesidad de preguntarlo - ¿Para ti supondría un problema la edad? Piensa en todas las cosas que me podrías enseñar... - Le dije con algo de picardía.
-Me temo que si, Arthur. Para mi es mucha diferencia de edad. No te lo tomes a mal, pero... un chico de 22 años como tú es muy joven para mi... estoy buscando un hombre más maduro. Lo siento. Espero que te vaya genial en el programa y tengas suerte. Éxitos.
Solicito abandonar la cabina, directora.