Partida Rol por web

Bajó las gafas primeramente, mirando al camarero con su mirada bipolar, ojo rojizo con aquel azulado, su imagen siempre fue algo tenebrosa y particular pero, bien dice el dicho: no juzgar por las apariencias. ¿Era aplicable en este  caso?

Will sonrió como  respuesta a la comida, desabrochándose más la gabardina para sacarla y dejar a relucir su ropa, bastante formal pero, como la vestía no parecía muy formal, la verdad, ya que la llevaba algo holgada.

No pasa nada , Lyam. - declaró mirando las burbujas de la cerveza, alzó la jarra hacia  arriba y entonces, parecía hacer un brindis, cuando sus ojos se centraron en los de Lyam nuevamente. Quedandose petrificado un instante. - Oye... ¿no hemos hecho esto antes ?– preguntó

Después de servirle la cerveza, Lyam consigue saber la identidad de la persona que era, ¿cómo no se había dado cuenta  antes? Sería sus pintas de superstar de incognito, de cualquier forma, era Will y cuando observa sus movimientos, el corazón empieza a latirle lento y se siente algo... ¿ebrio? por unos segundos. Ver a Will le ha dado una sensación de camarería extraña, como si hubiesen estado juntos antes y su pregunta lo confirma.

Finalmente, mueve la cabeza para  desatontarse y concentrarse, la sensación de borrachera desaparece.

-Quedarse hablando con Will

-Salir a fuera un momento

Hora de poner~

Progresión 1/10 en notas para Lyam
 

Bajó la jarra, observando a Lyam con la mirada ligeramente entrecerrada y, prosiguió con una risita, notando como  Naxael se daba a notar con sus artimañas de hombre macho. Casi sintió las ganas de poner las piernas sobre la mesa, a modo chulo, porque sabía que eso era un defecto suyo pero, no le causaba problema alguno admitirlo.

Con una sonrisa ladina, lo observó con atención y empezó a cortar la carne: –Que me guste más la noche, no indica que sea un vampiro. - se burló de forma  graciosa, llevándose el trozo de carne a la boca.- Suelo venir bastante, ¿verdad Lyam?- una mirada de extraña complicidad y compañerismo, sin saber porqué pero , sigue pareciendo que es demasiado conocida... ¿sería cierto que habrían coincidido más veces? - ¿Mercancías? - preguntó, bebiendo la cerveza sin quitarle el ojo a Naxael.-Creo que tengo que ir al puerto a un recado. – tragó profundo casi media jarra, parecía deshidratado. -¿Estarás por ahí? – el muchacho se giró de golpe y con un pie, arrastró ligeramente la silla de su lado para comentar: - ¿Por qué no te sientas? No voy a comerte... – resopló, un tanto cansado de que la gente pudiera mirarle extraño por ser cómo era.

Naxael:
-Seguir hablando con él
-Dedicarte a otra tarea de las tuyas (mercancías, ir a buscar pedidos)
-Intentar acaparar la atención de Lyam

Lyam:
-Definitivamente, salir de ahí a por las mercancías, esto es raro
-Seguir con ellos hablando
-Dedicarte a alguna otra tarea en la taberna

Con una sonrisa, en la cara, me siento donde me indica, le miro y le digo:

-¿que asuntos le llevaran al muelle?-digo como no acabándome de cree sus palabras.

-creo, que no me quedare mucho  si que si quiere charlar valla al grano.

Al ver que las cosas se empiezas a calmar Lyam sonríe a ambos hombres y se disculpa.

Perdonen pero voy a terminar de meter las mercancías, seguro ustedes van a querer hablar sin matarse a piñas, yo ya vengo.

Lyam se aleja y empieza a caminar en dirección a la puerta a buscar más mercancías mientras hace esto los recuerdos vagan por su mente.

¿Yo camarada de él? Somos personas bastante diferentes, no hay forma en la que pudiéramos haber sido amigos y no soy tan borrado como para olvidarme de un amigo, este definitivamente es un día raro.

Al final Lyam se fue pero le seguí con la mirada, no estaba lejos, aún puede escucharme. La sonrisa se amplió, aunque soltó una carcajada muy sonora al escuchar su comentario. - No me gusta ir al grano, porque no me gusta andar con prisas – repitió dando más bocados y entonces, escuchó lo que le dijo y arqueó las cejas apoyándose sobre su mano de manera pensativa, clavando los ojos en el rubio de forma intensa y después volvió a reír, sí, un momento de seriedad... lo tenían claro, los momentos de seriedad de Will parecían ser escasos pero, tampoco era muy bueno fiarse de él, era algo difícil de descifrar:- Hace frío y sol, me tapo porque vengo de una misión especial... Además ultimamente sueño con un pais frio y nevado... Es extraño ¿verdad? - breve pausa, risa y continúo.- Solo hice un trabajito y era mejor que no me ¿reconocieran?- se encogió de hombros y entonces, prosiguió:- ¿Celoso?- voló los ojos a Naxael con una sonrisita traviesa:-Si es por quién este cerca de este semental, debería estar celoso de más de medio pueblo. - declaró sin vergüenza alguna, con un tono algo chulesco y prosiguió:- Siempre vengo de noche, no sabía si por la mañana cambiabas de trabajo- insinuó a Lyam y después añadió: - Pero, si me cocinas más veces puedo acompañarte más rato por las mañanas. - declaró con una risita, pareciendo que lo decía bastante enserio, repasándolo con la mirada y después concentrar su atención en la hermosa rubia del frente, sí, lo decía por la cerveza, aunque bueno, Naxael también era buena vista, no iba a negarlo.

Miro a Will y luego a Lyam, me levanto y digo:

-Me retiro chicos tengo mas cosas que hacer -digo mirando mi agenda y esperando sus despedida.

Lyam terminó de meter las cajas que quedaban y miró a Naxael.

¿Tán rápido? Bueno, el trabajo es el trabajo, de todas formas que te sea leve y tengas suerte.

Una vez que Naxael se va mira a William.

Claro, si hay clientes les cocinaré, el problema es que el pueblo no es precisamente un centro turístico, por lo que el trabajo tiende a decaer en las mañanas y tardes.

Luego ve la cerveza y la señala con la cabeza.

Y cuidado con esa, seguro que si sigues tomando de esa maneras vas a terminar desnudo en el medio de un bosque frió y nevado, Maine también tiene sus temperaturas como las de tu sueño.

Lyam se despertó y como todos los días salió a caminar por las calles de Storybrook. A diferencia de otras mañanas había un lugar en la ciudad que le llamaba la atención y era en esa dirección que sus pies lo habían decidido llevar.

¿Que hacía Will camino al cementerio la noche anterior?

Ya más cerca del cementerio su mente volvía a trabajar como una maquina a vapor, con cada vez más fuerza y las preguntas se amontonaban congestionando el tráfico en su cerebro.

Ayer dijo que tenía "unos trabajos" ¿Eso tendría que ver con el cementerio? Realmente no me gusta nada lo que estoy pensando pero...¿Porque voy en esa dirección? ¿Y si todo fue un sueño y nunca lo vi caminando hacía ahí? Estúpido Lyam, si no lo viste no va a pasar nada.

Y con ese debate interno el hombre marchó al cementerio.