Entré en la habitación y tomé asiento con el ruido habitual del sofá.
Rachel, cómo estás? Realmente no creí que fuera a tener una oportunidad contigo. Dije, y luego reí. Después de que preguntaste si me había gustado alguien más, asumí que no habías sentido ese tipo de conexión conmigo. Pero en esta ronda decidí lanzarme al agua de todas formas, y me alegro de haber estado equivocado. Dije sincero, reconociendo que no la había puesto en la lista en mi primer ronda.
Parece que la chica no aparece y el tiempo de la cita llega a su fin.
Lo siento Kurt, Rachel era tu última oportunidad, un placer haberte tenido en la partida :)