Partida Rol por web

Los tacos repiquetearon sobre el suelo mientras Natalie se aproximaba, por el acercamiento del sonido, a la mampara.

-Hola, soy Natalie. Es un gusto conocerte… al menos es un gusto oírte.

Se oyó el mover de cosas mullidas, posiblemente los almohadones, antes de que cesara el sonido de sus pasos. Su voz era dulce y tranquila.

-¿Por qué te anotaste en el programa? Es una pregunta que creo muy importante , al menos para mí.

Entré con un paso relajado, por el sonido, mis suelas eran de goma.  Me senté en el sillón y respondí.

Hola Natalie, me llamo Curtis, pero puedes decirme Kurt.  Comencé.  También es un gusto oírte, y espero que podamos tener un intercambio entretenido.

Escuché su pregunta y contesté con voz grave y pausada, pero amistosa.

La respuesta honesta, que probablemente no debería dar, es que tuve una decepción muy grande vinculada a la superficialidad de mi ex prometida.  Eso me llevó a pensar en que quería construir un vínculo más significativo, que no estuviese iniciado por el aspecto, o lo que llevas puesto, o el dinero que tienes.  Al tiempo de salir, me propusieron este programa, y me pareció una idea disruptiva de cómo conocer a alguien con quien tener un vínculo a otro nivel.

Dejé un espacio para escuchar su reacción y continué.

Qué hay de tí? Cuéntame quién eres y qué buscas en el programa!

Se oyó sus asentimientos a lo que él le iba comentando. Después de su explicación de las razones para haberse anotado en el programa, ella comentó:

–Me parecen muy buenas razones, a decir verdad. No soy una chica superficial, ya lo irás viendo, así que creo que podríamos congeniar bien. En mi caso… bueno.

Aspiró hondamente antes de responder:

–Soy una chica que busca una relación para toda la vida. Tengo 24 años, lo cual puede parecer demasiado joven para tal misión pero la verdad es que he vivido cosas que me han hecho crecer de golpe.

Un suspiro.

–Tengo un pequeño, Mat. Perdimos a su papá hace un tiempo, fue difícil. Estoy buscando alguien que nos adopte a los dos –se deja entrever una sonrisa triste tras la frase. –¿Te gustan los niños? ¿Cuántos años tienes?

Era muy difícil para ella, y lo entendía.

Sé que no puedo llegar a imaginar por lo que pasaron, pero entiendo lo que te sucede.  Cuando tenía 21 años perdimos a mis padres, y tuve que criar a mi hermana de 16 cuando a duras penas podía conmigo mismo.  No digo que sea nada comparable con estar sola con un niño, pero entiendo ese miedo cuando de repente quedas con una situación que nunca pensaste afrontar sola. Y, a tu pregunta, me encantan los niños.  Mi hermana y su novia me harán tío en unos meses, y estoy muy ansioso por conocer a mi sobrino. Además trabajo en un centro juvenil en Harlem, donde doy talleres de yoga y cursos de matemática a chicos con dificultades económicas, sociales o familiares. Si las cosas resultan entre nosotros, y Mat me acepta, creo que no habría honor más grande que ser parte de su familia.  Qué edad tiene?

Escuché su respuesta y continué, con voz amistosa.

Entiendo, soy un hombre que cree que los "para toda la vida" son un cúmulo de "hoy te elijo".  No sé si es demasiado pretensioso, pero creo en la construcción día a día de una relación, y que si esa construcción es buena, se prolongará hasta siempre.  Creo que si lo vives de esa forma, te entregas por completo y la persona obtiene lo mejor de tí.  Y, obviamente, qué puede querer una persona más que una relación así que se prolongue para toda la vida!

En cuanto a mí, tengo 31 años, nací, crecí y vivo en New York y soy instructor de yoga.  Soy un hombre bastante sencillo, y disfruto de las cosas simples de la vida, particularmente de la compañía de las personas que quiero.  Tú de dónde eres y a qué te dedicas?

-El hecho de que hayas vivido tantas cosas dice mucho de ti. Me hace saber que eres una persona que, por ejemplo, no renuncia ante las dificultades a la primera oportunidad. Sobre todo, me reconforta saber que entiendes lo que es que la vida dé 180° de giro de improvisto. Respecto a Matt, Matt Gabriel Blue, ese es su nombre completo tiene cuatro años. Estaba embarazada de él cuando tuvimos el accidente. Él es la razón por la que me obligué a salir de la cama todos los días a pesar de que solo quería desaparecer.

La voz se vuelve un hilo cuando dice esto último, pero recobra la compostura pronto.

-Tu forma de ver una relación es igual a la mía. Es increíble, siento que esta sociedad te empuja a la satisfacción del momento, a escapar de las responsabilidades.  La pareja es un vínculo que se fortalece durante las pruebas; si solo estamos juntos para pasarlo bien, nos perdemos el eje de ese lazo: ser fuertes.

La alegría tiñe su voz cuando responde aquello último.

-Soy maestra de jardín de infantes y vivo en Lancashire, Inglaterra. Vivo en un poblado pequeño de esos en los que conoces a tus vecinos. Es un lugar muy bonito aunque me gustaría vivir cerca del mar. Y de un mar más cálido.

-Nueva York es bien cosmopolita, ¿usas el yoga también para relajarte? Digo, porque es un mundo lleno de actividad todo el tiempo. ¿Y cómo te hiciste maestro de Yoga?

Cuando mencionó el accidente, tragué saliva sin tener el cuidado suficiente como para que no se escuchara.

Mis... Mis padres también murieron en un accidente, y también estábamos con ellos cuando pasó.  Algunas noches temo cerrar los ojos y revivirlo todo en una pesadilla.

Luego volví en mí.

Maestra, eh? Sabes?... creo que ustedes son heroínas. Admiro mucho el trabajo que hacen, de encargarse de lo más preciado que tenemos como especie.

Mi voz había cambiado a una tonalidad más amistosa, luego de mi primer comentario algo gris.

Bueno, en Long Island hay playas, y creo que son algo más cálidas que en el mar irlandés.  Aunque no es LA o Miami. Si las cosas resultaran, considerarías vivir en New York?

De hecho, comencé con el yoga como forma de relajarme. Trabajaba en Wall Street y todo era una locura, y lo usaba para intentar apagar mi cabeza al llegar a casa. Hace un año, aproximadamente, tuve un problema cardíaco por stress severo, y el yoga me ayudó a reconstruir mi vida. Entonces decidí que mi hermana y mi futuro sobrino merecían un tío que estuviera allí, no en forma de billete, sino en forma de abrazo.  Abandoné los rascacielos y los trajes de raya diplomática y puse un centro donde intentar ayudar a la gente que pasaba por cosas similares.

La voz de sorpresa se hizo notar. Era una conexión más que intensa por haber compartido la vivencia de una cosa tan difícil para procesar. -Nunca uno lo supera... pero aprende a vivir con ello. También me ha enseñado que cada momento cuenta, es un deber como sobrevivientes el valorar incluso al dolor que implica estar vivos. 

Luego el tema fue más alegre, Natalie asintió a sus palabras con emoción. 

-Tú también haces cosas admirables por los demás pero, gracias. Se siente tan bien ser apreciada. Adoro a los niños, todavía no han desarrollado todos los prejuicios de nosotros, los adultos. Saben emocionarse por las cosas más mundanas y tienen una inmensa curiosidad por el mundo que los rodea. 

Su pregunta sobre vivir en New York si las cosas resultaban provocó una respuesta directa.

-Si tengo la fortuna de que tú seas mi pareja, si encuentro esa conexión que tanto anhelo, podría vivir donde sea y ser muy dichosa. 

Sobre lo otro, ella dijo:

-Sí, debes cuidarte, tu corazón es muy importante por supuesto. Yo también pienso lo mismo. Respecto a mi salud, quitando la tristeza que a veces afecta mi apetito, estoy bien. Solo es que me siento muy sola. No es lo que quiero, no quiero desayunar junto a Matt sin que esté ese compañero de vida. Te aviso que soy muy sentimental... ¿qué cosas no te gustan de ti?

Uno se acostumbra a vivir con eso, siempre te acompaña para bien y para mal a la vez.  Pero si, uno comienza a querer exprimirle a la vida lo que tiene para darle.

Había un tono esperanzador al final.

Hey, yo tengo clases tres veces por semana dos horas con ellos y salgo tan feliz como agotado.  No creo tener la capacidad para trabajar con 20 de ellos 30 o 40 horas a la semana! Ustedes merecen una estatua en cada plaza del mundo!  Y no lo digo por exagerar, sino por mi poca experiencia en el tema.

Solté una risa y, poco a poco me iba distendiendo más.  Se notaba en mi voz que era seguro y no titubeaba al hablar.

Genial, es muy importante para mí quedarme en la ciudad, con mi hermana, mi sobrino en camino y mi trabajo en el centro. Obviamente los ayudaría a tí y a Matt a instalarse y a construir sus afectos aquí. Y por el desayuno, cocino unos huevos y unos pankakes que harán que no necesiten nada más en el mundo... Además de las mermeladas caceras y los jugos de fruta del centro!  Sería genial para mí poder hacerles el desayuno cada día.

Sobre los sentimientos, mientras sean sinceros creo que es muy importante exteriorizarlos.

Sonará algo narcisista, pero juro que no lo es.  He hecho las paces conmigo mismo y me acepto y me gusto como soy, con los matices que me hacen humano.

Si tuvieras que elegir un solo lugar en el mundo entero, cual sería?

Natalie completó la idea de Kurt –vivir cada día de forma completa, sin necesidad de llegar a extremos insanos. Estoy a bordo con ello.

Se rió buenamente con lo de la estatua.

-A veces son díficiles de llevar, es cierto. Pero si descubres cada ritmo, cada mente a su manera… encuentras un balance. No voy a decir que es fácil pero se puede lograr.

Se la notó muy halagada cuando él mencionó lo de vivir en Nueva York. –Me muero por probar tus desayunos entonces, y conocer a tu familia. Yo sé hacer algunos pasteles típicos de mi pueblo. No soy una excelente cocinera pero me defiendo bastante bien.

-Concuerdo con lo que dices de los sentimientos y de quererse a sí mismo. Es importante.

Un largo silencio siguió a la última cuestión:

-Hawai… adoro el mar. Al punto que creo que elegiría vivir en él si pudiera. Y me encanta el calor, mi país es tan… es poco agraciado en ese tema. Además sus olas verdes, sus gentes amables, sus costumbres… Hawai sería un punto en el que siempre estaría a gusto. Pero, como te dije antes, no importa donde viva sino con quién.

Ella ahora preguntó:

-¿Has estado con muchas mujeres?

Solté una risita aprobatoria y contesté.

Concuerdo... Y no sé si vivir allí, pero de seguro podríamos ir a Hawaii, aunque conozco una decena de lugares cálidos geniales que podríamos conocer! En Filipinas, Indonesia y Brasil está mi top 3.

Se escuchó un "mmm..." precediendo mi respuesta.

Sé que, de nuevo, es algo que quizás no debería decir, pero depende de cuántas consideres "muchas".  Creo que las cantidades son relativas.  Aún así, no voy a esquivar la pregunta.  Tuve cuatro relaciones duraderas, de más de un año, incluída mi ex-prometida.  Además de eso, en la universidad solía salir como soltero y tuve aventuras de una noche.  Además he tenido citas con otras mujeres dónde la relación no llegó a durar tanto.

Quizás era demasiada información, pero quería ser sincero.

Tengo una historia, y creo que todos la tenemos, pero lo importante es qué aprendemos de ella y qué hacemos con el futuro.  Yo aprendí que la infidelidad duele, que la verdad es dura y que el amor se construye desde el cariño y el respeto.  Pero, sobre todo, aprendí que estoy bien solo, pero mucho mejor cuando puedo compartir mi vida con una persona a la que amo.

Hice un pequeño silencio.

Qué hay de tí? Que lecciones te ha dado la vida sobre el amor y las relaciones?